HISTORIAS PARA NIÑOS
En la casa de mi Padre DAWN JACOBSON-VENN
“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me voy y os preparo lugar, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo esté, vosotros también estéis” (Juan 14:1-3).
Materiales de apoyo
Venga caminando rápido desde el fondo de la habitación, con una maleta llena de artículos para un viaje. Algunas fotos de la naturaleza como flores, montañas y cascadas para mostrarles a los niños. La canción de Steve Green la casa de mi Padre. “¡Lo siento, estoy atrasada; ya voy! Estaba empacando para un viaje”. “Ahora déjenme ver lo que tengo aquí. ¡Necesito chequear si lo tengo todo – Cartera, dinero, pasaporte, teléfono, ropas, libros, Biblia, chaqueta, frazada y bocadillos! “Apuesto que probablemente te estés preguntando adónde voy, ¿cierto? Este es el viaje Dawn Jacobson-Venn, MA es Asistente Administrativa del Departamento del Ministerio de la Familia de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día, en Silver Spring, Maryland, USA.
más emocionante que he planeado. Verás, estoy alistándome para ir al cielo. ¿Quieres unirte a mí? La Biblia tiene mucho que decir sobre el cielo, y Dios nos ha dado algunas pistas sobre cómo será el cielo. Sin embargo, mucho de esto todavía es un misterio para nosotros, porque Dios aún está preparándonos este lugar especial. Al menos esto es lo que Jesús les dijo a sus discípulos antes de subir al cielo.
31
Jesús dijo que estaba preparando un lugar para nosotros con muchas habitaciones o mansiones. Esto me hace pensar que, si Dios creó el mundo y todo lo que hay dentro y alrededor de él en seis días, ¡cuán asombroso será el cielo, ya que se ha tomado mucho tiempo para prepararlo para nosotros! ¿Puedes pensar en un bello lugar donde has estado? Quien sabe una montaña, una cascada, o jardines hermosos con muchas flores (mostrar fotos). Bueno, por muy bello que sea nuestro mundo, ¡el cielo es mucho más maravilloso que cualquier cosa que podamos imaginar! Dios puede usar todo lo que quiera para preparar la ciudad celestial – Oro para pavimentar las calles, diamantes brillantes y otras gemas preciosas para decorar que ni siquiera hemos visto en la tierra. Tal vez por eso la Biblia no nos da una descripción completa del cielo, porque ni siquiera seríamos capaces de entender cuán asombroso y hermoso es realmente.
EN LA CASA DE MI PADRE
Texto