Revista
Año 7, Núm.74
ComunicacióN PolíticA & CulturA
Av. Gómez Morín s/n, Antiguos Talleres del Ferrocarril Del 10 de diciembre 2019 al 31 de enero 2021 HORARIO: De Miércoles a Domingo de 12 a 18 h ENTRADA GENERAL: $10
Revista
ComunicacióN PolíticA & CulturA
Año 7, Núm.74
La televisión abierta ¿Retoma su cetro?
La voz de la ciudadanía: Chile y Tailandia
Gabriela Seoane
Gema Morales
Nuevos partidos políticos en México Enrique Paz
Destruir para Transformar Sergio Uzeta
Memoria histórica y comunicación Ricardo Homs
Comunicación, elocuencia y persuasión (1) Sergio González
CONTENIDO
6 8 12 14 16 18 20 22 24 28
Formación en valores: una urgencia del siglo XXI Arlene Ramírez
Comunicación, elocuencia y persuasión (1) Sergio González
Memoria histórica y comunicación Ricardo Homs
Políticos inmunizados Antonio Sola
Destruir para Transformar Sergio Uzeta
Paridad de género y reelección Diego García
Fondos para mi fondo Cuauhtémoc Miranda
La televisión abierta ¿Retoma su cetro? Gabriela Seoane
El odio y sus seguidores Alfonso Gómez
Entrevista con: Alfredo Pérez Bravo
Embajador de México en Nueva Zelandia
38 40 42 44 46 48 50 52 54 56 Entre valores y deberes Carlos Gil
Los retos de la COFECE en el próximo decenio Armando Hernández
Nuevos partidos políticos en México Enrique Paz Retos y perspectivas en la integración del INAI Ileana Hidalgo
Mecanismos de democracia directa en la CDMX Moisés Vergara
Consideraciones sobre el registro de nuevos partidos políticos Carlos Ezeta
La voz de la ciudadanía: Chile y Tailandia Gema Morales
Maximino Javier Helio Pareja
Esperanza, opción de ilusos (Parte 2) Manuel Grapain
Grandes Personajes de la Historia Política Rodrigo Díaz
DERECHOS DE AUTOR Y DERECHOS CONEXOS, año 7, No. 74 , 2020. Revista Signum Comunicación Política & Cultura, es una publicación mensual editada por M&D High Strategy Group, calle retorno 21 de Genaro García Col. Jardín Balbuena, Delegación Venustiano Carranza, CP, 15900 Tel. (55) 55522465 y cuya página electrónica es: www.revista-signum.com Editor responsable: Claudia A Martínez Díaz direccion@ revista-signum.com Reserva de Derechos al Uso Exclusivo No. 042015041712141100203, ISSN 1405-8499 ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor, responsable de la última actualización de este número de Informática INDAUTOR, Ing. Juan José Pérez Chávez, calle Puebla, 143, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, CP 06700, fecha de la última modificación: 30 de diciembre de 2017. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor responsable ni de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación, sin previa autorización de M&D High Strategy Group. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.
DIRECTORA GENERAL Claudia Martínez Díaz direccion@revista-signum.com DIRECTORA DE COMUNICACIÓN Y ESTRATEGIA Mónica Martínez Díaz dircom@revista-signum.com COLABORADORES (en orden alfabético) Alfonso Gómez Arlene Ramírez Armando Hernández Antonio Sola Carlos Ezeta Carlos Gil Cuauhtémoc Miranda Diego García Eduardo Higuera Enrique Paz Gabriela Seoane Gema Morales Guillermo Miranda Helio Pareja Ileana Hidalgo Manuel Grapain Martha Mercado Moisés Vergara Ricardo Homs Rodrigo Díaz Sergio Uzeta Sergio González Yuri Beltrán
DISEÑO EDITORIAL M&D High Strategy Group FOTOGRAFÍA Manuel Grapain Guillermo Miranda SUSCRIPCIONES Y DISTRIBUCIÓN relacionespublicas@ revista-signum.com VENTAS DE ESPACIOS Y PUBLICIDAD direccion@revista-signum.com Teléfono: 4423620003
Por otra parte, en México el presidente López Obrador se acerca a cumplir su segundo año de gobierno entre grandes polémicas sobre el manejo de la economía, la pandemia y el sector salud, la extinción de fideicomisos, y conflictos con algunos gobernadores, entre otros muchos temas. Conforme avanza el sexenio, al parecer el hilo conductor de la 4T es la destrucción del orden establecido para concentrar el poder, lo que para diversos estudiosos y analistas de la política representa un retroceso para nuestra democracia, pues impacta en forma directa los equilibrios políticos y la división de poderes. Por si eso no fuera poco, el discurso de odio prosigue fomentando la polarización social. A pesar de la pandemia y demás problemas a nivel mundial, la vida sigue su curso y en algunos países como Estados Unidos y México, el proceso electoral se vuelve protagonista. Por lo pronto, en nuestro país ha surgido el debate por el registro de nuevos partidos y las condiciones en que se ha dado. Cabe señalar que habría que observar lo que pasa con la democracia en países como Chile y Tailandia, donde los movimientos sociales, a pesar de la pandemia, han tenido un papel relevante en la esfera pública a través de la ciudadanía, sobre todo de los jóvenes y las mujeres. En otro orden de ideas, en esta edición tuvimos el privilegio de entrevistar a Alfredo Pérez Bravo, embajador de México en Nueva Zelandia, quien nos comparte su muy interesante y amplia experiencia en la diplomacia, así como la importancia de esta para nuestro país. Dentro de los temas de comunicación, en esta edición se analiza la responsabilidad y relevancia social que tiene la forma de narrar la historia. Se plantean elementos fundamentales de la comunicación, la elocuencia y la persuasión, así como el cuestionamiento de si la televisión abierta retomará su cetro en la actualidad. En este contexto un aspecto que no debe olvidarse es la formación en valores que hoy tanta falta nos hace, debe regresarse a lo básico, pues la revaloración de la ética ciudadana permitirá que todas las manifestaciones de la sociedad civil en el espacio público tengan, ante todo, una voz de respeto absoluto hacia la nación en la que se desarrollan. Como cada mes, estos son algunos de los temas que usted podrá encontrar en esta publicación, sin faltar, por supuesto, nuestras secciones de cultura y cinematografía. Le reiteramos nuestro agradecimiento por su lectura y seguimos apreciando sus valiosos comentarios. El Consejo Editorial
CARTA EDITORIAL
N
os acercamos a final de 2020 y una de las preocupaciones mundiales sigue siendo la pandemia y sus consecuencias.
Formación en valores: una urgencia del siglo XXI Arlene Ramírez*
L
os ciudadanos del mundo en el siglo XXI, hemos logrado que nuestra voz sea escuchada en diferentes espacios de participación social; y es en esos espacios en los que se requiere de propuesta y acción, acción social que permita el desarrollo de una mejor y más sólida participación ciudadana. En virtud de que los movimientos sociales han logrado la protección de grupos vulnerables o la generación de políticas públicas, existe la necesidad de formar ciudadanos socialmente responsables; ciudadanos éticos, con sentido humano y sensibles a las necesidades de su entorno; ciudadanos (de todas las edades y condiciones sociales) que se preocupen por la trascen-
dencia, por la generación de valor. El pilar que debe soportar laparticipación social del siglo XXI debe ser la formación en valores. El regreso a los básicos. La revaloración de la ética ciudadana permitirá que todas las manifestaciones de la sociedad civil en el espacio público tengan, ante todo, una voz de respeto absoluto hacia la nación en la que se desarrollan. La ética y responsabilidad ciudadana son parte indispensable de la generación de una nueva conciencia que permitirá mejorar profundamente las condiciones de la población, y el desarrollo con equidad que tanto se anhela en el mundo.
POLÍTICA
Comunicación
*Arlene Ramírez es Licenciada en Relaciones Internacionales por el Tec de Monterrey Campus Estado de México, con Mención Honorífica (1998), Maestra en Diplomacia con especialidad en Terrorismo por la Universidad de Norwich (2010) donde también realizó estudios de Doctorado en Relaciones Internacionales. @ArleneRU
Cuando la sociedad civil actúa responsablemente, impacta positivamente en la generación de políticas públicas, promueve y desarrolla la participación proactiva y perdurable; de lo contrario, encuentra desprestigio y ambigüedad. La formación en valores permite el desarrollo de un auténtico ciudadano que es socialmente responsable (y corresponsable), comprometido con el desarrollo de su comunidad, pues genera propuestas, busca y promueve el cambio. Prioriza la acción frente a la reacción. En ese sentido, comprende que el cambio empieza por él mismo, y que en la suma de las individualidades nace el valor de la colectividad proactiva que promueve la transformación cotidiana,
siempre desde la participación social responsable. Regresemos de nuevo a la educación en valores, promovamos en nuestros niños y jóvenes el aprecio por las virtudes que se alcanzan solo con la práctica constante de los valores. La apuesta debe ser desafiar las prácticas que perjudican a los grupos más vulnerables, generando conciencia, solidaridad, y nuevas reglas de convivencia.
Comunicación, elocuencia y persuasión (1) Sergio González*
E
l discurso es el arma política por excelencia del candidato y del gobernante. Es el vehículo privilegiado para transmitir con claridad y alcance su mensaje, programa, valores, visión del mundo, estrategia y oferta política, entre otras cosas. A través del discurso político, el o la candidata (o el funcionario público) comunica por todas las vías a su disposición, a todas las audiencias posibles con la idea de persuadir para su causa al mayor número posible de ciudadanos y ciudadanas. Para cumplir su misión, dicen los expertos, el discurso, o mejor dicho el buen discurso político, debe prepararse, ensamblarse y pronunciarse con fundamento en 10 reglas generales del oficio; algunas de forma y otras de contenido que, bien ejecutadas y desplegadas con precisión, revestirán al mensaje y al propio orador de solidez y congruencia, tan necesarias para navegar de mejor manera el proceloso mar de la campaña y, en su caso, el del ejercicio de gobierno. Primera. Reconocer y agradecer a la audiencia y presentarse con ella.
No iniciar con la médula del mensaje; ofrecer con las primeras palabras una especie de apretón de manos verbal. Segunda. Toda gran pieza de oratoria demanda organización (orden); estructura en otras palabras, también conocida como anatomía temática. Esta regla es de las imprescindibles. Entre los buenos redactores de discursos y los grandes oradores el mantra es sencillo y reza: “Diles lo que vas a decirles, después diles lo que vienes a decirles y luego diles lo que les dijiste.” Tercera. Todo buen discurso necesita una cadencia o ritmo que lo haga asequible, que logre acercar al orador y al público en una suerte de danza que contribuya a sedimentar en el ánimo de la audiencia lo esencial del mensaje. Para lograrlo, los especialistas acuden a la anáfora, figura retórica consistente en una repetición de ciertos elementos. Aquí dos ejemplos, ambos de uno de los más elocuentes discursos de la historia política mexicana. Se trata de Benito Juárez en una elegía sobre Miguel Hidalgo, del 16 de septiembre de 1840 con motivo
A mi colega Diego García Vélez, que terminará lográndolo.
del aniversario de la Independencia nacional: “El día 16 de septiembre de 1810 es para nosotros del más feliz y grato recuerdo. En él rayó la aurora de nuestra preciosa libertad. En él recibió el león castellano una herida mortal, que más adelante lo obligó a soltar la presa. En él la Providencia divina fijó al monarca español el hasta aquí de su poder, dando al pueblo azteca un nuevo Moisés que lo había de salvar del cautiverio. En él los mexicanos volvieron del letargo profundo en que yacían y se resolvieron a vengar el honor ultrajado de su patria.” Más adelante: “Entonces no habrá sido estéril el sacrificio de que su vida hiciera el hombre singular…Entonces nos temerán nuestros enemigos… Entonces la paz y la concordia reinará entre nosotros… ” Cuarta. Asir la ocasión: hay que reconocer el momento en el que se articula el discurso. Puede tratarse de tomar el liderazgo (o cederlo) en un momento de crisis; puede haber-
se ganado (o perdido) la elección o darse una coyuntura en que la nación entera está hambrienta de esperanza, información o certidumbre. Es menester una aguda sensibilidad social y empatía para identificar una circunstancia que requiere un mensaje político de altura a cargo de un orador-estadista. Aquí hay que citar varios discursos norteamericanos cargados de anáfora: El 19 de noviembre de 1863 el presidente Abraham Lincoln inauguró el Cementerio Nacional Militar de Gettysburg, luego de una sangrienta batalla en la que murieron cerca de ocho mil soldados de ambos bandos y que aceleró la conclusión de la Guerra Civil norteamericana: “…que esta nación, bajo Dios, tendrá un nuevo nacimiento en la libertad y que el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo no desaparezca de la faz de la tierra”. En su toma de posesión como presidente, John F. Kennedy afirmó en
POLÍTICA
@ElConsultor2
Comunicación
*Sergio González, es Licenciado en Derecho por la Universidad Iberoamericana. Especialista en materia electoral con 30 años de experiencia. Ha colaborado en el IFE-INE en 4 ocasiones (fue fundador en 1990), en el IECM y en la FEPADE en posiciones de mando superior. Candidato a Doctor en Derecho, con tema de investigación: El Derecho a la Integridad Electoral. Actualmente es asesor en el Consejo General del Instituto Nacional Electoral.
plena guerra fría: “Así, conciudadanos, no pregunten qué puede hacer su país por ustedes. Pregúntense qué pueden hacer ustedes por su país.” Finalmente, el famoso “Yo tengo un sueño” de Martin Luther King del 28 de agosto de 1963, sobre los derechos civiles y la igualdad racial en su país: “Tengo un sueño de que un día esta nación se elevará y vivirá el verdadero significado de su credo… que todos los hombres son creados iguales…Tengo un sueño que algún día…los hijos de los antiguos esclavos y los hijos de sus antiguos propietarios, puedan sentarse juntos en la mesa de la hermandad…tengo un sueño que aún el estado de Mississippi se transformará en un oasis de libertad y justicia…. Tengo un sueño que mis 4 hijos vivirán un día en una nación en la que no serán juzgados por el color de su piel, sino por el contenido de su carácter.” Como usted puede percatarse, una buena pieza retórica puede inspirar a los escuchas, motivar a sus seguidores, informar a los electores reclutando nuevos adeptos, o convencer a sus contrincantes de que puede ganar y sabrá gobernar; una excelente pieza, en cambio, puede lograr todo eso, pero además inclinar una contienda electoral competida o definir o retomar el rumbo de la patria. Ninguno de estos empeños es menor; son fundamentales en la lucha por el acceso al poder y en cotidiano ejercicio de la función pública. Quinta. En uno de sus más famosos discursos, John Stuart Mill, filósofo, político y economista inglés repre-
sentante de la escuela económica clásica, acuñó una frase perfectamente aplicable a esta cualidad de todo gran discurso: “Todo lo importante para su propósito fue dicho en el momento exacto en el que había traído las mentes de su audiencia al estado más propicio para recibirlo.” Así, el orador debe hablar con un propósito, un fin, un objetivo. Quizá sea solo informar, pero también puede ser inspirar, liderar, motivar, recordar, avizorar. En todo caso, el orador debe tenerlo claro y, por lo tanto, su discurso debe expresarlo. Churchill mostró siempre un dominio apabullante de esta regla retórica. Al tomar posesión como primer ministro del Reino Unido en mayo de 1940, cerró su intervención con varias expresiones dignas del alto propósito de hacer prevalecer a los aliados sobre el eje: “Le diría a la Cámara lo que he dicho a los que se han integrado a este gobierno. No tengo nada que ofrecerles, salvo sangre, sudor y lágrimas… ¿Cuál es nuestra política? Hacer la guerra por mar, tierra y aire… contra una tiranía monstruosa nunca superada en el oscuro y lamentable catálogo del crimen humano… ¿Cuál es nuestro propósito? Respondo con una palabra: victoria, victoria a cualquier costo, a pesar de todo el terror; victoria sin importar qué tan largo y duro sea el camino. Victoria porque sin ella, no hay supervivencia.” Continuaré en entregas subsecuentes.
