Leer y crear en una biblioteca Blue Lupin
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Una aventura en las alturas Para la Biblioteca Blue Lupin de Las Mercedes, Las Flores, Lempira
Por Melissa Merlo Escritora
Miembro Número de la Academia Hondureña de La Lengua Catedrática de Literatura de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán
La montaña cantaba con los trinos de los pájaros esa mañana. Los pinos hilvanaban el
viento con sus hojas de aguja que dejaban escuchar algo que parecía un poema, quizá de Octavio Paz, porque hablaba como de árboles y soles. El rumor del poema que cantaban los pinos me atrajo como una brújula es atraída por el magnetismo que
emana de la tierra. Me hacía subir por el sendero tal y como el �lautista de los
hermanos Grimm había encantado a los roedores del pueblo de Hamelin, conduciéndolos a un destino desconocido.
El aire era muy fresco, mientras más subía la montaña, más frío se volvía el clima. Yo
estaba muy emocionada porque, como buscadora de oro, había aprendido con mi tío abuelo, experto en el tema, que entre más frío, más cerca está el tesoro. Así que,
emocionada, seguí subiendo por el sendero y escuchando a los árboles y a las aves recitar poemas y cuentos con voces de niños y niñas que seguramente, habían jugado en esos bosques. Eso no era para nada extraño. Los bosques y las montañas guardan