La Línea de la Concepción Semana Santa 2020
A Cristo a través de la Virgen total del Vía Crucis es de unos 16 kilómetros, cada hermandad porta la cruz algo más de un kilómetro por la arena del Camino de los Llanos, también denominado El Camino de la Virgen, ya que este es el camino que toma la Virgen del Rocío cada siete años entre el Rocío y Almonte. Este año además, como cada siete años, el vía crucis cambia el sentido de su marcha, y va desde el Rocío a Almonte. Adjunto al artículo el cartel del Vía Crucis del próximo 21 de marzo, al que invitamos a todos los cofrades linenses que quieran vivir esta bonita experiencia de penitencia cuaresmal con nosotros; este año precisamente, la foto que ilustra el cartel y que lo ha realizado la Hdad del Rocío de Algeciras, nos muestra a un grupo de rocieros linenses portando la cruz durante nuestra estación del Vía Crucis del pasado año 2019.
En esta vida, todos buscamos el mismo fin, llegar a Cristo, y los rocieros elegimos buscar el camino de la llegada a Cristo a través de su Santa Madre. Los rocieros también preparamos, como no podía ser de otra forma, nuestra Semana Santa, y lo hacemos muchos desde nuestras hermandades de penitencia, en mi caso soy hermano de la Hermandad de Penitencia del Santísimo Cristo de la Esperanza, María Santísima de la Concepción y San Juan Evangelista, la Cofradía del Silencio, hermandad de negro de nuestra Semana Santa que lleva a gala el respeto, la sobriedad, la humildad y la sencillez a la hora de realizar sus actos cuaresmales y su estación de penitencia. Esta forma de ver la fe se puede entender quizás como la antítesis de lo que significa el Rocío y su Romería, pero no son más que las dos caras de la misma moneda, vivir con tristeza, respeto y silencio el duro momento de la pasión y muerte de nuestro Señor y alegrarnos enormemente con cantos y algarabía con su resurrección y la venida del Espíritu Santo.
Por supuesto nuestra hermandad también asiste al Vía Crucis del Consejo y los rocieros linenses nos preparamos intensamente en la cuaresma para vivir la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor y el Santo Triduo Pascual desde nuestras hermandades de penitencia, ya que la inmensa mayoría de los rocieros también pertenecemos o somos seguidores de alguna hermandad penitencial, y llegar a regocijarnos con la resurrección de nuestro Señor, para cuya celebración cada año preparamos una fiesta que da el pistoletazo de salida a la espera de 50 días hasta la llegada del Espíritu Santo en el lunes de Pentecostés.
Hay un acto muy especial que realizamos las Hermandades rocieras de nuestra provincia y del que este año haremos la XXII edición del mismo (que se está empezando a copiar desde las provincias de Sevilla y Huelva en estos últimos años) es el Vía Crucis que realizamos desde Almonte al Rocío portando una cruz de unas dimensiones y un peso importantes, en el que un grupo de hermanos de cada hermandad porta la cruz durante el recorrido entre dos estaciones y el rezo en la estación de destino, teniendo en cuenta que el recorrido
Isidoro López Hermano Mayor de la Hdad del Rocío
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