Memoria histórica y comunicación Ricardo Homs*
L
a memoria histórica es el resultado de la forma en la que se interpreta la historia de un país, desde la perspectiva generalmente oficial-gubernamental, a través de los sistemas educativos o incluso, desde todo el planteamiento de comunicación pública que se haya hecho a lo largo de los años. Eso tiene un especial significado, porque en México, ante la inminencia de la conmemoración de los 500 años de la capitulación de la gran Tenochtitlán, vienen muchas posibilidades de darle una interpretación que va a ser determinante para generar una actitud colectiva frente a este hecho histórico, el cual tiene grandes repercusiones en el ámbito emocional de la gente, por lo que significan las raíces étnicas,
culturales, religiosas e incluso la propia identidad de los mexicanos. Aquí debemos reconocer la trascendencia del trabajo de comunicación. La posibilidad de que se despierte el interés colectivo por el análisis y la reinterpretación de la historia a partir de las nuevas visiones existentes en este mundo globalizado. Actualmente se han terminado de rescatar más documentos, que ahora están afortunadamente en la Web. Con ello se facilita una visión más cercana a lo que sucedió en la realidad hace 500 años, lo cual contribuye a entender el contexto para asumir una postura ante este hecho. En ese sentido, el trabajo de comunicación va a ser de-
www.ricardohoms.com FB: @Ricardo.Homs1 LI: Ricardo Homs TW: @homsricardo
terminante, ya que puede representar la continuidad en la divulgación de mitos y leyendas que no corresponden a la realidad, pero que sí ayudan a la reconstrucción histórica que favorece visiones políticas del momento, o en contraste, rescatar la información nos puede ayudar a definir la interpretación que nos permita a los mexicanos reflexionar sobre cuáles son nuestras fortalezas y debilidades anidadas en nuestro inconsciente colectivo. Así podríamos tratar de encontrar el modo de canalizarlas positiva y conciliadoramente. De este modo podríamos propiciar un conjunto de valores sociales que nos ayuden a sentir mayor orgullo por nuestra identidad, mayor compromiso social con nuestro
país, e incluso poder generar el interés colectivo de homogeneizarnos alrededor de un nuevo proyecto de país. A partir de lo anterior, la comunicación va a tener un alto impacto en nuestra interpretación; por lo tanto, es muy importante generar un fenómeno de opinión revisionista y analítico, que de buena fe nos ayude a entender qué es lo que pasó en aquella época, cuál es la forma en que nos impactó a lo largo de los años, y hoy poder saber cómo tenemos que interpretarlo para asimilarlo de la forma más positiva posible. Por tanto, es fundamental reflexionar sobre el importante papel que jugará la comunicación colectiva en la forma que tendremos que reinterpretar la historia.
Comunicación
*Ricardo Homs, es presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación AC. (www.amdc.org.mx), autor y conferencista. Ha publicado más de 23 libros con las editoriales más importantes. Es editorialista del periódico El Universal y participa en noticieros de ADN40. Es experto en liderazgo social, marketing político y posicionamiento. Fundó la empresa de consultoría Ries & Ries México, la cual forma parte de la corporación global fundada por Al Ries en Atlanta.
Políticos inmunizados Antonio Sola*
L
as portadas de los periódicos, en el momento de escribir este artículo, de muchos países del mundo, como los de España, auguran una dura segunda ola de esta pandemia sanitaria del COVID-19, una segunda embestida que, en muchos de ellos, coincidirá con la entrada del otoño y el invierno, y la época de gripe. Todas estas páginas muestran como el coronavirus vuelve a copar la agenda política y mediática -si alguna vez dejó de hacerlo-. Todas generan una sensación de impotencia y de tristeza inconmensurable, para todos aquellos que somos espectadores de una realidad que no podemos cambiar, más allá de contribuir con nuestro granito de arena, cumpliendo con las imprescindibles recomendaciones sanitarias. Estas noticias que nos llegan representan que nuestros mandatarios no aprenden de sus errores. Hace escasos meses, ante un problema que nos arrolló de manera cuasi inesperada, los políticos adolecían de cuatro pecados capitales, que también comentábamos en estas páginas:
no decir la verdad, subestimar a los ciudadanos, aletargar las decisiones y buscar la rentabilidad política. Lamentablemente, debemos incorporar un pecado capital más y es que se han inmunizado, pero no pensemos en inmunidad ante el COVID-19 ¡Ojalá! Estos políticos nos siguen demostrando la (mala) clase de la que están hechos y, de esta forma, se han inmunizado de la realidad, del dolor de la gente, de la soledad, de los muertos, de los niños encerrados. Así vamos… dirigidos por ellos mismos hacia un callejón sin casi salida, al menos, por el momento. Hace unos meses, teníamos una pandemia global, una crisis sanitaria sin comparación. Ahora estamos sumidos en el principio de la que se prevé como segunda ola, además de estar ya viviendo, en primera persona, la pandemia económica. Ante esto, vemos políticos que no analizan, no prevén, no lideran, no hacen una buena lectura de sus pueblos y ponen tiritas en heridas que necesitan ser suturadas.
Mientras, viven enfrascados en sus luchas políticas, donde la pandemia se ha convertido en arma arrojadiza para lograr alcanzar ese rédito político que siempre les ha preocupado, pero con el agravante de que la ciudadanía está ya muy cansada de un 2020 que está siendo muy injusto. Las personas solo quieren ser felices y necesitan que los políticos hagan su trabajo, que no es otro que facilitar ese camino hacia la felicidad, asegurando ciertos aspectos para que el individuo pueda desarrollarse plenamente dentro de la sociedad. Estos aspectos van desde la salud, a la educación o a la economía. Y no me refiero a los grandes conceptos macroeconómicos, sino a la de la cesta de la compra más básica. Todos estos temas son los que integran el primer metro cuadrado de los ciudadanos, concepto de mi amigo y socio de Isonomía, Pablo Knopoff. Ese primer metro cuadrado se compone de todas aquellas cosas que son irrenunciables para la persona, aquellas que deben preservarse. Pues los políticos no solo están
desconectados de ese primer metro cuadrado, sino que, si entran (accidentalmente), lo hacen como elefante en cacharrería, para destruir, en lugar de construir. El panorama que nos espera es, por un lado, desalentador. Vamos a encontrarnos con sociedades vacías que necesitan llenar lo más básico, eso que sus gobernantes no han conseguido cuidar. Sin embargo, siempre prefiero buscar el rayo de luz, esa esperanza… porque los ciudadanos están buscando un líder nuevo que muestre empatía y que les ayude a vivir mejor. Estoy convencido de que llegará ese perfil de líder resiliente que ayude a los demás a adaptarse o recuperarse de la adversidad. Ese que será el catalizador que inspire a las personas a alcanzar metas que no podrían haber logrado por si solos. Son los líderes que necesitamos en este momento y estoy seguro de que están ya ahí. Quizá, alguno esté leyendo estas líneas. Si es así, te animo a que des un paso al frente.
POLÍTICA
Comunicación
*Antonio Sola, es reconocido en el mundo de la consultoría política como “Creador de Presidentes”, Antonio Sola es hoy uno de los estrategas políticos más destacados y reconocidos a nivel mundial, especialmente, en Iberoamérica. Con 46 años de edad, Sola ha sido estratega principal en importantes campañas presidenciales ganadoras como las de Juan Manuel Santos (Colombia), Mariano Rajoy (España), Felipe Calderón (México), Otto Pérez Molina (Guatemala), Michel Martelly y Jovenel Moïse (Haití), entre otras. Cuenta en su haber con más de 450 campañas electorales, de todo rango de poder, en más de 25 países en Europa, América y África. @AntonioSola_
Destruir para Transformar Sergio Uzeta*
E
stán por cumplirse los primeros dos años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien llegó a la presidencia impulsado por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), partido que detenta el poder en México. A dos años de asumir la titularidad del Ejecutivo, AMLO ha hecho todo lo que está a su alcance para concentrar el poder a fin de tener el margen de maniobra político y económico para llevar a cabo lo que ha bautizado como la Cuarta Transformación (4T). Conforme avanza el sexenio, lo que observamos es que el hilo conductor de la 4T es la destrucción del orden establecido para transformar el estado de cosas a capricho del gobernante en turno. Esto, para diversos estudiosos y analistas de la política, representa un retroceso para nuestra democracia. Retroceso que impacta en forma directa los equilibrios políticos y la división de poderes. López Obrador ha marcado una ruta política clara de concentración absoluta del poder económico y político para hacer lo que más le convenga a su visión de lo que debe ser el gobierno de la Cuarta Transformación. Lo negativo de esta ruta es que, en el camino, AMLO ha ido minando los contrapesos institucionales que permiten una sana convivencia política y la toma de decisiones colegiadas a partir de la visión de expertos sobre diversos temas. Ahí está la ruptura con diversos gobiernos estatales y
las presiones a los poderes Legislativo y Judicial. También los órganos autónomos han tenido que padecer la pesada mano presidencial, desde el Instituto Nacional Electoral (INE), pasando por la Comisión Reguladora de Energía (CRE), y terminando con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que ha perdido toda relevancia como órgano defensor de los derechos fundamentales para convertirse en comparsa del poder en turno. Y qué decir de las organizaciones de la sociedad civil que promueven y defienden causas tan nobles como los derechos de las mujeres y los niños, o aquellas que se quedarán sin fondos a partir de la desaparición de más de 100 fideicomisos que sostenían su noble labor. Ni hablar de los padres de niños con cáncer que llevan meses sin recibir los medicamentos adecuados para continuar con sus tratamientos. Y en este repaso podemos incluir la permanente descalificación presidencial hacia medios, periodistas e intelectuales, que han osado difundir algunos trabajos o análisis que hablan del abandono o incompetencia del gobierno en diversas áreas clave para los mexicanos. Tal es el caso de salud, seguridad, economía familiar y evolución de los indicadores de pobreza. Según el propio presidente todo iba bien hasta que sobrevino la pandemia del COVID-19, situación que exhibió el abandono del sector salud y sus principales progra-
mas, pero también la ineptitud de la nueva clase gobernante. Ante las crecientes críticas a la mala contención de la pandemia de coronavirus, y sus terribles efectos en la economía, la seguridad y el deterioro social, el mandatario ha usado el espacio de la conferencia mañanera para condenar, descalificar y juzgar a quienes van en contra de sus posiciones. La conferencia mañanera se ha convertido en el espacio de gobierno desde el cual, el presidente tira línea para condenar o dar el apoyo a quien le venga en gana. Desde ahí, se destruye y se purifica. Se apoya o se condena. Se pontifica y descalifica. Así, la política de sembrar miedo se ha convertido en un arma infalible para apuntalar la voluntad presidencial y enfilar las baterías a favor o en contra de personas, causas y adversarios. Todo aquel que sea visto como un obstáculo a los planes de Palacio Nacional es exhibido o amedrentado por la 4T. En México, en el gobierno de López Obrador ha ido cobrando forma la llamada cultura de la cancelación, un fenómeno que comienza a crecer en diversos países del mundo. En su artículo titulado “La lista de chequeo de la cultura de la cancelación”, reproducido en la revista Letras Libres, el pasado 12 de agosto, Jonathan Rauch, señala que, mientras “la crítica presenta pruebas y argumentos en un esfuerzo por persua-
dir. La cancelación, en contraste, busca organizar y manipular el ámbito social o mediático con el propósito de aislar, privar de una plataforma o intimidar a los oponentes ideológicos. No intenta buscar la verdad, sino moldear el campo de batalla de la información; su intención –o al menos su secuela más predecible– es forzar al conformismo y reducir el espectro de posibilidades críticas que no han sido sancionadas por el consenso predominante de alguna mayoría local”. Tal parece que en el gobierno de la llamada Cuarta Transformación, la cultura de la cancelación llegó para quedarse. La cancelación busca acallar y paralizar a quienes piensan diferente o se atreven a emitir una crítica. Se trata de acosar al oponente de tal manera, que pierda cualquier tipo de plataforma o soporte para emitir críticas contra el gobernante en turno. En síntesis, se trata de nulificar la acción de aquel que es considerado como enemigo. Esta práctica perniciosa ha generado daño y división entre los grupos sociales, al grado de provocar linchamientos colectivos contra todo aquel actor político o social susceptible de convertirse en un objetivo del odio o el rencor de las huestes fieles al líder. Así las cosas, la dinámica de destrucción que guía a la 4T es implacable, y lo arrasa todo a su paso con tal de obtener sus objetivos. Pero en esta lógica, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en el pecado lleva la penitencia, porque nadie puede construir o transformar a partir de las cenizas.
POLÍTICA
Comunicación
*Sergio Uzeta es comunicador y periodista, y en la actualidad se desempeña como consultor independiente, especializado en el manejo de plataformas tecnológicas de comunicación y el desarrollo de talleres en manejo de medios, manejo de crisis y construcción de identidad pública. Ha sido director de Noticieros y Programas Informativos de Canal Once, conductor en Radio Fórmula y Radio Independiente de México; fue el director fundador del Canal Judicial de Televisión y también el primer director de Notimex, en su etapa de Agencia de Noticias del Estado Mexicano. En el servicio público también se desempeñó como gerente corporativo de Comunicación Social de Pemex y trabajó en la Unidad de la Crónica Presidencial durante las administraciones de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari. Es egresado de la licenciatura de Comunicación en la Universidad Iberoamericana, lugar donde también ha dado clases y diversos talleres. @UZETASUM
Paridad de género y reelección Diego García*
L
a reelección para cargos de senadurías y diputaciones federales, así como diputaciones locales e integrantes de ayuntamientos, llegó con la reforma constitucional en materia político-electoral del año 2014. En junio de 2019 se reformó el artículo 35 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos “CPEUM” incluyendo en los derechos de la ciudadanía, como un principio, el poder ser votada en condiciones de paridad de género. El problema planteado por algunos actores políticos, se centra en el falso enfrentamiento entre el derecho del candidato a la reelección o elección consecutiva, como también se le denomina, y la obligación que tienen los partidos políticos y las autoridades de que toda postulación cumpla con el principio de paridad de género. No existe disyuntiva alguna, toda autoridad electoral debe de garantizar el derecho al registro de candidaturas, se trate o no de una postulación que busca la reelección, la obligación como autoridad es verificar que se cumpla con los requisitos tanto en lo individual, como de manera integral al analizar el total de candidaturas de cada partido político o coalición. El escenario se presenta en la etapa del registro de candidaturas teniendo como actores a: Los legisladores (federales y locales) e integrantes de los ayuntamientos que pretendan buscar la reelección; los partidos políticos, quienes tienen la obligación de postular candidaturas cumplien-
do el principio de paridad de género, y los institutos electorales, los cuales deben vigilar y garantizar que el registro de candidaturas se haga conforme a la norma. La reelección no está totalmente reglamentada a nivel federal, y en algunas de las entidades del país, uno de los principales problemas de esta falta de reglamentación tiene que ver con el hecho de si quienes busquen ser reelectos deben o no separarse del cargo noventa días antes de la elección. La elección de 2021 será la primera ocasión en que la autoridad federal se enfrente a dicha situación, sin embargo, a nivel local, esto ya se presentó y se resolvió. Por ejemplo, en el Estado de México, en la elección del año 2018, se eligieron diputaciones e integrantes de los 125 ayuntamientos y hubo candidaturas de diversos partidos políticos buscando la reelección. En un Juicio de Revisión Constitucional, la Sala Regional Toluca del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación resolvió inaplicar la porción normativa de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de México, la cual señala en su artículo 40 que para ser diputado un requisito es no ser diputado local, por lo tanto, un diputado en funciones no podía registrarse como candidato, por lo que tendría que separarse del cargo. Por lo anterior, se puede suponer que la autoridad nacional puede tomar como antecedente la resolución de la Sala Regional Toluca y en el proceso electoral federal no sea necesario que se separen del cargo los diputados federales que busquen reelegirse.
