REPORTAJE Por Arturo Castro Barrantes
Autos eléctricos llegaron para quedarse
Por la salud del medio ambiente, la suya y la de su bolsillo, los vehículos eléctricos ofrecen una solución atractiva a las necesidades de transporte. Los analistas esperan que su venta aumente 950% para el 2030, para alcanzar 21 millones de unidades.
C
omo en todo negocio, el retorno de la inversión resulta un factor decisivo y, en la compra de un vehículo eléctrico, los beneficios son múltiples y variados. Esos retornos parecen indicar que los vehículos eléctricos (EV, por sus siglas en inglés) llegaron para quedarse. Entre esos beneficios, en primer lugar, se encuentra la misma supervivencia humana, ante la amenaza del calentamiento global, cuyos efectos climáticos son cada vez más evidentes. “Hoy, la temperatura de la Tierra es 1,1° C más elevada que a finales del si112 | VIDA Y ÉXITO
glo 19 y la última década (2011-2020) fue la más cálida registrada. Como la Tierra es un sistema, en el que todo está conectado, los cambios de una zona pueden influir en los cambios de todas las demás. Las consecuencias del cambio climático incluyen, entre otras, sequías intensas, escasez de agua, incendios graves, aumento del nivel del mar, inundaciones, deshielo de los polos, tormentas catastróficas y disminución de la biodiversidad”. Así de clara resulta la Organización de las Naciones Unidas al referirse al problema del cambio climático y culpa a la quema de combustibles fósiles
DISTINTAS OPCIONES Aunque diferentes, ambos forman parte de la solución de vehículos eléctricos (EV): • Vehículos eléctricos de batería (BEV): funcionan únicamente con baterías. Usan un motor eléctrico para girar las ruedas y producen cero emisiones. • Vehículos eléctricos híbridos enchufables (PHEV): capaces de conducir sin emisiones, generalmente entre 20 y 30 millas, y pueden funcionar con gasolina o diésel para viajes más largos. Como sugiere su nombre, deben conectarse a un suministro eléctrico para maximizar su capacidad de cero emisiones. Fuente: “Vehículos eléctricos, estableciendo un rumbo para 2030”, Deloitte.