P SICOLOGÍ A
EN DONDE DESTINO ERA, PROYECTO DEBE ADVENIR 1 por A braham G. A l drete imágenes de A ndrew DeGraf f
1 El título retoma la frase de Freud “Donde ello era, yo debo devenir” para pensar su teoría a partir de los conceptos destino y proyecto.
El psicoanálisis explica que el destino de una persona puede fraguarse por lo ello, instancia despersonalizada e inconsciente, comandada por los impulsos. Para determinar el propio destino, es necesario que el yo devenga como un proyecto que pueda comandar nuestro viaje.
inconscientes. Freud describió la meta del tratamiento psicoanalítico en estos términos: “En donde ello era, yo debe advenir” (Wo Es War, soll Ich werden). Cabe recordar que la segunda tópica freudiana sobre el aparato psíquico incluye tres instancias: lo ello (das Es), el yo (das Ich) y el Superyó (das Úber-ich). Lo ello describe el carácter impersonal de la existencia en general: rehúsa especificación y hace referencia a elementos inconscientes del yo: el sujeto es objeto de repeticiones como si él no existiera, no hay decisión ni oposición. En estos episodios el ser humano es extraño a sí: se presenta una vivencia en la que el sujeto se aleja de sí mismo, determinado por los afectos pulsionales. Esta ajenidad es fundamental en lo ello: corresponde a impulsos anónimos en los que el sujeto no se reconoce.
“Qué son las esperanzas frustradas sino ocasiones para nuevos intentos”. Peter Sloterdijk
U
na de las experiencias más frecuentes relatada por los pacientes al inicio de un tratamiento psicoterapéutico es sentir que viven por inercia: levantarse, ir al trabajo, resolver pendientes, regresar a casa, cenar y ver películas: así todas las semanas. La persona experimenta una impresión de imposibilidad: nada puede cambiar. Si esta aseveración se convierte en dogma, el paciente comienza a faltar a las sesiones y abandona el tratamiento. La repetición de actos indeseables retorna —atracones en la dieta, sabotajes en los ascensos laborales, destrucción del vínculo en relaciones de pareja—, y se fija una creencia falsa de que no hay solución. Al observar este fenómeno, Freud dijo que esta repetición “hace la impresión de un destino que las persiguiera, de un sesgo demoniaco en su vivenciar”. 2
Las situaciones clínicas en las que lo ello predomina corresponden a momentos de despersonalización; por ejemplo, el sujeto tiene la sensación de que lo acontecido no es real y se deja llevar por las circunstancias, las repeticiones patológicas, las demandas de los otros y los afectos primarios sin decidir absolutamente nada. El paciente, ausente de subjetividad, se ve arrastrado por un destino impersonal que lo determina de modo desconocido. Este fenómeno de despersonalización describe la presencia de una vida sin propietario que puede equipararse a una “existencia impersonal”: una vida sin autor, una existencia sin sujeto.
El psicoanálisis advierte que este destino es autoinducido y está determinado por motivaciones 1 El título retoma la frase de Freud “Donde ello era, yo debo devenir” para pensar su teoría a partir de los conceptos destino y proyecto. 2 Freud, Más allá del principio de placer en Obras completas, Vol. XVIII (Buenos Aires: Amorrortu editores, 2001), p. 21.
CA P I TE L | DE STI NO
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