@dgv1968
Hoy en día, con la reciente reforma al Código Electoral del Estado de México, quienes tengan interés en reelegirse, deberán separarse del cargo, por lo menos, veinticuatro horas antes del inicio de las campañas. Otra de las reglas que se encuentra tanto en la CPEUM, como la particular del Estado de México, es que quienes busquen ser reelectas o reelectos deben ser candidatos del mismo partido político que los postuló la primera vez y si fue coalición, por alguno de los partidos integrantes de dicha coalición, de no ser así, quien pretenda reelegirse por algún partido distinto debió haber renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato. Por otro lado, una vez resuelto el problema de la reelección, debemos entrar al fondo respecto de la paridad de género que deben cumplir los partidos políticos y que la autoridad electoral debe vigilar. Los partidos políticos tienen la obligación de cuidar en todo momento que el total de sus postulaciones cumpla con el principio de paridad de género, tanto de manera horizontal como vertical, así como por bloques de competitividad, es decir, se tiene que cuidar la paridad de género de manera integral. Para dar cumplimiento a lo anterior, la autoridad electoral debe conocer los resultados de cada partido político en las últimas elecciones con el objetivo de hacer un análisis de cuáles son los bloques de competitividad de cada partido, por ejemplo, en qué municipios ha obtenido mayores triunfos (alta competitividad); en
qué municipios, aun cuando no ha ganado, es competitivo obteniendo el segundo lugar en la votación (media competitividad); y en cuáles ha obtenido sus peores resultados (baja competitividad). En cada uno de estos tres bloques tendrá que existir paridad horizontal, en otras palabras y para clarificar, si uno de los bloques está compuesto por 20 municipios, 10 tendrán que ser encabezados por mujeres y 10 por hombres, en caso de que el número de municipios de cada bloque sea non, se deberá privilegiar como acción afirmativa que en el bloque de alta competitividad el municipio dispar sea encabezado por una mujer y en el caso del bloque de baja competitividad por un hombre, todo lo anterior cuidando que el número total de candidaturas sea cincuenta por ciento para cada género y en el caso de números dispares, se aplicará la acción afirmativa. Para concluir, podemos afirmar que no existe una disyuntiva, la autoridad electoral debe vigilar que, en lo individual, cada postulación cumpla con los requisitos que marca la ley; si está vigente, que quien busque la reelección deba separarse del cargo 90 días antes si se quiere registrar, si posteriormente existe alguna demanda y la autoridad jurisdiccional determina que no se aplique dicho requisito, no se aplicará. Sin embargo, los partidos políticos o las autoridades no deben conflictuarse por el tema de la paridad de género, ya que se puede y se debe cumplir con lo mandatado para ambos temas.
ELECCIONES
*Diego García es Licenciado en Administración y Maestro en Administración Electoral; tiene más de 20 años de experiencia en la Administración Pública y actualmente labora en el Instituto Electoral del Estado de México como secretario particular del Consejero Presidente. Es autor de diversos artículos sobre comunicación política, elecciones y participación ciudadana
Fondos para mi fondo Cuauhtémoc Miranda*
S
i levantar la mano como borregos es hacer política, todos estamos perdidos. El pasado 9 de octubre los “ilustres diputados”, en su mayoría de Morena, concretaron la extinción de 109 fideicomisos, incluyendo fondos tan importantes como el de Desastres Naturales (FONDEN), el Fideicomiso Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (FIDECINE), el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (FODEPAR) y los fondos para investigación científica y tecnológica.1 Para estas y otras áreas no se requiere dinero, ¿de qué vivirán, de la dádiva? En espacios anteriores hemos reiterado la trascendencia de incentivar a la ciencia y a la tecnología, además de apoyar a la cultura tanto física como mental, pero al parecer a un grupo de seudodiputados esto nos le interesa, simplemente porque le tienen miedo a la formación y expresión del ser humano a través de las diversas manifestaciones intelectuales, o peor aún, el dinero lo quieren para su clientelismo partidista que no aporta nada al crecimiento de una nación. Esa es la realidad de México, el presupuesto de apoyo a
instituciones serias, que vía impuestos aportan miles de mexicanos, lo han borrado con solo levantar la mano. Tan solo en mayo pasado, el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE) en su Anuario estadístico de cine mexicano 2019, anunció con bombo y platillo que durante ese año se alcanzó la cifra histórica de 216 películas realizadas en el país, cuyo costo promedio por película ascendió a 17.2 millones de pesos. Además, detalló que de esta cifra el 49% contó con algún apoyo gubernamental. En el reporte disponible en el sitio de internet http://www.imcine.gob.mx/ cine-mexicano/anuario-estadistico/ se menciona que se realizaron 93 óperas primas, se produjeron 618 cortometrajes y 73 documentales; también se estrenaron 101 películas mexicanas en territorio nacional, las cuales registraron 35.2 millones de espectadores, según informó la Secretaría de Cultura en un comunicado. A estas buenas cifras, se le tendrá que restar casi la mitad para los próximos años, ya que no contarán con el apoyo del gobierno, quedando quizá 110 películas al año.
La política es quizá la única profesión para la que no se considera necesaria ninguna preparación.
Robert Louis Stevenson
FIDECINE reportó que en 2109 se otorgaron casi 60 millones de pesos para la realización de 10 filmes, números muy jugosos que ahora se destinarán para otros menesteres “más importantes” que la cultura, si bien se ha dicho que esos fondos ahora sí llegarán a quien verdaderamente lo requiere, al momento de esta publicación no se ha especificado bajo qué mecanismos se entregarán esos dineros, es decir, la reforma se trabajó en sentido contrario, primero quitan y luego averiguan. En plena pandemia, hoy más que nunca se tenía que invertir en investigaciones de grandes dimensiones, por ejemplo, pensar en buscar la cura o vacuna contra el COVID-19, pero eso será imposible, porque el Fondo Institucional de Fomento Regional para el Desarrollo Científico, Tecnológico y de Innovación con 1,546 millones de pesos, que formaba parte de los 65 fondos con los que contaba CONACYT, simplemente ya no existe, ahora invertir en nuevos proyectos será muy com-
plicado. Directores de instituciones que reciben este presupuesto han expresado que ese dinero solo sirve para pagar la operatividad del lugar, que ellos buscan la forma de hacerse de otros recursos para continuar con los diversos procesos de investigación. Estos pequeños ejemplos muestran el panorama de lo que se viene para las organizaciones que sobrevivían con esos fondos. Es una lástima que más de 68 mil millones de pesos se vayan a perder por un capricho presidencial, nos queda claro que para miles de proyectos tanto de cultura, salud y educación se requiere de dinero bien administrado, pero las formas de modificarlo no son las correctas. Ahora solo nos queda rezar para que no pase un terremoto, huracán o algún otro fenómeno natural, porque simplemente no se tendrá acceso directo a un presupuesto para solventarlo. REFERENCIAS 1. 2. 3.
http://www.cronica.com.mx/notas-consuman_desaparicion_ de_fideicomisos-1166257-2020 https://www.jornada.com.mx/ultimas/espectaculos/2020/05/23/mexico-realizo-216-peliculas-en-2019-252.html http://www.imcine.gob.mx/estimulos-y-apoyos/fidecine/
Comunicación
*Cuauhtémoc Miranda es autor del libro Crónicas Hertzianas, historia de la radio en México editado por Interwriters. Estudió la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además realizó una maestría en Filosofía y Crítica de la Cultura por la Universidad Intercontinental. Desde 1992 ha sido productor y conductor para diversos grupos radiofónicos, entre los que destacan Televisa-radio, Radio Fórmula y Grupo Imagen. Es catedrático del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey campus Ciudad de México. @cumiranda
La televisión abierta ¿Retoma su cetro? Gabriela Seoane*
D
esde que empezó el confinamiento como consecuencia del COVID-19, circularon múltiples recomendaciones para que las personas pudieran sobrellevar mejor el “encierro”. En las redes sociales, por ejemplo, se multiplicaron los consejos para ejercitarse desde casa sin tener contacto con el exterior. También proliferó la distribución de recetas para preparar innumerables platillos. Así, se encontró una fuente inagotable de información para ejercitarse y su aparente contraparte, la comida. Afortunadamente también surgieron múltiples ofertas para presenciar espectáculos de teatro, danza, ópera y música en general en línea. Muchas bibliotecas abrieron sus catálogos de manera gratuita y los museos y galerías no se quedaron atrás. Los psicólogos y psiquiatras abrieron espacios en diversas redes sociales para ofrecer asesorías o pláticas a las personas que lo requirieran. Historiadores, antropólogos, especialistas en arte, entre otros profesionistas, compartieron generosamente sus conocimientos e hicieron más placentero el encierro de millones de personas. En México, conforme se regresa a la “nueva realidad”, paradójicamente comienzan a cerrarse algunos de los espacios mencionados u otros permanecen, pero ya con un costo, lo cual es comprensible porque todo mundo tiene que “pagar renta y comer”.
Sin embargo, en los medios de comunicación tradicionales, como la radio y la televisión, el acceso a la información, la educación, la cultura y el entretenimiento sigue siendo gratuito y para muchos millones de personas más accesible que una señal de Internet. De acuerdo con datos de Nielsen IBOPE1, durante el primer trimestre de la pandemia, el número de radioescuchas y de televidentes aumentó en México. En la televisión este incremento se registra más en canales de paga, así como señales de streaming, entre otros. En el reporte de Nielsen IBOPE, se destaca que los noticieros de televisión incrementaron su audiencia en un 23.1% durante la semana 12 del confinamiento. Esto lo atribuyen a “la necesidad de los mexicanos por mantenernos informados”.2 Estas cifras son muy congruentes con la realidad mexicana. Al iniciarse el presente ciclo escolar, quedó claro que la señal de Internet todavía no llega a todos los mexicanos. Muchos de ellos accedían a la red desde sus trabajos o en cafeterías que lo ofrecen de manera gratuita. Esto explicaría por qué una mayoría se informa, ahora, a través de la radio y/o la televisión abierta. Pese a que en México hay más de 50 millones de personas en situación de pobreza, no es raro que hasta en las casas más humildes se tenga al menos una televisión. Es por eso que, en los mejores momentos
@Gabseomx
de la televisión abierta, se consideró a la empresa más relevante en el rubro, Televisa, tan importante como al presidente de la República. Pero ¿qué tipo de información es la que tienen a la mano las personas que ven los noticieros de la televisión abierta? La misma de siempre. Una serie de notas de 30 segundos a un minuto de duración en la que se da cuenta de los hechos, sin análisis ni seguimiento. Cada vez aparecen menos los reporteros y más los lectores de noticias. Prevalecen la visión superficial y las posturas oficiales. Por ejemplo, cuando se menciona el desabasto de medicamentos, se presenta al portavoz gubernamental dando una serie de explicaciones, pero no se analizan ni los alcances ni las repercusiones de problema. Se trata de información rápida, superficial y con poco contexto. Se omiten críticas fuertes al presente gobierno o bien se matizan. Tanto en la televisión privada como en la pública (esta última por cierto ha registrado una baja de audiencia) los noticieros se han convertido en transmisores de hechos con imágenes de manera muy rápida. La gente sabe lo que pasó, pero tendrá que averiguar por otros medios más detalles. Cabe señalar que son los noticieros los que han mostrado un incremento en sus audiencias, en la televisión abierta, pero como se mencionó, el mayor número de
televidentes pertenece a la televisión de paga y a rubros como el streaming. Es decir, los televidentes, sobre todo los más jóvenes, buscan sus propios contenidos: series, películas, documentales. Contenidos que no encuentran en la televisión abierta, pues pese a que ahora hay más canales, la programación parece una “copia al carbón” de lo que hacen las televisoras más grandes Televisa y Televisión Azteca. Como ejercicio, elijan una hora y hagan un recorrido por todos los canales y verán como son programas con el mismo formato y hasta los mismos anunciantes, pero con diferentes conductores, quienes, por cierto, saltan de un canal a otro. En México, por años, la televisión se convirtió en la “reina del hogar”. Las familias se reunían para verla. Los noticieros formaban opinión, aun sin informar. Los programas de entretenimiento permanecían por años. El mundo cambió y la audiencia también. Los dueños de las televisoras parecen no entenderlo todavía. Será interesante ver qué sucede una vez que pase la pandemia y las personas puedan salir nuevamente de su casa.
REFERENCIAS 1. Nielsen IBOPE (2020). La televisión y los medios digitales en tiempos de COVID-19. México: nielsenibope.com. Recuperado de: https:// www.nielsenibope.com/coronavirus-covid-19/ 2. Idem
Comunicación
*Gabriela Seoane es licenciada en periodismo y comunicación por la UNAM FES Acatlán y Maestra en educación también por la UNAM. Se ha desempeñado como guionista, redactora y reportera de radio y televisión. Ofrece capacitación para entrenamiento en medios y ha sido profesora del ITESM CCM en el Departamento de Español, Literatura y Arte de la preparatoria.
