educando para la paz
Bede Griffiths, su vida y su enseñanza
Salud Integral: Aliméntate sátvicamente
Mahasangha es la “Gran Comunidad”, recordándonos que todos somos parte de una gran familia espiritual. Esta sección es un espacio donde amigos, practicantes, profesores, estudios de yoga y centros de bienestar nos comparten sus fotos de momentos especiales.
Comparte tus fotos con nosotros al correo: revistasadhana@gmail.
Cuerpo & Mente
30 Luces del Mundo
Editor In Chief
Cintamani Musello
Editor Asistente
Gustavo Plaza
Arte & Diseño
María Elena Chavarría
Fotografía
Manuel Tama
Administración
Nubia Soledispa
Colaboradores
Prabhu Mriganath
Dr. Gonzalo Arcos
Swami Veda Bharati
Ramiro Calle
Narasimha Yoga
Lorena Alvear
Lisette Burgos
M.Sc. Scheny Feraud
ISKCON Guayaquil
Henry Toral
Parsival Castro
Tatiana Reyes
Copyrights 2023
SADHANA JOURNAL revistasadhana@gmail.com
Contacto
Teléfono: +593 6029041
Calle La Moderna #630, Samborondón, Guayaquil-Ecuador
Sadhana imprime y distribuye 5000 ejemplares
L levar una vida equilibrada, en el mundo en el que vivimos, requiere de compromiso y esfuerzo. Aunque suene paradójico, así es.
Iba a comenzar este editorial escribiendo “Llevar una vida equilibrada en la actualidad es muy difícil”, pero luego me di cuenta que siempre lo ha sido. Sí, vivimos en un mundo cada vez más rápido, de mayor movimiento, con más actividades, muchos frentes que cubrir y distintos roles que interpretar. Sin embargo, si miramos hacia atrás, en todo momento ha habido factores externos (e internos, muchos más) que nos han obstaculizado el mantenernos en balance, pues así es la vida, dual.
Desde el inicio de los tiempos, humanidad y dificultades coexisten: Sequías, hambrunas, calentamientos y enfriamientos terrestres, terremotos, erupciones de volcanes, diluvios e inundaciones, plagas, escasez de alimentos, guerras, epidemias, etc.
Si vemos la vida de nuestros abuelos, a pesar de haber parecido más serena y menos complicada, estaba llena de los conflictos y desafíos de la época. Si conversamos con alguien 30 o 40 años mayor que nosotros, escucharemos la realidad. Cada década, cada siglo viene con sus propias cargas y contratiempos. Y es nuestro trabajo aprender a navegar estas aguas de la dualidad de la mejor manera posible.
El entender, interiorizar y darnos cuenta (de verdad) que somos seres espirituales viviendo experiencias humanas es el primer paso para llevar una vida en balance. Pero, ¿qué quiere decir esto a nivel práctico? Pues que hay cosas mucho más importantes que nuestro trabajo, dinero, posesiones, horarios, apariencia física, estado civil,
y más. Que si somos seres espirituales, nuestro desarrollo espiritual es primordial (debería ser el pilar más importante de nuestra vida).
No tomarnos tan en serio los personajes que representamos en esta vida terrena (hijo, padre, madre, abogado, deportista, amargado, feliz, delgado, gordo, etc.), saber que todo es pasajero, que nosotros “controlamos” muy poco (o NADA), que la vida es efímera y puede acabar en un instante… Te puede dar un poco de perspectiva.
Sin embargo, existen otras prácticas que también nos ayudan a llevar una vida equilibrada y que si las transformamos en hábitos serán de apoyo inconmensurable:
-Meditar temprano en la mañana antes de empezar con cualquier actividad
-Realizar pranayamas equilibrantes y estar consciente de nuestra respiración a lo largo del día
-Tener una práctica sostenida de asana, así como de ejercicios cardiovasculares y de tonificación diarios
-Llevar una alimentación natural y saludable, si es posible, de acuerdo a tu biotipo
-Descansar y tener tiempo de ocio
-Aprender algo nuevo
-Desarrollar la resiliencia
En esta edición de Sadhana encontrarás artículos que te inspirarán y te darán muchas pautas para llevar una vida más ecuánime. Utilízalas, ponlas en práctica, sácales provecho.
En amor y servicio, Cintamani.
Próximo evento en el Domo: Ritual de Equinoccio de Primavera
El 21 de Diciembre del 2022 en El Domo estuvieron más de 100 personas meditando y uniendo su energía e intención en la “Ceremonia del Fuego “ por el Solsticio de Invierno y ahora nos preparamos para encontrarnos nuevamente este 21 de Marzo y unirnos en “El Ritual del Equinoccio de Primavera” en nuestra ceremonia de unión con la Tierra.
Respiraremos profundamente y nos fundiremos con la vibración de la música y la belleza de la primavera que renace en cada uno de nosotros.
El Domo es un Campus de Meditación y Bienestar ubicado en la zona de Tumbaco en Quito-Ecuador, es un lugar diseñado para crear condiciones físicas y energéticas ideales para inducir estados de consciencia de relajación, serenidad, armonía y paz.
El Domo es el espacio perfecto para que profesionales del mundo del bienestar, del desarrollo personal y espiritual puedan ofrecer sus servicios en este hermoso lugar.
Teléfono de contacto: +593 983 001 392
E_mail: hola@domomindspa.com
https://domomindspa.com
Ubicación: Calle Alfredo Donoso Lt. 254 y José Vinueza (Sector La Morita – Tumbaco)
Luego de una carrera de casi 40 años y con más de 50 discos grabados, Ricardo Williams llega a su madurez artística de la mano de un puñado de mantras universales, para sumarse, con sus composiciones musicales, a una creciente corriente de sanación y amor.
MANTRAS PARA EL CORAZÓN, el nuevo disco de Williams, recoge mantras de distintas corrientes espirituales, fruto de un proceso de reencuentro consigo mismo, con su música y con su voz.
"Ma”, primer promocional de este disco, ya se encuentra disponible en todas las plataformas digitales.
1. Om Shanti
2. Maha Mantra Para Prema
3. Om Nama Shivaya
4. Om Mani Padme Hum
5. Ma
6. Durga Ma
7. Govinda
8. First Maha Mantra
9. Sat Cit (Para Ananda)
Ricardo Williams vuelve con “Mantras para el Corazón”
Lo que nos encanta en esta edición
Lo que aprendí de mi gato Émile, el nuevo libro de Ramiro Calle
Esta es una historia real y conmovedora de amor incondicional. Es el encuentro de dos almas, la de un gato y la de un humano, que se inspiran, confortan, ayudan y aman. El gato Émile, que es un prodigio de sabiduría, sensibilidad, ternura y entrega, se convierte en un maestro para Ramiro Calle y no hay día que no aprenda a través de él esenciales enseñanzas y pautas para la vida, y todo ello mediante una profunda y rica conexión que se celebra más allá de las palabras y los conceptos.
De las más de 200 obras de Ramiro Calle, ninguna resulta tan intimista y sensible como ésta, porque no está escrita desde la mente, sino desde el ser. Este libro es asimismo un canto de inmenso cariño a todos los animales, a los que el llamado ser humano tanto ha explotado, menospreciado y maltratado. A través de la presencia y actitud de Émile en su vida, el autor abre de par en par la puerta de su corazón.
Amarce Bordados, bordando desde el corazón
“Cuando en medio de toda la locura que pasa en mi día a día, busco un poco de equilibrio, un poco de paz e inspiración… Ahí yo bordo”. -Marcela Arce
En el 2014 nació este emprendimiento. Marcela, las manos detrás de Amarce Bordados, borda desde siempre. Diseñadora gráfica de profesión y freelance desde que terminó la universidad, siempre ha preferido la parte artística del diseño: dibujar, pintar, la fotografía, y claro, bordar. Es a partir del nacimiento de sus hijos que decide trabajar desde casa para poder darles el tiempo y atención que merecen.
Así, con esa idea de que un bastidor bordado puede convertirse en un detalle muy lindo para colgar en cualquier pared o rincón, creó Amarce Bordados, como la marca que representaría sus bordados.
Son nueve hermosos años de muchas horas de bordado, donde un bastidor, unos hilos, tela, tijera y una aguja, se convierten no sólo su terapia diaria, sino en piezas prácticas, artesanales y lindas.
Contacto: +593 98 719 1406
@amarce.bordados
Madi Das y Dave Stringer “Mantra Americana”
Cuando los confinamientos se tomaron el mundo en el 2020, sin opciones a presentaciones en vivo, los cantantes, compositores y productores Madi Das y Dave Stringer (ambos nominados a los Grammy 2022) comenzaron a escribir juntos, haciendo reuniones por Zoom semanalmente, improvisando e intercambiando ideas.
La música de estas sesiones era fresca y eléctrica, cantos orientales con acento country, ¡sánscrito con alma! Juntos investigaron sus antecedentes para crear canciones que harían progresar el género y harían que el canto devocional fuera más accesible.
Durante los siguientes dos años, reunieron a la banda de Bhakti Without Borders, a menudo grabando de forma remota, para desarrollar un sonido nuevo y fresco que sería Mantra Americana. El nuevo álbum profundiza en el ritmo y la armonía con la adición de un cuarteto vocal y una rica combinación de banjo y tabla, armonio y armónica, un subgénero único que solo puede describirse como Country & Eastern. Este álbum fue nominado a Mejor álbum new age, ambiental o de canto devocional en los Grammy 2022.
Dust and Tears de Jai Uttal: Siguiendo el caminar de los ancestros
Dust and Tears es uno de los álbumes más introspectivos y profundamente personales del vasto catálogo gran devoto innovador musical Jai Uttal. También es una de sus grabaciones más audazmente aventureras: una síntesis inspirada de poesía y canciones divinas de todas las épocas y de todo el mundo. La paleta musical es relativamente sobria, no obstante, chispeante y cautivadora, entrelazando una miríada de sabores de músicas del mundo para crear un maravilloso y cálido tapiz de devoción y amor. A lo largo de nueve pistas prístinas, magníficamente grabadas, como siempre, por Ben Leinbach, Jai invoca y honra a los grandes santos cantantes de la tradición Bhakti de la India, la belleza de la quiromancia del Antiguo Testamento y las sentidas canciones de los narradores errantes de América.
“En mi canto de kirtan, mantra y oración a lo largo de los años, me he sentido profundamente conectado con los hombres y mujeres del pasado antiguo”, dice Jai. “Personas que invirtieron sus corazones y almas en estas palabras, estos mantras, y que se conectan con nosotros hoy y nos prestan su shakti, sus corazones, sus emociones y el poder de sus oraciones, para aumentar el poder y la potencia de nuestras oraciones.”
