Sección coordinada por José Luis Rodríguez Gamo Ingeniero de Montes, Ferrovial Servicios S.A.
Infraestructura verde urbana
La evaluación de servicios ecosistémicos como base para la planificación de la infraestructura verde
Inés Santé Dr. Ing. Agrónoma, profesora titular de la Universidad de Santiago de Compostela ines.sante@usc.es Andrés Manuel García Dr. Ing. de Montes, investigador de la Universidad de Santiago de Compostela andresmanuel.garcia@usc.es Pedro Calaza Dr. Ing. Agrónomo, decano del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Galicia calaza@iies.es
Existe una versión extendida de este artículo, con bibliografía, disponible en www.revistamontes.net
Introducción a los conceptos de infraestructura verde y servicios ecosistémicos El término de infraestructura verde (IV) se utiliza desde hace décadas para hacer referencia a conceptos ligeramente diferentes en cuanto a su ámbito de aplicación, escala o propósito. EEA (2011) presenta un análisis de la evolución histórica de este concepto y destaca como sus características principales la conectividad, la multifuncionalidad, la conservación inteligente de los valores naturales y su contribución al fortalecimiento de los servicios proporcionados por los ecosistemas. Este último aspecto resulta el más innovador de la actual acepción de IV y el que se desarrollará con profundidad en el presente artículo. La comunicación de la Comisión Europea de 2013 “Infraestructura Verde: mejora del capital natural de Europa” define la IV como una red de zonas naturales y seminaturales y de otros elementos ambientales, planificada de forma estratégica, diseñada y gestionada para la prestación de una extensa gama de servicios ecosistémicos (SSEE). Dende este punto de vista, los ecosistemas son entendidos como un capital natural que contribuye al bienestar humano mediante un conjunto de funciones con capacidad para proveer servicios. Aunque los SSEE dependen de las funciones de los ecosistemas, no son lo mismo. El concepto de servicio ecosistémico es antropocéntrico, de modo que un bien o servicio que no beneficia al ser humano no es un servicio ecosistémico, es decir, debe existir una demanda humana para una función del ecosistema para que esta constituya un servicio. La publicación de DAILY (1997) y el artículo de COSTANZA et al. (1997), constituyeron punto de inflexión en el estudio y valoración de los SSEE. En
Nº 140 | Segundo Trimestre 2020
DAILY (1997) se definieron los SSEE como las condiciones y procesos a través de los cuales los ecosistemas naturales y las especies que los constituyen, sostienen y completan la vida humana, mantienen la biodiversidad y la producción de bienes ecosistémicos. A pesar de que este concepto y su contribución a una mejor gestión ambiental han sido ampliamente reconocidos, sus aplicaciones prácticas todavía son limitadas (COSTANZA et al., 2017). Los ecosistemas proporcionan a la sociedad toda una serie de bienes y servicios valiosos y económicamente importantes, como la purificación del agua y el aire, la fertilización del suelo o la provisión de alimentos. Así mismo, los ecosistemas sanos desempeñan un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático (CC), tanto por su importancia en el almacenamiento de carbono como por la protección que ofrecen contra inundaciones, sequías y otros efectos del CC. El concepto de IV está siendo adoptado de forma creciente en las diferentes políticas y estrategias de gestión territorial como un instrumento para asegurar los SSEE requeridos para el bienestar humano y la calidad de vida. En España, la Ley 33/2015 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad introduce la creación de la Estrategia Estatal de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas, que incorporará una cartografía adecuada que permita visualizarla gráficamente. La CE en el documento “Construir una Infraestructura Verde para Europa” establece que, en la práctica, una de las formas más efectivas de construir una IV es a través de la ordenación del territorio. La planificación territorial de la IV debe localizar
[61]