El odio y sus seguidores Afonso Gómez*
C
uando el presidente López Obrador elabora sus disertaciones y llama adversarios a sus gobernados no nos está recetando uno más de sus dislates. Tampoco es una de sus declaraciones ocurrentes como aquella que tanto elogiaron sus panegíricos cuando dijo que la oposición estaba moralmente derrotada. En México, una de las reglas no escritas de la democracia es que durante la lucha electoral son válidos todos los ataques y los golpes entre candidatos, no importando incluso la legalidad, pero terminan en el momento en que se hace la declaratoria de un ganador. Eso en buen español es perder con todas las de la ley. Pero, ¿qué pasa cuando el ganador, ya instalado en el pináculo vuelve una y otra vez contra el perdedor y sus segui-
dores, tal y como lo hace el presidente López Obrador? Simple y sencillamente lo hace porque ha encontrado en el odio la fuerza de su estrategia. Sin importarle que es el presidente de todos los mexicanos, incluyendo lo que no votaron por él, ha arrastrado al país hacia un ambiente que resta energías y nunca como ahora resulta apropiado decir que estamos en el hoyo y seguimos cavando. El odio es un sentimiento que motoriza lo más deleznable del ser humano y en muchos casos genera violencia. Hacía mucho que no vivíamos escenas con golpes como las que se vivieron en la Cámara de Diputados, la noche del martes 6 de octubre cuando opositores al régimen defendían la no extinción de los fideicomisos. En la refriega de protestas, una diputada de Morena soltó dos
bofetadas a otra del bloque opositor que levantaba una pancarta donde se leía: No a la desaparición de fideicomisos. A unos metros de ellas, en la multitud, un diputado también de la bancada morenista empujó y dio un puntapié a su adversario que cayó al suelo por efecto del golpe. El episodio era el resultado de un desencuentro en el que las palabras ya no acompañaron a los parlamentarios en el largo y sinuoso camino del diálogo legislativo. Pero la señal de destruir a los fideicomisos, creados para fomentar actividades de cultura, ciencia, educación, migrantes, deportistas, braceros, mujeres golpeadas, enfermos de cáncer y más, había salido de la conferencia mañanera. Es precisamente ahí donde todos los días se construye (alguien diría que con afán des-
tructivo) la narrativa de odio para ir en la ruta de la cuarta transformación, una entelequia que difunde el régimen para justificar la devastación del país con tres clases de seguidores de Morena y de López Obrador. A saber: 1.- Los fanáticos. Son los más peligrosos porque su resentimiento es tan grande como su ignorancia y se fueron formando a la par de él y sus causas. Este grupo lo conforman aquellos que oyeron hablar del dirigente que tomó pozos en Tabasco, aunque bien a bien no saben por qué lo hizo. Y lo siguieron junto con los que votaron para que asumiera la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal. A estos se sumaron los que apoyaron el plantón del Paseo de la Reforma y más recientemente, los que en el proceso electoral de 2018 ven alzarse la figura carismática del hombre que va a terminar con todos los males de México, in-
POLÍTICA
Comunicación
*Alfonso Gómez lleva ejerciendo el periodismo desde hace 35 años. Fue reportero en los periódicos: Diario de México y El Sol de México. Reportero, investigador y conductor en Canal 13 de Televisión, posteriormente Imevisión (Canal 13 y Canal 7 TV). Trabajó durante 17 años en Grupo Monitor de Radio Red donde se desempeñó como Jefe de Redacción, de Noticieros Metropolitanos, Gerente de Información, Director de Información, Director de Internet y Director de Operaciones. Gerente de las emisoras XEFAJ 1560 AM XENET 1320 AM. En el sector público ha ocupado las Subdirecciones de Información de la PROFECO, y las Direcciones de Información en las secretarías de Gobernación y Economía. Actualmente se desempeña como Subdirector de información del GPPAN en la Cámara de Diputados. Es egresado de la carrera de Periodismo y Comunicación Colectiva de la UNAM, FES Aragón y actualmente cursa la Maestría en Periodismo Político en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García.
cluso pidiendo perdón a los conquistadores de América. 2.- Los indignos. Son los sumisos que no ven otra salida que seguir sus decisiones a pie juntillas, aunque vayan en contra de toda lógica, simple y sencillamente porque la realidad de todos ellos está en el paraíso que ha bosquejado el presidente. Para estos seguidores, la verdad verdadera es la versión que se ofreció en campaña o la que expresaba en los debates soslayando las respuestas ante los demás candidatos presidenciales. Alguien diría que son como autómatas porque reciben el mensaje en las conferencias mañaneras y lo procesan sin comparar, ni cambiar el sentido de la instrucción. 3.- Los cínicos. Son los que siempre se han beneficiado del sistema y ahora de nuevo se encuentran en el lado correcto. La mayoría actúan visiblemente, son mediáticamente interesantes y tienen la experiencia (caradura) de luchar con arrojo por las causas de movimiento lopezobradorista. La incongruencia es una característica de su personalidad,
pero mientras están cobijados por la sombra del líder máximo no les genera conflicto. La filia por conveniencia siempre ha sido su moneda de cambio y hoy están nuevamente jugándosela por el ganador, ya mañana pelearán por otra causa siempre justa, según ellos. Para los seguidores del lopezobradorismo, el progreso es una palabra que no está en su vocabulario ni tampoco en el del presidente, quien deliberadamente no está haciendo nada para ir en busca de ese objetivo, sino que mientras más vulnerabilidades cauce al sistema es mejor para sus fines. La atmósfera nacional está muy afectada y en otras condiciones nadie estaría en contra del avance de nuestra nación, pero para que haya progreso dependemos de un Estado fuerte, un gobierno transparente y competente que rinda cuentas, además de que su sistema democrático funcione. Aquí entramos a la gran prueba que nos plantea el destino y que enfrentaremos en breve con un Estado incompetente,
paralizado por el odio, disfuncional porque no hay claridad para resolver los problemas actuales. Y para colmo la inestabilidad está a la vuelta de la esquina por un gobierno torpe. Por la falta de respuesta de un gobierno asertivo, hemos visto en estos meses a mujeres saliendo a la calle a exigir justicia, casetas tomadas por las mafias regionales disfrazadas de causas sociales, trenes varados porque las vías fueron bloqueadas por maestros seudodisidentes, las presas tomadas por agricultores en rebelión demandando agua para sus tierras, robo de medicamentos en plena pandemia y un largo etcétera de situaciones conflictivas. Con el paso de los meses nos hemos dado cuenta de la importancia de contar con instituciones neutrales que no se dejen influir por el poder presidencial. Ahí tenemos a la Suprema Corte de Justicia de la Nación cediendo a una consulta insulsa. Un Tribunal Federal Electoral cambiando el sentido de la democracia y regalando licencias para nuevos partidos políticos que en
menos que canta un gallo se declaran admiradores del régimen. Un órgano del Estado mexicano dando manos libres a los monopolios de PEMEX y CFE, pero restringiendo la intervención de otros actores en mercado de energía y otros órganos autónomos arrodillados. Corregir todo lo que se ha distorsionado en tan solo dos años nos costará, pero de alguna manera habrá que comenzar a corregir, primero el Estado de derecho y la solidez de las instituciones. En el próximo año de elecciones intermedias está la clave de dar por terminada esta pesadilla llamada presidencia omnipotente. Habrá que dar la batalla en medio de un ambiente mucho más crispado por el odio y con simpatizantes de un movimiento hecho por conveniencias. Será la hora de la presidencia imperial, de la que nos fuimos alejando con muchos años de lucha de la sociedad y que la terca realidad nos quiere volver a llevar a donde hoy estamos.
E
s embajador de carrera del Servicio Exterior Mexicano con 44 años de servicio en la Secretaría de Relaciones Exteriores de México. Ascendió al rango de embajador a los 33 años de edad. Los últimos 30 años se ha desempeñado como embajador de México, acreditado ante 52 países de África, América Latina, Caribe, Asia, Europa, y Oceanía. Dentro de su amplia experiencia se encuentra haber sido embajador itinerante para África, acreditado ante 39 países en ese continente (1990-1994). Embajador en Argelia (1991-1994). Embajador en Panamá, y embajador concurrente ante Guyana y Surinam (1999-2001); también fue representante de México ante la Comunidad del Caribe Anglófono (CARICOM) (1999-2001). Embajador de México en Malasia (2001-2007), donde el último año fungió como decano del cuerpo diplomático en Kuala Lumpur. Embajador de México ante la Federación de Rusia, y embajador concurrente ante las repúblicas de Armenia y Belarus (2007-2012); también fue embajador de México ante la República Portuguesa (2015-2019). Es autor de tres libros: “Cooperación Técnica Internacional”; “Panamá: Una Transición”, y “Hecho en Asia”. Ha escrito más de 40 artículos con temas internacionales; fue colaborador de las revistas “Tiempo” y “Examen” (1989-1991). En la década de los 80, publicó diversos “Cuadernos del Instituto Matías Romero de Estudios Diplomáticos”, sobre Redacción de Documentos Diplomáticos; Países Nórdicos, y acerca de Política Exterior. En esta entrevista el embajador Pérez Bravo nos comparte su gran experiencia, pasión y visión acerca de la diplomacia y la responsabilidad que esta implica.
RS. ¿Quién es Alfredo Pérez Bravo en lo personal y lo profesional? APB. Nací en la Ciudad de México. Mi padre, originario de Querétaro, fue médico, cirujano y urólogo; y mi madre, de Veracruz, fue concertista de piano. Soy egresado de la entonces Escuela Nacional de Estudios Profesionales (ahora FES) “Acatlán”, UNAM, de donde fui consejero universitario y presidente de la primera generación de Relaciones Internacionales (1975-1979). En lo profesional: ingresé a la Secretaría de Relaciones Exteriores en febrero de 1976, por lo que tengo casi 45 años de trabajar ininterrumpidamente en la cancillería mexicana. Soy embajador de carrera del Servicio Exterior Mexicano (SEM). Ascendí al rango de embajador a los 33 años de edad (junio de 1990), y los últimos 30 años me he desempeñado como embajador de México acreditado ante 52 países de África, América Latina, Caribe, Asia, Europa, y Oceanía. Entre otros cargos debo mencionar que fui jefe de Protocolo de Estado, de dos presidentes del país (2012-2014); Director General de Cooperación Técnica y Científica Internacional (1995-1999), y Asesor Especial de dos cancilleres de la República. RS. ¿Cómo y cuándo empezó su interés por el ámbito diplomático? APB. Lo atribuiría al destino, más
que a una decisión planeada. Cuando estaba en la preparatoria, en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) “Naucalpan”, un día recibimos a personas de “orientación vocacional” quiénes me hablaron por primera vez de la nueva carrera de Relaciones Internacionales, para la cual -según ellos- yo tenía el perfil. Así fue como solicité mi ingreso a dicha carrera en la UNAM. Cuando empezaba mi segundo semestre de la carrera de Relaciones Internacionales en la ENEP Acatlán, se me presentó la oportunidad de ingresar a trabajar en la Secretaría de Relaciones Exteriores, en Tlatelolco, en la entonces Dirección General de Organismos Internacionales, como auxiliar de analista (febrero de 1976). Empecé a trabajar por las tardes, y tan pronto terminé la carrera me incorporé de tiempo completo al trabajo en Relaciones Exteriores. En 1980 presenté el concurso público de ingreso al Servicio Exterior Mexicano, y al aprobarlo inició mi carrera diplomática. Desde 1976, por casi 45 años la Secretaría de Relaciones Exteriores ha sido mi casa. RS. ¿Qué es la diplomacia para usted? APB. La diplomacia es mi vida. Es un oficio, un arte, que se desarrolla y perfecciona con los años, con la experiencia. Quizás en
otra oportunidad pueda referirme a sus definiciones formales, a sus modalidades, pero en este espacio me limitaré a destacar que la diplomacia es precisamente el resultado del oficio diplomático: es la palabra, la propuesta, la tarea, la defensa, la negociación, la interlocución de nosotros los diplomáticos, los integrantes del Servicio Exterior Mexicano y de la cancillería de nuestro gobierno; es nuestro quehacer oficial y oficioso ante otros gobiernos y organismos internacionales. Para dar una idea del enorme espacio que ocupa la diplomacia y de su importancia, es necesario observar al sistema internacional en su conjunto, en particular su propia dinámica que se nutre de todas las relaciones entre los actores internacionales -particularmente entre gobiernos y sus organismos internacionales-. Todas esas relaciones van desde puntos de mayor colaboración a puntos de mayor conflicto, con un abanico intermedio de diversos matices. En ese gran universo de relaciones internacionales, en todas ellas, de un extremo a otro, se conducen
y guían precisamente por la actividad diplomática, por el trabajo de los diplomáticos. Nuestra tarea, la de los diplomáticos mexicanos, tiene como razón de ser la de defender y promover los intereses nacionales. En esa defensa, en esa tarea de posicionar mejor a México en el mundo, se encuentra la importancia y fortaleza de la diplomacia, la importancia de la red diplomática que tiene México en su Servicio Exterior, del cual me siento orgulloso de formar parte. RS. ¿Qué es lo que le gusta más de ser diplomático? APB. Servir, en primer lugar. Servir a los mexicanos que se encuentran en el exterior, y a los intereses de México, en cualquier parte del planeta. Igualmente, me llena de orgullo, y lo considero un privilegio, representar en el mundo a un maravillo país, como es México. RS. ¿Cuáles son las principales funciones que tiene su embajada? APB. Las embajadas son las representaciones de más alto nivel que acredita un gobierno ante otro.
