ANTiDOGMA #6

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DIRECTORIO Rector Salvador Alejandro Corrales Ayala Pérez de Alba Directoras editoriales Reyna Aguiar Basurto Adriana Martínez Noriega Redacción y contenidos Reyna Aguiar Basurto Lourdes Ma. Alcocer Cervera Sandra Benito Vélez Marianna Carrión Cacho María Guadalupe Fuentes Vergel Adriana Martínez Noriega Imelda M. Morales Ferrero Sofía Nefi Fajardo Berenice Pardo Hernández Miranda Román Méndez Esteban Romero Álvarez Coordinación de diseño Ana Cuellar Ocaña Equipo de diseño UC Alexa Chávez, coordinadora Arturo Cortés Fabián Ramírez Fotografía Reyna Aguiar Basurto Mónica Arandia Mondragón Alejandra Bárcena González José Fredy Bartolo López Fernando Chávez Carlos de la Sancha Antonio Escribano Andrés Figueroa Ernesto Franco Pablo Emiliano García Sandra Hernández Gabriela Huerta Tamayo Graciela Iturbide Cristina Kahlo Ixnic Kasiopea Estefanía G. Luna Montero Sebastián Monsalve Yésica Neri Valdés Alida Páramo Brotzman Judith Romero Djahel Vinaver Ulises Verde Audiovisual Reyna Aguiar Basurto Javier Buendía Juanki Buenrostro Miriam Cinthia Cerna Rosales Dante Coello Zamora Sandra De Alba Del Riego Vianey Irra Herrera Esperanza Islas Arroyo Marco Jáuregui Michel López Estefanía G. Luna Montero Laureana Martínez Figueroa Cheram Morales Antonio Morales Rosado Georgina Navarro Yésica Neri Valdés Jami Pacheco

Marcos Palomeque Monserrat Pérez Carreño Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo Andrés Rivera González Alexa Danae Zaragoza Barrios Vinculación académica Ricardo Jesús Balcázar Garcilazo Lorena Castillo Rodríguez Patricia Corrales Ayala Ricardo Lozano Villaseñor Plácido Merino Heleny Ortiz Dávalos José Arnoldo Yumkimil Ramírez Adrián Segovia Cristina L. Tamayo Oneibys Torres Vinculación institucional Israel Alvarado, Aguafuerte Galería Mariana Arellano Cadena, Museo Frida Kahlo Mónica Arandia Mondragón, Centro de las Artes de Querétaro Isabel Azpiri de la Garza, Galería Hotel Presidente InterContinental Sandra Benito Vélez, Estudio Jorge Marín Elena Brown-Guiness, Moyshen The Gallery Juan ki Buenrostro, vinculación con Lechedevirgen Lunnia Campana, 175 Show Room Natalia Carreón, Espacio Arterial Ruth Casas, K’puchinos Restaurante Bar Rodrigo Castillo, Galería L Patricia Conde Juaristi, Patricia Conde Galería Julien Cuisset, Le Laboratoire Fabio Cuttica, OjoRojo Fábrica Visual Henoc de Santiago Dulché, Museo del Estanquillo Alberto Fierro, Consulado General de México en Boston Angustias Freijo, Galería Freijo Leobardo García Córdova, Ángulo Galería Hebe Garibay, Galerie Nordenhake México Mariana Gómez Maqueo, Patricia Conde Galería Rosalba Hernández Vera, MAIA Contemporary Jessica Janeiro Obernyer, Galería Freijo Sebastian Kunold, La Nave Karim Kuri, Córdova Plaza Blanca López, MAIA Contemporary Alejandro López López, Patricia Conde Galería Armando Martínez, ArtSpace México Mónica Martínez, Galería L Gilda Mejía, Museo del Futuro Francisco Morales, The Front Arte y Cultura Cheram Morales, 175 Show Room Georgina Navarro, Festival Transvolcánico de Poesía Roberta Noriega Casas, K’puchinos Restaurante Bar Rosario Ojeda Silva, Estudio Jorge Marín

Daniela Pascual, Restauradoras con glitter y enlace con APIS, Luchadoras, Disidenta y Lana Desastre Susanna Peredo-Swap, Vanguard Culture Arturo Rodríguez, La Caja Arte y Cultura Judith Romero, Resplandor Gallery Mariana Rubio de los Santos, asistente de Graciela Iturbide Sofía Sáenz, Galería Hispánica Luciana Sánchez, Galería Hispánica Aldo Sánchez, Museo del Estanquillo Liana Vázquez, Galería Enrique Guerrero Polo Vidal, Galería L Sandra Villanueva, Galería L Ricardo Lozano Villaseñor, Casa UC Susana Villegas, The Front Arte y Cultura Asesoría legal en propiedad intelectual y derechos de autor Silverio Sandate Morales Luna Morel, Jalife/Caballero, despacho de abogacía Mariana Ramirez Jalife/Caballero, despacho de abogacía Colaboraciones de la Comunidad UC Reyna Aguiar Basurto Karla Mariana Arellano Cadena Natalia Carreón Patricia Corrales Ayala Pérez de Alba Sandra De Alba Del Riego María Guadalupe Fuentes Vergel Belena Hesles Ferreiro Diana Karina López Correa María Cristina Luna Tamayo Adriana Martínez Noriega Brenda Naomi Morales Ramírez Yésica Neri Valdés Ana Roberta Noriega Casas Rodrigo Oropeza Adame Monserrat Pérez Carreño Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo Alexis Gabino Quintal Núñez Miranda Román Méndez María Fernanda Ruiz Gil Paula Sophía Segura Brito Alexa Danae Zaragoza Barrios Dinorah Zepeda Campos Colaboraciones externas a la UC Lourdes Ma. Alcocer Cervera Mónica Arandia Mondragón Andrea Arnal Aguilar Michelle Ayala Alejandra Bárcena González Lulú Barrera Jesica Bastidas Cruz Sandra Benito Vélez Javier Buendía Juan Ki Buenrostro Sheila Viridiana Caballero Nuño Alma Elena Cardoso Martínez Miriam Cinthia Cerna Rosales Patricia Conde Juaristi Julien Cuisset Fabio Cuttica Henoc de Santiago Dulché Maribel Escobar Varillas Alberto Fierro Garza

Alexis García Julieta Giménez Cacho García Nicol Figueroa Rendón Alejandra Flores Gabriela Huerta Tamayo Vianey Irra Herrera Esperanza Islas Arroyo Diego Isunza Kahlo Graciela Iturbide Javier Jurado Sebastian Kunold Perla Labarthe Álvarez Yuruen Lerma Mayer Vanesa Loredo Estefanía G. Luna Montero Jorge Marín Luis Alberto Martínez Miriam Mabel Martínez Laureana Martínez Figueroa Cheram Morales Francisco Morales Imelda M. Morales Ferrero Antonio Morales Rosado Alma Delia Miranda Flores Georgina Navarro Sofía Neri Fajardo Pedro Núñez Marcos Palomeque Alida Páramo Brotzman Daniela Pascual Luisa Pastor Susana Peredo-Swap Andrés Rivera González Tania Robledo Oscar Robles Méndez Judith Romero Esteban Romero Álvarez Paula Rosales Mariana Rubio de los Santos Ingrid Suckaer Lechedevirgen Trimegisto Nora Iselina Trovamala Landa Adriana María Urso Lorena Wolffer Servicio social Sandra De Alba Del Riego, Licenciatura en Animación, Universidad de la Comunicación Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo Licenciatura en Animación, Universidad de la Comunicación Alexa Danae Zaragoza Barrios Licenciatura en Comunicación Visual, Universidad de la Comunicación Prácticas profesionales Lourdes Ma. Alcocer Cervera, Licenciatura en Historia del Arte, Universidad Iberoamericana Portada Graciela Iturbide, “Desierto de Sonora”, 1979. agradece a: Aimée Labarrere de Servitje Héctor Pardo Sánchez el gran apoyo brindado para la impresión de este número.

Derechos de autor y derechos conexos: ANTiDOGMA año 3, número 6, mayo a noviembre de 2022, es una revista de arte y cultura, semestral, editada, publicada y distribuida por ANTiDOGMA Arte y Cultura A.C., Kansas 49-2, Col. Ampliación Nápoles, CP 03840, Alcaldía Benito Juárez, en la Ciudad de México. Editoras responsables: Reyna del Carmen Aguiar Basurto y Adriana Martínez Noriega. Certificado de reserva de derechos al uso exclusivo del título otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor No. 04-2019-061018200200-102. Certificado de licitud de título y contenido otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación, certificado No. 17316. ISSN 2683-2399. Este número se terminó de imprimir el 20 de mayo de 2022, en los talleres de Impresora Peña Santa SA de CV, Sur 27 No 457, Col. Leyes de Reforma, segunda sección Iztapalapa, Ciudad de México, Tel. +52 5556 0063 45, impresoraps@yahoo.com.mx y su tiraje fue de 3,000 ejemplares para su distribución gratuita. Para información y colaboraciones: antidogma.mx@gmail. com, Tel: +52 55 4541 3304, Redes: FB, IG, TW, TikTok y Spotify, y página web: www.antidogma.mx, canal de YouTube: Revista Antidogma.


ÍNDICE 2. Carta del rector 3. Carta de las editoras GALERÍAS 4. Patricia Conde Galería (CDMX). Patricia Conde Juaristi 6. Le Laboratoire (CDMX). Julien Cuisset 7. Galerie Nordenhake (CDMX). Paula Sophia Segura Brito 8. Aguafuerte Galería (CDMX). María Guadalupe Fuentes Vergel 9. Galería Hispánica (CDMX). Imelda M. Morales Ferrero 10. Galería Enrique Guerrero (CDMX). María Guadalupe Fuentes Vergel 11. Galería L (CDMX). María Fernanda Ruiz Gil 12. ArtSpace México (CDMX). Belena Hesles Ferreiro 13. MAIA Contemporary (CDMX). Rodrigo Oropeza Adame 14. Espacio Arterial (CDMX). Natalia Carreón 15. Casa UC (CDMX). Belena Hesles Ferreiro 16. Galería Hotel Presidente InterContinental (CDMX). Alejandra Bárcena 17. Resplandor Gallery (Oaxaca). Judith Romero 18. 175 Show Room (Oaxaca). Cheram Morales QR: Registro de “Hilo dorado”, pieza de arte acción participativo en Zipolite, Oaxaca. Idea original de Cheram Morales 19. La Nave (Xalapa). Sebastian Kunold 20. Moyshen The Gallery (San Miguel de Allende). Paula Sophia Segura Brito 21. La Caja Galería (Tijuana). Nora Iselina Trovamala Landa 22. Ángulo Galería (Tijuana). María Fernanda Ruiz Gil 23. The Front Arte & Cultura (San Diego). Diana Karina López Correa QR: Entrevista a Francisco Morales. Miriam Cinthia Cerna Rosales 24. OjoRojo Fábrica Visual (Bogotá). Alexis Gabino Quintal Núñez 25. Galería Freijo (Madrid). Brenda Naomi Morales Ramírez LATITUDES 27. Alberto Fierro: Promover la cultura desde el exterior. Miranda Román Méndez QR: Entrevista al Ministro Alberto Fierro Garza, Cónsul General de México en Boston. Sandra De Alba Del Riego 28. Lo que Ciudad Juárez nos heredó. Mónica Elizabeth Arandia Mondragón 30. INASIBLE, Reflexiones Actuales de Mujeres en las Artes. Sheila Viridiana Caballero Nuño 32. Vanguard Culture: 10 años de promover colaboración entre las industrias creativas de San Diego, California. Reyna Aguiar y Adriana Martínez QR: Entrevista a Susanna Peredo-Swap. Miriam Cinthia Cerna Rosales 33. Gasto absurdo del esfuerzo. Alma Delia Miranda Flores QR: Francis Alÿs. Registro de la obra Paradox of Praxis 1 (Sometimes making something leads to nothing), Ciudad de México, 1997 34. Actos de faquirismo. A diez años de “Pensamiento Puñal” de Lechedevirgen Trimegisto. Juanki Buenrostro QR: Entrevista a Lechedevirgen Trimegisto. Antonio Morales Rosado 35. Poetas de Colima: entre letras y volcanes. Oscar Robles Méndez QR: Poetas del Festival Transvolcánico de Poesía. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo 36. Escrituras ilegibles. Luisa Pastor COBERTURA ESPECIAL 38. Graciela Iturbide: de herencias y rupturas para encontrar lo propio. Mariana Rubio de los Santos 41. QR: Entrevista a Graciela Iturbide. Esperanza Islas Arroyo 42. Apropiación y extractivismo culturales: un llamado a la concientización. Alida Páramo Brotzman y Andrea Arnal Aguilar 43. Desde la génesis de nuestra ancestra Francesca Gargallo. Gabriela Huerta Tamayo 44. Mujeres e infancias, ¡a volar!. Sofía Neri Fajardo 46. Entre archivos personales, afectos y genealogías. Yuruen Lerma Mayer 47. QR1: Entrevista a Yuruen Lerma Mayer. Antonio Morales Rosado QR2: “Ojalá la guerra no hubiera terminado”. Prácticas, redes e identidad epistolar de Trixie Mayer, una joven mexicana inglesa en tiempos de guerra (1942-1946). Tesis doctoral en Estudios Feministas. División Ciencias Sociales y Humanidades. Uni-versidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Xochimilco. Yuruen Lerma Mayer 48. Las herencias culturales intangibles de la protesta feminista. Restauradoras con glitter 49. QR: Plática sobre herencias intangibles entre colectivas. Alexa Danae Zaragoza Barrios

50. Diego Isunza Kahlo: La cocina mexicana, ingrediente de nuestra identidad. Adriana María Urso 51. QR: Entrevista a Diego Isunza Kahlo. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo 52. Dicen que las flores cantan… Voz, palabra y memoria de mujeres en el son jarocho tradicional. Laureana Martínez Figueroa QR1: Décimas de Citlaly Malpica. Laureana Martínez Figueroa/ Antonio Morales Rosado 53. QR2: Video de la canción “Las máscaras en el suelo” de Citlaly Malpica QR3: Video de la canción “Flor de naranja” de Citlaly Malpica 54. ‘Te voy a cambiar el nombre’… o de cómo las prácticas artísticas resignifican el espacio público y sus denominaciones. Alma Elena Cardoso Martínez 56. El Estanquillo: espacio para lo heterogéneo y para hacer comunidad. Maribel Escobar Varillas 57. QR: Entrevista a Henoc de Santiago Dulché. Alexa Danae Zaragoza Barrios 58. Y las diablas, mujeres afromexicanas y representación. Estefanía G. Luna Montero QR: Documental “Mi cuerpo de diablo” de Estefanía G. Luna Montero MISCELÁNEA 61. Jorge Marín: Elogio de la forma. Sandra Benito Vélez 63. QR: Entrevista a Jorge Marín. Esperanza Islas Arroyo 64. Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada. Lourdes Ma. Alcocer Cervera QR1: “Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada”, proyecto de investigación completo. Lourdes Ma. Alcocer Cervera QR2: Presentación de “Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada” de Lourdes Ma. Alcocer Cervera en el marco de la Semana de Arte IBERO. Cortesía de Arte Ibero/ Sandra De Alba Del Pliego 65. Angélica Carrasco: reflexión y poética gráfica. Ingrid Suckaer 66. Piso 16. Laboratorio de iniciativas culturales UNAM. Julieta Giménez Cacho García y Lissa Nicol Figueroa Rendón 67. QR: Entrevista a Julieta Giménez Cacho, Lissa Nicol Figueroa, Michelle Ayala y Pedro Núnez. Miriam Cinthia Cerna Rosales 68. “Cobra”: políticas galácticas del cuerpo. Esteban Romero Álvarez 70. Visita al Museo del Futuro. Jesica Bastidas Cruz QR: Visita al Museo del Futuro. Andrés Rivera González/ Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo 71. Resistencia social, activismo y arte digital. Marcos Palomeque QR1: Extracto de entrevista a Minerva Cuevas. Cortesía de Farolito.me/ Marcos Palomeque QR2: Sitio Web de Farolito.me 72. Alejandra Flores, artista visual regiomontana. QR: Página de FB de Alejandra Flores COMUNIDAD UNIVERSITARIA 74. El arte de reinterpretar herencias gastronómicas. Ana Roberta Noriega Casas 75. QR1: Entrevista a Roberta Noriega, Ruth Casas y Javier Jurado de K’PUCHINOS restaurante bar, en Tequisquiapan, Qro. Sandra De Alba Del Riego QR2: “Turismo gastronómico y patrimonio cultural”. Tesis de licenciatura en Comunicación y gestión de la cultura y las artes. Universidad de la Comunicación. Ana Roberta Noriega Casas 76. Cultura líquida en México. Dinorah Zepeda Campos QR1: Cata de mezcal en Patricia Conde Galería. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo QR2: Entrevista al maestro mezcalero Luis Alberto Martínez. Alexis García/Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo 77. La ausencia de la presencia, reseña del libro. María Cristina Luna Tamayo 78. Museo Frida Kahlo: Un inmueble, muchas herencias. Karla Mariana Arellano Cadena 79. QR: Entrevista a Perla Labarthe Álvarez. Esperanza Islas Arroyo 80. NEUTLE: Bebida No Contada, un documental que visibiliza una de las bebidas más representativas y legendarias de nuestro país: el pulque. Yésica Neri Valdés 80. QR: Documental “NEUTLE: Bebida No Contada” de Yésica Neri Valdés


CARTA DEL RECTOR En 1856, en el jardín de la abadía de Santo Tomás de Brünn, en la actual República Checa, un joven monje hacía, junto con sus chícharos, uno de los descubrimientos más interesantes del siglo. Con sus observaciones, Gregor Mendel sentaba las bases para formular la teoría de la herencia genética y, con ello, permitía al mundo saber cómo es que se transmiten las características físicas de una generación a otra, posibilitando el entendimiento de las conexiones que tenemos con nuestros ancestros y, al mismo tiempo, con nuestra descendencia. Gracias al descubrimiento de la herencia genética, por primera vez en la historia de la humanidad, pudimos entender que estamos físicamente unidos con nuestro pasado y nuestro futuro, que no somos individuos aislados, sino colectividad pura. Nuestros genes, esos marcadores del tiempo, nos acompañan en la travesía de quiénes y cómo somos. Sin embargo, a pesar de que esas pequeñas estructuras contienen toda nuestra información evolutiva, nuestra identidad no se compone únicamente de herencias corpóreas, sino también de legados intangibles. Desde que somos especie humana hemos ido acumulando y heredando una serie de características que nos permiten pensar y manifestarnos de manera particular. Estos elementos utilizan, para pasar de una generación a otra, un lenguaje y un engranaje distinto al genómico. La lengua, las costumbres y las tradiciones se vierten en una serie de marcadores de otro tipo que nos acompañan no solo en nuestra manera de mirar y configurar el mundo, sino también en la manera de sentir; forman parte de nuestras fantasías y nuestros sueños más profundos. El arte da cuenta de esta serie de sucesiones que, desde el pasado remoto, se han ido entretejiendo en relatos que ahora nos hablan de dónde venimos y hacia dónde vamos. Este número de ANTiDOGMA le rinde homenaje a esas herencias etéreas, a esas sensibilidades que son voz e impulso para el arte. Las expresiones artísticas se nutren, permean y exhiben estas crónicas evolutivas del sentir y el pensar. A lo largo de estas páginas les invito a ser parte de esta epopeya, de estas recitaciones que nos hablan de manera artística y creativa de nuestras historias, de nuestra colectividad, de nuestra herencia. Salvador Alejandro Corrales Ayala Pérez de Alba Rector Universidad de la Comunicación