Al crear Dust and Tears, Jai colaboró estrechamente con su esposa de muchos años, la profesora de yoga, bailarina y autora Nubia Teixeira. La inspiración inicial para el álbum provino de ella, relata: "Nubia estaba mirando algunos libros de antiguas canciones místicas de la India y dijo: ¿Qué tal si hacemos un proyecto en el que tomamos estas canciones, poemas y oraciones y las actualizamos y adaptamos en nuestro propio idioma y música? En realidad, Nubia escribió más del 50 por ciento de estas letras. A veces era un poco más yo, otras veces era un poco más ella. Y a veces éramos los dos. Qué fabuloso regalo poder colaborar con mi esposa de esta manera”.
Anteriormente hemos conversado acerca de los gunas, de las tres cualidades o energías que se entretejen para manifestar la realidad tal y como la conocemos: satva, rajas y tamas.
Nuestro estilo de vida moderno, con sus altos niveles de estrés y toxinas, nos lleva a una vida que fluctúa entre los modos rajásicos y tamásicos. A pesar de que estas dos energías son igual de importantes que satva para que la vida se dé, para hallar y lograr la felicidad, claridad y estados mentales y espirituales más elevados, debemos trascender tamas y rajas y llegar a un estado sátvico.
Nuestros alimentos pueden ser sátvicos, rajásicos o tamásicos
En el Bhagavad Gita 17.8-10 Krishna hace una descripción muy minuciosa y acertada acerca de los alimentos y su clasificación. La comida tiene la finalidad de aumentar la duración de la vida, sanar, purificar la mente y auxiliar en la fuerza del cuerpo. Ese es su único propósito. En el pasado, los sabios y grandes rishis seleccionaron aquellos alimentos que mejor ayudan a la salud y aumentan la duración de la vida, tales como los productos lácteos, la melaza, el arroz, el trigo, las frutas y las verduras (recordemos que en la antigüedad todos los alimentos eran orgánicos).
8. āyuḥ-sattva-balārogyasukha-prīti-vivardhanāḥ rasyāḥ snigdhāḥ sthirā hṛidyā āhārāḥ sāttvika-priyāḥ
Aliméntate Sátvicamente
Por : Cinta mani MuselloLas comidas que les gustan a aquellos que están en el plano de la modalidad de la bondad (satva guna), aumentan la duración de la vida, purifican la existencia de uno, y dan fuerza, salud, felicidad y satisfacción. Esas comidas son jugosas, grasosas, sanas y agradables al corazón.
9. katv-amla-lavanaty-usna-tiksnaruksa-vidahinah ahara rajasasyesta duhkhasokamaya-pradah
Las comidas que son demasiado amargas, demasiado agrias, saladas, calientes, picantes, secas y que queman, les gustan a aquellos que están en el plano de la modalidad de la pasión (raja guna). Esas comidas causan aflicción, sufrimiento y enfermedades.
10. yata-yamam gata-rasam puti paryusitam ca yat ucchistam api camedhyam bhojanam tamasa-priyam
La comida que se prepara más de tres horas antes de ser ingerida, la comida desabrida, descompuesta y podrida, y la comida hecha de sobras y cosas impuras, les gustan a aquellos que están en el plano de la modalidad de la oscuridad (tama guna).
Los alimentos sátvicos son aquellos que son integrales, frescos (sin procesar ni refinar), jugosos (ricos en agua), cocinados al momento, ligeramente aderezados y sazonados.
Son alimentos vivos, con toda la energía de vida dentro de ellos. Podríamos decir que vienen directamente de la naturaleza, con poca o sin intervención humana.
La comida rajásica, a diferencia de la mencionada anteriormente, es excesivamente condimentada: Demasiado salada o picante, muy amarga, ácida, utiliza saborizantes y colorantes artificiales. Alimentos como el vinagre, el ajo, y los ajíes, así como el café (y todos los estimulantes) son considerados rajásicos por promover la hiperactividad mental.
Los alimentos tamásicos no son alimentos vivos, es decir, no tienen ni aportan energía; más bien, restan energía a nuestro organismo y nuestra mente. Toda comida procesada (empacada), refinada, enlatada, embotellada, guardada (sobras), congelada es considerada tamásica. Las carnes (todas), la cebolla, el alcohol y los cigarrillos también forman parte de esta categoría que promueve la inercia, la pesadez y la ignorancia.
Los efectos de nuestros alimentos
Las comidas sátvicas sanan. Son fáciles de digerir, por lo que nuestro cuerpo utiliza menos tiempo en asimilarlas, esto le da más tiempo de sanar. En el momento en que cambiamos a una dieta y un estilo de vida sátvicos, retomamos el poder y la responsabilidad de curarnos de enfermedades sin medicamentos.
Los beneficios no son solamente físicos. Los pensamientos se modifican: Claridad
mental, humildad, calma, compasión. De esta manera nos elevamos a un estado más alto de consciencia y nos acercamos a la Divinidad.
Comer comida rajásica y tamásica no sólo perjudica nuestra salud corporal, sino también nuestra salud mental. Si comemos predominantemente alimentos de este tipo, llegará un momento en que seremos víctimas de muchas enfermedades, como diabetes, obesidad, presión arterial alta, colesterol alto, dolores en las articulaciones, alergias, etc. En un nivel más sutil, tienen un gran impacto en nuestros pensamientos. Nos volvemos arrogantes, inquietos, ansiosos e impacientes. Nuestros niveles de concentración disminuyen y el aburrimiento y la pereza serán parte de nuestro día a día.
¿Cómo es una alimentación sátvica?
Para que nuestra comida sea y tenga efectos sátvicos en nuestro cuerpo y nuestra mente debe tener cuatro cualidades:
1. Viva
2. Integral
3. Vegetal
4. Rica en agua
Esto quiere decir que, en la medida de lo posible, te alimentes de frutas y vegetales frescos, crudos o poco cocinados, granos integrales, sin azúcares ni grasas añadidos. Los vegetales ricos en agua deben de ser el 70% de tus comidas, y el resto (granos y cereales integrales, almidones) deben cubrir el 30% restante.
*Esta es una guía básica para comprender el alcance que tienen los alimentos que ingerimos en la salud de nuestro cuerpo y mente. Recuerda que siempre es mejor realizar estas modificaciones de la mano de un Terapeuta de Ayurveda certificado y con experiencia.
Eka Pada Koundinyasana II
Postura del Sabio Koundinya o de la apertura voladora
BENEFICIOS
• Fortalece las muñecas y los brazos.
• Fortalece el core y te ayuda a trabajar los abdominales.
• Permite la apertura de los muslos internos.
• Ayuda a tener una mejor digestión al masajear los órganos internos.
• Te ayuda a trabajar el equilibrio físico y mental.
• Desarrolla humildad.
• Calma la mente.
PASOS:
1
CONTRAINDICACIONES
• Es importante que no hagas la postura del sabio Koundinya si tienes lesiones en las muñecas, cervicales o en la espalda baja.
POSES PREPARATORIAS
Esta postura es de nivel medio-avanzado, por lo que recomendamos tener una práctica diaria de las siguientes posturas:
• Bakasana
• Chaturanga dandasana
• Upavistha Konasana
• Uttan pristhasana
Comienza colocado en la postura de cuatro puntos de apoyo. 2
Mueve tu pie derecho hacia el frente, en posición de la lagartija, con ambas manos por dentro del pie derecho. Coloca las palmas de las manos en el suelo con el dedo medio apuntando hacia el comienzo del mat y las muñecas bien apoyadas para que toda la mano contacte con el suelo. La pierna izquierda está activada y fuerte, estirada.
3 5
Pasa el tobillo derecho por delante de la mano derecha, levanta la rodilla y el talón del pie izquierdo hasta quedarte sobre las puntas de los dedos del pie de atrás. Flexiona el codo derecho para hacer hueco y poder ir metiendo el brazo hasta el hombro bajo la rodilla derecha. Intenta que el dedo medio de la mano derecha señale hacia delante para que la muñeca no se vaya hacia los lados.
4
Levanta el pie derecho a la vez que estiras el codo derecho haciendo más hueco para poder llegar a meter el hombro hasta que toque la parte posterior de la rodilla derecha. Estabiliza las manos sintiendo toda la palma de las manos en el suelo. Flexiona los codos hacia atrás, apretando los costados y lleva el pecho hacia adelante con la pierna derecha extendida y apoyando el muslo derecho sobre la parte superior del brazo derecho doblado.
¡Despega! Respira y al inhalar levanta el pie izquierdo del suelo. Intenta mantener la postura en equilibrio al menos 3 respiraciones profundas. Repite esta postura por el lado contrario.
Parsival Castro, educando para la paz.
Por: Gustavo PlazaCuando conoces a Parsival jamás te imaginas que tiene 72 años… Su energía, sus pocas arrugas, su mirada limpia, pero más que nada su jovialidad y ligereza al andar, despistan. A simple vista nada delata su edad. Parsival es un hombre sencillo y humilde, de habla pausada, tranquila. Cuando entablas un diálogo con él te das cuenta desde el primer momento que hay temas que lo apasionan: La paz, la música, la filosofía, el arte. Sus conversaciones están cargadas de estas palabras y de su ilusión por transmitir esa misma pasión a sus alumnos y allegados.
Arquitecto de profesión, filósofo, historiador y educador de vocación, Parsival lleva 50 años en la docencia, totalmente volcado en su querido República de Francia.
Visitamos su institución para saber un poco acerca de su obra: Un colegio con un enfoque integral.
Parsival qué gusto estar aquí contigo. Cuéntanos un poco acerca de tu colegio.
Esta institución fue fundada como Colegio República de Francia en 1956 por mis padres. En el año 1998 yo me hago cargo del colegio. Siempre hubo una apertura y dirección hacia una educación de paz. El objetivo era trabajar por el bienestar individual y colectivo de la humanidad, así como el logro de la paz mundial.
Yo aún doy clases, y a pesar de yo ser arquitecto, la materia que doy es filosofía y no matemáticas como se pudiera pensar.
¿Cuál fue tu inspiración para que el colegio República de Francia sea lo que es en la actualidad?
La obra de este colegio está inspirada en los escritos del escritor y astrólogo francés Serge Reynaud de la Ferrièr, quien proponía la unión la ciencia, el arte, la filosofía y la didáctica. Por eso todos los salones están llenos de cuadros, pues los colores son un
lenguaje tan importante como el lenguaje que viene del sonido, o el lenguaje del movimiento en la danza; incluso el timbre que marca los cambios de hora es la 8va Sinfonía de Schubert y en los recreos se escucha por altoparlantes música clásica.
occidentales, destacándose por un espíritu de integración y de síntesis.