Somos responsables del manejo de las relaciones entre México y los países ante los que nos encontramos acreditados. Por lo tanto, nos corresponde defender los intereses de México y de los mexicanos en el exterior; fortalecer los vínculos oficiales y de cualquier tipo entre nuestros países; buscar en todos los renglones las oportunidades que favorezcan a México, a su economía, a su gente. Nuestra tarea abarca todos los rubros y dimensiones: la política, la de seguridad nacional, jurídica, económica, comercial, consular, cultural, académica, educativa, tecnológica, bilateral, regional, multilateral, etcétera. Por lo que se refiere a la embajada de México en Nueva Zelandia, entre nuestras principales funciones están: atender a la comunidad mexicana en este país, que ya supera los 3 mil miembros; ofrecer todos los servicios consulares; dinamizar la relación en rubros tan importantes como el comercial, el de inversión, el de cooperación científica-académica, el de los intercambios culturales, el de la promoción de destinos y productos de México, así como la atención de otros te-
mas, entre los que destacan el de grupos indígenas y el de la mujer y la juventud. Como una tarea permanente está la de mantener el diálogo político a los niveles más altos, y trabajar en las grandes coincidencias que México y Nueva Zelandia tienen en la gran mayoría de los temas y foros internacionales. RS. ¿Cuáles son los principales desafíos que tiene su embajada? APB. La ubicación geográfica y las distancias entre los países son determinantes en muchos casos, y la distancia entre México y Nueva Zelandia no es una excepción. Para la movilidad de personas y productos, el transporte se vuelve un tema central a resolver, sobre todo si consideramos que los costos aumentan con las distancias. Estar tan lejos es sin duda un reto. Encontré también que son pocos los neozelandeses que hablan español, y eso implica que los intercambios, sobre todo de carácter educativo y cultural, se limiten. Sin embargo, el gran desafío en este momento es el cierre de las
fronteras de Nueva Zelandia, a raíz de la desesperada batalla contra la pandemia; la movilidad de personas es nula, y la de productos y de servicios ha disminuido, sobre todo de estos últimos. Mi programa de trabajo, y mis metas de mediano y largo plazo se han visto totalmente afectadas. Ello nos ha obligado a replantear nuestras actividades y a buscar nuevas fórmulas y mecanismos de trabajo bilateral, que en gran medida se están atendiendo de manera virtual. Debo decir que, sin embargo, la relación se redinamizará por completo hasta que se restablezca, sobre todo, el intercambio de personas (estudiantes, investigadores, académicos, funcionarios de gobierno, empresarios, etcétera), y se abran las puertas a bienes y servicios de todo tipo. RS. ¿Cómo se da la comunicación entre la embajada y los ciudadanos mexicanos que viven en Nueva Zelandia? APB. La mayoría de los mexicanos que viven en Nueva Zelandia son jóvenes o adultos jóvenes, que han logrado ubicarse en buenos espacios de la sociedad neozelandesa. Son mexicanas y mexicanos destacados, cuyo trabajo y talentos aportan mucho a este país. Desde mi llegada a Nueva Zelandia, a finales del año pasado, y no obstante los meses perdidos por los confinamientos causa-
dos por la pandemia, he tratado de tener todos los canales de comunicación abiertos con todos los connacionales que viven tanto en la isla del norte como en la isla del sur de este país. Durante los meses más complicados del manejo de la pandemia, redoblamos nuestro trabajo consular y ayudamos a más de 600 mexicanos a regresar a México o reubicarse acá, sobre todo porque desde finales de marzo se suspendieron los vuelos regulares y las reglas migratorias se volvieron totalmente restrictivas. En lo personal he buscado un diálogo directo con mis paisanos, y estamos realizando diversas actividades culturales, de promoción y educativas con las comunidades mexicanas, sobre todo en Auckland, Christchurch y Wellington. Y aunque esta embajada es muy pequeña, los tres diplomáticos que la conformamos tenemos muy claro que nuestra primera prioridad son los mexicanos. RS. ¿Cómo surgió la serie de pláticas con mexicanos que viven en Nueva Zelandia? APB. Yo he sido embajador residente en 7 diferentes países, jefe de cancillería en Estocolmo y jefe de asuntos políticos en Washington D.C., lo que me ha permitido -en mis 40 años de ser diplomático- entender y reconocer los retos y logros de los mexicanos en el exterior. En Moscú, en Lisboa, en
Washington D.C., en Kuala Lumpur, en Panamá, y en otros lugares me he encontrado con mexicanas y mexicanos maravillosos que merecen nuestra admiración y, sobre todo, nuestro apoyo. La serie de charlas con mexicanas y mexicanos en Nueva Zelandia surgió espontáneamente en Wellington, cuando conocí a un músico mexicano de quien yo ya había escuchado buenos comentarios de algunos neozelandeses que he conocido, y le pedí que me contará su historia y, mejor aún, que nos la contara para mostrarla al público en las redes. Para mi agrado, hay muchísimas historias de éxito que contar de tantos mexicanos talentosos que viven en Nueva Zelandia, y bueno ya llevamos una decena de entrevistas, algunas de ellas con más de 10 mil reproducciones en las redes sociales. RS. ¿Cuál considera que ha sido uno de los mayores retos que ha tenido en su carrera diplomática? APB. Yo siempre comento que los diplomáticos vivimos en dos esferas que no siempre coinciden: la personal y la oficial. Un cargo diplomático importante, en términos profesionales, no necesariamente es el más fácil en términos personales, y viceversa. Las exigencias de vivir en el exterior, muchas veces sin familiares, en idiomas y culturas distintas, con climas y comidas alejadas a las que México nos
tiene acostumbrados, es todo un reto. Si eso se traduce a la familia inmediata, a nuestros hijos, a su educación, el reto es todavía mayor. RS. ¿Nos podría compartir una anécdota que haya impactado su vida diplomática? APB. Cuando era embajador itinerante para África, acreditado ante 39 países africanos, a finales de 1990, me encontré en el aeropuerto de Lusaka, Zambia, a Nelson Mandela que tenía poco de haber salido de prisión. Hablé con él, lo que fue un gran privilegio, y me sugirió que abriéramos ya nuestra embajada en Sudáfrica (donde no teníamos representación diplomática porque México estaba en contra de la política del “apartheid”), y lo más importante fue que aceptó mi invitación para viajar a México, lo que se volvería una realidad en julio de 1991, meses después de nuestro encuentro, lo que sería una visita histórica. Importantes lecciones para mi han sido mis encuentros y conversaciones personales con grandes líderes como el primer ministro Olof Palme de Suecia, con el primer ministro Tun Mahathir Mohamad de Malasia, con el presidente Obama, con el presidente Putin, con el presidente Xi Jinping, con el presidente Shimon Peres; con la primera ministra Angela Merkel, con los presidentes portugueses Aníbal Cavaco Silva y
Marcelo Rebelo de Sousa, con los reyes de Suazilandia, Malasia y de Camboya y, por supuesto, con la primera ministra de Nueva Zelandia, Jacinda Arden. RS. ¿Cómo se ha transformado la diplomacia a partir de las nuevas tecnologías de comunicación? APB. Ha sido un cambio muy importante en las formas, pero los canales oficiales tradicionales se mantienen vigentes, y al final del camino son los que reconocemos los gobiernos. Lo que han generado las redes sociales es la posibilidad de difundir el trabajo que realizamos los diplomáticos, y que antes conocía muy poca gente. Ahora se le llama diplomacia pública por razones evidentes, pero la diplomacia se sigue manejando por los conductos oficiales reconocidos internacionalmente para tal fin. No obstante, esta es una pregunta que amerita una reflexión de mayor profundidad, y sin tener el espacio para abundar, me limitaría a señalar que estamos en el proceso de transición donde cada vez más diplomáticos es-
tamos aprendiendo a utilizar las redes sociales como herramientas de trabajo. Es ya un proceso irreversible, que irá encontrando sus propios parámetros. Yo en lo personal incursioné este camino desde hace varios años -soy uno de los pioneros- y reconozco las enormes ventajas de comunicarnos con la sociedad a través de las redes; tengo que decirlo, cada día se aprende algo nuevo por las reacciones que tengo del público al subir alguna publicación. RS. En su opinión, ¿qué características debería de tener un buen diplomático? APB. Una pasión irrevocable por su país, lealtad, honestidad, disciplina, tenacidad, perseverancia, equilibrio, comprensión, paciencia, curiosidad, orgullo, y un optimismo infinito. RS. Usted ha sido diplomático en muchos países del mundo, ¿hay algún país en el que no haya estado y que le gustaría representar? APB. Toda carrera diplomática está trazada y orientada por una trayectoria de promociones, de
reconocimientos que dan los méritos, la experiencia, y el trabajo cotidiano. Pertenezco a un servicio de carrera con rangos escalafonarios que nos dan mayor responsabilidad conforme los escalamos, al tiempo que nos exigen una mayor preparación y experiencia para alcanzarlos. Hace 30 años llegué al más alto rango del Servicio Exterior, el de embajador, y mi gran compromiso ha sido siempre trabajar en lo que me indiquen el presidente y el canciller de la República, en cumplir mis tareas y servir a mi país. RS. ¿Qué recomendaciones daría a los jóvenes que están interesados en desarrollar una carrera diplomática? APB. Una carrera diplomática es una carrera para toda la vida. Lo primero que tiene uno mismo que definir es si uno está seguro de querer dedicarse a esta actividad toda la vida, o gran parte de ella. Si la respuesta es que sí, entonces hay que cultivar talentos y capacidades indispensables, como la disciplina, el estudio, la lectura, la oratoria, los idiomas. Se debe de aprender a adaptarse a todo tipo de ambientes y circunstancias; estar abiertos a nuevas ideas, nuevas culturas, nuevas maneras de hacer las cosas, y como lo mencioné en una respuesta anterior se debe de tener “una pasión irrevocable por México, lealtad, honestidad, tenacidad, perseverancia, equilibrio, comprensión, paciencia, curiosidad, orgullo, y un optimismo infinito”.
Entre valores y deberes Carlos Gil*
A
partir de las recientes movilizaciones y eventos de protestas motivadas por innumerables demandas sociales en distintos puntos del país, se ha ubicado en el centro del debate la cuestionable eficacia con que los elementos de las corporaciones de seguridad, tanto estatales como federales, ejercen los distintos protocolos de actuación policial para garantizar la paz y orden público.
las voces a favor de los derechos de las y los policías que con esfuerzo, dedicación y una verdadera vocación de servicio están dispuestos a enfrentar el rechazo de algunos que creen que es una obligación solapar el vandalismo y actos de violencia de una cobarde minoría capaz de trasgredir la legalidad distorsionando cualquier forma legítima de expresión de la voluntad soberana del pueblo.
Con una imagen institucional cada vez más desgastada por los escasos resultados obtenidos a través de la estrategia nacional de seguridad, sumado a las constantes denuncias de abuso policial y uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones públicas, las policías enfrentan el enorme desafío de ganar la confianza social que permita construir puentes para incentivar la participación ciudadana a favor de la seguridad pública.
Nos hemos olvidado de que las y los policías son seres humanos, padres de familia, hijas, hijos, hermanos; de carne y hueso con sentimientos y emociones que tienen plena libertad de empatizar o no con las protestas contra la injusticia y la violencia en sus distintas formas de manifestación, pero que también cumplen a cabalidad con las funciones encomendadas. Vaya lucha moral y ética a la que son sujetos nuestros policías.
Claro está que cualquier acto de represión, violación a los derechos humanos, autoritarismo y uso excesivo de la fuerza por parte de los funcionarios de la seguridad debe ser sancionado de forma inmediata conforme a la normatividad correspondiente, sin embargo, pocas son
De ahí que, casos como el de las integrantes del Grupo Atenea de la Unidad Táctica de Auxilio a la Población de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, conformado por mujeres, jefas de familia, esposas y profesionistas que trabajan para garantizar la seguridad de la ciudadanía en mani-
festaciones, marchas y concentraciones masivas; o las historias de los elementos de la Guardia Nacional desplegados en la frontera norte y sur para contener las caravanas de migrantes, sean un claro ejemplo de cómo la vocación y la disciplina son la base para desempeñar la función policial, incluso a costa de ideología y valores individuales. Entre la infinidad de historias y vivencias de quienes han estado al frente de batalla, me resulta difícil imaginar lo que debió ser para las mujeres integrantes del Grupo Atenea escuchar las historias y demandas por injusticia y violencia de las víctimas en pie de lucha. Difícil debe ser para una policía estar en protesta permanente por visibilizar sus derechos en una profesión dominada por hombres. Difícil debió ser contener una marcha legítima y ser trasgredida por otras mujeres, ya que mientras ejercía sus funciones a cabalidad para prevenir y contener cualquier manifestación de violencia, en su interior enfrentaba una lucha emocional e ideológica porque aquellas manifestantes entendieran que también ella estaba en protesta. De igual forma, difícil debe ser para las y los integrantes de la Guardia
Nacional sostener la mirada desbordada por la angustia y el miedo de niñas y niños migrantes aferrados al cuello de sus padres mientras son bajados del tren que los lleva a cumplir el tormentoso sueño americano. Inevitable debe ser no sentirse afortunados por tener a sus familias en casa, pero al mismo tiempo enfrentar la frustración y tristeza por aquellas personas desconocidas que día a día arriesgan su vida en busca de un mejor futuro. Nadie deja su casa, familia, amigos y su país sin ningún motivo de fondo. Ser policía es un verdadero honor. Ejercer una profesión que defiende los valores sociales, lucha por el respeto y la convivencia pacífica de los ciudadanos y que está al servicio de la patria y la sociedad, exige un compromiso y vocación permanente para desempeñar el trabajo con sacrificio y entrega. Estos servidores públicos nos demuestran día con día que son los pequeños actos de amor, honestidad y gentileza los que producen grandes transformaciones sociales a cambio de fomentar y construir una cultura de respeto a las instituciones de las fuerzas del orden y la seguridad para beneficio de todos.
POLÍTICA
Comunicación
*Carlos Gil es economista egresado del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. En 2006 cursó el posgrado en Economía, Derecho y Políticas Públicas con especialidad en Análisis Económico del Derecho en la Universidad Complutense de Madrid y el Instituto de Investigación Ortega y Gasset. En 2008 obtuvo el grado de Maestro en Administración Pública por la Universidad de Salamanca de España. Cuenta con diversos diplomados y cursos de especialización en materia de seguridad pública, en Mando Policial, así como en Alta Dirección. Sus áreas de especialidad son gerencia policial, economía de la seguridad pública, y proximidad e inteligencia social. Fue condecorado con la mención honorífica por su destacado liderazgo en las acciones de rescate durante los sismos de septiembre de 2017 y con la condecoración al mérito social por la autoría, diseño e implementación del Programa de Jubilación de Elementos Caninos de la Policía Federal, orientado a reconocer y dignificar la labor y la vida animal. @CGilPartearroyo
Los retos de la COFECE en el próximo decenio Armando Hernández*
L
a Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) creada en 1992, y que adquirió su actual naturaleza jurídica como organismo constitucional autónomo (OCA) en la reforma de 2013, es el organismo rector de las políticas públicas del Estado mexicano en la materia, con excepción de lo relativo al sector de telecomunicaciones. Pese a su aún corta historia dentro del modelo constitucional mexicano, la COFECE ha tenido importantes avances y tiene frente a sí muchos retos en la próxima década, entre otros, los siguientes: Esta Comisión podría pasar de ser una instancia técnica en materia económica, a consolidarse como una institución más cercana a las personas. Si bien uno de sus principales objetivos es la eliminación de prácticas monopólicas, también es importante su contribución en la percepción social del modelo de economía mixta previsto en la Constitución mexicana, mediante la elaboración de propuestas de simplificación administrativa para fomentar la competencia económica, facilitando la intervención del
mayor número de personas en el mercado. Ello implica un rediseño institucional y la incorporación de nuevos estándares para la evaluación de su desempeño institucional. Para ello, debe estimarse la conveniencia de convertir a la institución en un organismo protector del derecho humano individual conocido como libertad de concurrencia económica, previsto en el artículo 28 constitucional; para lo cual tendría la necesidad de adoptar criterios y prácticas propios de una institución con el carácter de “ombudsman administrativo” conforme a los criterios propios de ese modelo. Asimismo, es importante consolidar su labor en el nivel de pymes, debido a que las prácticas monopólicas también afectan sensiblemente a este sector económico, y es en el que puede ser más notorio el impacto de las medidas tomadas por el Estado, a través de esta institución, dentro de la economía familiar. También resultaría de gran utilidad tomar medidas adicionales para transitar del modelo de análisis cuantitativo a la percepción cualitativa de la problemática social asociada a las dificultades de com-
petencia económica, apoyando e incrementando la investigación social multidisciplinaria que aporte nuevos enfoques a la solución y la identificación de nuevos problemas sociales a resolver, y no solo de carácter económico. Lo anterior, permitiría incrementar la interacción, vinculación y participación social, para mejorar los niveles de legitimidad institucional que en estas épocas resulta tan necesario. Explicar al mayor número de personas qué es y qué hace la COFECE, no solo con infografías en Internet, sino de forma tal que se logre comunicar satisfactoriamente la importancia del organismo y la utilidad de cada peso del presupuesto público que se invierte en su funcionamiento, con indicadores y metas evaluables periódicamente. Asimismo, implementar medidas inmediatas de racionalidad en el ejercicio del gasto público, así como en su funcionamiento. El actual perfil de la institución podría parecer un tanto lejano a los intereses económicos inmediatos de las personas, concentrándose más en el impacto general que las medidas tomadas pudieran tener en las variables macroeconómicas.
Eso no significa que la COFECE no tenga atribuciones ni tome medidas que benefician directamente a la sociedad en temas de competencia económica, a nivel micro. Sin embargo, su vocación y diseño institucional tienden a evitar concentraciones en la toma de decisiones económicas por agentes que impactan las variables económicas del país, para mejorar las condiciones de competencia. Entre otros aspectos, debe resaltarse que su personal se encuentra altamente calificado y especializado en temas económicos, sin considerarse la necesidad ampliar su visión institucional un poco más allá del mismo sector desde el que se han venido tomando las decisiones y controlando las variables económicas del país en las últimas décadas. Por ello, resultaría sumamente oportuno afrontar el reto de incorporar nuevas perspectivas epistémicas al desempeño institucional de esta importante comisión.
Flor de Loto: ¿Outsider o stablishment?