CARTA DE LAS EDITORAS Las herencias culturales inmateriales podrían compararse con Jano, el dios romano de las dos caras que da nombre al primer mes del año en el calendario gregoriano. Es decir, son, por un lado, aquello que llega al hoy desde el ayer y, por otro, aquello que se pretende dejar para el mañana. Con esa mirada bifronte que va más allá de una teleología meramente lineal, es decir, capaz de conjugar pasado, presente y futuro en un mismo momento, las herencias inmateriales representan ese cúmulo de saberes, tradiciones, creencias, etc., que, al sobrevivir el paso del tiempo gracias a la oralidad, la imitación performática de comportamientos y a diversos soportes transmisores –por ejemplo: las distintas manifestaciones artísticas–, dan sentido y significado a nuestra existencia. Por esta razón, es un honor que la destacada fotógrafa Graciela Iturbide nos haya cedido tan sugerente imagen para la portada de la revista. Pues en ella retrata a una digna, añosa y experimentada mujer seri que, en medio del desértico paisaje sonorense de 1979, da testimonio de una ancestralidad encarnada. Ahora bien, en una coyuntura como la actual, ANTiDOGMA presenta este número con el afán de reflexionar crítica y colectivamente sobre aquello que las generaciones anteriores nos han legado como ese ‘deber ser’ amparado en la cultura, pero también sobre aquello que queremos transformar aquí y ahora para heredar a quienes nos sobrevivirán. Y es que es precisamente ahí, en ese doble juego entre el cosechar y el sembrar, que se abre un resquicio para el rescate, la revisión, la conservación y, en su defecto, la resignificación responsable de aquellos preceptos que históricamente han demostrado, o no, aportar frutos a la mayoría. Les invitamos a recorrer las cinco secciones de la revista en las que hemos urdido una cuidada trama de ideas a través de los artículos, entrevistas, documentales, proyectos académicos y demás materiales aquí compendiados, y que podrán disfrutar no solo en versión impresa, sino también a través de los QRs que acompañan los textos y que remiten al universo digital: GALERÍAS incluye reseñas, entrevistas, videos y agendas de exposiciones de 21 espacios ubicados en la Ciudad de México, en diversas ciudades del país y en otros lugares del mundo. LATITUDES ofrece una colección de materiales escritos y audiovisuales que van desde conocer las labores del Ministro Alberto Fierro, Cónsul General de México en Boston, a hablar de una iniciativa cultural transfronteriza en San Diego, para luego entrar en territorio nacional a problematizar las herencias de enclaves feminicidas como Ciudad Juárez, o a destacar la labor colectiva de un grupo de mujeres en el sector artístico-cultural de Querétaro. Asimismo, mientras un artículo nos invita a celebrar los 10 años de publicación de “Pensamiento puñal”, otro retoma una de las obras de Francis Alÿs para hacernos reflexionar sobre la lógica laboral, y otro nos traslada a recorrer los volcanes y las letras de Colima a través de su tradición poética, para terminar en España con un texto que habla sobre la obra de Luisa Pastor.

COBERTURA ESPECIAL comienza con un reconocimiento al legado iconográfico de Graciela Iturbide, para después cuestionar las lógicas extractivistas de ciertas prácticas culturales y rendir un efusivo homenaje a Francesca Gargallo. De igual manera, contiene artículos y entrevistas que hablan del devenir de los voladores de Papantla, las genealogías y afectos de los archivos personales, y las herencias culturales inmateriales de la propuesta feminista en palabras de las Restauradoras con glitter (y otras colectivas). También, esta sección recorre el universo gastronómico de Diego Isunza Kahlo; rescata la voz de las mujeres en el son jarocho tradicional; exalta la importancia del uso de lenguajes inclusivos en la praxis artística y cultural; cuestiona la representación de las mujeres afromexicanas en sus ritos y tradiciones; y analiza la trascendencia de colecciones como la de Carlos Monsiváis de viva voz de Henoc de Santiago Dulché, director del Museo del Estanquillo. MISCELÁNEA abre con un texto sobre la trayectoria del reconocido pintor y escultor Jorge Marín para luego adentrarse en la revisión de una pintura olímpica del inglés Alfred R. Thomson y, posteriormente, en la poética gráfica de Angélica Carrasco a través de la pluma de Ingrid Suckaer. Por otro lado, esta sección incluye: un artículo en el que Julieta Giménez Cacho y Nicol Figueroa nos hablan de Piso 16, un laboratorio de iniciativas culturales de la UNAM; una relectura del cuerpo a través del análisis científicoliterario de “Cobra” de Severo Sarduy; una reseña sobre el recién inaugurado Museo del Futuro; y un artículo que presenta distintas estrategias e iniciativas de resistencia y activismo social en Internet. COMUNIDAD UNIVERSITARIA conjuga textos y entrevistas que hablan sobre la reinterpretación de las herencias gastronómicas queretanas; las bebidas artesanales tradicionales de nuestro país; las escenas de una Roma vacía en tiempos pandémicos; los múltiples legados del Museo Frida Kahlo a través de las palabras de su directora, Perla Labarthe Álvarez; y la realización y presentación del documental “Neutle: Bebida No Contada”, un proyecto del alumnado de la licenciatura en Comunicación social de la Universidad de la Comunicación.

¡Que la disfruten!

ant idogma .mx @RevistaAntidogma antidogma.mx@gmail.com


Foto: Carlos de la Sancha, Exposición Contemplaciones de Cristina Kahlo, 2018

GALERÍAS

Dirección: Gral. Juan Cano 68, San Miguel Chapultepec Teléfono: +52 55 52906345 +52 55 52906346 Horarios: Lunes a jueves de 10:30 a 18:00 hrs. Viernes a sábado de 11:00 a 16:00 hrs. www.pcg.photo @Patricia Conde Galería @Patriciacondegaleria @PCgaleria

Patricia Conde Galería

Texto: Patricia Conde Juaristi* Fotos: Cortesía de Patricia Conde Galería

Mi relación con las letras empezó muy temprano. Los días se fueron tejiendo y escribieron una historia que sólo pude leer muchos años más tarde. Debido a un extraño padecimiento, la mayor parte de mi infancia la pasé en obligados aislamientos, por lo que mis compañeros fueron libros, cuentos y ensueños. La soledad se convirtió en una costumbre, en un ritual suave y dulce en el que me encontraba a solas con aquel personaje que se quedó en medio de la resolución de una decisión vital. También las películas, en blanco y negro, desde luego, eran parte de mi cotidiano. Me llevaban al extremo de sentir el aire mientras corría por calles desconocidas o a discutir con los personajes de mis libros como si estuvieran presentes. Nada de esto alarmaba a nadie en mi casa. Más bien creo que los aliviaba de la monserga de ir a entretenerme en mis largos retiros. Así crecí. Papel, olor a imprenta, letras, a veces algún libro prohibido, películas donde era clarísimo distinguir el bien del mal y lo bueno de lo malo. El destino me tenía preparado un compañero de viaje que se entusiasmaba, igual que yo o más, en los mismos temas. Pero él me llevó al riquísimo mundo de la imagen. Juntos recorrimos infinidad de exposiciones de fotografía. Me enseñó la diferencia entre las técnicas, los temas, qué hay detrás de la imagen. Conocí a grandes personajes de la fotografía, la pintura, la literatura y tuve la oportunidad de entender lo que significa vivir el arte y apropiármelo. *Historiadora del arte y galerista, fundadora y directora de Patricia Conde Galería.

Foto: Carlos de la Sancha, Exposición Contemplaciones de Cristina Kahlo, 2018

(CDMX)

@Juan Cano 68 @Juancano68


Y de pronto, casi sin pensar, de manera completamente natural, penetré la imagen, sus múltiples lecturas, su paralelismo con los libros y las historias y un día, así nomás, nació una galería especializada en fotografía mexicana. Han pasado muchos años desde que di inicio a esta aventura extraña y fascinante que nació como un hijo no planeado para convertirse en el motor de la existencia. Desde siempre y a lo largo de ese trecho, es muy evidente el asombro que la fotografía mexicana despierta en toda aquella persona que la mira un poco más profundamente. La foto, como cualquier otra forma de arte, necesita de la participación del espectador—o lector, en el caso de los libros. Grandes fotógrafos mexicanos han documentado, desde el invento o descubrimiento de la fotografía, monumentos, costumbres, retratos, rituales, fantasías. Gracias a ellos y a ellas—pues es importantísimo mencionar a tantas y tantas mujeres que fueron grandes y muy reconocidas fotógrafas, dueñas de estudios y a quienes debemos trabajos de gran relevancia—tenemos la posibilidad de reconstruir una época de nuestro país. La fotografía es memoria. Nuestros recuerdos están, mayoritariamente, formados por narraciones y anécdotas contadas por nuestros padres y por la constancia visual de la imagen. La imagen es nostalgia, recuerdo, dolor, sueño, evocación. Nos devuelve una edad, una época, un momento olvidado y reconstruido gracias a que podemos pasar la yema del dedo sobre esa piedra, ese árbol, esa cara que hace tanto hemos dejado de ver. Nos permite mirar

sin perturbaciones, sin molestias, sin interrupciones. Así es como nos aprendemos la cara de aquel ser que estamos a punto de olvidar. La galería tiene esa vocación, una vocación de contar, de narrar historias desde aquellos que ya han dejado su impronta; los que están en plena creación; y los que inician con un nuevo discurso. Siempre de la mano de lo nuevo, buscando y encontrando lo que ha pasado, lo que está ocurriendo, lo que cada uno vive en este México rico, diverso, complicado, tan mexicano. Todos estos y estas grandes artistas forman el imaginario colectivo y la identidad desde su lugar, desde su experiencia y, con su infinito telar, forman un tejido teñido de añil que va contando nuestra historia.

Agenda de exposiciones: • 16 de marzo al 21 de mayo de 2022: Espacios Intermedios exposición de Paola Dávila e Ilán Rabchinskey en la sala principal. • 7 de abril al 18 de junio de 2022: M / D por Marianna Dellekamp, intervención en la biblioteca. • 2 de junio al 20 de agosto de 2022: Del acoso y digresión de Ana Blumenkron, Tania Bohórquez y Sylvana Burns; curaduría por Paola Dávila. • 8 de septiembre al 10 de diciembre de 2022: Exposición de Steve McCurry.


Dirección: Vicente Suárez 69, Col. Hipódromo Condesa Teléfono: +52 55 5256 4360

Le Laboratoire (CDMX)

Texto: Julien Cuisset*

Foto: Cortesía de Le Laboratoire

Horarios: Lunes a viernes de 11:00 a 14:30 hrs. y de 16:30 a 19:00 hrs. (Se requiere cita previa) https://www.lelaboratoire.mx @Galería Laboratoire @galeríalelaboratoire

Las herencias culturales intangibles

“La política de la humanidad implica el respeto hacia los conocimientos, las técnicas, el arte de vivir de las diversas culturas, incluidas las orales. Integra todo aquello que es válido en la idea actual de desarrollo, pero para insertarlo en el contexto singular de cada cultura o nación. Además, la noción de desarrollo debe completarse con la de involución, es decir, de conservación de las protecciones comunitarias, de salvaguarda de las cualidades que el desarrollo tiende a destruir, de regreso a valores no materiales como la sensibilidad, el corazón y el alma.” Edgar Morin, “La vía para el futuro de la humanidad.” Las tradiciones, expresiones y otros ritos fecundan y alimentan nuestro patrimonio inmaterial. Su diversidad cultural es un factor primordial de resistencia a la hegemonía planetaria (“aldea global” de McLuhan) y su globalización neoliberal galopante: debe de permitir la transmisión y permanencia de un conjunto de conocimientos y técnicas, e inducir un diálogo nutrido y respetuoso entre las diversas culturas. Claude Lévi-Strauss decía: “Al conocimiento del pasado le atribuimos la capacidad de permitirnos comprender el presente y ese presente nos sirve para hacer previsiones sobre el futuro.” En México, varias manifestaciones culturales como la charrería, el mariachi, la cocina tradicional y las ceremonias rituales (los Voladores de Papantla, por ejemplo) forman parte del listado de patrimonio cultural inmaterial de la humanidad de la UNESCO. Son expresiones vivas heredadas que se moldean con el tiempo y contribuyen a darnos un sentimiento de identidad y un vínculo entre pasado y presente, un compromiso en la salvaguardia de dichas manifestaciones. La mundialización actual ha ido fomentando una nueva era transcultural, híbrida e interconectada, en algunos casos, identitaria y propagandista. Tal como lo dice Edgar Morin, los mestizajes (genéticos, étnicos y culturales) son, a la vez, unificadores y diversificadores. No se puede negar la existencia de una tendencia a la homogeneización cultural por desnaturalización, cuando no disolución, de las culturas originarias, ya que se impone un imperialismo dotado de una estructura económica poderosa. Lo importante es encontrar ahí los mecanismos que permitan que las tradiciones se mantengan y puedan (re)florecer en otros contextos y/o territorios. El arte no está exento de las mismas mutaciones endémicas. Las personas dedicadas al arte habitan su tiempo y se adaptan a las nuevas herramientas y contextos socio-politico-económicos. La “servidumbre” numérica actual y el universo hiperconsumista cambian las formas de “fabricar” arte: la volatilidad de la dinámica social fomenta una nueva tendencia mutante, nómada. Dicho intersticio social se mueve en una cultura sin fronteras reales, interconectada y ubicua, que no deja de insertarse en una jungla poco codificada. La “cultura-mundo” *Curador y galerista, fundador y director de Le Laboratoire.

de Gilles Lipovetsky hace hincapié en la hipermodernidad cultural globalizada, donde los antagonismos ya no tienen tanta razón de ser. Una considerable audiencia parece estar dispuesta a informarse, a “consumir” arte. En la era digital tenemos que asumir el hecho de que cada persona tiene la capacidad de “producir” contenidos culturales, tangibles e intangibles: el efecto Google, los algoritmos de Facebook, la experiencia Instagrameable, entre tantas nuevas ventanas informativas, soportan nuestra voluntad de estar mejor informados, pero también de promover las (fútiles y fugaces) egotecas. Pero la cantidad de páginas visitadas (en muchas ocasiones, en micro-comunidades) no es garantía para fomentar un espíritu más crítico y abierto. La intangibilidad del arte no es asunto nuevo. Desde 1959, Yves Klein creó su “Zona de Sensibilidad Pictórica Inmaterial”, serie de obras que ofrecía a coleccionistas, como opción, adquirir una zona inmaterial a cambio de una cantidad de oro previamente acordada, y cuya mitad arrojaba el propio artista al Río Sena de París. Hoy en día, la cripto revolución y los NFT’s agitan fuertemente el mundo del arte digital a través de bienes intangibles. Parecen representar y reflejar una franja notable de la creatividad y de las necesidades de nuestra época. La tokenización implica una universalidad de contenidos y la posibilidad de tasar el valor de lo intangible, otorgando autenticidad y propiedad de un activo dentro del sistema infalsificable de la blockchain. ¿Nuevo instrumento democratizador? ¿Construcción integral de riqueza neoliberal? ¿Nueva y futura forma de preservar (almacenar y compartir) parte de nuestro patrimonio cultural? Los nuevos retos de la conservación y transmisión del patrimonio estriban en la (re)valorización continua de sus culturas, fuente de inspiración para la creatividad y la innovación, en la construcción de significados y sentidos para las futuras generaciones. Del 3 de mayo al 2 de julio de 2022 se expondrá en Le Laboratoire “La parte y el todo es infinito”, el segundo proyecto individual que Georgina Bringas presenta en la galería.


Galerie (CDMX) Nordenhake

Dirección: Monterrey 65, Col. Roma Norte

Fundada en 1976 en Malmö, Suecia, Galerie Nordenhake está comprometida con el arte conceptual y minimalista. Su sede en México, ubicada en la colonia Roma, ha acogido estas propuestas artísticas con trayectoria internacional. Desde el 27 de abril y hasta el 18 de junio de 2022, la galería presenta “Desvío”, una exposición individual de Håkan Rehnberg, artista nominado para el Carnegie Art Award y miembro de la Real Academia de Bellas Artes desde 2000. Se trata de una propuesta artística despreocupada que no busca obtener la perfección. En palabras del artista:

Teléfono: +52 5513 138371 www.nordenhake.com mexico@nordenhake.com

Horarios: Martes a jueves de 11:00 a 18:00 hrs. Viernes y sábado de 11:00 a 16:00 hrs. @Galerie Nordenhake @galerie_nordenhake

Texto: Paula Sophia Segura Brito* Fotos: Cortesía de Galerie Nordenhake

artista interesado en representar la modernidad y sus posibilidades a través de la pintura. Durante el verano la galería cerrará por remodelaciones y reabrirá para Gama Week / Gallery Weekend en septiembre.

“Cada cuadro se pinta y se completa durante una sesión. Nunca abandono el proceso de trabajo, para volver a él con nuevos ojos. No trato de obtener la perfección en un cuadro, sino que deseo manejar una situación en la que la pintura y el proceso pictórico se convierta incondicionalmente y de repente en un cuadro - en este paso reside el desafío. Cada gesto y decisión debe manejarse al borde de la catástrofe, donde el fracaso siempre amenaza con arruinarlo todo, mientras que simultáneamente se crea una libertad eufórica.” Al pintor le interesa invitar al espectador a trasladarse a la tarea inmediata de ir más allá del discurso y la palabra como formas únicas de expresión, como si la palabra se convirtiera en un gesto atado al silencio. A través de su obra se puede observar una constante lucha entre la falta de voluntad y la voluntad por crear una pieza que construye su propia forma, que se va renovando y que posee múltiples posibilidades que caminan hacia el futuro, imposibilitando el retroceso. Por otro lado, del 12 de mayo al 18 de junio de 2022, Nordenhake (CDMX) será también sede de una exposición de Jerónimo Rüedi, un *Alumna de cuarto semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


(CDMX, San Miguel de Allende, Val’Quirico)

Aguafuerte Galería

Dirección: CDMX: Guanajuato 118, Col. Roma Norte

Texto: María Guadalupe Fuentes Vergel* Fotos: Cortesía de Aguafuerte Galería

Aguafuerte Galería es un espacio que se ha comprometido a ofrecer exposiciones que ayuden a visibilizar problemáticas de interés nacional e internacional por lo cual constantemente generan convocatorias dirigidas a artistas con diferentes puntos de vista. A través de las diversas propuestas artísticas que reúne, esta galería ha sido testigo de la manera en que las creencias y costumbres de los distintos países han influenciado las axiologías y lenguajes formales de los y las creadoras. Un ejemplo de ello son los artistas oaxaqueños que utilizan técnicas propias del estado.

