DOSI E R
MARTA SYRKO: EL OJO QUE ESCULPE LA CONCIENCIA p or Móni ca Sánchez Escuer
La mirada de la fotógrafa ucraniana Marta Syrko es experimentada y luminosa, fresca y profunda. Sus imágenes presentan fragmentos de historias en las que se hacen evidentes los claroscuros de la vida y nos recuerdan que en la libertad se encuentra la clave de nuestro destino.
admiración. Para muchos no es fácil mostrarse, pero poco a poco se abren, se sueltan y, como el escultor que saca vida de la piedra, Syrko cincela con luz sus pieles desnudas, ilumina y resalta las líneas poderosas de sus cuerpos y les revela en cada imagen una fuerza y belleza que el espejo es incapaz de mostrar. En el proceso, la fotógrafa parece decirles, primero a ellos y luego al mundo entero: “todos los cuerpos son una obra de arte”.
“No duermes sólo con este hombre, sino con toda su vida, y a veces ella te despierta y le arranca de tus brazos. Pues, ya ves, a menudo la guerra viene y se tiende entre vosotros como un niño temeroso de quedarse solo en la oscuridad”. Kateryna Kalytko
Sculptures continúa la línea de sus proyectos de carácter social Sun inside, sobre niños con síndrome de Down, o Diversity you, en la que Marta expone la necesidad de abrazar lo diverso, de mirar las características derivadas de una enfermedad o accidente como rasgos de la originalidad del ser humano.
L
a joven ucraniana Marta Syrko ha decidido retratar la guerra desde la trinchera que domina: la fotografía artística y el retrato íntimo. Su mirada es aguda y luminosa, sutil y profunda. Ella dice que no es fuerte, como otros fotógrafos que se han volcado al frente de batalla, pero se requiere de un alma valiente, sensible y comprometida para transmitir el dolor y la impotencia de los soldados, mostrar al mundo las cicatrices que la guerra ha grabado en sus cuerpos.
Sus imágenes son fragmentos de historias que dejan ver los claroscuros del destino: la confusión entre las certezas, la fortaleza de la fragilidad, el impulso vital que nace de la tragedia. Su narrativa no se enfoca en el sino fatalista ni en los maniqueísmos convencionales, la suya no es una visión edulcorada o simplista de la realidad. Con una clara influencia del arte conceptual, la pintura renacentista y el cine, Marta crea escenarios ficticios sutiles en un ambiente con tintes etéreos que parece salir de los sueños o pensamientos de la persona que retrata. Utiliza la luz como materia, herramienta y motivo; mediante
En su serie Sculptures, aún en proceso, Syrko retrata a esos héroes silenciosos, emulando la estética de las esculturas clásicas que, a pesar de haber perdido algún brazo o pierna, siguen siendo invaluables y hermosas. En su estudio, Marta les habla con honestidad sobre el propósito y la importancia del proyecto, escucha sus historias desde la empatía, el respeto y la
CA P I TE L | DE STI NO
130