La historia de la energía en Colombia: de la leña al sol
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olombia ya vivió un pequeño fin del mundo, o por lo menos, un simulacro. Fue en 1992, cuando toda su poblacióntse vio abocada a someterse a condiciones especiales que cambiaron el ritmo de todas las actividades, desde las más cotidianas, como la hora de lavarse los dientes para ir al colegio, hasta las más complejas, como los horarios de funcionamiento de la máquina productiva de la economía del país. Décadas antes del coronavirus, el país tuvo un momento de parálisis transitoria en que se vio obligado a modificar la totalidad de sus dinámicas de funcionamiento para superar juntos una situación presionada por factores externos, y que golpeaba a todos y cada uno de los miembros de su población. Se trata del apagón, una medida 10
ENERGÍA
de respuesta al Fenómeno de El Niño que trajo largas sequías que pusieron en jaque un sistema de generación basado principalmente en fuentes hídricas. Desde entonces, son muchos los aprendizajes que han llevado al sistema energético colombiano a robustecerse, diversificarse y consolidarse como uno de los más confiables y sostenibles del mundo. Para muchos, en especial los millennials, el apagón marca el inicio de la historia de la energía en Colombia. No suele haber mucha claridad sobre lo que había antes, y solo desde entonces, los focos de la opinión pública han estado encendidos sobre el funcionamiento de las distintas formas de energía que se producen en el país. Antes del apagón, pareciera que todo era oscuridad. Pero eso fue hace unos 28 años, y, en realidad, la historia de la energía en el país comienza mucho antes. Como lo enuncia la ley de la conservación de la energía, convertida hoy en todo un dicho popular: “la energía no se crea ni se destruye, solo se