Agenda de próximas convocatorias: • Convocatoria mayo: Gran formato -Tema: gran formato - Técnica libre Cierre 27 de abril • Convocatoria junio: Identidades - Tema: diversidad sexual, derechos e igualdad - Técnica libre Cierre 25 de mayo • Convocatoria julio: En abstracto - Tema libre - Técnica libre Cierre 22 de junio • Convocatoria agosto: Expo Subasta - Tema libre - Técnica libre Cierre 20 de julio

Teléfono: +52 55 2454 9638 Horarios: Martes a sábado de 12:00 a 20:00 hrs. Domingo y lunes de 12:00 a 19:00 hrs. Dirección: SMA: Distrito Soma -Calle Lupita 2. PB 10. Col. Estación Teléfono: +52 415 150 1699 Horarios: Miércoles a domingo de 12:00 a 20:00 hrs. Dirección: Val’Quirico: Callejón Don Juan 126-010 Horarios: Miércoles a domingo de 11:00 a 19:00 hrs. www.aguafuertegaleria.com contacto@aguafuertegaleria.com @Aguafuerte Galería de Arte @aguafuertegaleria @AguafuerteG

La exhibición “Químicas Ácidas” que tendrá lugar de 22 de agosto al 19 de septiembre de 2022 en la sede CDMX, mostrará esculturas de Dalla Benetta, una artista plástica italiana, y de Pablo Maire, un artista multidisciplinario originario de Chile. La muestra dará cuenta de este cruce de caminos entre ambos, caracterizado por un diálogo de metáforas construido a partir de bronces y resinas mediante las cuales los artistas modelarán, torcerán o retorcerán el mundo. La obra de Dalla Benetta busca narrar los conflictos internos que plasman las identidades y los roles de los seres humanos. Su arte conduce a una mirada hacia el interior y al descontrol. Su estética es un equilibrio entre lo clásico y lo surrealista, busca la línea sutil que separa la identidad personal de las convenciones sociales, estudiando las diferencias entre lo que se percibe y la realidad. La obra de Maire, por su parte, busca entablar comunicación con la muerte, el homoerotismo y lo macabro. Su arte resulta incómodo por su estética contundente y quebrantadora; juega con los miedos individuales y colectivos en imágenes distorsionadas de seres que reclaman un lugar en este mundo.

La galería cuenta con tres sedes. Actualmente y hasta el 31 de mayo, Ray Herrera Leguizamo presenta “Paisaje-Abstracto” en San Miguel de Allende.

*Alumna de segundo cuatrimestre de Periodismo en la Universidad de la Comunicación.


Galería Hispánica - (CDMX) Proyecto H - Proyecto T Texto: Imelda M. Morales Ferrero* Fotos: Cortesía de Galería Hispánica

Ubicada en Guadalajara 88, en la colonia Roma Norte, la Galería Hispánica Contemporánea nace en 2012 como una filial de su matriz en Madrid. Esta sede en Ciudad de México surge con el objetivo de promocionar el trabajo de artistas españoles y mexicanos en América Latina, además de acercar la obra de artistas americanos a España. Así, esta galería promueve la obra de creadores contemporáneos ya consagrados, o mid career, al tiempo que tiende puentes de colaboración e intercambio con otros espacios expositivos, tanto en América Latina como en los Estados Unidos. Entre sus redes principales de colaboración en Ciudad de México se encuentra Proyecto H, galería de arte contemporáneo que nace en 2013 como una iniciativa curatorial de la propia Galería Hispánica y que también cuenta con una sede en Madrid (desde 2016). La principal función de ésta es la de difundir, exponer e internacionalizar la labor de artistas contemporáneos tanto emergentes como de mediana carrera y ya establecidos. Su programación anual consiste en organizar al menos ocho exposiciones, mismas que se dividen en sus dos sedes, colaborando con curadores independientes. A su vez, Proyecto H en Ciudad de México colabora de manera muy estrecha con Proyecto T, un espacio de creación y exposición de arte contemporáneo que busca apoyar y visibilizar el talento emergente que aún no cuenta con representación en ninguna galería. En este caso, Proyecto T fue fundada en el año 2017 por Sofía Sáenz de Santa María, quien es su actual directora.

Entre las exposiciones programadas para este 2022, se encuentran: Proyecto H El vacío como exploración formal de la observación de Rocío Gordillo (México) - 17 de marzo al 12 de mayo de 2022. Inspirada en las investigaciones que la artista ha realizado sobre el vacío a través de un complejo proceso de meditación vipassana, su obra deja ver la intención de entender cómo se puede percibir realmente la realidad mediante un estado donde la mente se deja en vacío, observando la “realidad” tal cual es. Próximamente: Isabel Alonso Vega (España) – De mayo a julio de 2022. Proyecto T Piel con piel de Carmen Mora (España) - 24 de marzo al 17 de abril de 2022. La propuesta surge de su investigación y experimentación con la condición de fósil, concretamente con los procesos de descontextualización de los árboles fósiles que aparecen en un tiempo diferente y en lugares a los que no pertenecen. El resultado será una serie de esculturas, que, como nuevos cuerpos, serán presentados sobre la pared, en el suelo, o posados sobre otro objeto. Próximamente: Douglas Degges (EEUU) – Del 26 de mayo al 8 de julio de 2022.

Dirección: Guadalajara 88, Roma Nte. www.galeriahispanica.es @ghhispanica @galeriahispanica @ghhispanica www.proyectoh.com

Teléfono: +52 55 5211 4087 Horarios: Lunes a viernes de 10:00 a 14:00 hrs @proyectohcontemporaneo @proyectote

*Arquitecta y especialista en Historia del arte de la UNAM, y egresada de la Maestría en Conservación y restauración de bienes culturales inmuebles en la ENCRyM. Ha colaborado en distintas publicaciones mexicanas dedicadas al diseño, arquitectura y tecnología (imorfer@me.com).


Galería Enrique (CDMX) Guerrero

Dirección: General Juan Cano 103, Col. San Miguel Chapultepec Teléfono: +52 55 5280 2941 Horarios: Lunes a sábado de 10:00 a 15:00 hrs. www.enriqueguerrero.com info@galeriaenriqueguerrero.com @Galería Enrique Guerrero

Texto: María Guadalupe Fuentes Vergel* Fotos: Cortesía de Galería Enrique Guerrero

Fundada en 1997, Galería Enrique Guerrero es un espacio que representa a artistas jóvenes que forman parte de la escena emergente y que exploran todas las disciplinas que actualmente comprenden las artes visuales: pintura, escultura, fotografía, video, instalación y medios digitales, con una visión contemporánea y propuestas auto sustentables. Tal es el caso de Daniela Ramírez y Pedro Vaz quienes, desde el 27 de abril hasta el 11 de junio, tienen sendas exposiciones en la sede de la CDMX de esta galería. “Una luz animal ronda nuestra superficie” es el nombre que Daniela Ramírez le da a su exposición; en ella explica que los seres humanos atribuimos significados más que biológicos a los caminos que recorremos porque, desde que el mundo es mundo, pasamos sobre árboles y flores, y construimos con ellos casas, altares, etc. El trabajo de Daniela Ramírez, por tanto, cuenta esos cuentos en sus obras, cuentos que no son otra cosa que nuestro vivo retrato.

La técnica de Daniela es tanto experimental como conceptual, y en la metáfora de su exposición hace preguntarse cosas como “quién deja el jardín intacto, quién lo incendia y quién lo deja por completo en blanco”. “Path of power” es la exposición de Pedro Vaz. Su nombre se originó del viaje que el artista emprendió en Brasil donde siguió el llamado “caminho do ouro”, que conecta las ciudades de São Paulo, Río de Janeiro y Minas Gerais.Este camino actualmente está dividido en veintisiete tramos, de los cuales el 10% está asfaltado, el 1.5% por ciento es carretera, y el 6% son senderos, siendo el resto del trayecto de tierra batida, cubriendo así varias categorías de paisaje.

La exposición de Vaz relata, así, el único camino que pudo conocer con exactitud, es decir, el de la experiencia personal. En junio se presentará una muestra de Horacio Quiroz y por último Carolina Ponte se presentará en noviembre de este año.

*Alumna de segundo cuatrimestre de Periodismo en la Universidad de la Comunicación.


Dirección: Alfonso Reyes 216 – L001, Hipódromo Condesa Teléfono: +52 55 5256 1060

Horarios: Martes, jueves y viernes de 10:00 a 19:00 hrs. Miércoles y sábado de 9:00 a 18:00 hrs. www.galerial.com @Galería L @galeria_l

(CDMX)

Galería L Texto: María Fernanda Ruiz Gil* Fotos: Cortesía de Galería L

Este espacio de arte y diseño dedicado a la exhibición de artistas mexicanos y extranjeros con larga trayectoria está comprometido con la difusión de diversas manifestaciones estéticas que invitan a la reflexión.

SALÓN 2022. Del 26 de mayo al 7 de agosto del 2022 Salón 2022 reúne la obra de 15 artistas visuales: Adriana Barrientos, Atardecer Dusk, Elizabeth Berlanga, Gus Murrieta, Himura, Hunter, Jaime Ruíz Martínez, Julio García, Luis Campos, Marianela Castro, Paloma Muy kuay, Robert Slime, Trilce Zúñiga y Uriel Ramírez.

Tal fue el caso de Lo que ya sabemos que sabemos pero olvidamos todo el tiempo del artista oaxaqueño Marco Velasco y que estuvo en exhibición hasta el pasado 23 de abril. Como parte de su programa Rotante –iniciativa de exhibiciones digitales—, esta muestra conformada por 15 piezas, surgió de la revisión y lectura de las bitácoras que Velasco ha trabajado desde el 2015, y que le han servido como contenedor de ideas y procesos creativos en su ejercicio artístico. En ellas, el dibujo, sus reflexiones y lo cotidiano se fundieron en un dispositivo que dio cuenta de la conformación de su pensamiento y subjetividad.

Con sede física en la colonia Condesa, pero actualmente operando de manera primordial a través de medios digitales, el proyecto de Galería L presenta una nutrida agenda de actividades para los meses por venir. Aquí algunas de sus propuestas:

MUVA 2022. Del 14 de abril al 17 de diciembre del 2022, muestra presencial, Muva, por sus siglas Muestra virtual de arte, es un proyecto anual dedicado a la exhibición de piezas artísticas y proyectos multimedia: video, animación, gif, imágen digital, nfts, etc. Este proyecto surge como una iniciativa de Galería L para dar espacio a estas formas de expresión actuales, presentando obras que proponen nuevas reflexiones y estéticas. Muva, por tanto, es una muestra colectiva abierta que, durante el tiempo de exhibición, irá incorporando más piezas y artistas al programa. Esto con la intención de promover la producción artística de nuevos medios en el país. La exhibición se mostrará en el videowall de la galería de forma continua y en el horario establecido.

*Alumna de segundo cuatrimestre de Periodismo en la Universidad de la Comunicación.


ArtSpace (CDMX) México

Dirección: Campeche 281, Hipódromo Condesa Horarios: Lunes a sábado de 10:00 a 17:00 hrs. www.artspacemexico.mx @ArtSpace México @artspacemexico @artspacemexico

Texto: Belena Hesles Ferreiro* Fotos: Cortesía de ArtSpace México

Art Space México es una plataforma de exhibición de artistas emergentes, inexplorados y sumamente provocadores. La obra que representa suele abordar el cuerpo humano y la naturaleza, ofreciendo nuevas interpretaciones de la belleza, la masculinidad, la femineidad, la sexualidad y el interior. En suma, se trata de una galería ecléctica que fusiona lo contemporáneo con estéticas pop y matices de técnicas clásicas.

Aquí su agenda de los próximos meses: Dirty Old Men & Young Studs (abril – mayo) es una muestra individual de Lothar Müller en la cual, a partir de imágenes fotográficas traducidas al código de la pintura, forma una red de producción que atraviesa su experiencia como varón maduro, abiertamente homosexual y explorador de límites eróticos. Müller presenta al público una modalidad de la identidad masculina que ha sido opacada por el estereotipo y por la imposición de cánones de belleza física sobre el varón gay, construyendo así un pabellón para mostrar sin ambages una virilidad apostada en el riesgo y en la exploración de los límites físicos y sensoriales.

Foto: Juan Astianax, Me caíste del cielo, acrílico, aerosol y collage sobre cartón, 122.5 x 137 cm, 2021

Foto: Lothar Müller, “Yo como Marlene”

Motivos para volar (junio – julio) es una exposición de Juan Astianax quien, a través de sus pinturas y dibujos, hace una revisión de algunos de los movimientos artísticos modernos europeos del siglo XX. Con un ánimo local contundente, su obra le permite manipular lo kitsch a través de una nueva mirada. Así, a través de la mezcla de una iconografía pop-posmoderna y la pintura mexicana de rótulo, sus formas tienen un acento icónico, insólito y raro que le confiere a sus piezas un sentido post-holocaústico atractivo.

*Alumna de séptimo semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


(CDMX) MAIA Contemporary

Dirección: Casa Basalta: Colima 159, Roma Norte Teléfono: +52 55 8434 9599 Horario: Martes a miércoles de 11:00 a 17:00 hrs. Jueves a sábado de 11:00 a 20:00 hrs. Domingo de 12:00 a 18:00 hrs. info@maiacontemporary.com

Texto: Rodrigo Oropeza Adame* Fotos: Cortesía de MAIA Contemporary

Como está estipulado por la UNESCO “los procesos de globalización y de transformación social, por un lado, crean las condiciones propicias para un diálogo renovado entre las comunidades pero, por el otro, también traen consigo, al igual que los fenómenos de intolerancia, graves riesgos de deterioro, desaparición y destrucción del patrimonio cultural inmaterial”. En esta línea, entre el 19 de febrero y el 15 de abril de 2022, MAIA Contemporary presentó COCIJO, una exposición de Sabino Guisu que giró en torno a la pregunta por los dioses y su fuga en el sistema de creencias contemporáneo. Guisu se planteó esta exposición al encontrar una urna funeraria del dios Cocijo, deidad de la lluvia y del rayo entre los antiguos zapotecas, en el Kimbell Art Museum, en Texas. Así, tras ser testigo de cómo un objeto tangible se encontraba encerrado en una prisión institucional, decidió rescatarlo a través de su valor simbólico, es decir, de su aspecto intangible.

formatos para crear piezas que sirvan como portales para ingresar a otros reinos de existencia”. Así, al pensar la manera en que nos comportamos en el mundo como individuos, la propuesta es retomar la conciencia llegando, según las enseñanzas de Buda, al Sūnyata o la vacuidad. Más adelante se presentará en el espacio un solo show dedicado al maestro Pedro Friedeberg.

La actual exposición de MAIA Contemporary se titula PORTALS AND TRANSITION / EARTH AND OCEAN y estará hasta el 28 de mayo. Se trata de una propuesta donde la galería se une a la residencia artística Śūnyatā Sri Lanka, para mostrar el trabajo de los creadores Aaron Glasson, Aleph Geddis, Caledonia Curry (Swoon), Mario Arroyave, Remed y Ricky Lee Gordon (quien auspicia este proyecto de residencia para artistas). Expresando la importancia del valor del alma que habita nuestros cuerpos, esta exposición alude a la pregunta: ¿cómo salir de la ilusión? En ese sentido, “todos los artistas exploran diferentes medios y *Alumno de sexto semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


Espacio Arterial (CDMX) Texto: Natalia Carreón*

Fotos: Cortesía de Espacio Arterial Espacio Arterial es la galería de la Universidad de la Comunicación que, desde noviembre de 2014, ha fungido como centro multidisciplinario de exhibición artística y cultural, y laboratorio para el estudiantado de la licenciatura en Comunicación y gestión de la cultura y las artes. De tal suerte que el espacio ha permitido a quienes estudian esta disciplina aplicar de manera práctica el conocimiento teórico adquirido en las aulas. El alumnado es, pues, el encargado de gestionar Espacio Arterial: presentan el proyecto que desean exponer, lo programan, realizan la curaduría y museografía, recaudan los fondos y convocan a la prensa, entre muchas otras labores de esta profesión. Esto les permite materializar sus ideas en un proyecto tangible mediante el cual adquieren las herramientas y habilidades necesarias para desenvolverse profesionalmente en su campo. Paralelamente, Espacio Arterial cuenta con su propia app que contiene las audioguías para acompañar los recorridos de todas las exhibiciones vinculadas con la Universidad. Actualmente y hasta finales de mayo podrás utilizarla para visitar la exposición de Objetos y Literatura en el Museo del Objeto (Colima 145, Roma Norte).

Aquí la agenda de actividades:

El próximo mes de junio traerá dos muestras imperdibles. A través de la materia de Proyectos culturales impartida por Daniela Mar, alumnado de segundo semestre realizará una exposición ingeniosa sobre el impacto del color en la psique humana. En ésta se exhibirán objetos y fotografías que dialoguen con la temática. Por otro lado, alumnos de posgrado de la asignatura de Seminario de estética y arte contemporáneo impartida por Plácido Merino realizarán una muestra que incorporará distintas instalaciones y ready mades. Hacia el mes de agosto se presentará una exhibición colectiva acerca del diablo y sus distintas representaciones simbólicas, gestionada por Edgar González (@edgartoad). Durante el mes de octubre podrás visitar Ausencias, una exposición multidisciplinaria y colectiva gestionada por alumnas de sexto semestre, cuyo eje temático gira en torno a los vacíos y la incertidumbre que se genera al perder a un ser querido, ya sea por causa de muerte o un distanciamiento en el plano terrenal. ¡Síguenos en redes sociales para conocer más detalles sobre las actividades que tenemos programadas!

Dirección: Zacatecas 120, Roma Norte Horarios: Lunes a Viernes de 10:00 a 18:00 hrs. @Espacio Arterial

@espacioarterial

*Alumna de sexto semestre de Comunicación y gestión de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación (@naatcarreon, natalia. carreong@gmail.com).


Dirección: Avenida México 200, Col. Condesa Horarios: Lunes a sábado de 9:00 a 19:00 hrs. @Casa UC @casa_uc

(CDMX)

Casa UC Texto: Belena Hesles Ferreiro* Fotos: Ixnic Kasiopea - Cortesía de Casa UC

CASA UC es un espacio cultural de exhibición que busca la formación continua para todo público, ofreciendo herramientas que les permitan gestionar y crear diversos proyectos en torno a la cultura, el arte, el diseño, las infancias, la equidad y el pensamiento crítico-creativo. Este emblemático lugar, ubicado en una preciosa casa en la Condesa, aprovecha la diversidad de sus espacios para ofrecerle a los y las espectadoras experiencias en todos los sentidos; desde exposiciones, talleres, diplomados, cursos, proyecciones y performances, hasta experiencias gastronómicas.

Entre otras actividades que tendrán lugar en 2022 se encuentra Volumen 2, el cual incluirá proyectos en torno a la Biocultura en México. Así, la programación a lo largo de este año se centrará en exposiciones de distintas escalas con la finalidad de mostrar los contextos y los diversos esfuerzos que se están haciendo en el país en términos ecológicos, artísticos y culturales.