Y como muchas personas aquí en Guayaquil, fui un autodidacta. Mi desarrollo se dio por medio de la documentación por libros. Es ahí cuando aprendo que, así como el Macrocosmo (Gran Universo) registra todas las leyes de la naturaleza con la ayuda de los planetas, el Microcosmo (pequeño universo, ser humano) rige las leyes orgánicas con la ayuda de las glándulas endocrinas. Y comencé a practicar los ejercicios psicofísicos del yoga, que abarcan un
Se trata de llegar a una síntesis entre la ciencia y el arte, pues la ciencia desarrolla la parte racional del cerebro y el arte desarrolla la parte intuitiva, creativa y emocional. Y la pregunta es ¿cuánto aporta nuestro sistema educativo a la racionalidad y a la creatividad? Una sociedad que se educa sólo en la razón le falta la comprensión del sentido de la felicidad.
¿Cómo es un día normal aquí?
Los chicos tienen todas las materias que son requeridas por el Ministerio de Educación, las del pénsum corriente: Matemáticas, Estudios Sociales, Ciencias, Lengua y Literatura, Educación Física, Inglés, etc. Adicionalmente tienen Filosofía desde pequeños (cabe recalcar que la materia no es “historia de la filosofía”, sino filosofía como tal), Yoga, Arte, Danza, Música.
Este no es un colegio de santos, pero sí de sanos. Es una institución de gente sana.
Sabemos que el yoga ha sido una parte importante de tu vida. ¿Cómo llegó el yoga a ti?
El yoga llegó de una forma muy sencilla. Yo no tengo formación académica en ese ámbito, pero fue a través de los libros de La Ferrièr que yo descubrí esta ciencia del yoga. Llevo ya 50 años practicándola…
El Dr. Serge Raynaud de la Ferrière,
trabajo de control, tanto sobre el organismo como sobre la consciencia.
¿Cómo integras esta ciencia en lo que haces en tu día a día, en la educación?
El yoga en la educación es una propuesta para la construcción de una sociedad de paz. En medio de todo este mundo de
agresividad, una propuesta de no violencia entre los niños y jóvenes es una urgencia, una necesidad. Pero el yoga no debe ir solo, debe ser enseñado junto a las ciencias (matemáticas, biología, estudios sociales, etc.) y el arte.
El que los estudiantes, desde la escuela, aprendan a pensar, que se cuestionen, se hagan preguntas y las debatan, es parte de nuestra meta. Que no estén solamente “de paso” por el planeta, que se den cuenta de su conciencia y su inconsciencia, que se pregunten por qué están aquí…
fundador de la Gran Fraternidad Universal (GFU), se caracterizó por su interés en las diversas disciplinas del saber, tanto filosóficas, científicas, artísticas, de culturas ancestrales como de las contemporáneas, empleando para ello fuentes orientales y
En cada una de nuestras clases los alumnos se toman una o dos pausas con momentos de silencio, luego cantan una escala musical, y silencio nuevamente. Esto reinicia su sistema nervioso, además que les permite aprender mejor.
Aquí tenemos una Orquesta de Cámara, todos nuestros alumnos son músicos, todos hacen arte, es obligatorio. Las clases “normales” son hasta el mediodía, después de eso este colegio se transforma en un conservatorio y escuela de bellas artes.
El yoga es parte esencial del día a día. Los chicos tienen clases de hatha yoga y meditación desde temprana edad. En cada una de las horas de clase incluso se
hacen varias pausas para reforzar la calma y la absorción de conocimiento: El profesor a cargo les da la orden a los alumnos de dejar de hacer lo que estén haciendo, ellos cierran los ojos, se concentran en su respiración, cantan una escala musical, vuelven a concentrarse en la respiración, y acto seguido, la clase continúa.
¿Qué es lo que tú en todos estos años como educador has podido observar de diferente cuando se educa por la paz?
Hay mucha cordialidad entre los alumnos, no se ven las peleas y los malos modos que hay en otros lugares. No se ve la agresividad a la que estamos acostumbrados, lo que pensamos que es normal. Los estudiantes son buenos, y eso se nota.
Asimismo, en este momento tenemos 20 chicos que están Francia estudiando música, y que practican yoga allá también, son nuestro orgullo.
Es más, uno de nuestros ex-alumnos es el director de la orquesta más importante de Estrasburgo. Estuve hace poco con ellos en Europa, realizamos una linda práctica liderada por el director de orquesta. Imagínate a toda una orquesta haciendo yoga guiados por su director… fue muy bonito.
Testimonio de Eunice, alumna del Colegio República de Francia, 17 años
Antes yo estaba en otro colegio, y la verdad es que el cambio fue bueno. Este es un colegio diferente, aquí hay mucha música y puedo tocar lo que me gusta, que es el harpa.
Aquí también comencé a hacer yoga, lo practicamos todos los días, y esto me ha ayudado mucho a forjar mi personalidad, me ha dado dirección. He cambiado muchos aspectos de mi vida gracias al yoga, lo veo más que nada en mi actitud. Por ejemplo, hay situaciones en la vida en las que me provocaba simplemente reaccionar, por lo general de forma un poco agresiva, pero ya tengo integrado en mí ciertos conocimientos entonces lo que hago es respirar tres veces de forma suave y consciente, y todo cambia. No actúo impulsivamente, sino que pienso antes de actuar.
El yoga también me ha ayudado a tocar mejor el harpa, a ser más creativa. Yo a esto que hago lo llamo la “técnica del harpa libre”, que es meditar, hacer ciertas posturas mientras toco el harpa. Respiro, medito, y toco. Generalmente después de estas sesiones compongo música y escribo, me inspira mucho.
El yoga en la educación es una propuesta para la construcción de una sociedad de paz. En medio de todo este mundo de agresividad, una propuesta de no violencia entre los niños y jóvenes es una urgencia, una necesidad.
Kadamba Kanana Swami
Una vida cantando el Santo Nombre
Por: Cintamani Musello“Sólo medito en la misericordia. El punto es este: tenemos que apreciar que este es un movimiento de misericordia y de alguna manera u otra simplemente nos refugiamos constantemente. (…)Toma refugio en el Santo Nombre, toma refugio en el Srimad Bhagavatam, toma refugio en los devotos, toma refugio en prasadam y toma refugio en el servicio devocional.”
(12 de noviembre de 2022, India, reunión semanal de Zoom)
Kadamba Kanana Swami es sinónimo de kirtan. Su inconfundible y melodiosa voz es la protagonista de festivales de canto, casi una quincena de álbumes devocionales (con cuyas ventas financia los proyectos que apoya) y cientos de videos en YouTube, así como de muchas interesantes clases de filosofía védica y charlas espirituales. Es también autor de varios libros, como Nada Más que el Santo Nombre, Palabras de un Ermitaño Público, Servicio Devocional, Maravilloso Krishna y Kirtaniya Sada Harih, textos que son fuente de inspiración para todo buscador en el camino del Bhakti yoga.
A pesar de haber nacido un 12 de abril de 1953 en Heemstede, Países Bajos, su corazón está en Vrindavan, lugar al que llama hogar, y donde reside desde hace más de 45 años.
Su viaje iniciático comenzó cuando el joven neerlandés sintió que su vida carecía de sentido. A la edad de 25 años decide volar a India en busca de un significado más grande y profundo, a encontrarse. Pero además de encontrarse, es en esa peregrinación que encuentra a su gurú, Jayadvaita Swami, editor (el más antiguo de Bhaktivedanta Book Trust durante más de cuarenta años), maestro y discípulo directo de A.C. Bhaktivedanta Srila Prabhupada. Es por medio de su maestro que entra a ISKCON (Sociedad Internacional para la Conciencia de Krishna) en 1978 y se une al servicio del templo Krishna Balaram Mandir, donde desde el inicio hasta 1984 cumple varios roles gerenciales y administrativos.
La década de los 80 fue de suma importancia, ya que comienza a viajar a dos países, donde gracias a él, las comunidades vaishnavas crecen de manera sostenida y fuerte: Australia y Bélgica. A su capacidad de entrega, carisma y su habilidad para relacionarse, se les debe el veloz desarrollo que tuvo el movimiento de Srila Prabhupad en estas naciones de Oceanía y Europa.
Pero India lo seguía llamando… En 1985 regresa, esta vez a Mayapur, donde toma el cargo de supervisor del Pushpa Samadhi Mandir de A.C. Bhaktivedanta (santuario conmemorativo) y donde permanece durante 5 años. El espíritu pionero de S.S.
Kadamba Kanana Swami era lo que lo motivaba a seguir trabajando en este lejano país, pero sobre todo, el poder disfrutar de este lugar sagrado que le brindaba alegrías más allá de lo material.
El desempeño como supervisor de tan magna obra en Mayapur le valió el cargo de presidente del templo en Vrindavan, que con gusto y mucha iniciativa tomó y sostuvo hasta 1995. No es sino hasta después de dejar esta ardua y hermosa posición, que empiezan sus viajes de prédica alrededor del mundo, y en 1997 su gurú lo inicia como sanyasi (renunciante).
Como sannyasi, ha estado activo en una gran variedad de proyectos. En primer lugar, se involucró profundamente en Sudáfrica y pasó un tiempo considerable allí desde 1995 hasta el presente. En un país con tanta historia de Apartheid, trató de construir puentes entre comunidades africanas y en ofrecer apoyo a la comunidad local en la Conciencia de Krishna. Adicionalmente fue el responsable de llevar la famosa festividad y desfile de Ratha Yatra a Soweto, Johannesburgo. Otros lugares en los que ha residido y donde ha puesto en marcha diversos proyectos han sido República Checa y Bélgica (el festival Radhadesh Mellows fue iniciado
principalmente por devotos neerlandeses), así mismo, en Países Bajos dirige el festival anual Harinam del Día del Rey, donde cientos de devotos toman las bulliciosas calles de Amsterdam para un día de canto y baile.
Los últimos 10 años los ha pasado entre Mayapur, Vrindavan, Nueva York y Durban, siendo ésta la ciudad donde en febrero del 2016 le detectan un tumor colorrectal. Esto no fue un obstáculo para el Swami. Su servicio continuó: Kirtan, iniciaciones, clases, charlas, con pausas necesarias para su descanso y recuperación.
