Fondos para mi fondo Cuauhtémoc Miranda*
S
i levantar la mano como borregos es hacer política, todos estamos perdidos. El pasado 9 de octubre los “ilustres diputados”, en su mayoría de Morena, concretaron la extinción de 109 fideicomisos, incluyendo fondos tan importantes como el de Desastres Naturales (FONDEN), el Fideicomiso Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (FIDECINE), el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (FODEPAR) y los fondos para investigación científica y tecnológica.1 Para estas y otras áreas no se requiere dinero, ¿de qué vivirán, de la dádiva? En espacios anteriores hemos reiterado la trascendencia de incentivar a la ciencia y a la tecnología, además de apoyar a la cultura tanto física como mental, pero al parecer a un grupo de seudodiputados esto nos le interesa, simplemente porque le tienen miedo a la formación y expresión del ser humano a través de las diversas manifestaciones intelectuales, o peor aún, el dinero lo quieren para su clientelismo partidista que no aporta nada al crecimiento de una nación. Esa es la realidad de México, el presupuesto de apoyo a
instituciones serias, que vía impuestos aportan miles de mexicanos, lo han borrado con solo levantar la mano. Tan solo en mayo pasado, el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE) en su Anuario estadístico de cine mexicano 2019, anunció con bombo y platillo que durante ese año se alcanzó la cifra histórica de 216 películas realizadas en el país, cuyo costo promedio por película ascendió a 17.2 millones de pesos. Además, detalló que de esta cifra el 49% contó con algún apoyo gubernamental. En el reporte disponible en el sitio de internet http://www.imcine.gob.mx/ cine-mexicano/anuario-estadistico/ se menciona que se realizaron 93 óperas primas, se produjeron 618 cortometrajes y 73 documentales; también se estrenaron 101 películas mexicanas en territorio nacional, las cuales registraron 35.2 millones de espectadores, según informó la Secretaría de Cultura en un comunicado. A estas buenas cifras, se le tendrá que restar casi la mitad para los próximos años, ya que no contarán con el apoyo del gobierno, quedando quizá 110 películas al año.