Jugando desde el fondo - Artículos cortos de periodismo deportivo
La nueva Casa de la Selección Miércoles 26 de febrero de 2020 Bendito Fútbol
El 2 de junio de 1996, la Selección Ecuatoriana de Fútbol derrotaba por primera vez a la dos veces campeona del mundo, Argentina, en una Clasificatoria rumbo al Mundial de Fútbol. Sucedió bajo el nuevo formato de competición que contempló el “Todos contra Todos” que aún se conserva hasta la actualidad. El presidente de la Federación (FEF), Galo Roggiero, había entendido que las ventajas de jugar en Quito eran mucho más importantes que los intereses de presentar a la Selección en Guayaquil, particularmente en el Estadio Monumental de Barcelona, donde dos meses antes, el 24 de abril, habíamos derrotado por 4 a 1 a Perú. A partir de ese momento el Estadio Olímpico Atahualpa se convirtió en un fortín para la Selección, y Quito, la sede indiscutible para los partidos de Clasificatorias al Mundial. Años más tarde, ya bajo la administración de Luis Chiriboga, las excelentes relaciones que se mantenían con Rodrigo Paz permitieron que el Director Técnico sugerido por el dirigente de Liga de Quito, Hernán Darío Gómez, asuma el comando de la Selección, así como que el estadio Casa Blanca pudiera albergar al menos dos partidos del proceso rumbo a Corea del Sur – Japón 2002: contra las modestas Venezuela y Bolivia, pues los estrategas expertos en la materia, sugerían que jugar contra selecciones rápidas como Colombia, Argentina o Brasil, sería una desventaja en un césped tan veloz como el que caracteriza al Estadio de Liga. Quienes han vivido en las entrañas del “monstruo” que es el balompié ecuatoriano, han rumoreado que el distanciamiento entre Chiriboga y Paz tuvo, entre otros ingredientes, el hecho de que la Selección Nacional no volvió a jugar ningún partido 22