Sin embargo, y a pesar de haber sido intervenido quirúrgicamente, extrayendo el tumor, y de haber recibido quimio y radio terapia, en junio del año pasado, sus médicos en Sudáfrica y Londres le dieron la noticia de una metástasis en pulmones y próstata. Kadamba Kanana cree en ser directo y en enfrentar las situaciones de la vida, por lo que desde Nueva York dirigió una carta a sus discípulos actualizando su estado de salud, y en la que menciona, con total naturalidad, que está consciente de que éste es el comienzo del final de su cuerpo:
“He entrado en la última etapa de mi vida y espero saber cuánto tiempo me dará el Señor.
Maharaja Pariksit recibió una advertencia de siete días y mis médicos indican que me darán mucho más que eso. Por lo tanto, no tengo motivos para quejarme. Rezo para seguir los pasos de Maharaja Pariksit.
A nivel personal, mi deseo es hacer un buen uso del tiempo que me queda para escuchar y cantar acerca de Krishna. Mientras pueda, también deseo continuar con mi predicación con toda mi fuerza. Pero mi salud deteriorada dicta que disminuya mis viajes y que elija cuidadosamente mis actividades restantes.”
Vrindavan lo volvió a recibir en septiembre del 2022, ciudad desde donde a pesar de su cada vez más débil estado de salud sigue brindando clases y charlas, tanto presenciales como virtuales; así como peregrinajes, y embriagantes sesiones de canto devocional en los más exóticos y sagrados lugares.
Kadamba Kanana Swami ha cumplido a cabalidad aquello que se prometió: Dedicarse, hasta el final de sus días, a cantar los Santos Nombres de Dios hasta regresar a Él.
*Mientras esta revista estaba en impresión, Kadamba Kanana Swami, rodeado de sus seguidores y allegados y en medio de oraciones y kirtan, dejó el cuerpo desde su amada Vrindavan, un 9 de marzo. Nuestro más sentido pésame a su familia, sus hermanos espirituales y discípulos. Su sabiduría y su kirtan quedan para seguirnos guiando, acompañando e inspirando en el camino espiritual.
Para más información acerca de los álbumes y libros de Kadamba Kanana Swami visita: www.kksblog.com
El Señor Krishna es el Controlador Supremo y nosotros somos pequeños controladores, en esta situación no hay mucho que yo pueda controlar, no puedo dirigir mi bote en el ahora salvaje río del tiempo, sólo tengo que aceptar las cosas y ver qué pasa en el camino. Ya sea en este mundo o en el próximo, estoy en manos de Krishna. "
"
Mi peregrinaje a la India: Un viaje de transformación profunda
Por: Sati Devi DasiInició el viaje al corazón de la India, que en realidad es un viaje hacia nuestro propio corazón, un viaje de transformación profunda. Una vez que estuve de regreso sentí que algo en mí había cambiado y que el haber vivido experiencias completamente extra cotidianas, hicieron que yo me enfrentara a partes de mí que no conocía… Aún sigo asimilándolo.
Llegamos al aeropuerto de Nueva Delhi, la capital de India, donde nos recibió un enorme mural con estatuas de manos que salen de la pared formando los mudras o gestos de la tradición del Yoga. Una gran cantidad de gente, rostros y vestimenta completamente distintos.
A la salida nos esperaba nuestro transporte y dado que llegamos de madrugada, pudimos contemplar directamente la belleza del sol naciente. En las calles de Nueva Delhi se observan muchos árboles, uno que otro mono trepado por las ramas, y muchos carros, muchos, muchos carros y rickshaws (moto taxis) que se mueven rápidamente y se entrecruzan con el sonido de sus bocinas a todo volumen… No lo hacen con agresividad ni de forma defensiva, las bocinas son utilizadas con naturalidad como aviso. A nosotros nos chocaba un poco, pero para ellos esto es normal, y una vez que te acostumbras y entiendes la idiosincracia, ves todo de forma distinta.
Lo que más me emocionaba desde el principio era conocer en persona a nuestra bella sangha “online”, ya que con varios nos habíamos estado tratando durante meses en las sesiones de meditación por Zoom en la “Dicha de Meditar” y era la primera vez que compartiríamos en vivo y en directo.
Debo decir que conocer a estas almas fue mucho más bello de lo que esperaba, a pesar de ser un gran grupo se sintió la fluidez, solidaridad y respeto hacia la peregrinación que emprendimos en conjunto.
Fuimos a muchos templos, lugares turísticos, ashrams y demás, pero puntualizaré aquellos que más tocaron mi corazón.
India reúne a varias tradiciones religiosas, hinduismo, islam, sufismo, cristianismo, entre otros, y cada una tiene sus ritos y espacios de reunión particulares, pero encontrar un lugar como el Templo de Loto, de la fe bahai, el cual se construyó precisamente como centro de congregación de todas las religiones, nos permite regresar a esa sabiduría profunda que la búsqueda es el amor dentro de esa diferencia; es la unidad.
En Agra visitar el Taj Mahal (Corona de los Palacios) fue alucinante, primero por el nivel de trabajo artístico, una obra que tardó 22
años en construirse y toda la estructura está hecha en mármol con incrustaciones en distintos tipos de piedra (rubíes, zafiros, madre perla, obsidiana, malaquita, etc.), detalles tan finos y abundantes. Y segundo, que este mausoleo es una gran representación arquitectónica del insondable amor que sentía Shah Jahan, emperador mogol, hacia su esposa, Mumtaz.
Todo lo que se conoce al pasear por los jardines de este recinto es deslumbrante. La información que nos proporcionaban los guías, muy versados en todo lo que a los monumentos y la historia concierne, era complementada con enseñanzas espirituales y datos importantes y curiosos que nos daban Arjuna y Cintamani.
La llegada a Vrindavan me removió el corazón de maneras que todavía sigo descubriendo. Este pueblo ubicado en el estado de Uttar Pradesh, fue la tierra sagrada donde Krishna vivió muchos de sus pasatiempos, donde todos te saludan, te despiden, y te piden paso con un “Radhe Radhe”, en mención de su eterna amante Radha. Ahí nos hospedamos en el Mungir Mandir, un ashram bellísimo donde todas las mañanas a partir de las 4:30 empiezan los rituales de salutación a las deidades con cantos y oraciones. El kirtan o canto devocional está presente permanentemente,
y la verdad, a pesar de que hubo momentos en que me sentí agotada y abrumada porque caminábamos e interactuábamos todo el día, de alguna manera sentía que los cantos me sostenían, que en realidad mi alimento más vital fueron los mantras.
Uno de los días en que estábamos en Vrindavan viajamos en dirección a Govardhan, pasando por lugares donde el señor Krishna jugó con las gopis, donde se enfrentó a deidades y demonios. Nuestra primera parada fue Kusum Sarovar, lugar de juegos de Radha y sus amigas, donde ella recogía flores para Krishna. Aprovechamos el amanecer aquí, uno de los templos más bellos que he visto, con sus cúpulas color
rosa pálido y su gran estanque de agua, donde varios sadhus hacían sus abluciones matutinas y donde el sol del crepúsculo nos acompañó durante una hermosa meditación guiada por mi maestro.
Y cuando pensamos que esto era lo más lindo que nos podía haber sucedido, tuvimos una sorpresa aún más grande: Vishwambar (uno de los miembros de la famosa banda de kirtan “Mayapuris”), nos acompañó, junto a su grupo de peregrinos y estudiantes de música a sentarnos en los ghats de Kusum Samovar, a hacer kirtan. La energía del lugar y del momento era perfecta, todos cantaban y bailaban, la devoción se sentía a raudales. Mi corazón se sentía lleno.
Después de esta extática mañana fuimos al sagrado monte Govardhan, donde escuchamos el pasatiempo de Krishna en el cual levanta la montaña con su dedo meñique y salva a la gente del diluvio. ¡Yo no podía creer que estaba en ese lugar del que tanto había leído en el Bhagavata-purana! Volvimos al canto devocional sentados en tierra sacra, con el corazón completamente desbordado, las lágrimas brotaban de mis ojos, era casi un sueño, algo que no podía
comparar con nada que hubiera vivido antes, algo que hasta el día de hoy me eriza la piel cuando lo recuerdo.
La siguiente parte del viaje fue una total aventura. Llegar de Jaipur a Varanasi fue toda una travesía (casi 15 horas), y si algo te enseña la India es que todo puede pasar y eso implica cultivar la paciencia. Una vez más, el kirtan y las enseñanzas de los maestros fueron lo que nos mantuvieron
centrados y calmados en medio del caos. Llegamos a esta maravillosa tierra de Kashi, tan conocida por el paso de la Madre Ganga (Río Ganges), sus crematorios y por ser la morada terrenal del Señor Shiva. Aquí tuvimos la oportunidad de visitar una auténtica casa local, la casa del Dr. Rami, médico ayurvédico experto en aromaterapia y destilación de esencias. Callejuelas coloridas y estrechas nos guiaron al hogar/laboratorio del doctor, quien
amablemente nos recibió con un típico chai con leche de su propia vaca, nos habló de su trabajo, y nos compartió sus conocimientos acerca de las plantas y esencias medicinales.
Los días anteriores a nuestro arribo a Varanasi el Ganges había crecido mucho: los ghats habían desaparecido por la subida del río y la corriente estaba tan fuerte que no era posible entrar en sus aguas; pero justo el día que llegamos levantaron la prohibición y tuvimos la oportunidad de tomar un bote para navegar en el río. Desde este punto privilegiado observamos la tradicional ceremonia de fuego en honor a la Madre Ganga, el “Ganga Arati”, que se realiza todas las tardes. En la madrugada del día siguiente, una vez más la Madre nos permitía visitarla, meditar sobre sus
aguas y ver el amanecer desde su cauce. Para finalizar el viaje llegamos al poblado de Rishikesh en el estado de Uttarakhand, donde el paisaje cambia, es montañoso y fresco, ya que estamos más cerca de los Himalayas. Nos hospedamos en el Swami Rama Sadhaka Grama Ashram, regresando un poco a la fuente, a las raíces. Este sitio era muy especial para nosotros porque es una de las ramas de donde viene la tradición de nuestra escuela Yoga Rahasya.
Fue ahí donde Swami Veda Bharati impartió tanta sabiduría, y transmitió muchas de las enseñanzas de varios maestros, pero por, sobre todo, de su maestro Swami Rama de los Himalayas.