POLÍTICA
DEMO C R A C I A &
*Armando Hernández Estudió en la Universidad Nacional Autónoma de México; es Licenciado, Maestro y Doctor en Derecho, con Especialidad en Derecho Constitucional, Derechos Humanos y Derecho Administrativo; ha ocupado diversos cargos en el Instituto Electoral del Distrito Federal y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Ha sido catedrático, instructor, conferencista y miembro de diferentes asociaciones vinculadas a la materia de Derecho, Derechos Humanos y Procesos Parlamentarios, también ha publicado artículos en DDHH. Ha sido y Magistrado del TEDF. Actualmente es profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM, así como de varias universidades del país, @DrArmandoHdz
Nuevos partidos políticos en México Enrique Paz*
L
os partidos políticos nunca han gozado de buena reputación política, pero hasta ahora no existe un modelo distinto que prescinda de estas organizaciones para obtener el poder político en las democracias representativas. Considerados un mal necesario para la democracia contemporánea, la desconfianza ciudadana prima sobre los partidos políticos. En México, la transición y consolidación de nuestra incipiente democracia no puede entenderse por el rol que han jugado los partidos políticos desde la década de los noventa. Fueron estas organizaciones políticas quienes acordaron las fases de liberalización democrática a partir de incorporar factores de competencia y competitividad a los procesos electorales que llevaron a una mayor pluralidad política y alternancia en las estructuras de gobierno y legislativas. Las reformas electorales que contribuyeron a aumentar la pluralidad y competitividad fueron acordadas por tres partidos políticos, el entonces partido hegemónico el Revolucionario Institucional (PRI) y los principales partidos de oposición, Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD). En la medida que aumentaba la disputa y el conflicto por el poder político, las reformas electorales fueron incrementando las regulaciones y restricciones a los partidos políticos. La fiscalización de los recursos, el modelo de comunicación política, la transparencia de la información y la democracia interna se convirtieron en materias tuteladas por el Estado mexicano a fin de que los partidos políticos respondieran a los preceptos legales como entidades de interés público. De manera paulatina, los partidos políticos en México dejaron de ser organizaciones de par-
ticipación política de la ciudadanía para convertirse en instancias estatales que responden a las coyunturas políticas e intereses de los grupos de poder. El pasado 14 de octubre se cerró un capítulo más en la historia de la creación de partidos políticos en México. La decisión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) de revocar la decisión del Instituto Nacional Electoral (INE) y otorgar el registro a dos nuevas organizaciones partidistas (Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México) y refrendar su decisión de reconocer el registro a una tercera (Encuentro Solidario); así como validar la negativa de otras cuatro más (México Libre, Grupo Social Promotor, Alternativa y Súmate a Nosotros). La polémica decisión de aceptar a unos y dejar fuera a otros con criterios legales controvertibles para los afectados, abre nuevamente el debate sobre el proceso de creación de nuevos partidos políticos y sus implicaciones en el sistema de partidos. Por un lado, la ciudadanía se manifiesta –en general- en contra de que se incorporen nuevos actores a los procesos electorales. Por otro lado, hay quienes piensan que los actuales partidos han dejado de representar los intereses de la ciudadanía y, por ello, es necesario ampliar las alternativas y opciones políticas. Quienes critican el número de partidos existentes basan su rechazo en el presupuesto público que reciben cada año para sus actividades ordinarias o financiamiento en las campañas electorales sean federales o locales. Esta situación ha puesto sobre la mesa la pertinencia de continuar con un modelo de financiamiento público a los partidos que prevalece desde la década de los setentas del siglo pasado. No
falta razón a quienes cuestionan que dichos recursos deberían ser destinados a otras prioridades del gasto público en lugar de “mantener” a burocracias partidistas sin “oficio” ni “beneficio”. Más aún en la situación actual de crisis económica derivada de la pandemia en el mundo. Por otra parte, hay un sector que defiende el modelo de financiamiento público argumentando que eliminar estos recursos o limitarlos puede generar inequidad en la contienda electoral. Las organizaciones partidistas que dependan en mayor medida del financiamiento privado de sus simpatizantes o militantes responderán a intereses económicos de sus “patrocinadores” y no al interés general. El peor escenario es que en un esquema en el que prevalezca el financiamiento privado, los recursos de los particulares tengan orígenes ilícitos o sirvan para actividades vinculadas al crimen organizado. En el centro de la crítica y rechazo a la creación de nuevos partidos políticos está la discusión sobre el financiamiento público. Ello nos lleva a discutir si el modelo actual para el ingreso de nuevos actores al sistema de partidos debe cambiar a fin de que el incentivo principal sea el respaldo electoral y no los recursos que deben otorgarse a las nuevas organizaciones partidistas. El actual modelo para crear partidos genera vicios e inercias de una pobre cultura democrática en el país, en el que prevalecen prácticas que van desde la coacción hasta la distribución de prebendas en el que terminan prevaleciendo los grupos de interés (empresariales, gremiales o religiosos) o la conveniencia del poder estatal. Pero tampoco puede cancelarse la oportunidad de que agrupa-
ciones ciudadanas busquen ampliar la oferta partidista y obtener el aval de la autoridad electoral para participar en las elecciones. La configuración del sistema de partidos en una democracia debe responder a un solo factor: el voto popular. Los criterios de una reforma en este sentido deberían flexibilizar los requisitos de entrada al sistema de partidos y, al mismo tiempo, restringir las prerrogativas a los nuevos actores. En la medida en que disminuyan los incentivos del financiamiento público a los nuevos partidos políticos, menor será el beneficio que reciban aquellas organizaciones que buscan ingresar al sistema partidario por razones económicas. Si bien sería inequitativo retirar todo el financiamiento público a los recién llegados, podría invertirse la proporción con las fuentes de recursos privados (70% privado, 30% público tanto para actividades ordinarias como campañas electorales). El riesgo sobre el origen del dinero deberá observarse a partir de los sistemas de monitoreo con los que ya se cuenta, tanto en las autoridades electorales (órganos de fiscalización del INE), fiscales (Sistema de Administración Tributaria) y hacendarias (Unidad de Inteligencia Financiera). De igual forma, deberá revisarse la vinculación entre el porcentaje mínimo de votación para mantener el registro con el otorgamiento de financiamiento público. Actualmente el registro se refrenda con el 3% de la votación válida (a la votación total emitida se le restan los votos nulos y de los candidatos no registrados) y, con ello, se accede no solo a la representación legislativa, sino a las prerrogativas a los que tienen derechos los partidos políticos para un periodo de al menos 3 años, que es el periodo entre una elección federal.
POLÍTICA
Comunicación
*Enrique Paz es politólogo y Maestro en Estudios Políticos y Sociales por la UNAM. Experto en asuntos legislativos, proceso electoral y partidos políticos. Consultor político y asesor en la Secretaría de Educación de la Ciudad de México. Fue coordinador de asesores del Grupo Parlamentario Nueva Alianza en la Cámara de Diputados en la LXII Legislatura. Consejero Electoral Distrital del entonces Instituto Federal Electoral (hoy INE) en los procesos electorales de 2000, 2003 y 2006. Participó como consultor político en campañas electorales de presidentes municipales y diputados federales. Ha sido profesor en los diplomados impartidos por el Instituto Ortega y Gasset en México en materia Educativa y Transparencia y Acceso a la Información. @jepp_79
Retos y perspectivas en la integración del INAI Ileana Hidalgo*
E
n el mes de mayo de 2020 quedaron vacantes dos cargos en el Pleno del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información, y Protección de Datos Personales. El proceso de selección para ocupar ambas vacantes inicio en el mes de marzo de este año, sin embargo, debido a la contingencia sanitaria con motivo del COVID-19, el proceso de renovación de dichos cargos fue interrumpido, reanudándose apenas en el mes de octubre de este año. A la convocatoria acudimos 38 personas, 11 mujeres y 27 hombres, con experiencia y trayectoria en la materia, y con el ánimo y convicción de aportar en la construcción de un nuevo rostro para dicha institución. Dentro de ese ejercicio, tuve el honor y la oportunidad de ser entrevistada vía remota, por senadoras y senadores integrantes de las Comisiones Unidas de: Anticorrupción, Transparencia y Participación Ciudadana; y de la Comisión de Justicia de la Cámara Alta. Además de agradecer la oportunidad que me brindaron de poder participar en dicho ejercicio de parlamento abierto y transparencia, tuve la oportunidad de exponer ante ellos dos breves apartados: El primero, sobre lo que considero que debe ser el perfil y experiencia profesional para ocupar tan elevado encargo, y el segundo, sobre algunas propuestas y acciones concretas para el fortalecimiento Institucional del INAI. En lo personal, llevo los últimos 11 años de mi trayectoria profesional trabajando temas de transparencia y protección de datos personales desde diversas trincheras: Tanto en los organismos garantes a nivel nacional y local en el INFODF y en el INAI; y actualmente, desde la perspectiva de sujeto obligado en mi función como coordi-
nadora general de la Unidad de Transparencia en el Senado de la República, lo que me ha permitido conocer distintas perspectivas del manejo de estos temas. Asimismo, he tenido la oportunidad de realizar actividades académicas así como diversas publicaciones sobre temas de transparencia, protección de datos personales y el combate a la corrupción. Entre los criterios de evaluación establecidos por las comisiones respectivas, también se consideró útil y relevante la participación previa en órganos colegiados de toma de decisiones y la vinculación con instituciones académicas y organizaciones sociales. En la citada entrevista, además, manifesté que en mi actual función al frente de la Coordinación General de la Unidad de Transparencia, se han logrado disminuir los índices de impugnación, es decir de las 1098 solicitudes de transparencia recibidas durante el 2º año legislativo de la 64 Legislatura, solo 53 respuestas fueron recurridas, de las cuales, el INAI: • • • •
nos confirmó 27; sobreseyó 20; 3 se encuentran pendientes de resolución y únicamente nos modificó 3 respuestas
Además, en materia de Capacitación conseguimos que el 100% de la estructura acreditara ante el INAI, sus cursos de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública y Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados. Y obtuvimos la calificación del 100% en cumplimiento de Obligaciones de Transparencia, calificación que refrendaremos en el año 2020. Estos Resultados se han logrado gracias al gran compromiso institucional de esta Cámara de
Alta como Sujeto Obligado frente al reto que trae consigo la transparencia y el combate a la corrupción. Señalé que en el caso de que esa Cámara tuviera a bien considerar mi perfil para incorporarme al órgano garante nacional; buscaría que todos los Sujetos Obligados implementaran medidas similares con la mismas tasas de éxito. Ahora bien, para la referida convocatoria presenté un plan de trabajo que contiene propuestas y acciones concretas distribuidas en ejes estratégicos que en caso de ser favorecida con la designación plantearía incorporar a los trabajos del INAI: En dicho plan resaltaron propuestas como: Primera: La creación de la Escuela de Transparencia y Protección de Datos Personales; a efecto de pasar de la simple capacitación a la formación integral al interior y exterior de la institución, y lograr por primera vez que el INAI imparta licenciaturas y posgrados en transparencia y protección de datos. Segunda: Mejorar la asequibilidad de la PNT para facilitar su uso; mediante la indexación de información por “dato” en lugar de “listados”, de tal forma que cualquier persona, pueda tener acceso a la información requerida en cualquier buscador comercial. Tercera: Incrementar la vinculación con la sociedad civil y los distintos grupos sociales como niños, niñas y adolescentes, adultos mayores y personas en situación de pobreza para la promoción, difusión y defensa de la transparencia, y la protección de datos personales como derechos humanos universales. Cuarta: Coordinación con el Legislativo para la mejora regulatoria con la finalidad de que la
transparencia se vuelva una herramienta útil y eficaz en el combate a la corrupción. Cabe señalar que desde la emisión de la primera Ley en 2002, ha habido grandes avances en materia de transparencia. Sin duda es un camino que se ha recorrido de manera lenta pero constante, hoy todo servidor público en los tres niveles de gobierno sabe que la ciudadanía está ahí, fungiendo como un fiscalizador social del ejercicio público. Nuestro país tiene importantes retos en estas materias, los logros alcanzados aún no son suficientes, hay nuevos desafíos en miras del fortalecimiento del derecho de acceso a la información y de la protección de datos personales. Debemos fortalecer estos derechos humanos, desde la función del INAI, mediante acciones que favorezcan a todos los sectores sociales. El INAI es más que un órgano administrativo que emite resoluciones a los recursos de revisión. Su vocación es la de una institución que construye políticas públicas en materia de gobierno abierto y protección de datos, que promueve, difunde y protege los derechos humanos de la transparencia, la rendición de cuentas y la protección de datos personales, y es esa vocación la que debemos potencializar en beneficio de la sociedad y del fortalecimiento democrático del Estado mexicano. Al momento de escribir este artículo, no ha sido tomada la decisión en el Pleno del Senado. Sin embargo, más allá de la designación que realice el Senado de la República para la integración de dicho órgano, lo cierto es que esta ha sido una experiencia enriquecedora desde distintos puntos de vista, y es mi intención agradecer todo el apoyo, solidaridad y muestras de afecto recibidas en el proceso.
DERECHOS HUMANOS
POLÍTICA &
*Ileana Hidalgo es Licenciada, Maestra y Doctora en Derecho, con especialidad en Derechos Humanos por la Universidad Castilla la Mancha, en España y maestria en Argumentación Juridica por las universidades de Alicante, España y Palermo Italia. Es Directora de Auditoría Interna en el INAI, dentro del IEDF ha sido Directora de Organizaciones de Representación Ciudadana y Presidenta del Comité Derechos Humanos “Nuestros Amigos A.C.” También ha sido investigadora en el Instituto de Investigaciones Legislativas del Senado de la República “Belisario Domínguez”. Es conferencista a nivel nacional e internacional y también docente en varias universidades del país. Actualmente es Titular de la Unidad de Transparencia del Senado de la República. @IleanaHidalgoR
Mecanismos de democracia directa en la CDMX Moisés Vergara*
L
a Ciudad de México se ha caracterizado por ser pionera en el país en diversos temas. Hoy comentaremos sobre los mecanismos de democracia directa.
El artículo 25 de la Constitución Política capitalina establece que la ciudanía tiene el derecho y el deber de participar en la resolución de problemas y temas de interés general y en el mejoramiento de las normas que regulan las relaciones en la comunidad, a través de los mecanismos de democracia directa y participativa reconocidos por dicha Constitución. En ese sentido, la democracia participativa es entendida como el derecho de las personas a incidir, individual o colectivamente, en las decisiones públicas y en la formulación, ejecución, evaluación y control del ejercicio de la función pública, en los términos que las leyes señalen. Iniciativa ciudadana En el caso de la iniciativa ciudadana, la Constitución local reconoce el derecho de la ciudadanía a iniciar leyes y decretos, incluidas reformas a la misma, todo ello ante el Congreso de la Ciudad de México, el cual establecerá una comisión para su debido procesamiento. Los proyectos deberán contar con las firmas de al menos el cero punto trece por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores de la Ciudad de México, y el Congreso resolverá sobre la procedencia de la solicitud en un plazo no mayor de quince días hábiles, aclarando que este mecanismo no procede en materia penal, tributaria y en ninguna materia que contravenga los derechos humanos; y que tendrá el carácter de preferente aquella iniciativa que cuente con al menos el cero punto veinticinco por ciento de las firmas de las personas inscritas en la lista nominal de electores y que sea presentada el día de la apertura del periodo ordinario de sesiones.