Volumen 1 fue el programa inaugural que se llevó a cabo durante la semana del arte en la Ciudad de México, la cual tuvo lugar del 10 al 13 de febrero. Esta exposición contó con una serie de actividades artísticas, comerciales y gastronómicas de gran calidad. El concepto inaugural fue el norte, la frontera, la Baja, el desierto y el lugar que habita entre los sueños y creaciones menos visibles en los espacios públicos y privados de la cultura nacional.

Durante el mes de mayo, encontrarás una exposición cuya temática muestra distintos aspectos relacionados con el aguacate, el milenario fruto mexicano. La muestra cuenta con servicios de audioguía para una mejor comprensión, por lo que les recomendamos llevar audífonos. Estén pendientes también de nuestros performances, presentaciones de libros, muestras colectivas y demás proyectos multidisciplinarios.

*Alumna de séptimo semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


Dirección: Campos Elíseos 218, Col. Polanco Teléfono: +52 555327 7782 Horarios: Abierto www.grupopresidente.com @intercontinentalmx Visita guiadas: Daniela Alcázar, Directora de Caminarte México Gallery caminartesma@gmail.com Informes y venta de piezas: Isabel Azpiri, Relaciones públicas del Hotel Presidente InterContinental Isabel_azpiri@grupopresidente.com

Hotel Presidente (CDMX) InterContinental Texto y foto: Alejandra Bárcena* En colaboración con el Consejo Leonora Carrington y Caminarte México Gallery, el hotel Presidente InterContinental Ciudad de México inauguró el pasado 24 de marzo la exposición “El recóndito mundo de Leonora Carrington”. Nuevamente, este lujoso y prestigioso hotel de Polanco, abre sus puertas al arte para el deleite de sus huéspedes y visitantes. La exhibición “El recóndito mundo de Leonora Carrington” cuenta con más de 40 piezas con fantásticos personajes creados por esta emblemática y surrealista artista plástica de origen inglés. Entre ellas, se cuentan esculturas, litografías y joyería, mismas que estarán ubicadas en el lobby del hotel hasta el próximo 24 de junio.

La exhibición cuenta también con viniles que evocan bocetos y dibujos de esta prolífica artista nacionalizada mexicana con los cuales el recinto se viste por completo con el universo onírico de Carrington. La curaduría de las piezas de esta exhibición fue cuidadosamente hecha por Fermín Llamazares, Director del Consejo Leonora Carrington, así como por Pablo Weisz Carrington, hijo de la artista, y quien estuviera presente durante la inauguración.

“La arpista”, la imponente “Inventora del atole”, “La barca de cráneos”, “La palmista”, “La mujer gato” y “La serpiente voladora” son algunas de las espléndidas esculturas de bronce de mediano y gran formato que integran la muestra. En cuanto a litografías se encuentran “La hija del minotauro”, “Las distracciones de Dagoberto”, “Nueve, nueve, nueve”, “Personajes fantásticos”, “La silla Daghda” y “El último retrato de las Sra. Patridge”. En fin, un conjunto que, mediante las diversas técnicas que Carrington dominaba, llevan al surrealismo a su máxima expresión.

Con esta importante intervención artística, Grupo Presidente se congratula en celebrar 11 años de la creación de su programa Hospedarte, creada por iniciativa de Braulio Arsuaga Losada, CEO de Grupo Presidente con la finalidad de impulsar tanto a artistas consagrados como emergentes, así como para acercar a sus huéspedes y comensales al arte en general.

* Maestra, comunicóloga multidisciplinaria, activista, wanderlust, mindfulness y art craft (@alejandrabarcenamx).


Foto: Andrés Figueroa. De la serie “Bailarines del desierto”. 2014

Dirección: Calle de La Constitución 100 a, Centro Oaxaca de Juárez, Oaxaca. Teléfono: +52 951 514 2276 Horarios: Lunes a sábado de 11:00 a 19:00 hrs. @Resplandor Gallery @resplandorgallery

Resplandor Gallery Texto: Judith Romero* Es imprescindible pensar en los distintos saberes, prácticas y tradiciones que van entretejiéndose para conformar nuestra múltiple y diversa herencia cultural intangible. Es precisamente la fotografía, un medio privilegiado para conocer y reconocer no sólo la vida cotidiana en ciudades o comunidades, sino algunas formas de vida, de conocimiento y de saberes transmitidos (y transformados) a lo largo de los años. Las fotografías son parte fundamental de nuestra memoria social y colectiva. En Resplandor, no sólo contamos con libros de arte/fotografía referidos a estos temas, sino que hemos conjuntado un acervo visual, difundiéndolo en nuestra galería y a través de diversas exposiciones de carácter más específico relacionadas con la potente diversidad de Oaxaca. En torno a las herencias culturales intangibles, podemos mencionar los ambrotipos de Mauricio Toro-Goya (elaborados en Chile o en Oaxaca) —a partir de formas culturales barrocas, entreveradas y puestas en escena— o las imágenes de Andrés Figueroa de “Bailarines del desierto” —sobre las festividades realizadas en comunidades del Norte de Chile (Ayquina, San Lorenzo de Tarapacá, La Tirana y Las Peñas)—, exhibidas en nuestra galería, formando parte de nuestro acervo disponible. De Oaxaca, recordar las fotografías sobre “El carnaval de la Chinantla Alta” de Eleuterio Xagaat; “Las mujeres danzando en rituales celebratorios o los músicos que se desplazan en la región mixe” de Conrado Pérez y “El guajolote como símbolo festivo para la fiesta del caldo en la comunidad de Zautla, en la región zapoteca de Valles Centrales” de Octavio López; la obra de estos 3 fotógrafos indígenas fue expuesta en Resplandor, bajo la curaduría del investigador Abraham Nahón, quien las integró destacando la singularidad de su fuerza visual y el que formen parte de una resistencia

(Oaxaca)

cultural en nuestro país, a partir de la construcción de visualidades de estos pueblos originarios. Asimismo, en nuestro acervo disponible existen imágenes muy significativas sobre regiones y comunidades indígenas, mestizas y afromexicanas de Oaxaca de los fotógrafos Félix Reyes, Judith Romero, James Gritz, Yael Martínez, Pedro Valtierra, Nadja Massün, entre otros. Son imágenes que rescatan una mirada de autor, resguardando y difundiendo la pluralidad cultural, identitaria y étnica de entidades sustentadas por las prácticas (gastronómicas, culturales, artísticas) de sus pueblos originarios, mestizos y afromexicanos.

Foto: Judith Romero. De la serie “Totoperas”, San Blas Atempa, Oaxaca, 2021.

*Fotógrafa y diseñadora editorial. Dirige la Galería Resplandor desde 2015. Su trabajo fotográfico explora, desde una perspectiva feminista, aspectos vinculados al cuerpo, las identidades y las decisiones (políticas) que asumen las mujeres frente a los mandatos sociales.


Dirección: Andador Tabachín, Col. Roca Blanca Zipolite, Oaxaca, México Teléfono: +52 664791 4631 Horarios: Martes a sábado de 11:00 a 14:30 y de 15:30 a 20:00 hrs. @175ShowRoom @175ShowRoom

175 Show Room (Zipolite)

Hilo Dorado muestra de manera física ese hilo que nos une como comunidad detonando redes de trabajo a partir de la cultura. Se trata de una pieza que hace memoria del último cambio de paradigma de la humanidad—la pandemia y la masificación de la tecnología—buscando la participación real y física de la comunidad por medio de una acción artística. Esto, haciendo especial énfasis en la generación de memorias colectivas a través de las cuales fortalecer el tejido social y promover experiencias y diálogos conjuntos. Mediante la elaboración de más de 200 papalotes cuyas estructuras de palma de coco las realizaron voluntarios de distintas partes de México y el mundo, se detonó un diálogo con niños de Zipolite encargados de forrar y decorar dichos artefactos voladores. El proyecto de Hilo Dorado trabajó con más de 150 niños de 3 escuelas primarias de la Costa de Oaxaca. El material se volvió un elemento relevante en la comunicación entre los participantes, haciendo evidente las múltiples relaciones que surgen en un pueblo con las características de Zipolite. El uso del papalote como herencia cultural, no solamente de la región si no de la raza humana, así como los diferentes significados que se le dan en cada cultura, convergieron en una acción híbrida de múltiples capas. Para realizarla escogimos la fecha del primero de noviembre con el fin de honrar a los que trascendieron y motivar las relaciones entre los vivos, sin importar nuestras diferencias. Previo a la realización del evento y como complemento teórico para los participantes, se llevó a cabo un taller de arte acción “A Volar” donde se revisaron los trabajos de diferentes artistas como Francis

Texto: Cheram Morales*

Foto: Cortesía de 175 Show Room

Alÿs, Ulises Carreón, Felipe Ehrenberg y Vick Muniz. Todo esto se logró gracias a esfuerzos conjuntos entre amistades, voluntariado, profesorado e infancias participantes. Hilo Dorado fue una pieza que creé con el apoyo de 175 Show Room y la comunidad de Zipolite en noviembre de 2021. Para ver el registro de la acción consulta el QR al final del artículo.

Próximos eventos:

• “Kawaii Autobuses Volkswagen” de Edo Kanpachi (@edokanpachi). • “Una caja mágica: exposición fotográfica colectiva”. Resultados del taller de fotografía de niños en Zipolite. Facilitadoras: @ vidamaltrecha @pastorpuntocom @_mferm. • “Arrecife”. Resultados taller cerámica niños Zipolite y Arroyo 3. Facilitadoras: @pastorpuntocom @alguien.escarlata @lunnia_ @cheram.morales.

Registro de “Hilo dorado”, pieza de arte acción participativo en Zipolite, Oaxaca. Idea original de Cheram Morales.

*Artista visual contemporáneo y gestor cultural. Su obra está íntimamente ligada al trabajo en comunidad y el arte-acción. Cuenta con una licenciatura en Artes Plásticas por la UABC, así como con exposiciones individuales y colectivas en México y Estados Unidos. Actualmente radica en Oaxaca, donde gestiona el proyecto 175 Show Room.


La Nave (Xalapa)

Además de su función como centro de producción, La Nave busca convertirse en un espacio de reunión, intercambio y transformación social a partir de la creación artística colectiva. En sus instalaciones se realizarán talleres, pláticas y presentaciones, entre otras actividades. En la galería del recinto se presentarán exposiciones de artistas locales y foráneos, con la intención de ampliar la oferta cultural de nuestra zona.

Texto: Sebastian Kunold* Fotos: Djahel Vinaver

A tan solo diez minutos de la ciudad de Xalapa se encuentra el Rancho 2y2, Centro de Experimentación y Producción Artística. Fundado en 1966 por los multifacéticos artistas Rocío Sagaón y Georges Vinaver, este proyecto se configuró como un espacio en el que se entrelazan la agricultura y las artes. Actualmente, este centro es dirigido por los artistas Djahel Vinaver, hija de Rocío Sagaón y Georges Vinaver, bailarina, coreógrafa y ceramista, y Joaquín López “Chas”, artista con más de 40 años de experiencia en la creación de música original y montajes sonoro– musicales para teatro y danza. El Rancho 2y2 funciona como una sede de residencias artísticas, cursos, talleres, encuentros y eventos artísticos. Dentro de sus instalaciones se encuentran el taller de Cerámica “El Tomate”, el foro de artes escénicas “El Izote” y “La Nave - Taller Estudio Fotográfico” que cuenta con una galería independiente en la que se exhiben obras de distintas disciplinas del arte contemporáneo.

En esta primera etapa del proyecto, honraremos la herencia artística y cultural de los fundadores del Rancho 2y2. Articularemos una curaduría a partir de la obra realizada en el taller de cerámica “El Tomate” en un periodo de más de 4 décadas por una gran cantidad de reconocidos ceramistas. En esta exposición, las piezas históricas dialogarán con las de las nuevas artistas que conforman la nueva generación del “Tomate”, bajo la dirección de Djahel Vinaver, estableciendo así un puente entre el presente y el pasado. Con el mismo espíritu de intercambio creativo que guió la fundación del Rancho 2y2, recibiremos en la galería de La Nave, la formidable obra del artista visual, Luis Vargas Santa Cruz, del estado de Guerrero.

Agenda de actividades:

29/Abril – 15/Agosto – Retrospectiva del taller “El Tomate” – Exposición de cerámica con obra de Rocía Sagaón, Georges Vinaver, Djahel Vinaver, Gustavo Pérez, Tomás Owen, Angélica Moya y otros. 2/Septiembre – 27/Noviembre – La expulsión del paraíso – Exposición de Luis Vargas Santa Cruz.

El proyecto de La Nave, coordinado actualmente por quien esribe estas palabras, parte de la adecuación de una nave agro-industrial re-configurada como un taller-estudio de creación y experimentación fotográfica y de las artes visuales en general. Comenzó sus actividades a mediados del año 2021 y su galería fue inaugurada en diciembre del mismo año con la exposición fotográfica de mi autoría, “Carpa Memoria”.

*Fotógrafo y artista visual.

Dirección: Camino a Coapexpan S/N, Rancho Viejo, Xalapa, Veracruz. Teléfono: +52 22 8126 4586 Horarios: Visitas solo con cita


Dirección: Calzada La Aurora s/n, San Miguel de Allende, Gto. Teléfono: +52 415 688 3721 Horarios: Lunes a sábado de 10:00 a 18:00 hrs. Domingo de 10:00 a 17:00 hrs. moyshengallery@gmail.com moyshengallery.art@gmail.com @Moyshen the gallery @Moyshen

Moyshen The Gallery (San Miguel de Allende) Texto: Paula Sophia Segura Brito* Foto: Cortesía de Moyshen The Gallery

Fábrica La Aurora, un centro de arte y diseño en San Miguel de Allende, se ha posicionado como importante referente cultural en Guanajuato. La vibrante ciudad de época colonial ha sido testigo de cómo dentro de los muros de esta antigua fábrica textil, hoy se alberga el ingenio de muchos artistas consolidados y de mediana carrera como Rafael Coronel, José Luis Cuevas, Pedro Friedeberg, Fernando Andriacci, Leonardo Nierman, Fanny Rabel, Rudy Cottón, y algunos más jóvenes como Moyshen, Pierre Valls, Josh Rowell, Ángel Velásquez, Ana Rivera y Fernanda Guevara. Moyshen The Gallery se ubica precisamente en este recinto y tiene como uno de sus objetivos principales alentar a nuevos coleccionistas a identificar propuestas, discursos y tendencias para seleccionar conscientemente las piezas de su agrado y así comenzar a involucrarse en el mundo del arte. Sin embargo, otra de sus misiones es impulsar a artistas que aún no cuentan con una larga trayectoria como es el caso de Mario Kon, Lilliam González, Guillermo Azuela, Karina Puente, Jorge Serrato o Betzabé Diaz, de tal suerte que el arte pueda fungir como su principal fuente de ingresos.

Agenda de exposiones:

- Actualmente se exhibe M Cutouts: Ésta ha tomado la M de Moyshen, el artista, y Cutouts como referencia a una exposición de Matisse a la que Moyshen asistió en la Tate Modern de Londres en 2014. Lo que más llamó su atención de aquella muestra fue ese modelo de creación con recortes de coloridos brillantes que llevaban la técnica del collage a alturas inimagibables.

El arte siempre se inspira de formas, colores y propuestas que se van entremezclando para dar paso a nuevas creaciones. En el caso concreto de esta exposición persiste una citación al genio francés; sin embargo, Moyshen ofrece una serie de piezas llenas de novedad con la frescura de un lenguaje joven y actual, lleno de la riqueza de un artista que ha nutrido su carrera con experiencias internacionales. Así, haciendo alusión a Matisse, el artista utiliza elementos reales para representar la vigencia de los lenguajes modernos que enriquecen la cultura contemporánea. Sin duda, una muestra muy personal y emotiva a través de la cual podemos conocer mejor el bagaje cultural del artista, qué y quiénes le inspiran, y cómo logra conjuntar todos los elementos en su creación.

*Alumna de cuarto semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


Dirección: Callejón de las moras 118 B, Col. 20 de noviembre, Tijuana, B.C.N. Teléfono: +52 664 610 3723 / 664 686 6791 Horarios: Lunes a viernes de 9:00 a 19:00 hrs. www.lacajagaleria.com @lacajagaleria @lacajagaleria

(Tijuana) La Caja Arte y Cultura Texto: Nora Iselina Trovamala Landa* Con los pies en la tierra y la sensualidad en el alma, La Caja Arte y Cultura exhibe “De Barroco a Matérico”, una muestra póstuma del maestro bajacaliforniano Álvaro Blancarte que estará hasta principios de julio. Monserrat Sánchez Soler, curadora invitada de la galería, nos ofrece una breve descripción en sus propias palabras: “Álvaro, uno de los artistas fronterizos de mayor prestigio, maestro, pintor, escultor y muralista, pilar del arte en la región, ha sido un incansable productor y explorador del alma. Dentro de los elementos primigenios que lo inspiraron se encuentran las pinturas rupestres, el colorido del paisaje local, la magia y el erotismo, de ellos germinaron varias de sus series de pinturas, entre las abstractas fueron “Barroco y Matérico” las más destacadas. Para la creación de su arte utilizó tierras marmolinas y cementos teñidos en distintas tonalidades, aplicados en capas sobre la superficie para crear, con elementos abstractos, formas, colores y texturas que saturan el soporte, creando un lenguaje propio. Texturas de carga que se parten, se abren y se desgarran sobre la tela. Texturas que son como la piel sobre la que el artista agrega elementos, ya sea pintados, esgrafiados o con materiales agregados como hilos y botones en ropajes”. Continuando nuestro recorrido y recogiendo las herencias culturales inmateriales de los artistas, nos encontramos con la técnica Rakú. Esta técnica tradicional oriental de elaboración de cerámica, se cree que tuvo origen en Corea. Sin embargo, es en Japón donde ha cobrado mayor auge. Desde finales del siglo XVI, el Rakú atrajo a los maestros del té quienes, influidos por la filosofía budista, sintieron un singular placer en el tratamiento de esta arcilla. Alex Preciado es el encargado de impartir talleres de esta técnica La Caja, donde quienes asisten

Fotos: Cortesía de La Caja Arte y Cultura

aprenden a modelar piezas cuya transformación físico-química se traduce en efectos metálicos, nacarados y cambios sorpresivos en el color de las superficies.