Aquí pudimos compartir la práctica ritual, el sadhana. Todas las mañanas a las 5:30 empezaba la práctica de pranayama y ásana que concluía con una profunda meditación. El silencio y la meditación son pilares fundamentales en el yoga del Himalaya, por lo que la paz y tranquilidad eran palpables en todo momento en este lugar. Las horas de las comidas eran avisadas por medio de una campana que hacía que los sadhakas se acercaran al comedor a compartir los alimentos de manera discreta y sin hacer ruido. Los días que estuvimos en el ashram aprendimos mucho sobre filosofía, pranayama, meditación, compartimos con
los distintos maestros del lugar y tuvimos diversas prácticas físicas y teóricas. ¡Disfruté tanto estas clases! Me dejaron claro que más allá de ser profesora de yoga seré siempre una estudiante.
Durante el viaje tuve la oportunidad de conocer más a la sangha, de conectar, reír, coincidir, meditar, estar en tranquilidad. Pero además tuve la dicha de compartir con mi pareja, quien viajó conmigo. Este peregrinaje abrió puertas para preguntarnos quiénes realmente somos, en qué creemos, conversar acerca de esto. Lo místico está tan presente en esta peregrinación espiritual… y muchas veces la mente quiere razonar, explicar, encasillar. Yo no tengo una respuesta concreta, pero sólo sé que yo no “creo”; yo siento profundamente en mi ser ese llamado, esa chispa divina que me abraza y me sostiene y que me permitió vivir esta experiencia desde el lema que siempre decimos en Yoga Rahasya: “Pensando menos y sintiendo más”.
Padre Bede Griffiths Su vida, su enseñanza
Por: Tatiana ReyesVivió consecuentemente su convicción de que la libertad espiritual se consigue sólo a través del desapego, abogando por las comunidades pequeñas de cooperación mutua para el crecimiento de todos, en armonía con la naturaleza, y con la mayor prescindencia posible de necesidades materiales. "Vivir despojado", no como un sacrificio, sino gratamente, como un camino para encontrar el gozo espiritual.
Este respetado fraile benedictino y guía espiritual, nació en 1906 en Inglaterra en el seno de una familia de clase media. Educado en Oxford, dejó su país natal en 1955, atraído por la filosofía y religión de la India, adonde fue en busca de "la otra mitad de su alma". Se instaló en el ashram de Saccidanada, llamado Shantivanan (Morada de la paz), conduciéndolo desde 1968 hasta su muerte con un estilo sencillo que incorporaba elementos tanto orientales como occidentales.
Llegó a ser reconocido como un gurú por los aldeanos de la ciudad, viviendo voluntariamente en la pobreza y consumiendo sólo lo indispensable. Para él, la vida debía estar libre de necesidades artificiales viviéndose al día y en equilibrio con la naturaleza. Así, en el ashram se cultivaba únicamente lo necesario para la subsistencia.
Aunque cristiano devoto, portaba el "Kavi", hábito azafrán del renunciante hindú - y andaba descalzo. Todo lo que hace referencia a él representa la simplicidad, valor central de su vida, que fue adoptando paulatinamente al ir asimilándose a la austera India. Contrario a las grandes ciudades por su deshumanización
y alejamiento de la vida natural, rehusó asimismo la seguridad de la vida monacal.
El Padre Bede consagró gran parte de su vida al estudio y la comprensión de la relación entre la religión cristiana y la tradición religiosa hindú y budista, sin dejar de lado la integración entre ciencia y misticismo. Esto ha hecho que se le compare con Lama Govinda. Para ambos, debía producirse un cambio cultural profundo, una síntesis entre Oriente y Occidente, donde la ciencia occidental y el pensamiento y tradición oriental encontraran un desarrollo compartido.
Las religiones están unificadas en su origen, difiriendo sólo en lo exotérico. Al profundizar en su contenido esotérico nos acercamos a su fuente. Cada tradición encierra una verdad eterna que se manifiesta de forma distinta, siendo la tarea actual de la humanidad el ir en busca de esa verdad esencial e interna de cada tradición, de donde emergerán las posibles soluciones.
El Padre Bede creía en un renacimiento de las verdades profundas a través del enriquecimiento del cristianismo con la experiencia oriental. La comprensión e interrelación entre ellas produciría paulatinamente la emergencia y florecimiento de las simientes verdaderas. Pensaba
asimismo que la incorporación de una visión no dualista (advaita) era esencial para la sobrevivencia espiritual humana. Junto al privilegio del aspecto contemplativo de la experiencia religiosa, está el "abandono de sí mismo", primeramente de los sentidos y luego de la mente y sus limitaciones.
La forma de llevar esto a la práctica es a través de la meditación, la que permite experimentar algo de la realidad trascendente y del acercamiento a Dios. Su realización perseverante y prolongada incidirá en la actitud hacia las otras personas y hacia el mundo circundante, propagándose sus efectos a todas las cosas.
El camino hacia la espiritualidad es difícil de llevar a cabo si no se tiene un entrenamiento adecuado. Por esto, las personas comunes necesitan "apoyos", como la oración, los rituales, los cantos devocionales. Todo tiene su lugar, como asimismo el amor hacia las personas, hacia la naturaleza y la belleza, lo que facilita un acercamiento mayor a este gran misterio trascendente. Es la percepción del universo como un organismo vivo y sagrado, del que
todos y todas las cosas formamos parte. Esto es válido para cualquier religión, y estas verdades comunes, y por tanto posibles de
hinduísta de un Dios inmanente.
Como ésta, hay gran cantidad de verdades esenciales que pueden ser complementarias y que merecen ser trabajadas en este tiempo, buscando la unificación. La expresión "venimos de la unidad y vamos a la unidad" manifiesta que existe afinidad en la esencia tanto del hinduísmo como del budismo y del cristianismo, y que sus diferencias y contradicciones sólo están en la superficie. La distorsión de una verdad y, por lo tanto, el inicio de las diferentes corrientes, comienza en el momento mismo en el que aquella entra en nuestro mundo de tiempo y de materia, debido a los distintos grados de comprensión y a la necesidad de emplear el lenguaje, de por si insuficiente e imperfecto, para referirse a lo ilimitado, a lo divino.
compartir, eran las realzadas por el Padre Bede.
La idea de un Dios trascendente pertenece más bien al punto de vista bíblico, pero es perfectamente compatible con el enfoque
Otra diferencia aparente entre Este y Oeste es la concerniente a la relación con Dios. Para el oriental la relación con Dios es en términos de consciencia, donde el pecado es la ignorancia, vista como inconsciencia de niveles superiores de mayor amplitud. En la tradición judeo-cristiana la relación se concibe
El amor cristiano sería paralelo al ahimsa (la no violencia) del hinduísmo y a la compasión del budismo, aunque cada cual con un carácter distintivo.
"
"
en términos morales, como pecado versus virtud. Pero ambos están interrelacionados.
Al situarse la ignorancia en la consciencia y el pecado en la voluntad, son dependientes entre sí.
Para el cristiano, Dios es omnipotente allá en el Cielo, y el hombre, su criatura acá en la Tierra, trata de merecer su Gracia mediante la práctica de la virtud. El oriental ve la unidad de Dios en todos los seres y acontecimientos, y busca a Dios dentro de sí como una parte de Dios que es el mismo. A nivel profundo ambas versiones son valederas y convergentes.
Para la tradición hindú, Dios es Satchit-ananda (Ser-ConocimientoBienaventuranza), pura consciencia. Para el cristianismo, Dios no sólo puede considerarse como un estado de consciencia, sino como una relación de amor. En la tradición hindú, la persona al final desaparece, pero en la tradición cristiana, la realidad última es personal o interpersonal. Mediante el amor nos salimos de nosotros mismos y nos entregamos a otro, y sin perdernos en el otro somos uno, pero a la vez diferentes.
En la consciencia existe una sola identidad, pero no ocurre así en el amor, ya que él implica al amante y al amado, cuya comunión los convierte en uno. Es una paradoja.
Todos tenemos la misma capacidad de trascendernos y experimentar la unidad con Dios, diferenciándonos en los diversos grados de apertura hacia lo divino. Esta posibilidad coincide en las diferentes religiones, aunque con matices. Para el hindú es posible devenir Dios, pero para el cristiano esta realización no puede ser completa para un ser humano. Podemos unirnos a Él, experimentar Su amor, pero Él estará siempre más allá, debido a nuestras limitaciones. No podemos ser Él.
Se aprecia una marcada diferencia entre Oriente y Occidente en la concepción del tiempo. En las religiones orientales el tiempo es cíclico: personas y avatares vuelven una y otra vez y no hay un final. Hebreos y cristianos, en cambio, tienen un punto de
vista lineal donde el tiempo transcurre hacia un final en el que Jesús lleva todo a un nuevo comienzo en otro plano: culminación y trascendencia del tiempo y el espacio en la resurrección.
Al ser lineal esta perspectiva, esta trascendencia se produciría en un momento histórico, a diferencia del hindú, que transita en su proceso de devenir Dios a través de los ciclos de renacimiento. La base común de estas visiones está en la posibilidad de revelación divina, factible a todos de acuerdo a su capacidad y grado de apertura. Capacidad que puede crecer y llegar a ser total.
conformada por el amor", una fe real, nos abre a lo divino. Y de esta tenemos poca en el cristianismo, donde muchos sólo creen.
Desde remotos tiempos se ha simbolizado a Dios, la divinidad, la realidad última, con la luz, en oposición a la oscuridad de la ignorancia, el pecado y la muerte. Curiosamente, sin embargo, para el Padre Bede lo supremo se encuentra en la "divina oscuridad", tras un viaje que sobrepasa a la imaginación, a los pensamientos, a la mente, hasta llegar a Dios, oculto en las profundidades del inconsciente.
En el trayecto hay que descartar muchos demonios y distracciones, los que parecieran ser desde el punto de vista del Padre Bede fenómenos de la luz. Toda visión sería consecuencia de la luz, de un mundo témporo-espacial, de no-Dios, quien es lo no formado, lo invisible, lo incognoscible. Así, Dios sólo puede ser encontrado en la oscuridad del centro interno del ser.
El cristianismo necesita crecer, reconstruir su teología con nuevos aportes, pues el Platonismo y el Aristotelismo que la fundamentaron en el Medioevo ya se hacen insuficientes. Una fuente de esa nueva savia se puede encontrar en el misticismo oriental, en sus intuiciones profundas coincidentes, más allá de lo exotérico separatista.
Un paso inicial y fundamental para esta transformación es la fe, no en su sentido común de creencia, sino como anhelo de conocimiento profundo. Estrictamente hablando, la fe es una iluminación de la mente, pero se emplea indebidamente como sinónimo de creencia en lo no demostrable. La fe debe llevar a la experiencia, y ésta a la apertura de la mente ante la realidad trascendente, el verdadero conocimiento. Así, la fe debe actuar como motor para un comienzo en el experimentar y conocer. Sin esto, se transforma en teología vacua, puramente intelectual.
