Recomendación de los editores
Alma, cuerpo y máquina
Guillermo Núñez
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i uno confiara solamente en el peso que ciertas narrativas periodísticas le dan al estudio científico (se salmodia cada tanto, y no solo en artículos caza clics, que «estudios demuestran» o que «estudios comprueban», como si con ello se cincelaran La mente moderna —con verdades en piedra) olvidaríamos que los valores progresistas climático y no de emergencia o crisis; en la historia del pensamiento, como nos que le acompañan, y que Sillicon Valley se crean think tanks para recuerda la filosofía de la ciencia a parresolver cómo se seguirán vendiendo protir de los falsacionistas, está compuesta hoy a menudo se dan por ductos de entretenimiento una vez que por avances y retrocesos que a menudo sentado— antes tuvo que colapsen los ecosistemas, por poner un van de la mano de las pasiones humanas par de ejemplos). pero también de la capacidad limitada separarse de la idea del Este ir a tientas en la historia de la que se tiene en un momento histórico verdad, al mismo tiempo que se padece para explicar el mundo. Popper, Kuhn, alma y el espíritu, pero hambre o tristeza, resume en gran parte Lakatos, Feyerabend y otros insistieron también de subproductos el paso del humano por este planeta. A en una especie de intercambiabilidad de modelos científicos que recuerda un como los humores animales un esqueleto conceptual tan árido como juego de sillas, aunque responden, más o nociones insuficientes co- este le hacen bien relatos históricos como Alma máquina. La invención de la menbien, a su funcionalidad (en cierto punto, te moderna (2015, traducido por Eduardo todas las explicaciones dejan de ser su- mo los «buenos salvajes». Rabasa para Sexto Piso, 2021) de George ficientes). Es la naturaleza del esfuerzo Makari. De otro modo, los avances conquistados, las zonas científico estar limitado por lo humano, cosa que, me temo, de la historia iluminadas, parecerían regaladas sin más. Para en la vida cotidiana se traduce a enfrentarse a negacionistas un estudiante de filosofía desatento, como lo fui yo, las ideas del cambio climático, a defensores terraplanistas, y al impacto de pensadores como Descartes, Hobbes, Locke, Kant o Hegel, gradual o inmediato que los descubrimientos científicos tieparecerían haber existido en vacíos históricos, no solo separanen en la historia (en redacciones de periódicos se escriben dos de otras disciplinas sino de fuerzas históricas. editoriales para preguntarse si es suficiente hablar de cambio No he leído aún Revolución en mente (2008, publicado en español por Sexto Piso, en 2012), también de Makari, que cronológicamente podría leerse como una continuación de las ideas delineadas en Alma máquina —que, viceversa, para quienes hayan leído ya Revolución en mente, funcionará (me imagino)