Agenda 2022:

Galería • Sala Principal: De Barroco a Matérico, Álvaro Blancarte. • Salas Individuales: Los Hermanos Einar y Jamex de la Torre, Garzón Masabo, Andrés Ferrandis, Hugo Croswhite, Marco Miranda, Fernando Cervantes, Carlos Cea, Jaime Ruiz Otis, Enrique Avilez, Elizabeth Nepomucena, Bruno Reyes y Miguel Ángel íñiguez. • Sala de Usos Múltiples, exhibición colectiva: Los emergentes: Eddy Benitez, El Fide, Guadalupe Vidal, Nereida Dusten, Aida Urbina, Johans Ponce, Trillizos Torres Pachecho, Os Vz y Omar Khalid. Extensión Académica • Pintura, cerámica, diversos horarios, matutinos, vespertinos y en sábado. • Diplomado de Joyería profesional • Diplomado de Apreciación de las Artes Visuales (Edición no. 15). • Masterclasses: Aproximación a la técnica de Caravaggio, Collage Abstracto, Pastel Seco, Narrativa del dibujo improvisado, Posibilidades de la forma, De Oaxaca a Tijuana (Creación de un personaje en barro). • Taller de Cerámica Rakú: Técnicas: naked Rakú, Rakú primitivo, Pelo de Caballo (Cola), 16 sesiones. Espectáculos • Tributo a Herb Albert y su Tijuana Brass, a beneficio del programa Arte para Ciegos (2da Edición). • Jazz y Mood, 7 de mayo, 8:00pm. Concierto por Cuarteto Frontera.

*Periodista egresada del Centro Universitario en Periodismo y Publicidad.


Dirección: Flores Magón 7401 (2ndo. piso), Zona Centro Tijuana, Baja California Norte Teléfono: +52 55 664 3752689 Horarios: Lunes a sábado de 13:00 a 18:30 hrs. www.angulogaleria.com @angulogaleria @angulogaleria

Ángulo Galería (Tijuana) Texto: María Fernanda Ruiz Gil* Fotos: Cortesía de Ángulo Galería

Ángulo Galería es un espacio nuevo en la zona centro de Tijuana. Se trata de un recinto urbano sui generis, rodeado de oficinas y consultorios médicos, y ubicado a unos pasos de la famosa y tradicional Avenida Revolución (La Revu); esa calle donde la comunidad tijuanense y el turismo californiano convergen gracias a las distintas propuestas de esparcimiento que ofrece: tradicionales cantinas, bares mixológicos, taquerías, restaurantes gourmet, etc. Es en este contexto donde nace Ángulo Galería, un espacio cultural propuesto por el empresario tijuanense Alex García, a través de la fusión de un recinto que combina un lugar de oficinas y la recién creada galería. Inaugurada en verano del 2021 durante la pandemia del COVID-19, Ángulo Galería es una plataforma que promueve no solo la venta y exposición de obra de las y los artistas, sino también la oportunidad de encuentro, análisis, diálogo y acercamiento con el público. Con la coordinación de Leobardo García Córdova, se trabaja para lograr lo anterior por medio de exposiciones, pláticas y talleres de todo tipo en los que los artistas tengan una conexión directa con el público. Así, como la formación de públicos y la interacción son dos de los cimientos de este espacio, todos los eventos incluyen pláticas y recorridos guiados a las exposiciones en turno. Actualmente se exhibe una muestra que conjuga obra de Irma Sofía Poeter y Franco Méndez Calvillo. La primera con tres de sus series: Mandalas, Espejos y Memorias, y el segundo con Cuerpos de agua y Universo privado. Eventos próximos a realizar: • Charla de apreciación del arte. Evento mensual, gratuito. • Paint and drink, impartido por Iván Arevalo (@arte.ivanarevalo). • Noche de galería. Recorrido guiado con la/el artista por su exposición. Cerveza local, vino de la región y ambigú por un chef tijuanense invitado. • Ceremonia del té. Performance a cargo de Alex Jacott y Formosa Bonita (@formosabonita). • La siguiente exposición será con dos artistas mexicalenses: Pablo Castañeda (un paisaje y un bodegón) y Gabriela Badilla Kanagui (el detalle de una pieza con una mirada).

*Alumna de segundo cuatrimestre de Periodismo en la Universidad de la Comunicación.


Dirección: 147 W San Ysidro Blvd, San Diego, CA, EUA Teléfono: +1 619 428 1115 Horarios: Martes a sábado de 11:00 a 14:30 y de 15:30 a 20:00 hrs. thefront.casafamiliar.org @TheFrontArteCul

The Front (San Diego) Arte y Cultura Texto: Diana Karina López Correa* Foto: Cortesía de The Front

Este interesante espacio cultural de San Ysidro, California, ubicado a escasos metros de la frontera con Tijuana, ofrece una cartelera de actividades muy variada que siempre contempla las necesidades específicas de su comunidad. En este marco, teniendo en cuenta el interés de ANTiDOGMA por hablar de las herencias culturales inmateriales, su director, Francisco Morales, nos compartió las siguientes líneas: LAS VOCES QUE DESDE HACE SIGLOS HABLAN La tradición cultural en la zona de Tijuana - San Diego es sumamente rica y compleja. Desde tiempos milenarios hasta ahora, diversas tradiciones y conocimientos se han transmitido por generaciones en comunidades como los Kumiaii, Cucapás o Cochimíes. Culturas todas que, con una resistencia inmensurable, han sobrevivido guerras y fronteras. Aunado a esto, grupos humanos de diversas nacionalidades han hecho de esta zona su hogar: ciudadanos estadounidenses, mexicanos, haitianos y filipinos, entre otros, traen consigo sus propias herencias y las depositan aquí. Aunque a veces el lenguaje y otros factores se difuminen un poco, el arte ha sido un buen vehículo para transportar estas herencias, mantenerlas e, incluso, integrarlas.

Es decir, a través del arte, mantener vivas las voces que desde hace siglos hablan, pero también dar espacio a las nuevas y permitir que se integren. Añadiendo, de esta manera, capa tras capa al mosaico de culturas que, desde lejos, se mira como uno solo.

Agenda:

Junio - septiembre 2022 - Nuevas Narrativas Nativas. Exhibición resultado de nuestro programa de aprendizaje de arte del mismo nombre. Octubre 2022 - enero 2023 - Cosmogonía Kumiaii. Exhibición de trabajos contemporáneos de las comunidades Kumeyaay en EE.UU. y Kumiaii en Baja California, México. Marzo - mayo 2023 - Exhibición del Día de la Mujer. Exhibición colectiva de trabajos de artistas mujeres locales e internacionales.

Así es como nuestra misión en The FRONT, en tanto agentes culturales de esta región transfronteriza es tan vital. *Alumna de sexto semestre de Comunicación visual en la Universidad de la Comunicación.

Entrevista a Francisco Morales. Miriam Cinthia Cerna Rosales


OjoRojo Fábrica (Bogotá) Visual Texto: Alexis Gabino Quintal Núñez* Fotos: Cortesía de OjoRojo Fábrica Visual

Celebrando seis años de actividad en la ciudad de Bogotá, la fundación OjoRojo Fábrica Visual retomó todas sus actividades culturales y educativas desde el mes de enero, algunas de las cuales fueron limitadas por la emergencia sanitaria del COVID-19. A partir de mayo, podrán visitarles en su página web www.ojorojofabricavisual.org, la cual fue renovada para otorgar una mejor experiencia y para mantenerles actualizados sobre futuras actividades: talleres, encuentros, exposiciones, foto librería, etc.

Aquí su agenda para los próximos meses: Exposiciones

Cierre a finales de mayo 2022: I am Hello Kitty. Ensayo visual de la fotógrafa colombiana Joana Toro sobre los inmigrantes que trabajan vestidos de personajes icónicos de la cultura estadounidense en el Times Square en Nueva York, y que posan con turistas para generar un sustento mediante propinas. La serie provoca una reflexión sobre las tensiones culturales y económicas que enfrentan los inmigrantes latinos en Estados Unidos; incluye retratos de trabajadores informales en sus hogares y en el ámbito laboral, al igual que un diario personal de Toro, quien realizó este oficio al llegar a dicho país.

De junio a septiembre: La época: reportajes de una historia vetada. Desde hace más de un año y medio, la Fundación OjoRojo Fábrica Visual ha estado construyendo este proyecto que apoya a la Comisión de la Verdad en el esclarecimiento de las causas del conflicto armado colombiano. A través de la investigación de archivos visuales y de fotografía documental, se enfoca en la Guerra de Villarrica (1955) porque consideran que, debido a la censura de la prensa en la época, este periodo fundacional ha sido un “eslabón perdido” en el estudio de los orígenes del conflicto armado. El resultado del proyecto será un periódico mural y una exposición del mismo nombre. En el mes de octubre: Exposición Internacional de Fotografía Estenopeica y procesos alternativos de la imagen. Esta exposición será organizada por el Movimiento de Fotógrafos, en alianza con OjoRojo Fábrica Visual. El Movimiento de Fotógrafos nace en el 2012 como una organización compuesta por fotógrafos, artistas plásticos y visuales, ya sean autodidactas o profesionales, que usan la fotografía química, dando especial valor a la técnica estenopeica como herramienta en la formación y articulación de lenguajes dirigidos hacia la investigación, la creación artística y la memoria de los territorios.

Talleres/Proyectos educativos

Mayo: Taller de Producción Audiovisual, dirigido por Samuel Bregolin. El taller tiene como objetivo enseñar, a través de 36 horas de trabajo, una metodología práctica para realizar reportajes periodísticos en formato de video y mini-documentales. Octubre: Taller de fotografía estenopeica, dirigido por el Movimiento de Fotógrafos.

Dirección: Carrera 5ta #26c-62, Barrio La Macarena Bogotá, Colombia Teléfono: +57 314 351 8899

Horario: Miércoles a viernes de 15:00 a 18:00 hrs. Sábados de 11:00 a 16:00 hrs. www.ojorojofabricavisual.org OjoRojo Fábrica Visual @ojorojofabricavisual

*Alumno de segundo semestre de Comunicación y gestión de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


Dirección: Calle Zurbano 46, 28010 Madrid, España Teléfono: +34 913 10 3070 Horarios: Martes a sábado de 11:00 a 14:30 y de 15:30 a 20:00 hrs.

Galería Freijo

(Madrid)

www.galeriafreijo.com info@galeriafreijo.com Galería Freijo, arte moderno y contemporáneo @GaleriaFreijo @freijogallery

Texto: Brenda Naomi Morales Ramírez* Fotos: Cortesía de Freijo Galería

Esta galería nació en 2010 como un proyecto centrado en el trabajo con artistas de origen español y latinoamericano, cuya obra se caracteriza por la experimentación, el rigor formal y estético, y por propuestas conceptuales relevantes y críticas. Paralelamente a las exposiciones, Freijo lleva a cabo una actividad editorial derivada de la investigación, profundización y diálogo con los artistas. Hoy en día, la galería cuenta con un espacio dentro de sus instalaciones designado específicamente a albergar la biblioteca y que constituye un centro de investigación y documentación abierto al público. Además, entre sus actividades se cuentan presentaciones, encuentros, seminarios, programas de cine, charlas y conferencias.

Agenda:

• 15 de enero al 7 mayo: “Archivo de Misoginia Ilustrada”, de Raquel Manchado. Como parte del programa alternativo LZ46, enfocado a proyectos curatoriales de carácter experimental, la exposición individual de Manchado parte de la amplísima colección gráfica, compuesta por postales, viñetas, carteles, calendarios, periódicos, revistas y otros formatos de circulación masiva, publicados desde principios del siglo XX y que, bajo la coartada del humor, denigran

a las mujeres por su aspecto físico o por su comportamiento. A través de este proyecto, la artista crea una teoría sobre el imaginario social que la cultura ha creado sobre la mujer. • 12 de marzo al 13 de mayo de 2022: “S.L. Sus Labores (1974-1980)”, de Ángela García Codoñer. El título de esta serie que surgió durante los últimos años del franquismo, hace referencia a la profesión ambigua a la que se dedicaban las mujeres: tareas del hogar como los bordados, el patchwork o la confección, consideradas tradicionalmente labores femeninas y asociadas a lo largo de la historia del arte a la categoría de artesanía, un género inferior al de la pintura. En esta muestra García Codoñer se apropia de este lenguaje y lo traslada al medio de la pintura para así ascenderlo de categoría. convirtiéndose en un discurso político que subvierte la norma. • 24 de mayo al 16 de julio de 2022: “Famosos y anónimos, Retratos”, exposición colectiva. A través de diferentes soportes, desde el tradicional plata gelatina hasta la fotocopia, esta muestra presenta un recorrido por el mundo del (auto)retrato a lo largo de los siglos XX y XXI.

*Alumna de octavo semestre de Gestión y comunicación de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.


agradece a SETTERMEX S.A DE C.V., empresa mexicana que, desde 1964, provee al mercado soluciones de consumo sustentable en favor de la ecología, el patrocinio brindado para la impresión de este número con el cual se suma a la promoción y difusión del arte y la cultura.

agradece a CHOCODULCES, grupo familiar mexicano dedicado a la confitería y derivados del cacao con más de 75 años de experiencia en el mercado, el patrocinio brindado para la impresión de este número con el cual se suma a la promoción y difusión del arte y la cultura.

settermex.com.mx contacto@settermex.com.mx Teléfono: +52 (55) 5558 0488 / +52 (55) 5558 2713 @chocodulcesmx

@chocodulces


LATITUDES

Alberto Fierro:

Promover la cultura mexicana desde el exterior Texto: Miranda Román Méndez* Foto: Cortesía del Consulado General de México en Boston

En sus casi treinta años como diplomático en el Servicio Exterior Mexicano, el ministro Alberto Fierro Garza, Cónsul General de México, ha dedicado la mayor parte de su trabajo al ámbito cultural. Aquí un extracto de nuestra entrevista con él. ¿Qué implica irse del país y ver desde fuera la cultura mexicana, y al mismo tiempo tener que representarla? Es algo subjetivo, pero para mí, una de las cosas fantásticas de México es que te permite mostrar un poquito de todo, por ejemplo: la influencia prehispánica, la gastronomía, el folklore y también el arte contemporáneo. Mi reto ha sido cómo dar cuenta de toda su diversidad, del México de nuestros contrastes, del México cotidiano que tiene desde rock y jazz hasta danzantes aztecas fenomenales. Lo más interesante es cómo lograr hacer esta combinación. Sin embargo, una de las cosas que siempre ha sido compleja es la cuestión de los recursos. Porque somos muy dados a jactarnos de cuán importantes somos en el tema cultural, pero no le invertimos dinero a los proyectos. Yo he trabajado en el gobierno bajo el mandato de distintos partidos políticos y todos le han dado relevancia a la cultura pero bajo diferentes ópticas y crisoles. ¿Cuál es el papel que tiene la presencia cultural de México para las comunidades de origen mexicano en los distintos lugares en Estados Unidos y en otras latitudes? La cultura es algo vivo que se va modificando, se va nutriendo. Pensemos en el día de muertos; en los ochentas, con el mandato de CONACULTA (hoy Secretaría de Cultura), se empezó a dar más atención, auge y formalidad a las tradiciones mexicanas dentro de los ejes de política cultural nacional. Hoy, esta celebración se festeja más allá de nuestras fronteras; yo he sido testigo de cómo se celebra en Saint Paul, en Washington, etc. Con once millones de mexicanos nacidos en nuestro país y viviendo en Estados Unidos, la cultura de México es algo que se extiende, transmuta y llega a muchos lados con sus debidas adaptaciones. ¿Qué se promueve desde el Área de Cultura de Relaciones Exteriores y cómo la gente puede acercarse a estas instancias? Cada administración le ha dado un peso diferente; en la época en la que estuve en CONACULTA como director de Asuntos Internacionales, teníamos un comité conjunto con la Dirección de Asuntos Culturales de cancillería donde recibíamos todas las solicitudes de grupos artísticos mexicanos, y entonces se analizaban los proyectos y su pertinencia, tanto diplomática para cancillería, como cultural para CONACULTA. Esto ha ido modificándose, pero es importante mencionar que Relaciones Exteriores es la instancia que asigna los presupuestos a las embajadas y consulados alrededor del mundo, y que, a partir de él debemos diseñar y llevar a cabo los distintos programas culturales. Ahora bien, si algún artista está interesado en buscar apoyos por esta vía, dependiendo del país al que piensa ir, hay que acercarse a las agregadurías culturales de México en las embajadas o directamente a la Dirección de Asuntos Culturales de Relaciones Exteriores.

¿Cuáles son los apoyos para las mujeres y personas de la diversidad sexual? Desde la cancillería, en esta Administración, el Secretario Marcelo Ebrard ha propuesto una política exterior feminista para dar un lugar importante a la defensa de cuestiones de género, igualdad entre hombres y mujeres y la protección de las mujeres ante escenarios de violencia. En todos los consulados y embajadas hay un programa de protección y atención integral a las mujeres y a las personas LGBTIQ+ a las que estas poblaciones pueden acudir. Desde enero de este año, por ejemplo, ya expedimos actas de nacimiento con reconocimiento de género para personas trans. Entonces, tenemos una serie de medidas que tratan de salvaguardar los derechos de las personas históricamente vulneradas. ¿Hay alguna lógica o línea determinada de lo que la Secretaría de Relaciones Exteriores, según cada Administración, promueve en el ámbito cultural? Algo que ha sucedido en cancillería durante esta Administración es que se creó el Programa de Diplomacia Cultural por medio del cual se abrió, a todas las representaciones, un espacio donde podemos subir contenidos (diplomaciacultural.mx). En él se aprecian muchos canales en los que Francia, Sudáfrica, etc., suben elementos de lo que están haciendo. En fin, esta iniciativa habla de la gran riqueza de cómo, según el lugar, lxs embajadores o cónsules van eligiendo elementos distintos para promover en función del contexto en el que están. ¿Actualmente ha cambiado la postura de neutralidad desde la cancillería en cuanto a los conflictos internacionales como el de Ucrania y Rusia? Tenemos principios desde política exterior que siempre cumplimos, pero ha sido a través del Canciller y del Representante ante el Consejo de Seguridad de México que se ha expresado claramente el rechazo de México a la invasión de Ucrania y a la búsqueda de la negociación y el diálogo para la resolución del conflicto. Alberto concluyó dando su opinión sobre la profesionalización en el terreno de la cultura diciendo: “Invito al estudiantado de la Universidad de la Comunicación a que se sigan aplicando porque, entre más elementos formativos tengan en los diferentes ámbitos, más podrán aportar al campo en el que elijan trabajar.”

*Alumna de Comunicación y gestión de la cultura y las artes en la Universidad de la Comunicación.

Entrevista al Ministro Alberto Fierro Garza, Cónsul General de México en Boston. Sandra De Alba Del Riego


Lo que Ciudad Juárez nos heredó Texto y fotos: Mónica Elizabeth Arandia Mondragón* En 1993 yo apenas tenía 8 años y Ciudad Juárez ni siquiera existía en mi imaginación; busco en mi memoria y algún reportaje televisivo aparece borroso. Las mujeres y niñas en Ciudad Juárez fueron desaparecidas y asesinadas desde años atrás pero fue a partir de 1993 que las notas locales se convirtieron en noticias nacionales hasta obtener notoriedad internacional. Con ello, una serie de manifestaciones plásticas que, de manera orgánica y por parte de las familias de las víctimas, aparecieron donde los cuerpos fueron encontrados: cruces de madera pintadas en color rosa con el nombre de las mujeres asesinadas rotulado.