La mera creencia no nos salva ni nos transforma, es limitada, pasiva. Sólo una "fe
Otra fuente viva de aporte debería ser la ciencia contemporánea, cuya visión del mundo ha ido penetrando gradualmente todos los estratos y su asimilación tendrá que llevar a una nueva teología. La ciencia está redescubriendo lo sagrado y la realidad reverenciable del universo.
Se vuelve a la concepción de que el cosmos se refleja en nosotros. Ella desapareció durante el Renacimiento cuando se instauró la división entre el ser humano como observador separado de un universo material exterior a él.
Para el hindú todo es sagrado, pero como el cristiano occidental ha perdido esta visión que todo pueblo nativo inicialmente tuvo necesita recuperarla. En ese proceso son
El Padre Bede creía en un renacimiento de las verdades profundas a través del enriquecimiento del cristianismo con la experiencia oriental.
de gran ayuda las ideas de Einstein, Bohm, Sheldrake, Capra y otros que, al modo occidental, han redescubierto los viejos valores universales.
Es una oportunidad histórica única para renovarnos y ampliar nuestro horizonte de comprensión.
Actualmente hay una gran efervescencia por esta búsqueda, lo que ha producido en diferentes niveles acercamientos entre Este y Oeste. El transplante ideológico y cultural es bilateral. Así como occidente se vuelca hacia oriente en busca de respuestas existenciales, así también los orientales implantan en sus pueblos los valores de la tecnificación, industrialización y ciencia occidentales, en contrapunto con la vida tradicional conservada por las generaciones mayores.
Todo este movimiento de transferencia debería, a pesar de demoras y conflictos, llevar a una síntesis valiosa para ambos, en la que los valores profundos de ambas partes confluyan y se encuentren. Se puede apreciar en la práctica que las nuevas ideas científicas como la teoría cuántica, el orden implicado o los campos mórficos son aplicables tanto
a escala humana como a nivel fundamental, fusionándose así el macrocosmos y el microcosmos en un todo único e indivisible. Las implicancias son de tal magnitud que no se pueden limitar sólo al ámbito científico, sino que comprometen en igual medida a la filosofía, al misticismo, y a toda la consciencia humana.
A pesar de la diversidad de intereses del Padre Bede, su gran obra fue su vida, su
búsqueda de simplicidad, su constancia en llevar su comprensión a la experiencia, y su esfuerzo continuo por el logro de la unificación de lo mejor de las religiones oriental y occidental. En especial, la búsqueda de lo que nos une por sobre lo que nos separa, la persecución de las coincidencias por sobre los antagonismos aparentes.
Él veía a la hermandad humana subyacer bajo cualquier diferencia aparente, y en forma intuitiva buscaba los puentes de comunión. Esta cualidad se evidenciaba ya en su primera juventud, cuando formó una comunidad con sus amigos en Inglaterra, como alternativa a lo que estimaba como artificioso y superficial en el intelectualismo, la industrialización e incluso las grandes iglesias.
Este hombre sensible, que de joven se extasiaba ante la poesía, y que con los años se transformó en un erudito, fue paralelamente descartando de su vida todo lo no esencial, todo artificio y exceso. Supo rodearse de lo mejor de la tradición oriental y del pensamiento occidental, acudiendo a congresos de ciencia y misticismo con la vanguardia de la ciencia contemporánea, leyendo a los más connotados filósofos, teólogos y místicos. Por sobre todo, fue un gran ecumenista que supo aprender de la esencia de todas las corrientes y sintetizarlas en su vida y afán unificador.
Algunas de sus obras son: The Golden String, que describe su búsqueda espiritual;
The Marriage of East and West (Matrimonio entre Oriente y Occidente), que habla de la síntesis de pensamiento entre ambas tradiciones; Return to the Center, que contiene pensamientos sobre la unificación religiosa; Christ in India, con ensayos sobre religiones comparadas y filosofía; y su última obra, The Cosmic Revelation, sobre los Vedas.
Además de los escritos, el Padre Bede logró hacer de su ashram un centro de encuentro de personas de diferentes religiones, en un ambiente de paz, sencillez y calma que propiciara las prácticas contemplativas y el diálogo en comunión. Una biblioteca esencial, comida vegetariana, meditación,
cánticos budistas, hindúes y cristianos, velas e incienso, se reunían en una atmósfera espiritual universalista en la que no existía la segregación.
El 25 de enero de 1990, Bede Griffiths sufrió un primer derrame cerebral en su choza en Shantivanam. Un mes exactamente en febrero, fue curado en una lucha con la muerte y el amor divino. Más tarde describió esto como una intensa experiencia mística.
Para mayo de ese mismo año estaba en USA. Entre muchas otras charlas y conferencias, dio las conferencias John Main en New Harmony, Indiana, ahora publicadas como La nueva creación en Cristo. Poco después,
el p. Bede completó su obra final, aún no publicada, Universal Wisdom. Visitó Estados Unidos nuevamente en 1991 y 1992, dando conferencias itinerantes antes de viajar a Inglaterra, Alemania y Australia. Estando en Australia se reunió con Su Santidad, el Dalai Lama, y el intercambio fue enriquecedor para ambos. Después el p. Bede dijo: “¡Creo que le gusto!”.
Tomó el camino largo a casa, dando más conferencias en Alemania e Inglaterra. Su corazón latía con fuerza, pero siempre estaba energizado por todo lo que pasaba por él.
Regresó a su ashram en S. India en octubre. Un equipo de cine australiano lo estaba esperando. “A Human Search” se completó con éxito solo tres días antes de su último golpe el 20 de diciembre, tres días después de su 86 cumpleaños. El 24 de enero, a sus 86 años, Bede Griffiths sufrió una serie de derrames cerebrales que finalmente lo llevaron a su Mahasamadhi el 13 de mayo, en su choza en Shantivanam, rodeado de mucho cuidado y amor.
El Padre Bede Griffiths fue sepultado cerca del templo, junto a uno de sus primeros discípulos, el P. Amaldas. Su partida dejó una gran tarea por continuar, como es el fortalecimiento de ese puente tendido entre el cristianismo y las tradiciones orientales, el que significará una base fundamental para la sobrevivencia espiritual.
Astrología védica de la India Proyecciones 2023
Por: Prabu MriganathUniverso Sagrado te saludo. Energía de la vida, fluye en mi ser.
Maestros Divinos y seres de luz, sus bendiciones nos llenan de amor.
Con el corazón y el espíritu. Bienvenido 2023
Cada paso en la vida tiene su significado.
Hacia donde encaminamos nuestro corazón, nuestra consciencia y nuestra mente están allí.
Cada año es un nuevo camino para cumplir con nuestros objetivos.
Nuestros pensamientos y actitudes son importantes, estos son registrados en el universo cuántico.
Su fecha de nacimiento y su signo marca el paso en este caminar.
Los sabios en la antigüedad revelaron las claves de nuestro destino, bienestar, amor, salud y prosperidad.
Existen 12 caminos o 12 destinos en el mapa cósmico universal.
Con amor les invito a un recorrido en el espacio cósmico por los doce signos zodiacales, conociendo la interacción y la conexión de usted con sus metas y objetivos.
ARIES
Primer circuito en el cielo. Primer camino o destino. La residencia, la vida, la inteligencia.
Marte generará fortuna y Júpiter, bendiciones en el amor.
Este nuevo ciclo se relaciona con cambio de residencia, a otra ciudad, otro país o continente.
Habrá proyectos importantes hacia el exterior, con extranjeros, para negocios e inversiones.
Sus familiares que viven en otros países le darán ayuda, especialmente los abuelos o personas mayores.
Es el año para honrar a los antepasados y recibir bendición de ellos.
Su mente estará fuerte para tomar decisiones importantes. Habrá que cuidar la relación de pareja y matrimonio.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado, mantra:
OM SITA RAMGÉMINIS
Tercer circuito en el cielo. Tercer destino o camino. La salud y las relaciones familiares con hermanos.
Mercurio marca el pulso del movimiento, de los desplazamientos y de los viajes. En este año mercurio se conecta con el sol y las bendiciones de Júpiter, generando armonía en el cambio de residencia, realizaciones en el extranjero, trabajos con extranjeros o vida en el exterior.
Hermanos que viven en el exterior ayudarán para que se cumplan sus objetivos o sus desplazamientos hacia otros países. También será un momento favorable para estudios en el exterior, capacitaciones, seminarios.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra armoniza sus emociones y genera fuerza mental.
OM BUDDHAYA NAMAHATAURO
Segundo circuito en el cielo. Segundo camino o destino. La economía.
En este nuevo ciclo Venus, el planeta regente de este signo, está ubicado en el área de la profesión, del trabajo, de los proyectos y empresas propias, esto indica que es el momento para empezar su realización económica a través de sus talentos y capacidad de trabajo.
Habrá que controlar los estados de ansiedad y tensión, ya que Marte va a generar estados de intranquilidad. Tiempo de administrar correctamente sus ingresos y sus inversiones.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra, le permite cumplir con sus metas, tener poder y fuerza:
OM GOVINDAYA NAMAHACÁNCER
Cuarto circuito en el cielo. Destino o camino. Los vehículos, los parientes, la madre, la felicidad, la riqueza, las tierras y propiedades.
La luna marca un poderoso poder con las bendiciones de la madre. Este circuito en el cielo marcará éxito en inversiones, adquirirá propiedades, casa, tierras o vehículos. También podrá comprar propiedades en otras ciudades o en otros países, debido a que la luna tiene una conexión hacia el exterior. Se favorece también cambio de residencia.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado, mantra.
OM KRISHNAYA NAMAHALEO
Quinto circuito en el cielo. Destino o camino. Los hijos, la educación, el poder de la palabra.
El sol está ocupando la casa del poder de la palabra y está activado el Dharma la función natural debido. También el sol auspicia vida en el exterior. Su palabra será muy poderosa en este año, sus palabras atraerán fortuna o riqueza de acuerdo a la proyección y a la utilización que haga de ellas. Sus hijos serán beneficiados, esto indica que su linaje se fortalece, su descendencia, sus hijos y las personas a quién protege.
Se favorecen estudios en el exterior para sus hijos. Tendrán éxito y grandes realizaciones. Se consigue becas para estudios.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra fortalece el linaje familiar.
OM SRI RAMAYANA NAMAHALIBRA
Séptimo circuito en el cielo. Destino o camino. El amor, la relaciones, los proyectos en sociedades.
