parecido al que tuvo Martha Graham en el período precedente de la evolución de la danza; entonces se trataba de la modern dance. Al igual que Martha Graham, Merce Cunningham no forma auténticos discípulos, pero su obra, su ejemplo, se convierten en un estimulante para el desarrollo de la personalidad de toda una generación de artistas coreográficos, aunque no hubieran sido ni alumnos ni colaboradores del Cunningham profesor y coreógrafo. Sin embargo, un gran número de bailarines-coreógrafos considerados como pertenecientes a la nueva vanguardia son, muy a menudo, antiguos alumnos de Cunningham. O bien han estudiado su técnica, o bien siguieron los cursos de composición coreográfica que Merce Cunningham impartía junto a Robert Dunn cuando, a principios de los años sesenta, su enseñanza contribuyó a la formación del grupo procedente de la Judson Memorial Church. LA NUEVA DANZA. Principales animadores: Twjla Tharp - Yvonne Rainer - Elizabeth Keen -Meredith Monk Trisha Brown - Rudj Pérez - David Gordon... Cuando se inicia una nueva tendencia, cuando está todavía en su estadio de gestación, cuando sólo puede ilustrarse con unos pocos intentos, nos faltan referencias para poder apreciar el interés de dicha tendencia y otorgarle su justo valor. Esta nueva tendencia se revela a partir de los años 1962-1963, momento en que varios coreógrafos, posteriormente consagrados, presentan sus primeras obras en la Judson Memorial Church de Nueva York. Estos nuevos trabajos se escalonan a lo largo de todo un período y se caracterizan por algunos rasgos comunes que se manifiestan en todos ellos. Algunos de estos bailarines-coreógrafos han trabajado con Merce Cunningham. Muchos incluso han bailado en su compañía: STEVE PAXTON, DEBORAH HAY, DOUGLAS DUNN, y todos conocen y aprecian los principios de Cunningham. Así pues, en los trabajos de estos artistas independientes y que constituyen la ola de la Nueva Danza, se distingue el sello de Cunningham, aunque pocos de los investigadores se proclamen como pertenecientes a su escuela. La difusión de la obra de Cunningham despertó en ellos la idea de otras posibilidades de expresión, sobre todo a raíz de las experiencias de Merce Cunningham respecto a una nueva utilización del espacio y de los lugares poco habituales para la evolución de los bailarines. Twyla Tharp, Trisha Brown, Rudy Pérez, Elizabeth Keen se manifiestan al respecto en la misma línea que Merce Cunningham.
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