“Una cruz de éstas representa que encontramos a una chica asesinada en ese lugar; en donde quiera que hemos encontrado a chicas asesinadas nosotras ponemos cruces (…). Ya tenemos memoriales, es el simbolismo y es un constante recordatorio para el Estado: que el Estado tiene una deuda con nosotras, que nos ha fallado, que no ha protegido a nuestras hijas, pero nos ha fallado también al no darnos justicia y al no tener a los responsables de lo que nuestras hijas viven en esos últimos momentos en la cárcel.” Norma Andrade, madre de Lilia Alejandra, víctima de feminicidio

Actualmente, al caminar por el centro de Ciudad Juárez todavía se observan cruces negras pintadas con fondo rosa sobre postes de luz; la mayoría de éstas están muy cerca de las paradas de las rutas de camiones, las cuales marcan el lugar donde se vio por última vez con vida a alguna mujer o niña desaparecida. Esta campaña de pintas comenzó en 1998 de mano de Voces sin Eco, la primera organización compuesta por familiares de víctimas y cuyo principal objetivo fue presionar a las autoridades para encontrar justicia; lo cual supuso que la organización también auxiliara a las familias para lograr que las autoridades realizaran programas preventivos contra la violencia, exigiendo atención y trato digno. Estas cruces negras en fondo rosa tienen caducidad por su misma materialidad (se van desgastando, el color se pierde o la pintura se descarapela), pero también porque se encuentran en el espacio público y la publicidad o avisos de ocasión se han yuxtapuesto sobre ellas, al grado de volverlas invisibles ante la vista de las personas después de cierto tiempo. La postura oficial por varios años fue que a las mujeres las mataban por andar en ‘malos pasos’. Cuando las madres iban a presentar su denuncia al Ministerio Público las respuestas fueron: “No se apure, señora, al rato regresa. De seguro anda con el novio. Es más, cuando llegue me la presenta”. El Estado no tuvo la escucha ni la capacidad de acción necesaria para responder a quienes denunciaban; las decisiones de los agentes responsables estuvieron atravesadas


por una franca misoginia en medio de un contexto de violencia generalizada. Así, las familias, las otras víctimas (las que tienen que vivir con el dolor de la ausencia), buscaron los medios para hacerse escuchar y conseguir justicia a través de expresiones de memoria.

pañar a las víctimas, dar cursos de prevención de la violencia o hacer murales con los rostros de las mujeres y niñas asesinadas. Hoy, en 2022, la violencia en contra de las mujeres no ha parado; tan solo en Ciudad Juárez se han asesinado a más de 2300 mujeres y desaparecido a cientos. ¿Es acaso esta violencia nuestra única herencia? Me rehúso a creer que así sea pues, aunque la violencia continúa, las cruces que aparecieron como un objeto de duelo individual, al final, se convirtieron en un símbolo común reconocible para hablar de feminicidio. Así, tal como la herencia, esa transmisión lograda a través de los objetos materiales que se han mantenido a través del tiempo en nuestra memoria, las cruces rosas son testamentos que construyen una referencia significativa, una filiación a la exigencia de justicia, a la necesidad de garantizar que lo que les pasó a esas mujeres y a esas niñas no le pase a nadie más.

Como dice Elizabeth Jelin desde Argentina, la memoria es un trabajo y necesita ser producida. En ese sentido, destaca la labor de Esther Chávez Cano quien, junto con otras personas, empezó a llevar registro de mujeres y niñas desaparecidas y asesinadas a partir de las notas periodísticas locales. Este trabajo permitió establecer los antecedentes de la violencia feminicida en Ciudad Juárez y, más tarde, concebir dicho fenómeno como un problema estructural de ausencia de justicia. Desde un contexto francés, Pierre Nora, en su libro “Los lugares de la memoria”, afirma que no hay memoria espontánea, sino que hay que crear archivos, mantener aniversarios, organizar celebraciones, pronunciar elogios fúnebres y labrar actas, porque esas operaciones no son naturales. En 1994 se fundó la Coordinadora Pro Derechos de la Mujer (CPDM) que integró trece organizaciones civiles locales. Algunos de sus objetivos fueron exigir el esclarecimiento de los asesinatos, detener y castigar a los culpables, y crear instancias especializadas de gobierno. A lo largo de los años han seguido formándose más grupos que han trabajado incansablemente en acom-

Las cruces pintadas de rosa son objetos gestados políticamente que simbolizan una actitud crítica y combativa ante la violencia de género; son la herencia que nos permite recordar que, aunque no lo hayamos padecido de igual manera, los feminicidios siguen sucediendo. De tal suerte, cada que salimos a la calle marchando, llevando cruces, portando consignas o inscribiendo imágenes en el espacio público, traemos al presente esas huellas del pasado que nos negamos a repetir y así, buscamos trazar herencias o legados distintos que supongan la inscripción de nuevos sentidos y formas de convivencia para el porvenir. Por todo esto decido heredar la lucha de todas esas mujeres que ahora es nuestra: la resiliencia que nos convida a resistir y la determinación que busca no olvidar y exigir justicia siempre. Este texto lo escribí el 10 de abril de 2022, la misma semana en que fue desaparecida y encontrada sin vida, en una colonia vecina, la niña Victoria Guadalupe Rodríguez Martínez. En su memoria. *Licenciada en Arte por la Universidad del Claustro de Sor Juana, maestrante en Estudios Históricos por la Universidad Autónoma de Querétaro.


Foto: Colectivo Denuncia Gráfica

INASIBLE,

Reflexiones Actuales de Mujeres en las Artes Texto: Sheila Viridiana Caballero Nuño* Fotos: Cortesía del Centro Queretano de la Imagen Entrevista con Analí Nuñez, Coordinadora del Centro Queretano de la Imagen (CQI), quien generosamente nos comparte su labor en este espacio cultural, al tiempo que nos explica cómo se gesta la primera edición de INASIBLE, Reflexiones Actuales de Mujeres en las Artes. El agua puede surcar la tierra, las piedras, los muros y todo aquello que no se mueva y parezca duro… a punta de gotas obstinadas que, de a poco y en la oscuridad de una piedra sobre otra, hacen ceder, dando salida al camino que tenía que hacerse o al vigor de un cauce que termina por desbordarse y se hace grande e incontrolable. El agua es INASIBLE, toma todas las formas posibles sólo para derramarse cuando se colma. Igual de inasibles son los conceptos Mujer y Arte; pues en cuanto se han terminado de enunciar ya se han transformado. Es por eso que, de tanto en tanto –y mejor que sea cada tiempo corto–, es indispensable revisar la manera en que se va conformando, para cada una y para todas, el concepto Mujer y su hacer en las Artes, pues cada una va tomando un rumbo con formas particulares, rumbos distintos, tiempos específicos. INASIBLE se piensa como un espacio en el cual todos los cauces puedan tener lugar, en donde también sea posible encontrar a la otra en su mirar, hacer, decir y pensar. INASIBLE

El CQI es un proyecto que nace en 2015, teniendo como misión el

pasado, promoviendo de manera permanente el pensamiento crítico

resguardo, rescate, conservación y difusión de acervos fotográficos

que nos dirija al cuestionamiento.

del estado—desde los de relevancia histórica, hasta aquéllos que dialogan con lo contemporáneo.

Al preguntar, ¿cuál es tu antecedente personal del nacimiento de INASIBLE? Ella nos remite a marzo de 2020, planteándolo como un

La consigna es concebir la imagen como documento para contar

período de efervescencia ante la necesidad de abordar lo personal

con un registro histórico de realidades, de tal modo que en el futuro

como estandarte político. Fue entonces que Paulina Macías, quien en

sea posible establecer líneas de diálogo que nos lleven al análisis del

aquel momento era directora de la Galería Libertad, tuvo la iniciativa


de convocar a las mujeres que movían el elefante cultural del estado,

una apuesta que, a base de redes y voluntades, logró la sinergia de

por llamarlo de algún modo. Derivado de esta idea, nace el Club del

las más de sesenta artistas queretanas que se sumaron al programa

Tupperware, proyecto que tiene como objetivo reconocer el poder

de cuarenta y cinco actividades en las que se congregaron las más

de las reuniones de grupos de mujeres, como una comunidad que se

diversas disciplinas (teatro, fotografía, danza, escultura, pintura,

congrega, se conoce, se mira y, al mismo tiempo, se confronta. Lo

performance, grabado, creación colectiva, arte instalación, mesas de

anterior con el fin de abordar desde la fuerza y la sutileza los temas

discusión, literatura, restauración, música y talleres).

que nos preocupan, unen y solidarizan. La participación en estas actividades fue nutrida y enriquecedora. Sin embargo, una semana después, la efervescencia tuvo que ser contenida tras ser confinadas en los espacios personales por la pandemia. Entonces surge el cuestionamiento: ¿esto a lo que hemos dado inicio mantendrá la misma fuerza con el paso del tiempo? La respuesta vendría dos años después cuando las mujeres nos posicionamos desde los puestos directivos de los recintos culturales del estado. Y entonces nos reunimos con la intención de hacer que marzo sea nuestro, tal y como lo planteamos una tarde en la oficina del Centro de las Artes de Querétaro (CEART). Después de una profunda conversación, encontramos eco en nuestras palabras, experiencias,

Foto: Diana Cano, “Borré las paredes de las pintas”

inquietudes e historias, para dar continuidad a la labor que se inició a través del Club del Tupperware que propuso Paulina dos años atrás.

El programa completo fue alojado tanto en el CQI como en el CEART durante todo el mes de marzo de este año, porque solo un día no basta. Así, como una bella obra de arte colectiva, hecha a base de

el hacer de las mujeres artistas queretanas. La efervescencia estaba

generosidad, empatía, encuentros y arrojo, y contra todo aparente

de vuelta; lo comprobamos cuando en una sesión de trabajo logramos

pronóstico, INASIBLE se gestó como un surco imparable en el que

aterrizar en términos creativos lo que sería INASIBLE, Reflexiones

todas las reflexiones artísticas de las mujeres queretanas hallaron un

Actuales de Mujeres en las Artes 2022. El planteamiento inició como

eco imposible de contener.

Foto: Sandra Hernández

Queríamos crear un espacio seguro de visibilización y escucha sobre

*Asesora de proyectos artísticos. Programadora y productora artística. Actual Coordinadora del Centro de las Artes de Querétaro. Irremediable apasionada de las Artes. @ceartqro

culturaqueretaro.gob.mx


Vanguard Culture: 10 años de promover colaboración entre las industrias creativas de San Diego, California Texto: Reyna Aguiar y Adriana Martínez* Fotos: Cortesía de Vanguard Culture Vanguard Culture es una organización no lucrativa dedicada al avance de las industrias creativas de San Diego, California. Ofrece periodismo y cobertura de las artes de la región San Diego/Tijuana, eventos de vanguardia y desarrollo profesional con el fin de crear trabajos artísticos, unir a diversas comunidades e inspirar la colaboración entre las artes visuales, escénicas y culinarias. “Nuestra visión consiste en crear una comunidad artística y cultural próspera, diversa e inclusiva en San Diego que sirva como catalizador creativo y económico para la región y más allá” dice su directora, Susanna Peredo Swap.

La organización produce y divulga periodismo artístico de calidad así como experiencias culturales visionarias que responden a los cambios y desafíos de nuestro mundo contemporáneo. Desde 2018, ha recibido 27 premios a la excelencia en periodismo entre los que se encuentra el reconocimiento de “mejor sitio web de entretenimiento en San Diego 2021”. Su programación innovadora y multidisciplinaria incluso les ha ganado cobertura internacional a través de The National Geographic Channel. Sus eventos y experiencias culturales incorporan una variedad de industrias creativas y ponen a San Diego a la par con las ciudades culturalmente más vibrantes de Estados Unidos. Pero Peredo Swap está convencida que la programación más impactante es aquella diseñada para crear comunidad entre profesionales en las artes visuales, escénicas y culinarias. Estos programas incluyen oportunidades de networking que fomentan la comunicación y la colaboración entre profesionales de industrias creativas que normalmente no trabajan al unísono; por ejemplo, mezclando profesionales de cine con aquellos de artes visuales, o cantantes de ópera con aquellos que presentan poesía o artes culinarias. Vanguard Culture también programa una variedad de oportunidades para que *Directoras editoriales de ANTiDOGMA

los artistas emergentes obtengan acceso directo a un público amplio y a los líderes creativos e influencers más notables de San Diego. “Reconocemos las extraordinarias desigualdades que siglos de racismo e injusticia sistémicos han causado a las comunidades tradicionalmente marginadas de negros, indígenas y personas de color. Por eso trabajamos siempre con una mentalidad multidisciplinaria e inclusiva. Sabemos que las artes visuales, escénicas y culinarias tienen la capacidad única de reunir a personas de diversos orígenes, intereses y recursos”, continúa Peredo Swap. “Estamos comprometidos a elevar las voces del diverso cuerpo de profesionales creativos de San Diego / Tijuana y a proporcionar un espacio seguro para que los artistas de color creen, innoven e inspiren. La inclusión es la forma en que vivimos nuestro compromiso con la equidad y la diversidad, y celebramos las cualidades visibles e invisibles que hacen que cada persona sea única”, afirma su directora. Para más información visiten: www.VanguardCulture.org

Entrevista a Susanna Peredo-Swap. Miriam Cinthia Cerna Rosales


Gasto absurdo del esfuerzo Texto: Alma Delia Miranda Flores*

¿Se levanta con desgano en la mañana? ¿No disfruta de su trabajo? ¿Está harto de la cotidianidad? ¿Considera que su vida no tiene sentido alguno? No se preocupe, no traigo la solución a su problema. Pero le ofrezco algo mejor: una obra de arte que permite identificarse con su situación.

raspados o enfriar las caguamas) también representa la naturaleza del trabajo. Nos recuerda la parte física del “jale”, “la chamba” o el suplicio interminable de esas más de ocho horas, por medio de las cuales, ganamos dinero para subsistir.

Le presento “Paradoja de la praxis 1 (Sometimes Making Something Leads to Nothing/ Algunas veces el hacer algo no lleva a nada)” (1997), obra que consiste, literalmente, en ver a Francis Alÿs, el artista, trasladar un gran bloque de hielo durante más de nueve horas por las calles del centro de la Ciudad de México, hasta que éste se convierte en una manchita de agua que se evaporará rápidamente.

Asimismo, esta pieza es una crítica a la centralidad del productivismo en el sistema capitalista occidental y a la manera en la que las personas son clasificadas en diferentes esferas sociales según su profesión, el lugar donde trabajan y el número de ceros de su salario. Ya que en este paradigma, las personas se ven envueltas en una serie de acciones innecesarias o carentes de lógica, de igual o peor manera que empujar hielo por las calles.

Aunque, como lo dice el título del texto, todo parece un gasto absurdo del esfuerzo, la simple acción de empujar un bloque de hielo (que bien podría servir para unos buenos

Alÿs es un artista de Amberes que, en 1987, llegó a México como parte de una iniciativa del gobierno belga para asistir a los afectados por el sismo de 1985 y que se topó de

frente con la precaria situación laboral en este país, especialmente, con los esfuerzos frustrados de los trabajadores por mejorar sus condiciones de vida. Así, esta pieza es un antecedente directo de “Paradoja de la praxis 5 (Hotel Juárez)”, (2015), obra en la cual el artista patea una bola de fuego a lo largo de una zona conflictiva en Ciudad Juárez, exaltando la insatisfacción y frustración que supone llegar a nada, como muchos de nuestros intentos por mejorar nuestras condiciones de vida. Porque vivimos para trabajar, no trabajamos para vivir; envueltos en actividades cuyo fin u objetivo es nulo. “Me siento como Francis Alÿs, empujando eternamente un bloque de hielo”, recuerdo haberle dicho a mi padre uno de esos días en los que quieres tirar la toalla ante la monotonía y sinsentido de tu trabajo. A lo que él me respondió: “así me he sentido toda la vida”, mientras clavaba sus tristes ojos en la sencilla sopa que mi madre nos había preparado.

Francis Alÿs. Registro de la obra “Paradox of Praxis 1 (Sometimes making something leads to nothing)”, Ciudad de México, 1997.

Francis Alÿs, “Paradox of Praxis 1 (Sometimes making something leads to nothing)”

*Licenciada en Estudios e Historia de las Artes por la Universidad del Claustro de Sor Juana, con orientación en Gestión Cultural. Actualmente colaboradora en Corima Online, Gestora y Mirada Be.


Actos de faquirismo A diez años de “Pensamiento Puñal” de Lechedevirgen Trimegisto Texto: Juan Ki Buenrostro*

Foto: Cortesía de Lechedevirgen Trimegisto ¿Cómo apareció el texto en mi vida? Llevo dos meses y días con un profundo malestar en la boca del estómago. Arde. Comí vidrio, a lo mejor una espada o un machete, y no me acuerdo dónde. Llegó a mí en un momento donde lo necesitaba. Aunque a veces lo que uno necesita no es lo que se quiere. Estar en sus palabras lacerantes, apabullantes, cálidas como la sangre de la carne viva fue un ejercicio de (auto)escucha y (deliberada) inmolación. Porque necesitaba llorar, porque necesitaba sentirme acompañade. Por azar o por destino, la lectura del texto “Pensamiento Puñal” del artista queretano Felipe Osornio, conocide como Lechedevirgen Trimegisto (1991) Lechita para las amigas, coincidió con el décimo aniversario de su creación. El siguiente texto es una fiesta de cumpleaños, un acto circense, una mutua compañía y un diálogo con su autore. Elle es artiste y curadore, suele trabajar cercano al performance y a la fotografía. Posee un puñado de textos sobre su praxis artística en los cuales habla sobre las disidencias sexuales, masculinidades, la fragilidad, entre otros de sus temas favoritos. Suele ser relacionade con el posporno que luego abandonaría, la teoría queer la cual también abandonaría y criticaría fuertemente a favor de lo cuir. También, es gran analista sobre violencias simbólicas ojalá éstas últimas lo pudieran abandonar. Su oficio se me antoja el de un saltimbanqui, trashumante y escurridizo, nunca contundente y final, siempre en transformación. ¿No es ese un principio de la alquimia? Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra. ¿Y no es esa ciencia arcaica la que inspiró a Felipe a (re)nombrarse1? Magia, ciencia y arte se dan al mismo tiempo. ¿Cómo no iba a sentirme afectade por “Pensamiento Puñal” si las primeras letras acomodadas en el libro dicen Ésta es una escritura triste, hirviendo, a punto de ebullición? Está escrito para quien lo necesite. ¿Y cómo es este texto? Éste está cobijado por un proceso de edición, a cargo de Luis Sebastián Sanabria para editorial Dos Filos, que enmarca en tres partes la obra. La primera parte es una anunciación que responde a las preguntas qué es y desde dónde proviene su escritura. La respuesta: desde las heridas, desde las grietas. Posteriormente, prosigue con una dedicatoria que atiende a dar réplica a la pregunta, ¿para quiénes está escrita su prosa? Para les que dar en el blanco significa una amenaza irónica, pues son todos los colores menos el blanco. Luego, una interrupción. Existe en medio de la pieza un enorme cuestionamiento en páginas rojas. Leche se pregunta por qué puñal y se responde entre afirmaciones a dobles

sentidos: Soy Puñal porque cuando doy sexo oral soy fakir, soy tragaespadas, experto en camas de clavos, carbones calientes […] ¿Será que de ahí viene mi dolor de estómago?. Y continúa: Soy Puñal porque la gruesa aguja que me perforó la espalda en aquella biopsia de riñón a los 19 años todavía sigue adentro, pinchando un pedazo de tejido enfermo, por el trapo que tuve que morder, por el ardor de la anestesia. Sobre esto último, convoco la historia de la gestación de la obra. Leche me comenta, en una entrevista realizada el 24 de junio de 2022, sobre sus influencias: “Pensamiento Puñal surge después de haber tomado un taller con La Pocha Nostra. Después de haber tomado con Sayak Valencia un taller de poesía chicana. Y después de haber hecho un par de actividades de pospornografía, aquí en Querétaro, con Diana J. Torres”. Y prosigue contándome sobre el estado de su cuerpo en aquel entonces: “También coincide cuando me diagnosticaron Glomerulosclerosis focal y segmentaria, una enfermedad renal que no tiene cura, que es crónica y degenerativa. Fue casi al mismo tiempo que comencé a hacer arte. […] También se cumplió una década. A partir de ahí, empecé a tener contacto con la vulnerabilidad, el cuerpo y la enfermedad a partir de mis propias experiencias con la violencia, la homofobia, y el heteropatriarcado, en general. Entonces, todo eso se metió en una especie de licuadora y terminó coagulando en Pensamiento Puñal.”