El planeta Ketu a entrado en conexión con Libra cuyo regente es Venus. Ketu genera la evolución y Venus genera la prosperidad los negocios la armonía y el amor. Este nuevo ciclo habrá proyectos muy importantes de formación de empresas, de negocios, de inversiones junto con su pareja en su matrimonio o en su vida afectiva. Será un tiempo para armonizar la relación valorando Las cualidades de la pareja. Es un nuevo comienzo en la relación de sentimientos con su pareja, dejando ir conflictos, resentimientos, malos entendidos del pasado.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra activa la relación armónica con su pareja.
OM SITA RAM
VIRGO
Sexto circuito en el cielo. Destino o camino
El trabajo. La sanación.
Mercurio da el poder para hacer cambios en su modo de vida, en su trabajo, en sus relaciones y especialmente en la salud. Es el momento de librarse de estrés o tensiones, esto se conseguirán cambiando de ambiente, hacia otras ciudades u otros países.
Recibirá el apoyo de tios maternos que viven en el exterior, en asuntos legales habrá que tomar precauciones en cualquier firma de documentos. Tendrá contacto con sanadores y gente mística.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado.
Este mantra le conecta con la energía de la tierra, trae armonía éxito en proyectos y salud.
OM BHUMI DEVAYA NAMAHAESCORPIÓN
Octavo circuito en el cielo. Destino o camino. La armonía en la vida. La comprensión del karma.
Marte y Ketu genera una influencia poderosa en este signo. Se activan canales de sanación, se activa su energía sanadora de vidas o de reencarnaciones pasadas, se activa la energía creativa y se equilibra los asuntos económicos.
Se realizarán poderosas inversiones con buenos. resultados positivos en formación de empresas.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra permite cumplir sus objetivos y elimina los obstáculos.
OM GAM GANAPATAYE NAMAHASAGITARIO
Noveno circuito en el cielo. Destino o camino. La espiritualidad, el dharma, la fortuna.
Tres planetas generan un cambio valioso en su vida, el sol Mercurio y Júpiter. Ha llegado el momento de la transformación en su vida, para armonizar la economía a través de buenos negocios, para hacer negocios con personas del extranjero, para cumplir sus metas espirituales, para recibir bendiciones para sus hijos y su matrimonio. Cumplirá su Dharma o misión de vida. Recibirá bendiciones de Maestros Espirituales.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra activa todas estas bendiciones.
OM VAMANA DEVAYA NAMAHA
ACUARIO
Onceavo circuito en el cielo. Destino o camino. Las amistades, el equilibrio, el bienestar.
Saturno y Rahu marca un ritmo especial de nuevas experiencias en el campo laboral, nuevas relaciones de amistades, poder de pensamiento, poder de la palabra, poder y fuerza para desarrollarse económicamente y afectivamente en otras ciudades o países. Hermanos mayores tíos o primos paternos le generarán ayuda para viajar o vivir en el exterior.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra trae poder y fuerza, elimina las malas actitudes o pensamientos nocivos.
OM VARAJA DEVAYA NAMAHA.
HARI OM TAT SAT
Contacto:+593-99-232-2364 /
prabhuportal@gmail.com
CAPRICORNIO
Décimo circuito en el cielo. Destino o camino. Realización profesional. Trabajo. Fuerza de vida.
Éste signo tiene una bendición especial de Venus y Saturno, estos planetas se han juntado para activar un karma de regalos por las actividades piadosas que se realizaron en vidas pasadas. Se favorece la formación de empresas en las cuales puede participar la pareja o también personas mayores que puede ser el padre o un abuelo. Se abren también negocios hacia el exterior con ganancias y buenos resultados. Los compromisos económicos o deudas llegan a su término. Empieza una nueva etapa de florecimiento para lo cual hay que bendecir día día la abundancia y la protección divina.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra permite alcanzar sus metas y eliminar el mal Karma.
OM KURMA DEVAYA NAMAHA.
PISCIS
Doceavo circuito en el cielo. Destino o camino. La comprensión del destino. La liberación espiritual, Moksha
Júpiter se ha ubicado en la casa de la liberación, en la casa donde se comprende el nacimiento y la muerte. Toda la vida tiene su comienzo y su fin. Todo el universo se mueve bajo este principio de causa y efecto.
Este signo tendrá realizaciones, dentro y lejos de su sitio de nacimiento. Ha llegado el momento de hacer los cambios, las oportunidades se abren poderosamente hacia otras ciudades o países. Tendrá la ayuda de su familia o de su pareja. Se desarrolla un gran potencial espiritual, conocerá a poderosos sanadores que le darán orientación y sanación a su vida.
Cante diariamente 108 veces este sonido sagrado. Este mantra activa el potencial de sanación y le conecta con Maestros Espirituales.
OM GURU DEVAYA NAMAHA
Nota: Las fotografías de este reportaje muestran el comienzo y desarrollo de la Asociación Escuela de Autorrealización y Meditación fundada por el Padre César Dávila. Reflejan la historia del crecimiento de esta organización espiritual y relatan el camino personal de los discípulos junto a su maestro. Nuestra gratitud hacia María Eulalia Tamariz por su ayuda con estas fotografías.
Carlos Peña, Un yogui y hombre de familia
Por: Andrea Peña
Carlos Peña, mi papá, nació en Guayaquil en el seno de una familia católica, apostólica y cuencana. Su niñez se desarrolló entre los sacerdotes jesuitas del colegio San José y las vacaciones que pasaba con sus abuelos en Cuenca. A pesar de las enseñanzas de los curitas jesuitas, que continuaron en su adolescencia en el colegio Javier, Carlos le restaba importancia al concepto de Dios, y se revelaba ante la figura dominante de una iglesia dogmática que no le permitía cuestionar nada. Él necesitaba cuestionar.
Foto: Carlos Peña junto a su maestro espiritual, el Padre César Dávila.
Carlos lo cuestionaba todo. Enloquecía a los curitas con sus desafiantes preguntas y su falta de interés en las lecciones escolares. Sus intereses estaban en otro lado y a eso dirigía su tiempo y atención.
Desde joven sentía mucha curiosidad por temas esotéricos e investigaba constantemente sobre la vida en otros planetas. Los extraterrestres se volvieron su tema de mayor interés en la juventud y buscaba ávidamente personas con quien conversar de este y otros temas metafísicos. Tenía la mente abierta y estaba dispuesto a entretener todas las teorías de otros curiosos como él. Sin embargo, se sentía limitado en sus investigaciones por la poca información que encontraba disponible. Además, le era difícil conseguir con quién conversar y desarrollar estos temas en su círculo y la mayoría de sus amigos no tomaban sus inquietudes en serio. Él necesitaba más y estaba invariablemente dispuesto a seguir en la búsqueda.
“Cuando el alumno está listo, el maestro llega” dice un proverbio oriental, y aunque mi papá no era consciente de aquello, el momento de conocer a su maestro había llegado.
Carlos tenía 30 años y la convergencia se dio de la forma más casual. Mi abuela fue invitada a una charla que dictaba un sacerdote en casa de una de sus amigas cuencanas que también vivía en Guayaquil. Imposible para una fiel feligresa como ella decir que no a un sacerdote; ella asistiría.
Mi abuela no manejaba, así que le pidió a mi mamá que la lleve y, como la amiga vivía lejos, mi mamá se quedó a la charla para poder traer a mi abuela de regreso a la casa.
Ya en la reunión, mi mamá supo que quien organizaba la charla era un chico cuencano
llamado Pablo Jaramillo. Al final de la plática, Pablo se presentó con mi mamá para contarle que él recordaba con cariño a mi papá, de cuando pasaba sus vacaciones en Cuenca de niño. Mi mamá pensó que sería genial que mi papá se reencontrara con su viejo amigo y lo invitó a cenar esa misma noche. –“Por favor, que el Padrecito también acepte esta invitación. A Carlos le encantará conocer a un hombre tan interesante”, -requirió ella. Pues resultaba que este sacerdote era un gran conocedor de las filosofías orientales y temas ocultistas que tanto le llamaban la atención. Y así, esa noche mi papá conoció al hombre que cambiaría su vida, su maestro, el Padre César Dávila.
La conversación de la noche fue extremadamente cautivadora, como siempre lo era cuando el Padrecito estaba de por medio. Sin ninguna consideración por el pobre curita, entre varios cigarrillos y whiskies con hielo, mi papá preguntó lo que quería al respecto del conocimiento esotérico, el viaje astral y la vida en otros planetas.
El Padre contestó todas sus preguntas con paciencia mientras pedía que abrieran un poco la ventana para dejar salir el denso humo de la habitación donde estaban reunidos. Como era su tema favorito, mi papá también trató de impresionar al Padre con su conocimiento. ¡Cuánto ego el de la juventud! El Padre lo escuchó con esa humildad tan característica suya pero al final de la noche le dijo –“Carlitos, usted en
verdad no sabe ni entiende nada.” - ¡Zas! Golpe al ego- “Lea la Autobiografía de un Yogui y allí va a entender. Y también le digo, cuando empiece a entender dejará de fumar.” –
“Si yo no quiero dejar de fumar”-pensó furioso mi papá. Pero no se atrevió a refutar, quizás por no recibir más palo.
En esos días la empresa de mi papá estaba en proceso de liquidación y él no tenía cabeza para nada más. El estrés de la situación lo consumía y evidentemente no
había dinero para comprar nada…. Menos aún un libro del que nadie había escuchado antes. Sin embargo, al llegar su cumpleaños mi mamá decidió que era mejor no comer unos días -a ver si de paso adelgazaban algopara regalarle aquel libro recomendado por un sacerdote en cuya conversación no habían dejado de pensar.
El libro se sentó en su velador unos meses -durante los cuales mi papá fumaba día tras día y noche tras noche- mientras el abogado entraba y salía de la oficina en que se había convertido su casa por el tiempo en que se terminaba de liquidar la empresa. La preocupación era tanta que la vida le pasaba de largo. Sin embargo, una vez cerrado el proceso de liquidación, desempleado, con tiempo en sus manos, y quizás empujado por esa mella en su ego, agarró el libro y ya no pudo parar de leer.