Referéndum Por lo que respecta al referéndum, la Constitución reconoce el derecho ciudadano a aprobar, mediante dicho mecanismo, las reformas a la Constitución, así como a las demás disposiciones normativas de carácter general que sean competencia del Congreso capitalino, a solicitud de: a) Al menos el cero punto cuatro por ciento de la ciudadanía inscrita en la lista nominal de electores; y b) Dos terceras partes de las y los integrantes del Congreso. Al igual que en la iniciativa ciudadana, las decisiones legislativas en materia de derechos humanos, penal o tributaria, no podrán ser sometidas a referéndum. Plebiscito En cuanto al plebiscito, la ley fundamental local también reconoce el derecho de la ciudadanía a ser consultada para aprobar o rechazar decisiones públicas que sean competencia del Poder Ejecutivo de la Ciudad o de las alcaldías, a solicitud de: a) Al menos el cero punto cuatro por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores del ámbito respectivo; b) La persona titular de la Jefatura de Gobierno; c) Una tercera parte de las y los integrantes del Congreso; y d) Las dos terceras partes de las alcaldías. Las decisiones en materia de derechos humanos, penal, tributaria y fiscal tampoco podrán ser sometidas a plebiscito. Consulta ciudadana Por lo que hace a la consulta ciudadana, a través de este instrumento, las autoridades pueden someter a consideración de la ciudadanía, cualquier tema que tenga impacto trascendental en los distintos ámbitos temáticos o territoriales de la Ciudad. La consulta ciudadana podrá ser solicitada por al menos el dos por ciento de las personas inscritas en el listado nominal del ámbito territorial correspondiente.
Consulta popular Al igual que los anteriores mecanismos, la ciudadanía tiene derecho a la consulta popular sobre temas de trascendencia de la Ciudad. La consulta será convocada por el Congreso a solicitud de: a) Al menos el dos por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores de la Ciudad; b) La persona titular de la Jefatura de Gobierno; c) Una tercera parte de las y los integrantes del Congreso; d) Un tercio de las alcaldías; e) El equivalente al diez por ciento de los Comités Ciudadanos o las Asambleas Ciudadanas; y f) El equivalente al diez por ciento de los pueblos y barrios originarios y comunidades indígenas residentes. Un aspecto interesante es que la consulta popular se deberá realizar el mismo día de la jornada electoral local; y ningún otro instrumento de participación ciudadana podrá llevarse a cabo cuando exista proceso electoral en la Ciudad de México. Siguiendo con la lógica de los demás mecanismos, tampoco podrán ser objeto de consulta popular las decisiones en materia de derechos humanos, penal, tributaria y fiscal. Revocación del mandato La Constitución prevé que la ciudadanía tiene derecho a solicitar la revocación del mandato de representantes electos cuando así lo demande al menos el diez por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores del ámbito respectivo; y dicha consulta para la revocación del mandato sólo procederá una vez, cuando haya transcurrido al menos la mitad de la duración del cargo de representación popular de que se trate. Vinculatoriedad Por lo que respecta la vinculatoriedad del referéndum, plebiscito, consultas ciudadanas y revocación de mandato, la ley fundamental local establece los siguientes criterios:
1. Los resultados del referéndum y plebiscito serán vinculantes cuando cuenten con la participación de al menos la tercera parte de las personas inscritas en el listado nominal de electores del ámbito respectivo. 2. Las consultas ciudadanas serán vinculantes cuando cuenten con la participación de al menos el quince por ciento de las personas inscritas en el listado nominal de electores del ámbito respectivo. 3. En el caso de la revocación del mandato, sus resultados serán obligatorios siempre que participe al menos el cuarenta por ciento de las personas inscritas en el listado nominal de electores del ámbito respectivo y que de éstas el sesenta por ciento se manifieste a favor de la revocación. Organización, desarrollo, cómputo y declaración de resultados En los casos de referéndum, plebiscito, consulta popular, iniciativa ciudadana, consulta ciudadana y revocación de mandato, el Instituto Electoral de la Ciudad de México es el encargado de vigilar el cumplimiento y acreditación de los requisitos y plazos para que se lleven a cabo, y será responsable de la organización, desarrollo, cómputo y declaración de resultados, de conformidad con lo que establezca la ley. Como puede verse, los mecanismos de democracia directa son muy importantes y en la Ciudad de México están garantizados a nivel constitucional, por ello debemos conocerlos y difundirlos para estar en aptitud de ejercerlos.
LEYES & POLÍTICA
*Moisés Vergara, es Licenciado, Maestro y Doctor en Derecho y Especialista en Derecho Electoral, cuenta con estudios de especialización en derechos fundamentales en la Universidad Carlos III de Madrid, España y con diversos diplomados en trasparencia, derecho electoral, argumentación e interpretación jurídica. Ha sido profesor universitario y cuenta con artículos y ensayos publicados. Entre otros cargos públicos fue asesor y secretario particular en la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión; Secretario Técnico Jurídico, Secretario de Consejo Distrital, Asesor de la Secretaría Ejecutiva y Asesor de Consejero Electoral en el Instituto Electoral del Distrito Federal. En el Tribunal Electoral del Distrito Federal, hoy de la Ciudad de México, se desempeñó como Secretario Auxiliar, Secretario de Estudio y Cuenta, Coordinador de Ponencia de dos Magistrados Presidentes, Secretario Administrativo, Secretario General, titular de la Unidad de Estadística y Jurisprudencia y Contralor Interno del Tribunal Electoral capitalino. Actualmente es analista, consultor y asesor jurídico.
Consideraciones sobre el registro de nuevos partidos políticos Carlos Ezeta*
D
e acuerdo con la Constitución Federal, los partidos políticos son entidades de interés público que tienen como fin primordial: 1. Promover la participación del pueblo en la vida democrática; 2. Fomentar el principio de paridad de género; 3. Contribuir a la integración de los órganos de representación política: y, 4. Hacer posible el acceso de la ciudadanía al ejercicio del poder público. Bajo esta perspectiva, y sin obviar la importancia de la reincorporación en 2012 de las candidaturas independientes a la ley fundamental, el sistema de partidos ha contribuido a la consolidación del régimen democrático en México. Más allá de si los propios partidos cumplen a cabalidad con el fin constitucional que se les encomendó, su existencia es condición necesaria para la subsistencia de la democracia en nuestro país. El problema radica, más bien, en el grado en que los partidos ajustan su actuación a los parámetros constitucionales y legales establecidos por el marco jurídico que los regula; parámetros que, no en pocas ocasiones, son vulnerados por aquellos a fin de conservar o acceder al poder político. No obstante, partiendo de la relevancia del papel que juegan los partidos políticos en el sistema electoral mexicano y que actualmente se encuentra en curso el Proceso Electoral Federal 2020-2021 —en el que, entre otras cuestiones, se renovará la totalidad de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión—, resulta indispensable que la ciudadanía conozca las opciones políticas a elegir, a efecto de ejercer el derecho fundamental del voto de manera razonada. Así, el sistema de partidos en México ha estado integrado por distintos institutos políticos a
lo largo de la historia; entre los cuales, debido al apoyo ciudadano con el que cuentan o han contado desde su aparición —apoyo que se evidencia con la circunstancia de que, desde dicha aparición, ninguno de ellos ha perdido su registro como partido—, destacan el Partido Revolucionario Institucional, el Partido Acción Nacional, el Partido de la Revolución Democrática y el Partido Morena. Sin embargo, el sistema de partidos también se ha conformado por otros institutos políticos cuya existencia contribuye a la competencia democrática que debe acontecer en todo proceso electoral, y que se traducen en una opción política adicional para el electorado. De tal suerte, el 14 y 15 de octubre de este año, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emitió diversas sentencias en las que confirmó o revocó la procedencia o negativa del Instituto Nacional Electoral de otorgar el registro como partidos políticos nacionales a distintas organizaciones ciudadanas; lo que, posteriormente, concluyó con el reconocimiento del registro de los ahora partidos denominados Encuentro Solidario, Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México. Sobre el particular, es interesante analizar los aspectos principales que se estudiaron en estos fallos; análisis que podría agruparse en los siguientes temas: 1. Laicidad; 2. Gremios sindicales; y, 3. Origen ilícito de aportaciones. Por lo que hace al Partido Encuentro Solidario, se controvirtió la resolución dictada por el Instituto Nacional Electoral que determinó la procedencia de su registro; ello, entre otras cosas, bajo el argumento de que existió la participación de personas ministras de culto en el procedimiento de conformación de ese partido, vulnerando el principio de laicidad en el que se establece la separación entre el
@LicEzetaMacias
Estado y la Iglesia. Al respecto, la Sala Superior resolvió que, si bien se acreditó la intervención de personas ministras de culto en 15 asambleas celebradas para la constitución del partido en cuestión, lo cierto era que la invalidez de tales asambleas no era factor suficiente para decretar la improcedencia del registro, toda vez que el resto de las asambleas válidas alcanzaba el número requerido para otorgar la calidad de partido político. Postura que, en mi concepto, resulta acorde con la protección del derecho fundamental de asociación política de todas las personas que libremente participaron en las asambleas calificadas como válidas por la autoridad administrativa electoral; sobre todo, tomando en consideración la dificultad de comprobar el grado de afectación general que puede traer aparejada la intervención religiosa en el caso concreto. Con relación al Partido Redes Sociales Progresistas, la Sala Superior revocó la negativa de otorgar el registro a dicho partido y, en consecuencia, ordenó al Instituto Nacional Electoral la emisión de una nueva resolución en la que se pronunciara sobre la procedencia del registro. En lo que interesa, la Sala consideró que la conclusión del Instituto relativa a la intervención del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación en el procedimiento de obtención de registro del citado partido fue incorrecta, pues no existían elementos para tener por acreditada la participación directa del Sindicato; además de que la coincidencia entre el carácter de miembro sindical y a su vez afiliado del partido, no es suficiente por sí misma para concluir la intervención en comento. Así, tal como aconteció con el primer tema — influencia religiosa—, se protegió el derecho a la asociación política de los miembros sin-
dicales; aunque a diferencia de aquel, considero que en este último asunto existían varios indicios sobre la intervención sindical que pudieron ser motivo de pronunciamiento por parte de la Sala, sin que ello implicara el acreditamiento de esa intervención. Finalmente, en cuanto al Partido Fuerza Social por México, la Sala Superior también ordenó al Instituto Nacional Electoral que emitiera una nueva resolución en la que estudiara el registro de este instituto político, debido a que, si bien pudieron existir aportaciones de personas no identificadas, le correspondía a la autoridad administrativa destruir la presunción de licitud sobre esas aportaciones, con la finalidad de determinar si su origen era ilegal. Determinación que, desde mi perspectiva, refleja nuevamente el problema sobre la acreditación de la irregularidad correspondiente. Así las cosas, en este proceso electoral participarán diez partidos políticos nacionales —a los siete mencionados en este artículo, se suman el Partido del Trabajo, el Partido Verde Ecologista de México y el Partido Movimiento Ciudadano—, respecto de los cuales, es necesario conocer sus ideologías y propuestas para que la ciudadanía elija las mejores opciones. Es cierto que los partidos no siempre cumplen con las expectativas del pueblo, pero también es responsabilidad de todas las personas emitir un verdadero voto razonado; a fin de cuentas, no se debe olvidar que el apoyo ciudadano es el factor determinante para la conservación del registro de los partidos políticos.
REFERENCIAS 1. https://www.te.gob.mx/buscador/. 2. https://www.ine.mx/actores-politicos/partidos-politicos-nacionales/.
ELECCIONES
*Carlos Ezeta es Licenciado en Derecho por la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México; con estudios de Especialización en Derecho Civil y estudios de Maestría en Derecho Electoral por la Escuela Judicial Electoral del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Cuenta con diversos cursos y diplomados, entre ellos, Diplomado en Análisis Político Estratégico por el Centro de Investigación y Docencia Económicas. Actualmente se desempeña como Secretario Auxiliar en el Tribunal Electoral de la Ciudad de México, en el que en 2019 obtuvo la incorporación a la lista de personas habilitadas para el cargo de Secretario de Estudio y Cuenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
La voz de la ciudadanía: Chile y Tailandia Gema Morales*
L
uego del año poco convencional que hemos vivido y en medio de la pandemia internacional por COVID-19, los movimientos sociales adoptan un papel relevante en la esfera pública. La ciudadanía alza la voz para exigir cambios y justicia social ante el frágil papel del Estado para garantizar el respeto a los derechos civiles. Tal es el caso de Chile y Tailandia, dos países en continentes distintos, que comparten importantes procesos sociales y políticos.
ciembre de 2019 la convocatoria. Sin embargo, la pandemia del COVID-19 obligó a cambiar la fecha. Igualmente, el Servel ha tenido la responsabilidad de garantizar un proceso transparente, al tiempo de procurar la salud de los chilenos en medio de la pandemia. Para ello, Servel declaró que se aumentaron los centros de votación para evitar aglomeraciones, cada persona podría llevar su lápiz o bolígrafo azul para efectuar su voto y, por supuesto, sería obligatorio el uso de cubrebocas.
Derivado de varios días de manifestaciones, que tuvieron lugar en octubre de 2019 en Chile, iniciadas principalmente por estudiantes tras el incremento en las tarifas al sistema público de transporte, así como por las demandas a la redacción de una nueva Constitución - misma que la ciudadanía chilena califica como ilegítima al haber sido redactada durante el régimen de Pinochet -, y a la creciente desigualdad que aqueja al citado país; un acuerdo entre partidos políticos llevó a la realización de un plebiscito nacional el pasado domingo 25 de octubre, en el que la ciudadanía debía indicar si aprueba o rechaza iniciar con el proceso para conformar una nueva Constitución. Cabe destacar que no ha habido un plebiscito en Chile desde 1989, por lo cual una gran parte de la ciudadanía iría por primera vez a las urnas a votar en un ejercicio de esta naturaleza.
Además, se habilitó un horario especial para que adultos mayores acudiesen a votar y se amplió el horario de votación hasta las ocho de la noche. En cuanto a la dinámica de votación, esta sería la misma. Las personas encontrarían dos boletas, una con la pregunta: ¿Quiere usted una Nueva Constitución? Con las opciones de “Apruebo” y “Rechazo” y otra con la pregunta: ¿Qué tipo de órgano debiera redactar la Nueva Constitución? Con las opciones de “Convención Mixta Constitucional” y “Convención Constitucional”.
