EMPRESAS DEL AÑO
Por Luis Diego Quirós Acosta
Desarrolladores Inmobiliarios
Las nuevas tendencias en bienes raíces
LOS NEGOCIOS INMOBILIARIOS HAN EVOLUCIONADO DEBIDO A LOS CAMBIOS LABORALES Y A LOS NUEVOS HÁBITOS DE CONSUMO.
Guatemala
Tegucigalpa
Managua
E
l sector inmobiliario ha sufrido los efectos de una de las crisis globales de mayor impacto en las últimas décadas, donde el futuro se ha transformado en un desafío incierto, en el que todos los sectores manejan escenarios de incertidumbre, como bien lo aclara un reciente estudio de Deloitte. De acuerdo con el estudio de esta firma global, el sector inmobiliario está enfocando sus acciones en disminuir sus gastos operativos, cuidar los ingresos, velar por el mantenimiento del valor de sus activos y evaluar escenarios futuros para la industria después del COVID-19. Los sectores de retail y entretenimiento han sido profundamente impactados y muchos tuvieron que reinventarse para sobrevivir. Dentro de las tendencias emergentes para el mercado inmobiliario, el modelo híbrido de trabajo es uno de los que viene con más fuerza, al igual que contratos con más flexibilidad, donde se les permite a los em60 | VIDA Y ÉXITO
pleados trabajar en la oficina, desde su casa o dividir el tiempo entre ambas opciones. Algunos dueños de oficentros, zonas francas, proyectos de uso mixto y residenciales han adaptado sus contratos a estas nuevas modalidades enfocadas en el bienestar de los inquilinos, ofreciendo una mejor calidad y flexibilidad tanto en los contratos como en los espacios de trabajo y sus amenidades; para que de esta manera puedan satisfacer las necesidades de los clientes. Por otro lado, en esta época en donde se consolidó el teletrabajo, muchas personas se mudaron a zonas rurales, para así aprovechar la tranquilidad que otorga el campo, las montañas o la playa. Sin embargo, en nuestras ciudades sigue el crecimiento de proyectos inmobiliarios, eso sí, enfocados en el bienestar y la protección de las personas, quienes buscan seguridad ante situaciones de riesgo, como el COVID-19.
FLEXIBILIDAD LABORAL La oficina primero: las empresas requieren que sus empleados vayan a la oficina la mayor parte del tiempo, pero establecen uno o dos días al mes en los cuales los empleados pueden trabajar de forma remota. Híbrida (autonomía parcial): las empresas establecen parámetros para determinar cuáles empleados pueden trabajar virtualmente y cuándo lo pueden hacer. Híbrida (autonomía total): las empresas permiten que los colaboradores elijan cuándo les gustaría trabajar desde una oficina y cuándo les gustaría trabajar de forma virtual. Lo virtual primero: este modelo implica que la mayoría de los empleados trabaje virtualmente por defecto, ya sea desde sus hogares o desde cualquier otro lugar cuando su actividad tenga un enfoque individual y de concentración. Fuente: Gabriela Corvetto, Director, Workplace Advisory Strategic Project Services Latin America de Colliers.