Hemos de reunirnos todes, todas, todos. Júntense “lxs prostitutxs, lxs desobedientes-obedientes, lxs sumisxs, lxs esclavos a distancia”, lxs monstruos, lxs que se traban al hablar y a lxs que les da miedo el futuro. Engalana esta fecha un pastel preparado para la ocasión, creado para conmemorar palabras y sobre todo vidas. Es chocolate amargo combinado con clavos y betún asfáltico, sobre una cama de jeringas y cordones umbilicales. Y ahora nuestrx faquir puede soplar las velas o comérselas, lo que elle más quiera.

Entrevista a Lechedevirgen. Antonio Morales Rosado

1 Leche también me aclara que el cambio de nombre tiene que ver tanto con motivos artísticos relacionados con la inspiración de la lectura de ciertos textos de Hermes Trismegisto; así como un asunto de protección hacia su persona y su familia, especialmente por la línea de trabajo que ha explorado desde entonces.

*Licenciade en Ciencias del Arte y Gestión Cultural por la Universidad Autónoma de Aguascalientes, actualmente es maestrante en Historia del Arte por la misma universidad. Su trabajo comprende crítica de arte, ensayo creativo, cuento, dirección de arte y curaduría. Le interesa el arte niponés de la posguerra, el barroco y las producciones de las disidencias sexuales en el Bajío.


Poetas de Colima: entre letras y volcanes

Texto: Georgina Navarro Núñez* Fotos: Fernando Chávez, fotógrafo comalteco

Colima, territorio pegado al Pacífico mexicano, circundado por Jalisco y Michoacán, atrapado entre cerros, rodeado por un par de picos rocosos y una volcánica marea de sal y brisa. Ahí se acunan espacios donde se personifica el Paraíso: uno de primaveras, rosas moradas, parotas, humedad, cóbanos, heliconias, bestezuelas, cocos, tuba y cacahuates tostados. Desde ahí han crecido varias generaciones de personajes particulares; los más conocidos, con una estruendosa carcajada que contagia la alegría; otros que se dedicaron a la docencia y le legaron el método onomatopéyico; por supuesto, me refiero a Víctor Manuel Cárdenas y Gregorio Torres Quintero, pero también han pasado muchos otros autores que le han dejado a nuestro país letras, gente que ha brillado a nivel académico como Gloria Vergara, o que han venido de otras latitudes a inyectar teorías, pensamiento, ideas, como Lilia García Peña.

que, junto con otros compañeros, desde el 2013 se han encargado de gestionar y materializar un proyecto poético que atraviesa geografías volcánicas y poesía: el Encuentro Transvolcánico de poesía. Georgina Navarro, destacada en la traducción al francés de una serie de poemarios editados con Mantis Editores, de Luis Armenta Malpica, así como una figura crucial para compartir la poesía en espacios poco convencionales dentro del Estado de Colima, y quien también ha podido vincularlo con gente como Andrés Cisneros de la Cruz, del Volcán Popocatépetl, Lizeth

Colima se ha nutrido y ha nutrido de diversos modos. Ha venido gente importante además de Juan Rulfo y su inspiración por Comala. En nuestro estado han estado Rubén Bonifaz Nuño, Juan José Arreola, Efraín Bartolomé, Juan Gelman, o Luis Armenta Malpica, importante gente de letras y poesía. Y dentro de generaciones de autores que actualmente siguen vivos, podemos identificar el infatigable trabajo de una poeta como Verónica Zamora, quien lleva varias décadas ejerciendo con seriedad y rigor poético; así mismo, una poeta que conversa con la academia y el talento, Ada Aurora Sánchez. También podemos encontrar a alguien como Ángel Gaona, dentro de una generación que actualmente está delegando escuela y brillo lírico. En una esfera de poetas más jóvenes, encontramos a Georgina Navarro o a Oscar Robles,

*Artista multidisciplinaria, gestora cultural y madre. Actualmente radica en Colima, México.

Sevilla del Nevado de Colima, Mario Islasáinz del Pico de Orizaba o Dionicio Munguía del Nevado de Toluca. Dentro de los nuevos y jóvenes talentos, podemos ubicar a gente como Julieta Farías o José Carlos Juárez. Letras jóvenes e impetuosas que vienen a delimitar una generación que va fincándose un nombre en el panorama de las letras colimenses. Cada uno de los nombres mencionados, todos poetas de Colima, han podido compartirnos su trabajo poético y visual a partir de una convocatoria que el Colectivo Transvolcánico de Poesía compartió en diciembre de 2020, de manera digital, donde la poesía se hizo presente a través de la distancia. Hoy resuenan estas voces en la red redes, tejiendo palabras desde el trópico para volverlas flores en la mirada del lector curioso.

Poetas del Festival Transvolcánico de Poesía. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo


Escrituras Ilegibles Texto: Luisa Pastor*

Fotos: Cortesía de Luisa Pastor

El 28 de marzo de 1971, Roland Barthes envía una carta a Mirtha Dermisache en Argentina, al quedar profundamente impresionado por su trabajo en torno a la cuestión de la escritura. Dice Roland Barthes: “El Sr. Hugo Santiago ha tenido la gentileza de hacerme conocer su cuaderno de grafismos. Me permito decirle muy simplemente cuánto me ha impresionado, no sólo por la alta calidad plástica de sus trazados (esto no es indiferente), sino también, y sobre todo, por la extremada inteligencia de los problemas teóricos en torno a la escritura que su trabajo plantea. Usted ha sabido producir un cierto número de formas, ni figurativas ni abstractas, que podrían ubicarse bajo el nombre de escritura ilegible –lo que lleva a proponer a sus lectores, no los mensajes, ni siquiera las formas contingentes de la expresión, sino la idea, la esencia misma de la escritura. Nada es más difícil que producir una esencia, es decir, una forma que sólo se revierta sobre su propio nombre; ¿acaso los artistas japoneses no han invertido toda una vida en trazar un círculo que sólo se revierta sobre la misma idea de círculo? Su trabajo está emparentado con esa exigencia. Le deseo vivamente que lo continúe y que sea publicado” (Cozarinsky, p. 11). Obra: Luisa Pastor, “Escritura a dos voces”, serie Escrituras Ilegibles, 2022, 198.5 x 153.5cm, deconstrucción de dos cuadernos antiguos de contabilidad modelo 20 Astra y Diario sobre papel Hahnemühle Ultrasmooth 305 gr. Enmarcado: caja-urna de madera natural Koto y cristal antirreflejante.

Con esta sencilla carta de admiración, a principios de los años 70, Roland Barthes acuña el término de ‘escritura ilegible’, haciendo referencia a un conjunto de grafismos ininteligibles que, en busca del silencio, van más allá del orden racional y discursivo del lenguaje. Esta exposición gira en torno a la construcción de una escritura alternativa, hecha a base de pequeños fragmentos y arquitecturas de papel, en donde se escucha una polifonía de voces inconexas a partir de la transformación poética de una serie de libros de contabilidad.

cios, en busca de un lenguaje aneconómico, que transgrede la ley del discurso capitalista. Finalmente, en un acto poético que subvierte el principio de la escultura expandida de Rosalind Krauss, esta obra trata de condensar, de manera introspectiva y metafórica, una multiplicidad de significantes, con el fin de construir una serie de ritmos narrativos que dan voz a la intimidad del fragmento, más allá de la lógica económica que impone el Plan General de Contabilidad.

El trabajo que presento en el stand de la Galería Nordés (Santiago de Compostela, España), en ARCO Madrid 2022, lleva por título “Escritura a dos voces” y está realizado a partir de la fragmentación de dos cuadernos antiguos de contabilidad. A través del corte y la rasgadura, las hojas de registro crean un nuevo paisaje hecho de puntos, líneas y silen*Artista española (Alicante, 1977) cuyo trabajo atenta en contra de la organicidad de la obra tradicional y recupera la capacidad poética y política del fragmento gracias a un cuestionamiento crítico de la fuerza denotativa del lenguaje.


agradece a AIR DESIGN, empresa mexicana pionera en el diseño y fabricación de autopartes, piezas para agradece a AIR DESIGN, equipamiento médico y productos para mascotas, el patrocinio empresa mexicana pionera en el diseño y fabricación de brindado para la impresión de este número con el cual se suma a la autopartes, piezas para equipamiento médico y productos promoción y difusión del arte y la cultura. para mascotas, el patrocinio brindado para la impresión

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Graciela Iturbide, ¿Ojos para volar?, Coyoacán, 1991

COBERTURA ESPECIAL

Graciela Iturbide: de herencias y rupturas para encontrar lo propio Texto: Mariana Rubio de los Santos* Graciela es la mayor de trece hermanos. Con el peso de ser la primogénita de la familia Iturbide creció rodeada de tradiciones religiosas y conservadoras. Su madre les hacía la ropa hilando los textiles que conseguía su padre. Su abuela, interesada en educar la moral y la cocina publicó un libro de recetas para el hogar que incluía los platillos regionales para banquetes y también comidas diarias. Entre receta y receta se tomaba un momento para dar recomendaciones para cuidar al enfermo, para ser una buena ama de casa, procurar a la familia y contener los deseos, todo lo necesario para ser una dama. Hace unos años, Graciela reimprimió este libro y lo regaló entre sus familiares y seres cercanos. En la portada se distingue una mano que se acerca a tomar un pescado, sobre un fondo de pescaditos plateados que ondean en la superficie. Es una fotografía tomada en Oaxaca en 1997 que sirve como aquellas imágenes de pesca y caza que enmarcan los salones de banquetes de las casonas porfirianas. Con gestos como ese, Graciela Iturbide ha reinterpretado la herencia cultural a través de su mirada. Tras casarse y tener tres hijos comenzó sus estudios cinematográficos, aunque a ella le hubiera gustado ser escritora. Contactó con la sensibilidad fotográfica de su maestro Manuel Álvarez Bravo y de ahí surgió una relación que le cambiaría la vida. Como su achichincle o asistente, Iturbide viajó con él por México y se adentró en la cultura a través de las fiestas tradicionales, esa herencia cultural inmaterial que devela tanto de nuestra forma de convivir


y de percibir el mundo. Las fotografiaron, aunque nunca hicieron la misma toma. La foto tomada en Ocumicho, una comunidad indígena tarasca famosa por sus festividades, unida en sus tradiciones y guiada por la autoridad de los viejos, en el estado de Michoacán, da cuenta de ello1. En la imagen vemos a un niño de frente y de pie con los brazos cruzados, vestido de falda, pantalón, camisa y huaraches. Tiene el rostro cubierto con dos máscaras una de luchador y la otra, movida hacia su lado derecho, de papel maché con la cara de un viejo. Elementos de la cultura popular que nos recuerdan el eterno sincretismo en el que vivimos. Para los ojos de Iturbide es la imagen de Jano, con el embrujo de lo aparecido que implica reconocer lo viejo y lo nuevo, la fotografía se enviste de un nuevo significado que nos remite al dios bifronte de las puertas, de los finales y de los comienzos. Más tarde, como colega de Álvarez Bravo, Iturbide siguió aprendiendo de él la poesía del tiempo y de la vida misma. Graciela reconoce y agradece hasta hoy que la mayor enseñanza de Don Manuel fue esa mirada interior que da la libertad de conocerse y ser una misma. Después de todo, Graciela Iturbide escribe con esa mirada sensible a la luz.

Graciela Iturbide, Jano, Ocumichu, Michoacán, México, 1981

Graciela Iturbide, Pescaditos de Oaxaca, México,1997

Rosa Casanova identificó este empoderamiento femenino como parte del espíritu de época que acompaña también a los replanteamientos de la iconografía nacionalista2. La fotografía de Iturbide nos confronta con las mujeres indígenas, nos adentramos en momentos íntimos entre las mujeres seris deldesierto de Sonora y las zapotecas del Istmo de Tehuantepec. Sus retratos, ante todo, nos muestran la diversidad cultural a la que pertenecemos. La fotografía en la portada de este número muestra a una mujer seri con la expresión del desierto en su rostro, la aspereza del sol está marcada en sus arrugas y un gesto duro que reclama su lugar en el mundo. La postura y la mirada se enaltecen ante un punto de vista

Graciela Iturbide, Angelita pintándose, Desierto de Sonora, 1979

Francisco Miranda Godín “Ocumicho, una comunidad en fiesta”, El Colegio de Michoacán, 1983. http://colmich.repositorioinstitucional.mx/jspui/handle/1016/263 Rosa Casanova “Los sentidos de Graciela Iturbide” en Graciela Iturbide: Cuando habla la luz. México: Fomento Cultural Banamex, 2018.

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en ligera contrapicada que permite reconocer el valor de la vejez como el lugar de la presencia en donde las herencias culturales se conservan y se transmiten. Son testimonio de las vivencias de las comunidades y sus costumbres en las décadas de los setenta para Los que viven en la arena y también los ochenta en el caso de Juchitán de las mujeres. Los intercambios culturales quedan plasmados en sus icónicas imágenes, basta pensar en la grabadora que sostiene frente al desierto la Mujer ángel y las formas de referirse a Nuestra Señora de las Iguanas como la medusa juchiteca. La complicidad y el respeto a las costumbres permiten que la fotógrafa interprete y capture los testimonios de las culturas. Como afirmó Marta Dahó, el vínculo creado es su forma de compartir el acto fotográfico, “cada foto es el registro de un encuentro y una experiencia compartida”3. La anécdota que acompaña la fotografía de las Cholas con héroes de la serie de White Fence hace evidente este acto y recuerda también las diversas configuraciones de la identidad mexicana-estadounidense: el mural de los héroes de la patria entendido por ellas como mariachis.

Graciela Iturbide, Conversación, Después del rapto, Juchitán

Las cholas quisieron posar frente a los íconos culturales que les remiten a su herencia mexicana vivida en el este de Los Ángeles a finales de los años ochenta. Para Graciela Iturbide la fotografía también fue como terapia para enfrentar los miedos y, sobre todo, la pérdida de su hija pequeña. La vida le presentó la muerte e Iturbide decidió registrar el ritual del velorio de los angelitos (ceremonia fúnebre tradicional hispanoamericana dedicada a los niños que mueren) a lo largo del país. Este proceso de duelo dio pie a una de sus series fotográficas más conocidas. Después de acompañar a una familia en el cementerio de Dolores Hidalgo, Guanajuato, para enterrar a su angelito, la muerte se le presentó en un cadáver picoteado por los pájaros y le dijo “hasta aquí, Graciela”, según cuenta la fotógrafa cada vez que narra esta anécdota. Miró al cielo y una parvada de pájaros sobrevoló su mirada y quizás también, liberó su corazón. Los pájaros de la muerte pasaron a ser los pájaros del vuelo de la vida. En una entrevista que podemos leer en La Semana de Bellas Artes, Graciela Iturbide, reflexionó en torno a la potencia de las fotografías entre la realidad y su percepción: “La fotografía tiene el poder mágico de transformar la realidad, o es que el estado de ánimo en que te encuentras te hace elegir imágenes que satisfagan tu espíritu”4. Los autorretratos son ese lugar en donde su estado de ánimo busca acariciar su alma y calmar la angustia, como en ¿Ojos para volar?, con un pájaro vivo y uno muerto colocados ante sus ojos, lanzó la pregunta incómoda para digerir una crisis personal que la hizo dudar si debía seguir o no su práctica fotográfica. La reflexión es constante en el día a día de la fotógrafa. Su intuición es la que guía el camino. Los sueños, reconoció en una entrevista con Fabianne Bradu, “siempre han sido parte muy importante en mi trabajo”5.

Graciela Iturbide, Cholas con héroes, 1986

De sus viajes y recorridos, con el paso de los años, Graciela Iturbide ha girado su mirada hacia los objetos, rincones y huellas que nos conducen por la abstracción y exigen “nuestro

Marta Dahó, “Fotografías en cuanto espacio público” Revista de Estudios Globales y Arte Contemporáneo, vol.3 num.1, (2005), 233 Graciela Iturbide en entrevista con Ch. Zárate y E. Pérez Cruz en “La sembradora de imágenes. Graciela Iturbide” La Semana de Bellas Artes, num. 120, 19 de marzo de 1980, pp.8-9 Fabienne Bradu, Eyes to fly With Graciela Iturbide. Portraits, Self-Portraits, and Other Photographs, 2006.

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empeño para descifrarlos”6. Imágenes que remiten a experiencias específicas, como la de su viaje a Italia cuando tomó de guía ‘espiritual’ a Pier Paolo Pasolini. Visitó la ciudad de Ostia, en donde ocurrió su polémico asesinato y ahí ‘curiosamente’, según cuenta en la entrevista para ANTiDOGMA, se encontró con unas palmeras cubiertas, amarradas como verdugos. Esta serie de fotografías son un homenaje al cineasta, al volver al lugar de su muerte, Iturbide interpreta y se sorprende ante la referencia, quizás simbólica y fantástica, para dar un lugar poético de un acto controversial en la memoria cultural plasmada en sus imágenes.

memoria, las fotografías son testimonio de la herencia cultural que nos hace seres humanos: ritualidad, muerte, sexualidad, fiesta, huella y ausencia, siempre limitados por el tiempo. O será quizás, al contrario, como decía su maestro y ella repite como un mantra, hay tiempo. Es el tiempo lo que posibilita la existencia. Y de eso reflexiona últimamente en sus tardes, en torno al tiempo del mundo, a su origen y sus fuerzas creadoras, los paisajes y volcanes que también nos moldean y definen como personas. Al final, no queda nada más que la memoria, de los lugares que visita, de la familia y de los seres queridos, memoria de una misma. Eso concluye Graciela Iturbide en torno a la fotografía y su carácter transmisor de herencias culturales. Siempre y cuando se siga la receta que, según la fotógrafa, aplica para todas las artes: intuición, asombro, pasión y disciplina.