Lo encontró fascinante, leía los mismos párrafos una y otra vez intentando descifrar la profundidad de la lectura. Anotaba en el margen del libro lo que entendía y subrayaba las frases que le impactaban. Un día, mientras lo leía, sintió por unos segundos como si su cuerpo se elevara en un ascensor de alta velocidad provocándole una dicha enorme e intuyó que si se dedicaba firmemente a la práctica del yoga volvería a experimentar esa hermosa sensación. Todo esfuerzo valía la pena para lograrlo. Lo primero que debía practicar eran los pranayamas, y un fumador jamás lograría conquistar las técnicas de respiración. Entonces, Carlos dejó de fumar y se cumplió así el augurio del Padre. Pocos meses más tarde, Pablo Jaramillo volvió a llamar a Carlos para invitarlo a Baños a un fin de semana con el Padre Dávila. Ni lo pensó, en dos segundos metió 4 cosas en un bolso y salió volando.
En aquel entonces los grupos que se reunían eran muy pequeños y esa vez eran 6 o 7. Ese fin de semana fue mágico. Siendo tan pocos, Carlos pudo preguntar todo lo que quiso sobre lo que había leído en la Autobiografía de un Yogui, sobre los dogmas e incongruencias de la Iglesia que tanto rechazo le causaban, sobre la muerte. Con cada explicación del Padre Dávila percibía que caía de su mente un velo y
entendía que todos los aspectos metafísicos que siempre lo habían atraído, tenían que ver con un desarrollo espiritual del cual él no conocía nada pero que ahora anhelaba experimentar.
Desde ahí no hubo más que decir, se había convertido instantáneamente en un discípulo del Padrecito y en adelante donde fuera el Padre, iría él.
Así iban entonces, Carlos y Martha, mi mamá, de Baños a Cuenca, de Cuenca a Playas, de Playas a Quito y otra vez a Baños. Si el Padre los llevaba a bañarse en las aguas termales de El Salado, ahí estaba él a las 6h00 aunque se estremeciera del olor a azufre de esas piscinas amarillas que un “aniñado” como él jamás había visto.
Si había que meterse en la cascada de San Marcelo en el más pleno frío de Baños en junio, se lanzaba de cabeza aunque se le congelara la respiración. Si le tocaba organizar grupos, hacer de chofer, tender camas o lavar platos, bienvenidas eran todas las tareas que nunca había tenido que hacer antes, si de ellas dependía estar en presencia del Padre.
El Padre Dávila le enseñó disciplina, humildad, tolerancia, compasión. Con el Padre, Carlos vivió experiencias transformadoras, de otro mundo. Pronto entendió que la voz del Padre canalizaba la palabra de Dios y a través de sus enseñanzas aprendió también a vivir a Dios entendiendo que hay mil diferentes formas de hacerlo y respetándolas todas.
Mi papá siempre dijo que lo mejor que le había pasado en esta encarnación era haber conocido al Padrecito, pero yo estoy segura que su encuentro no fue casualidad; mi papá vino siguiéndolo, persiguiendo la oportunidad de evolucionar.
Enamorado del Padre, mi papá quería compartir sus enseñanzas con todo el que estuviera dispuesto a escucharlas. La única forma era tener un lugar donde reunirse para poder enseñarlas. Eran pocos, pero todos estaban dispuestos a cooperar como pudieran para lograr el
objetivo. El primer lugar fue el gimnasio de la casa de Gloria Urgellés, la misma señora que organizó la reunión donde mi mamá conoció al Padrecito. Pronto el espacio quedó pequeño y alquilaron un departamentito en la calle Bálsamos y luego una casita en la calle Guayacanes. Las dificultades económicas eran muchas y no era fácil conseguir el arriendo todos los meses. Cuando pensaban que iban a tener que separarse porque no podían manejar la carga financiera, una de las estudiantes ofreció el anexo de su casa que ella hasta ese momento tenía alquilado. El inquilino justo la desocupaba en esos días; esa sería su contribución al grupo. Cada vez que una dificultad se resolvía, mi papá se convencía más de que este era el camino, pues la mano de Dios se veía en cada solución. Así, por muchos años el grupo de AEA
Guayaquil se reunió en la calle Circunvalación en casa de Panchita de Chiriboga organizados en diferentes responsabilidades, desde dictar cursos hasta armar mingas de limpieza, para poder seguir adelante con el proyecto. Durante esos años, mi papá fue de AEA director, profesor, secretario. Mi mamá, igualmente discípula del Padre Dávila, apoyaba a mi papá en todas las actividades y entregaba también su tiempo para mantener la organización viva. Ella hacía labores de tesorería y entre todas las señoras se inventaban actividades para recaudar fondos y solventar los gastos. En mis recuerdos quedan varias obras de teatro infantil -donde alguna vez representé hasta un perro-, ventas de dulces -que no me daban permiso de comer- y noches de cine -donde me tocaba vender el canguil y las golosinas. No sólo yo, los otros niños de AEA también participaban. Había trabajo para todos y todos queríamos formar parte. La Asociación Escuela de Autorrealización era un proyecto familiar.
Por muchos años AEA Guayaquil se instaló en sedes alquiladas. Iban de un lado a otro buscando un lugar que lograra acomodar a un creciente grupo de personas, pero que calzara en un ajustado presupuesto. Era el sueño de todos tener una sede propia, que los representara y de donde no tuvieran que salir nunca más.
Finalmente ese sueño se cumplió a inicios de los 90 cuando se construyó el
ashram de la vía a Samborondón. Conseguir esa sede fue un peregrinar que se resolvió con el esfuerzo de muchos y la intervención divina. Pero esa es una historia que a otros les toca contar.
Ya en el nuevo centro mi papá se dedicó principalmente a sus labores de profesor. Le gustaba más que nada dar los niveles avanzados de ese curso que tantos años antes desarrollara el Padre Dávila como guía para AEA y que hasta hoy dirige los pasos de sus estudiantes.
Decía que conversar con los estudiantes de esos niveles le permitía escuchar para aprender. Él estaba dispuesto a sostener cualquier tema de conversación con quien quisiera tenerla y a explorar los cuestionamientos o planteamientos más inverosímiles. Sus alumnos lo querían por esta apertura y por su espíritu ligero incapaz de juzgar a nadie por sus creencias. Era un gran profesor porque veía las necesidades de sus alumnos más allá de lo intelectual y tenía la habilidad de ser firme y cariñoso a la vez. Una vez cuando tomé sus clases, él se valió de su rol de profesor para darme varios golpes al ego – que yo francamente necesitaba. La dulzura y humor con que lo hizo me enseñó la lección
sin resentimientos. Yo le quedo agradecida porque lección aprendida con amor es lección bien aprendida.
Además de los niveles que dictaba, él desarrolló su propio curso de la Autobiografía de un Yogui; ese libro que inició su despertar y que habrá leído probablemente unas 13 veces. Su primera copia de ese libro, aquella que descansara por meses en su velador antes de convertirse en su faro, tenía tantas notas en los márgenes que ya sólo hacían sentido para él.
Ahora descansa nuevamente en su velador y es el libro de cabecera de mi mamá. Espero yo que algún día sea el mío. Yo heredé de él una copia, estimo que la tercera o cuarta que comprara, y aunque sus notas al margen no siempre las entienda, me encanta saber lo que él pensaba en ese momento aunque sus conclusiones seguro cambiaran después. “Puedes leer este libro varias veces, pues en cada lectura encontrarás lecciones distintas. Este libro es un aprendizaje constante”, -me dijo en repetidas ocasiones.
Después de la muerte del Padre Dávila en 1999, mi papá se dedicó más que antes a la meditación y a la investigación de
temas filosóficos que se volvían más y más profundos con el pasar de los años. Durante sus últimos 10 años de vida, los temas a explorar estaban más allá de mi capacidad de comprensión y solo me dedicaba a escucharlo con la esperanza de que algún rayo de luz me golpeara -pero así como con un bate- y me quedará grabada, aunque sea en el inconsciente, la lección que estaba intentando enseñarme.
Alrededor del 2014, nuestra amiga Mónica Reynoso inició un espacio de conversación y exploración de todo tipo de temas esotéricos donde mi papá se sentía muy a gusto.
Aquí coincidió con un grupo de curiosos investigadores como él, cada cual con diferentes intereses, pero todos abiertos a contemplar las ideas y pensamientos de los demás. Ahí consiguió gente con quien hablar de aquellos temas que lo sacudían y conocía nuevas teorías a investigar. No obstante, su sendero siempre fue espiritual y en todo lo que investigaba, él encontraba sólo mayor profundidad de ese mismo rumbo. Dios, la Madre Divina, era siempre la meta final y todo lo demás, únicamente el camino.
Fue siempre fiel a su maestro y trabajó activamente en AEA hasta los últimos días de su vida.
Mi papá se fue cuando se quiso ir, aprovechando la oportunidad de una gripe mundana. Antes de la decisión final, hasta tuvo la lucidez de preguntarle a mi mamá, -“¿Tú crees que puedes sobrevivir sola?” –“Sí, siempre y cuando tú me ayudes.” -le dijo ella aunque hubiera preferido que se quede. Él cerró los ojos y asintió. Después de eso, permaneció lo suficiente para que le pudiéramos decir cuánto lo queríamos, por nosotros más que por él mismo, y luego partió. Seguro el Padrecito lo esperaba a su llegada.
Mi papá encarnó con el Padrecito para su evolución, pero yo encarné con él para la mía. Las almas afines para la evolución de un espíritu encarnan juntas, esa es la verdad.
Crema de tomates estilo indio
Ingredientes
• 2 kg de tomates rojos, no muy maduros
• 6 cucharadas de ghee
• 1 cucharadita de cilantro molido
• 1/4 cucharadita de asafétida
• 4 cda de hojas frescas de cilantro picadas
• 1 1/2 cucharadas de azúcar moreno
• 1 1/2 cucharaditas de sal
• 1/4 cucharadita de pimienta negra molida
• 1/4 cucharadita de pimienta de cayena
• 2 cucharadas de mantequilla
• 2 cucharadas de harina blanca
• 450 ml de leche
• 1 cucharada de jugo de limón
Preparación
Lave los tomates y córtelos en 8 trozos. Caliente el ghee en una olla de fondo grueso y sofría el cilantro molido y la asafétida durante unos segundos. Añada los tomates. Regule el fuego, entre moderado y lento, y deje cocer los tomates unos 25 minutos hasta que estén blandos y la piel se les desprenda. Licúe los tomates, o páselos por un tamiz, y vuelva a ponerlos en la olla. Añada el cilantro molido, el azúcar, la sal, la pimienta y la pimienta de cayena.
Caliente la mantequilla en otra cacerola y sofría a fuego lento la harina, removiéndola hasta que quede ligeramente dorada. Añada seguidamente, con cuidado, la sopa y déjela cocer (removiendo constantemente para prevenir que se formen grumos) hasta que se espese. Añada el zumo de limón y sirva la sopa caliente.