El Servicio Electoral de Chile (Servel), encargado de la organización y ejecución del mecanismo de democracia directa, el cual estaba contemplado para el 26 de abril del presente año, promulgó en di-
Los resultados con 50.9%, la participación más alta que ha tenido este país, arrojaron un contundente 78% a favor de una nueva Constitución y un 79% a favor de que sea redactada por Convención Constitucional, es decir, por un grupo de 155 ciudadanos y ciudadanas que serán electas por votación, por primera vez de manera paritaria y con representación de pueblos indígenas, en abril próximo. Chile ha vivido un plebiscito calificado como histórico, ha sido el primer paso en el camino que deberá recorrer a fin de lograr una Constitu-
ción ciudadana, democrática, incluyente y paritaria. Se dispondrá de nueve meses para la redacción de la nueva Constitución Política y nuevamente la ciudadanía chilena saldrá a votar para la aprobación de la misma. Por otra parte, en Tailandia también se han registrado manifestaciones sociales en los últimos meses, en donde miles de jóvenes protestan contra el gobierno bajo el slogan “¡Abajo la dictadura, viva la democracia!”. Aquí nos encontramos con tres particularidades: la primera, las manifestaciones están prohibidas por el estado de emergencia derivado de la pandemia por COVID-19; la segunda, la ley prohíbe criticar a la monarquía tailandesa, y la tercera, resulta fundamental resaltar el papel clave de la juventud. La juventud exige la disolución del Parlamento, la reforma de la monarquía, la modificación de la Constitución y el alto al hostigamiento por parte de las autoridades. A pesar de que estas manifestaciones han tomado más visibilidad en el presente año, en realidad desde 2019, luego de las elecciones en marzo, comenzaron las inconformidades. Las protestas se intensificaron en febrero de 2020, luego de la disolución del partido prodemocrático Futuro Adelante, considerado como oposición. En los últimos días las protestas han aumentado, al punto de reclamar la dimisión del primer ministro. Asimismo, los medios en Tailandia han sido censurados por
órdenes del gobierno, argumentando que el contenido publicado pone en peligro la seguridad nacional del país. Se cree que estas manifestaciones ocurren dentro de una división generacional entre personas mayores y las generaciones jóvenes. Se dice que las primeras están de acuerdo con las ideas del presente gobierno, mientras que la juventud desea un cambio de régimen y que sus ideas y preocupaciones sean tomadas en cuenta. De hecho, este movimiento recuerda al de la “Primavera Árabe” donde la juventud y las redes sociales han sido pieza clave en su desarrollo. De igual forma, la magnitud de estas expresiones radica en la postura que está adoptando el gobierno, pues además de censurar los medios, ha habido represión, violencia y detenciones. En ambos casos es fundamental resaltar el papel de la juventud, así como de las mujeres, pues son quienes han protagonizado gran parte de estos movimientos. La voz de la ciudadanía ha sonado fuerte, tejiendo redes de comunicación que se expanden para hacer llegar su mensaje más allá de sus fronteras. La ciudadanía quiere ser escuchada y quiere ser incluida; en el caso de Chile ha logrado que se le involucre en aras de un proyecto de nación. En Tailandia aún falta conocer cuál será el desenlace de estas demandas que la juventud requiere, para vivir en democracia.
ELECCIONES
*Gema Morales Ha sido Consejera Electoral del Instituto Electoral del Estado de Querétaro, donde presidió las Comisiones de Educación Cívica y Participación Ciudadana y de Asuntos Internacionales. Es Maestra en Gestión Pública Aplicada y Licenciada en Mercadotecnia por el Tec de Monterrey. Ha colaborado como Especialista en Educación Cívica en misiones de observación electoral con la OEA. Ha sido observadora de diferentes elecciones y mecanismos de democracia directa nacionales e internacionales. Es coordinadora de los libros Mecanismos de Participación Ciudadana: Una Experiencia Global; Educación Cívica: Una Experiencia Global; Voto Nulo en México: Análisis desde lo Local y ha colaborado en diversos artículos para revistas y libros. Es Secretaria de Vinculación de AMCEE y forma parte de Red de Politólogas. @gemamoralesmar
Maximino Javier Helio Pareja*
U
sualmente, cuando tenemos una fantasía, estamos conscientes de que se trata de una creación mental; de un placebo para el evento o situación que tenemos enfrente. Sin embargo, para algunos; para muy pocos, es una herramienta para encontrar lo imposible y hacerlo evidente para el mundo. El maestro Maximino Javier (1948), tiene más de 40 años materializando sus fantasías a través de los artilugios del grabado; la pintura y la escultura. Sus obras, son el legado de su amor por las costumbres e historias de Oaxaca; por la cultura que lo ha envuelto desde su infancia. En sus creaciones es evidente un lenguaje plástico, en donde la técnica es una constante al elaborar composiciones cóncavas que sobrepasan a la primera mirada para impregnarse en la mente del espectador. La cromática de sus obras es seductiva para los ojos, llena de tonos vibrantes y contrastantes que dan vida a escenas fantásticas, en donde la multiculturalidad prevalece en el tiempo, creando las condi-
ciones perfectas para que sus personajes bailen y se muevan fuera del lienzo. Es así como el maestro se ha creado un espacio en la memoria plástica de nuestro país, convirtiéndose en un narrador de fantasías, magnificando a través de sus obras las leyendas y virtudes de una tierra llena de historias, para que prevalezcan en el tiempo; para que perduren en la humanidad. El maestro Maximino Javier cuenta con estudios en la Escuela de Bellas Artes de Oaxaca y fue fundador del taller Rufino Tamayo de la ciudad. Su trabajo ha desvanecido las barreras fronterizas, por mencionar solo algunos espacios, ha sido expuesto en recintos como el Museo de Arte Moderno de San Francisco y la Galería del Instituto Francés de América Latina. De igual forma, su obra es parte de las colecciones del Continental Bank en Chicago; Phillip Morris Corp. en Nueva York; Museo de Arte Mexicano de Chicago; Museo de Arte de la Universidad de Iowa; el Banco Nacional de México; el Museo de Arte Byer en Chicago; el Museo de Arte Contemporáneo de
“Un momento para los cantos y las leyendas de Oaxaca” Montevideo y la colección Ben Nordemaa en Nueva York. La contemplación personal de una obra del maestro permite conectar de manera sencilla con su imaginario, identificarnos con algún personaje e incluso vibrar con las emociones que acontecen en sus creaciones. A partir de ahí comprendemos que lo que parecían fantasías y cuentos se pueden transformar en recuerdos casi tangibles de nuestra vida, pues en el fondo de cada historia prevalecen emociones básicas de la humanidad, es entonces cuando el amor, envidia, deseo, esperanza, calidez y bondad, hacen que sus personajes se vuelven evidentes para el mundo y dejan una huella en cada uno de nosotros.
Sección fija
C U L T U R A
*Helio Pareja, Socio Fundador y Director de Nuun Galería de Arte Querétaro, espacio especializado en la promoción, exhibición y venta de arte contemporáneo mexicano. Desde joven se adentró en la escena plástica oaxaqueña, donde asistió al maestro Amador Montes y desarrollo su pasión por el Arte. Ha sido colaborador en más de una treintena de publicaciones, centrando su discurso en el coleccionismo y la importancia del Arte en la historia de la humanidad. @Helio_hpa
Esperanza, opción de ilusos (parte 2)
Manuel Grapain*
S
atanás moribundo, sus riñones ya no dan más; pobre león que alguna vez fue la gracia más alta del circo, ahora su cabeza y su carne valen más que su vida, es menester encontrar una nueva atracción; Don Sandro, el dueño, ya tiene una estrategia que parte de la manipulación de propios y extraños.
no el alivio de uno mismo) con la esperanza de que las jugosas ganancias que el morbo produzca serían tan abundantes, suficientes para aliviar el dolor de su madrecita al no tener un techo seguro sobre su cabeza, hay una casa por comprar y piensa ¨con el dinero de la primera temporada bien alcanzará para el enganche, tener un lugar del que nadie nos lance¨
Para Don Sandro, al público, a la masa, se le manipula visual y sonoramente; a sus animalitos a veces con maíz, a veces con frijoles, carne casi nunca, pero les llama sus amigos, sobre todo a uno, Gabino, el faquir con quien prepara el lugar para la adoración, el horror y la esperanza entrelazada que amalgama a los que quedan vivos en el circo aquel todo maltrecho (Fe, esperanza y caridad, México, 1974).
¨La esperanza vino de un sueño¨ platica con una amiga; ahora el sacrificio de ser el que cargue con la cruz bien valdrá la pena con tal de irse, sabiendo que al regresar será el patrón, el Señor; será como comprar el derecho de volar de alejarse del chantaje que duele más que cualquier saco de vidrios o cualquier músculo torcido.
Ahora que el león ya no está, todo el circo depende de un sacrificio, el faquir acepta ser el crucificado (atracción irresistible para los que ven en otros la esperanza propia, para los que ven en el dolor aje-
Gabino es joven, fuerte, sabe que podrá con esta prueba; el médico lo declara apto para hacerle las cuatro incisiones de rigor, posteriormente cuatro agujas de oro pasarán por las heridas aún abiertas pero sanas, algunas gotas de sangre saldrán todos los días, estará bien alimentado, de cuerpo y
@mr_manugz
de espíritu, 24 horas al día de vigilancia médica. La cruz se apoyará inclinada sobre el muro haciendo un arco por donde pase la gente; acostado sobre la madera, el faquir soportará los primeros días pensando en cada persona y cada moneda que eso representa, en cada ladrillo de esa casa en la que sueña; ir al baño está prohibido, dieta blanda y líquidos lo hacen posible, mientras la enfermera lo ayuda con ese asunto, lo ve a los ojos y piensa todo lo que un solo hombre significa para tantos otros. Entre delirios el faquir se visualiza como un rockstar del que todos quieren un pedazo. La mujer de Don Sandro lo visitará todas las noches haciendo dupla con la enfermera quienes le recuerdan que también es hombre y un fetiche sexual a sueldo. La masa se batirá en la entrada por ver al sacrificado real, al de verdad, no al que les han contado, este sí está aquí es como todos nosotros, de carne y huesos. ¨!Es una obra de arte viviente dolorida!¨, dicen por todos
lados mientras camiones repletos de gente no dejan de llegar, en uno de ellos llega su madre, quien se lanza a besos sobre los pies de su señor. Una noche llega la fiebre, él piensa que será pasajera, tiene la esperanza de que pasarán el dolor y los escalofríos, se resiste a la atención médica, eso supone quizá el fin de la temporada, la gente llena como nunca el recinto casi sagrado pues el rumor de su muerte ya corrió por todo el pueblo, el calor es insoportable, el oxígeno escasea y la gente siente su respiración entrecortada, padece con él, ¡qué gran actor!, aclaman otros. Por fin llega el doctor a retirar los clavos; a excepción del resto el doctor, Don Sandro y Gabino el faquir sabían lo que se jugaban al comprar clavos solo bañados de oro, una de las heridas salió con todo y un cacho de carne pegada, la septicemia en ese momento ya era irreversible; la esperanza de una casa y la esperanza de volar se harán realidad pero su retorno como gran señor en adelante vivirá solo en el recuerdo de su madre.
Sección fija
CINE & CULTURA
*Manuel Grapain, es director, guionista y fotógrafo cinematográfico, así como actor, egresado de la Escuela de Arte Teatral (INBA) como Lic. En Arte Dramático. Maestro en Mercadotecnia por la Universidad de la Comunicación, donde también es profesor en la carrera de Cinematografía. Forma parte de la Comisión de Evaluación del EFICINE PRODUCCIÓN que otorga el estímulo fiscal por la cláusula 189 de la Secretaría de Hacienda.
Rodrigo Díaz*
Simonetta Sommaruga presidenta del Consejo Federal de Suiza
S
uiza es el único país del mundo cuyo sistema político es singular, pues al ser una de las naciones más democráticas del planeta, no tiene presidente sino siete miembros del Consejo Federal Suizo, por lo tanto, las decisiones que se toman no dependen de una sola persona, sino del consenso de dicho Consejo. De hecho, este reducido grupo tiene un líder que es rotado cada año y es la cabeza del Consejo durante ese tiempo, pero contrario a lo que podría pensarse, este personaje no tiene mayor autoridad que el resto de sus compañeros, más bien, sus atribuciones son meramente protocolarias. El gobierno de Suiza funciona como un Parlamento y tiene dos Cámaras: ● El Consejo de Estados que representa a los 26 cantones1 (lo que comúnmente se conoce como estados) en los que se divide el país. ● El Consejo Nacional que representa al pueblo. Estas dos Cámaras conforman la Asamblea Federal y es esta Cámara quien elige a los siete miembros del Consejo Federal. El Consejo Federal Suizo además está conformado por miembros de diferentes partidos y ninguna coalición; es presidido por Simonetta Sommaruga, quien ha sido reelegida por segunda ocasión. Sommaruga se licenció en 1983 en el Conservatorio de Lucerna como pianista, pero el vertiginoso desarrollo de su vida política
le impidió concluir sus estudios de Literatura Inglesa y Española en Friburg. Se afilió desde muy joven al Partido Socialista y se hizo notar cuando firmó un manifiesto que proponía un estilo político más liberal, lo que molestó a los más conservadores de su partido, pero que le valió el reconocimiento para ser elegida diputada en 1999, senadora en 2003 y en 2010 miembro del gobierno colegiado de su país. También ha sido jefa del Departamento Federal de Justicia y Policía, directora del Departamento Federal de Medio Ambiente, Transporte, Energía y Comunicaciones, vicepresidenta del Consejo Federal y en 2015 Sommaruga asumió el cargo de presidente de la Confederación Suiza por primera vez.2 Para Simonetta Sommaruga, la energía y el transporte no son solo temas en la agenda, en realidad su política apunta a la conservación de la biodiversidad, el apoyo a la política agrícola, la protección del agua potable y la sustentabilidad. Como buena política de un país pequeño en territorio, pero con gran presencia y reconocimiento a nivel mundial, la actual presidenta de la Confederación promueve que las relaciones internacionales de Suiza se basen en el derecho internacional, particularmente en lo relativo al uso de la fuerza, la justicia internacional y el derecho humanitario, ya que Suiza es miembro de Naciones Unidas desde septiembre 2002 y en la actualidad aspira a ocupar un puesto como miembro
no permanente del Consejo de Seguridad de esta organización en el bienio 2023-24. La política exterior de este país está cimentada en cuatro importantes rubros: paz y seguridad, prosperidad, sostenibilidad, y digitalización. Y aunque el Consejo estaba renuente a la migración moderada por su territorio, situación que es comprensible debido a que más del 20% de la población de aquel país son extranjeros y que Suiza representa una de las seis economías más sólidas del planeta, el pasado mes de septiembre, más del 61% de la población votó en contra de la iniciativa “para una inmigración moderada”, lo que mantiene a esta nación dentro de los tratados bilaterales con la Unión Europea. Como se puede apreciar, el gobierno de este país es altamente democrático y es responsabilidad de los siete consejeros escuchar los deseos de sus habitantes, acción que ha tenido muy clara Sommaruga al entrevistarse con Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, quien opinó que este resultado es una “señal positiva para continuar y consolidar la relación entre los dos actores”. Por otra parte, debido a un rebrote de COVID-19, Sommaruga declaró que a partir del 28 de octubre sería obligatorio el uso de mascarillas en espacios públicos y que todos los ciudadanos deberían acatar este ordenamiento, esta es una decisión federal,
lo que impide que los Cantones tomen decisiones individuales. Cabe señalar que Simonetta Sommaruga cuenta con un gran porcentaje de aprobación por parte de la población, la conocen de tiempo atrás y saben que su estilo es incluyente. REFERENCIAS 1. El territorio suizo está dividido en 26 cantones independientes y soberanos con sus respectivas capitales. Entre ellos existen amplias diferencias con respecto a extensión, cultura, orientación confesional y estructuras socioeconómicas. 2.Consultado en: https://www.eda.admin.ch/aboutswitzerland/es/home/ politik/uebersicht/kantone.html 3. https://es.qaz.wiki/wiki/Simonetta_Sommaruga 4.http://www.exteriores.gob.es/Documents/FichasPais/SUIZA_FICHA%20 PAIS.pdf
Sección f i j a
CULTURA
@Rodr_DM
HISTORIA &
*Rodrígo Díaz es Licenciado en Derecho por la Universidad La Salle. Ha trabajado en el Tribunal Electoral de la Ciudad de México, en la Ponencia de la Magistrada Martha Leticia Mercado Ramírez. Actualmente se desempeña como Profesional Jurídico en la Secretaría Técnica Normativa de la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores del Instituto Nacional Electoral.