Reporte SP 56

Page 25

En cualquier voluntad no hay otra cosa que política. Quizá es que cuando nuestro mundo es percibido como un juego, el usuario no solo juega en él: se convierte en parte del mismo.

de proyectiles —o una guerra de guerrillas— contra uno —o más: por lo general muchos más— enemigos. Pero además de «juego de disparos» se trata de una parodia y allí, en ese constante intercambio de asignaciones, radica su potencia: una escritura paródica a muchas manos donde intervienen programadores y usuarios, una escritura entendida como trajín que construye, finalmente, un nuevo canal. La parodia como proceso, escritura y lectura en «doble código» que se intercambia y se superpone, que no puede entenderse de manera lineal. Entre estas idas y vueltas las palabras se desmiembran, mutan. Pero no por ello olvidan. No en automático, al menos. A casi medio siglo de su aparición, el fantasma del General ha transitado un largo trecho: desde los afiches políticos de la Tercera Posición y los mítines multitudinarios en Plaza

Próximamente…

de Mayo a convertirse en una efigie estampada en tazas, camisetas, calcetines, juegos de mesa, imanes para el refri y un largo etcétera de artículos de consumo, una especie de «peronismo cool» que ha divagado por el inconsciente y los shoppings argentinos durante décadas. ¿Es posible que un personaje santificado y condenado, amado y odiado, abanderado de los humildes y perseguidor de sus enemigos a partes iguales, pierda cualquier connotación política y se convierta en el motivo de un bar en Palermo o en un robot gigante que aplasta edificios en Tokio? ¿Puede el titán metálico justicialista que siembra el caos al grito robótico de ¡Compañeros! percibirse como otra cosa que una metáfora cargada de sentido? ¿O se ha convertido, a fuerza de vítores y gastadas, en apenas un estereotipo? Como en el trabajo de Lamborghini, el aparato dista de ser una imitación burlesca; es más bien un «canto paralelo», casi un reordenamiento de hechos: un nuevo régimen paródico: cantado o jugado, a fin de cuentas la misma cosa. •

José Hernández · @monerohernandez The Man Who Sold the World

25


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.