Aquí estamos.
Gracias a todas las mujeres que llegaron antes de nosotras. Que dieron incluso su vida para ser lo que somos. Yo misma ahora escribo por ti, tengo un trabajo por ti, he cumplido sueños por ti, mujer; que diste todo para que muchas llegáramos y seamos lo que somos.
Ha sido un camino difícil, lleno de obstáculos, de señalamientos que hieren, que lastiman, hemos sido violentadas de todas las formas.
Esta edición es el pretexto para seguir escuchando lo difícil que es ser mujer, el camino que aún falta por recorrer para lograr una verdadera equidad. Que la violencia hacia nuestro género no disminuye y se hace presente en cualquier nivel socioeconómico de las mujeres.
Son muchas las virtudes que tenemos para no vivir como lo hacen los hombres, somos iguales. Nuestro género no debería ser un defecto para tener las mismas oportunidades que tienes ellos.