Graciela Iturbide, Dolores hidalgo, 1978

La extensa obra de Graciela Iturbide habla sobre la mirada y la presencia, la intimidad y la política, la poética y la abstracción. En un mundo que parece no tener

Entrevista a Graciela Iturbide. Esperanza Islas Arroyo

Graciela Iturbide, Ostia, Italia, 2007

Casanova, op. cit., 26.

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*Historiadora del arte con especial interés en la fotografía, la estética, las imágenes de la naturaleza y la sexualidad. Es asistente de Graciela Iturbide e investigadora independiente y actualmente escribe sobre paisajes lunares para su tesis doctoral.


Apropiación y extractivismo culturales: un llamado a la concientización

Texto: Alida Páramo Brotzman* y Andrea Arnal Aguilar** Fotos: Alida Páramo Brotzman

En la industria textil y de moda internacional existen dos conceptos, muy relacionados entre sí, que han ido cobrando cada vez más notoriedad dadas las lógicas económicas globales: la apropiación y el extractivismo culturales. La apropiación cultural es la toma e imitación de aspectos de una cultura por parte de otra, con fines de lucro y sin el debido (re)conocimiento de sus fuentes ni contextos (cosmogonías, usos y costumbres) de procedencia. Así, la apropiación implica también el vaciamiento del significado que originalmente le fue otorgado a determinada forma o diseño en la cultura creadora. Por su parte, el extractivismo cultural, aunque similar en muchos aspectos a la apropiación, lleva esta lógica leonina un paso más allá. Es decir, en este proceso se ve incluso el robo, la explotación directa o la destrucción de los recursos y las comunidades generadoras de dichas manifestaciones culturales. Sin embargo, por ponerlo de manera simplificada y sucinta, ambos fenómenos coinciden en el (ab)uso de creaciones de pueblos históricamente marginados para su consumo en el mercado capitalista. Tomemos como ejemplo la creación de textiles en la cultura indígena de Chinchero, en Perú; aunque bien podría pensarse en cualquier otra dentro del territorio mexicano. Para estos pueblos, los métodos de producción no solamente son una actividad económica sino un estilo de vida, una muestra de identidad y una conexión con sus antepasados y descendientes. Estos quehaceres son parte de su cosmovisión y, muchas veces, cuentan las historias de sus comunidades. Por su parte, marcas trasnacionales como BCBG, Nike y Oysho, por mencionar solo algunas, han copiado e incorporado diseños ‘autóctonos’ a prendas que ellas producen en serie y mercantilizan a precios elevados sin compensar a las comunidades dueñas de la propiedad cultural. Todo esto bajo el disfraz colonial de ‘haber descubierto’ dichas tradiciones y/o patrones.

Tejedora, Chinchero, Perú

Por eso, al momento de diseñar, producir y/o comprar prendas, consideramos de vital importancia hacer conciencia de las lógicas de opresión que se infligen sobre aquellos pueblos, autores de diseños y patrones, cuando no se les pide su consentimiento o colaboración, y cuando se les desprovee tanto del derecho al manejo de sus creaciones como de una justa compensación por el uso de su propiedad cultural. Ahora bien, como estas prácticas tan lamentablemente normalizadas son difíciles de revertir debido al reto epistémico, discursivo y económico que supone para las culturas indígenas iniciar acciones legales en contra de las empresas explotadoras, nos parece pertinente sugerir que, en tanto personas consumidoras, hagamos compras conscientes en las que: 1) verifiquemos el origen sustentable y respetuoso de los textiles, y 2) nos informemos sobre el valor cultural y el significado que llevan los patrones de las prendas, toda vez que cumplan con la primera condición.

Proceso de tinturas naturales, Chinchero, Perú *Alumna de sexto semestre de Diseño textil en la Universidad Iberoamericana. **Alumna de tercer semestre de Moda y textil en Centro, diseño, cine y televisión


Desde la génesis de nuestra ancestra Francesca Gargallo Texto y fotos: Gabriela Huerta Tamayo* El día que Francesca murió sonó la alerta sísmica. El epicentro del sismo ocurrió en una isla veracruzana. “Acorde ubicación para una siciliana”, divagué. Y las secuelas de la tristeza alcanzaron a Helena, su hija, y a tantos corazones que había tocado. Hoy me asiste la memoria, amalgama con afectos y preguntas, para ensayar unas líneas sobre el aliento compartido. Quienes salen de este mundo entran en el espacio de las genealogías. Ahora Fran es mi ancestra, cuando hace apenas un mes era mi amiga. Pienso que estas líneas existen porque ella ahora nos interesa. Los motivos pueden o no coincidir, pero el interés nos está vinculando. Bastante dijo e hizo ella sobre el papel o en la calle, con consecuencia, con la oreja parada, con apasionadas intervenciones, con carburantes contradicciones y desparpajadas expresiones, con humor para señalar los absurdos de las opresiones. Todos ellos, gestos agradecibles para no reducir su figura y su herencia a una rígida óptica. Poco después del 2010, el mundo se le abría de nuevo y celebraba volver a escribir, a escribir literatura, pero sin dejar jamás el ensayo. Unos años después, dejó la academia al concluir el último de sus tres libros de feminismo (Ideas feministas latinoamericanas, 2004, ampliada en 2006, Antología del pensamiento feminista nuestroamericano, trabajo colectivo, 2009, y su investigación Feminismos desde el Abya Yala, 2010). Así llegó la época en que se decantó su trilogía Al paso de los días; La costra de la tierra; Plan de mujeres, una crónica de la comunidad bicicletera, un nuevo libro de cuentos, otro sobre estética, textos con las y los bordadores por la paz y contra los feminicidios. De sus antiguos poemas, brotó Se prepara la lluvia a la tarde y, entre los más recientes, Si puedo participo, el más fresco, de fines de febrero de 2022, una antología de su obra que tradujeron y publicaron sus compas de Italia y que ilustró Helena.

un mundo con otros mundos, zurciendo el tejido social que nos tocaba de cerca. Y, aunque en nuestra amistad lo bailado fue lo que fue, me queda una deuda con ella. Una tal que adquirí por insistencia de ella y no por alguna falta mía. Para liberarme, debo expresar lo que ella quería que dijera: ella, Francesca, era una escritora, una narradora, de las que toman la narración tejida en el diálogo presencial. Su literatura y sus ensayos (sobre feminismos, historia, política, ecología, filosofía, ética, estética, derechos humanos, violencias) fueron dichos con los resortes de la experiencia del reconocimiento, la escucha y la discusión. Entendía esto como la razón narrativa de su vocación libertaria. Narradora, pues, con tablas en el espacio público, se admiraba y aprendía de las comunidades que reivindicaban la convivencia; el tiempo contra el del trabajo explotador; el diálogo, las artes y las risas. Confrontó con muchas otras y otres las violencias del patriarcado, del racismo, del capitalismo, de la colonización. Se ganó, para mi recuerdo y el de muchas, el reconocimiento de sus fuertas compañeras, desde abajo; el de tener su nombre en la Glorieta de las Mujeres que Luchan.

Por el año 2010, le propuse y convine con Fran publicar en línea la Antología de pensamiento feminista. Así, primero nació el portal de ideasfem en WordPress y, poco después, lanzamos su sitio con sus ensayos y obra literaria. Paralelamente nos fuimos encontrando en manifestaciones, acordábamos con más amigas salir a eventos, museos o ver pelis; echábamos porras a las poetas en sus presentaciones de libros; tradujimos a Flora Tristán y a Éléonore Blanc; viajamos a la montaña de Guerrero y a los caracoles de Chiapas; la acompañé en su viaje al Coatepec del Mezquital para encontrarse con Coatlicue y Malinalxóchitl, que figuran en su última novela, aún inédita. Figura convocante, una cita con Fran significaba muchas veces reunirse con más amistades. Sus redes podían tener identidades varias, pero se cruzaban con otras y, con frecuencia, para hacerse más grandes cuando los proyectos demandaban manos con diferentes habilidades. Por ahí, una podía tener una probadita para ver cómo sería *Curadora, cuidadora, activista y archivista feminista. Como egresada de filosofía, transita en el campo del arte, la política, la historia y la ética para comprender y alentar el cambio social. En ocasiones ha sido traductora y otras, fotógrafa documentalista.


Foto: Voladores de papantla / FreeImages.com

Mujeres e infancias ¡a volar! Texto: Sofía Neri Fajardo* La vida transcurre entre caídas y ascensos alternados. Caer, por lo general, se asocia con el fracaso o la llegada del fin, en contraste con la ascensión, idea percibida como inicio, trascendencia o conocimiento; sin embargo, cuando ambas acciones operan juntas, surge una lógica complementaria llamada renovación. Una manifestación del México prehispánico es ejemplo de ello: la Ceremonia ritual de los voladores, declarada en el 2009 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en el 2009, como parte de las herencias culturales inmateriales, es decir, de las “tradiciones o expresiones vivas heredadas de nuestros ancestros y transmitidas a nuestros descendentes”, como se señala en la página web de dicha organización, en su apartado sobre el tema. Las prácticas rituales tienden a percibirse íntegras, sin posibilidad de modificación. Sin embargo, su inmaterialidad las hace actos abiertos, incompletos y, por tanto, perfectibles, con la plasticidad necesaria para adaptarse a los cambios que los tiempos reclaman. Tal es el caso de la también conocida como danza de los voladores, cuyo origen se data alrededor del 600 a.C. Desarrollada sobre todo en el área huasteca de la Sierra Norte de Puebla y el Totonacapan veracruzano, hoy continúa practicándose en diversas áreas del país, sobre todo en el altiplano central e incluso en Centroamérica.

Esta ceremonia se ha transmitido de generación en generación por medio de la tradición oral, a través de ritos y expresiones artísticas, absorbida como actividad sincrética entre lo prehispánico y lo colonial. Su continuidad depende del uso social sostenido por sus protagonistas, quienes han mantenido su significado existencial y de cohesión comunitaria, ya que —a diferencia de los bienes muebles e inmuebles, cuya preservación es “restaurable” por medio de esfuerzos técnicos, concretos, tangibles— el frágil legado cultural de las herencias intangibles depende de voluntades dispuestas a crear conocimiento en torno a ello por medio de la documentación, la difusión y la apreciación sistemática de dicho bagaje; es así que, aunque enmarcadas dentro de sus propias regulaciones internas, las variantes regionales y simbólicas de cada grupo han pervivido de acuerdo con sus idiosincrasias locales. Por su parte, la propia UNESCO editó y revisó en 2008 el expediente técnico de este ritual conformado por quienes lo postularon, que, aunque no exhaustivo, sí incorporó un amplio desglose del fenómeno, con información sobre la leyenda que le da sentido, las relaciones de miembros practicantes involucrados, los marcos jurídicos, las zonas donde se celebra, los proyectos de organización en asociaciones y consejos, en un intento por documentar y sistematizar ciertas directrices.


La ceremonia de los voladores está compuesta por elementos religiosos, míticos y lúdicos asociados a la fertilidad y la permanencia, nutridos de la suma de tradiciones enriquecidas con sus distintos orígenes. Este performance ancestral, se ideó en esencia para pedir a los dioses el favor de la lluvia y recibir buena cosecha a través de una narrativa simbólica cuya capacidad envidiaría el storytelling contemporáneo. En general, se integra por tres fases: el ascenso, la danza propiciatoria y el descenso. Inicia con la elección del poste, un tronco que, en general, va de los 20 a los 40 metros, proveniente de un árbol de madera dura. El corte, traslado y levantamiento del palo en el sitio ceremonial conlleva una amplia participación de la comunidad e implica ofrendar un ave de granja y una bebida alcohólica en el terreno despojado del árbol como señal de perdón, a manera de tributo. El fuste se prepara con peldaños hechos de lazadas de cuerda o trozos de madera clavada para el ascenso. En su parte superior se ensarta un tecomate o tambor del cual pende un bastidor: ambos elementos funcionan, respectivamente, como base donde bailará el caporal en la parte central y más alta del palo, y como soporte desde el cual, atados y sostenidos de los pies, la cintura y las ingles, se lanzarán los voladores. La danza se compone de cinco participantes: un capitán o caporal y cuatro voladores. La altura está pensada para que en el descenso puedan cumplirse 13 vueltas que, multiplicadas por 4, dan 52; dicha numeralia se asocia con los simbolismos de la cosmogonía prehispánica (cuatro puntos cardinales, cuatro estaciones, trece niveles celestes, cincuenta y dos, ciclo calendárico). La vestimenta es también un repertorio simbólico que varía según la región pero que en general incluye elementos asociados a la naturaleza (en sus orígenes era un disfraz plumario que emulaba un ave, que posteriormente se transfiguró en el traje contemporáneo): un penacho o tocado; flores; adornos en medio círculo a manera de pechera y delantal; camisa blanca y pantalón rojo; flequillos; listones de colores; espejos. Todo ello, respectivamente, es representación del arcoíris, la flora, el sol, la luna y sus fases, la pureza, la sangresacrificio-vida, la lluvia, las estrellas. En suma, una alegoría de la humanidad y su entorno.

esta danza se ha adaptado a las necesidades, gustos y conquistas contemporáneas, dando cabida a dichos grupos, quienes pueden ya aprender la disciplina sagrada en escuelas o por medio de la enseñanza directa de parientes. Por su parte, las primeras mujeres jóvenes voladoras, asimismo instruidas por tíos o padres, han añadido a sus actividades cotidianas la práctica del vuelo ritual, el cual se lleva a cabo ya sea en fechas ligadas a las fiestas patronales de cada localidad, o a manera de espectáculo en puntos turísticos. Aunque todavía existen miembros de las comunidades reacios a dicho cambio (en general los de mayor edad, ligados a la usanza más añeja), la mayoría lo ha aceptado, con la propia evidencia de la práctica. El aporte ha fortalecido los lazos comunitarios —diversos en sí mismos— al conquistar un territorio más de inclusión, el del ritual, que pese a estar infiltrado por el dogma, pone en evidencia lo favorable que resulta para el entramado social siempre que muestra flexibilidad. Con ello, el beneficio derivado es combatir la estigmatización de grupos vulnerables y, por ende, visibilizarlos. Por otro lado, un culto dedicado al origen y preservación de la vida como parte de una visión específica de la realidad, se transforma, profundiza su significado y adquiere mayor coherencia al incorporar en su concepción —por medio de una conquista gradual, pacífica y de sentido común de quienes son ahora también protagonistas— elementos sin los que sencillamente el ciclo del ser no sería posible: mujeres e infancias, quienes finalmente dan lógica a la energía que mueve una de las ceremonias que simbolizan con mayor plasticidad escénica la continuidad, el sentido existencial y el orgullo de pertenencia. Así que ¡a volar!

La acción, que comienza desde el corte del palo, continúa con la subida de los participantes, su posterior acomodo (el caporal, invocador de los dioses y del ritmo de la ceremonia, se posa al centro, hasta arriba, mientras danza sobre el tecomate o plataforma; los voladores, antes de arrojarse, yacen sobre el bastidor que circunda a ésta) y la caída en círculos, de cabeza y con el cuerpo en brazos abiertos formando una cruz. El ritual se acompaña con flautillas y pequeños tambores, y la melodía dura hasta que los participantes tocan tierra. En lo esencial las formas escénico-rituales y la intencionalidad original del ceremonial han permanecido. Sin embargo, en el siglo XXI se presentó uno de los cambios más significativos que transformó y añadió mayor sentido a un culto en origen exclusivo de la masculinidad: la participación de mujeres e infancias. Hoy en día, vía el sentido común,

*Historiadora del arte, ha sido gestora, investigadora, curadora y coordinadora de exposiciones en museos del INBAL y de manera independiente. Ha realizado periodismo cultural, edición e investigación de textos de catálogo y de divulgación.


Entre archivos personales, afectos y genealogías Texto y fotos: Yuruen Lerma Mayer*

Invitar a la memoria es volverse a romper, una y otra vez, para recoger todos los fragmentos y tejer una historia. Volverse a romper es, simplemente, mirarse en miles de facetas. Lía García

A mediados del 2014, sin saberlo ni imaginarlo, mi vida dio un giro de 180 grados cuando me encontré –¿o me encontró?– el archivo personal de Beatrice Harriet Mayer Nordwald, mi tía abuela. Ese año, tras tomar las riendas de la vida de mi Opapa –como llamaba a mi abuelo materno Leonardo Mayer, quien a sus más de 90 años ya tenía un nivel avanzado de senilidad–, mi madre y yo nos dedicamos, entre otras cosas, a organizar sus espacios cotidianos y laborales. El giro sucedió un buen día cuando, al estar en su oficina, nos encontramos con dos cajas nombradas “Trixie” –como le decían a su hermana mayor– que contenían cientos de documentos como cartas, postales, telegramas, fotografías, etc. de principios de los años cuarenta cuando ella, de 23 años, y él, de 19, se incorporaron a las Fuerzas Armadas Reales británicas para luchar en la Segunda Guerra Mundial (SGM).

En la foto: Beatrice Harriet Mayer Nordwald (Trixie)

Mi madre –Mónica Mayer, artista visual feminista quien ha trabajado con archivos gran parte de su vida profesional– y yo –psicóloga feminista que nunca había trabajado con éstos– nos volteamos a ver y, con una mirada de complicidad, supimos la joya que estaba en nuestras manos. Dejamos de lado lo que hacíamos y, como dos niñas cuando encuentran un tesoro, comenzamos a hurgar entre esas huellas del pasado. La primera carta que leí estaba fechada en agosto de 1946 y fue enviada desde Chicago. Se la escribió Trixie a Leonardo después de cuatro años de servicio en el Reino Unido describiendo, entre otras cosas, su sentir respecto al inminente retorno a casa de sus padres. Entonces, leí la frase que dio inicio a mi nuevo andar: “ojalá la guerra no hubiera terminado”. Se la dije a mi madre. Nos quedamos atónitas. Quisimos saber más. Fui con mi abuelo y se la recité para ver si esas palabras detonaban algo en él: tal vez me explicaría por qué Trixie escribió tal frase o tal vez, finalmente, me contaría sobre sus propias experiencias durante la SGM, las cuales siempre calló. O a lo mejor, por tan sólo un momento, podría recuperar a mi abuelo quien, día con día, se hundía más en una profunda oscuridad. Sin embargo, su mirada, constante y extraviada, sólo se dirigió a la ventana y no dijo nada. No pude saber qué sintió, qué pensó o qué recordó –si es que lo hizo. Pero, lo que sí sé es que dicha declaración despertó

en mí un interés por conocer sobre sus pasados; en especial, el de Trixie que fue quien produjo esos documentos íntimos durante uno de los periodos más importantes de su vida y de la historia moderna, y que eran completamente desconocidos, incluso para la familia. Además, para mí, este camino era una oportunidad para conocerla prácticamente por primera vez, pues no tengo recuerdos de ella ya que falleció en 1987 cuando yo tenía apenas 2 años. En su momento, reconocí que en mi trayectoria profesional existía un vacío sobre las temáticas, contextos y disciplinas necesarias para aproximarme a este archivo por lo que en 2018 decidí entrar al recientemente inaugurado Doctorado en Estudios Feministas de la UAM-Xochimilco, considerándolo como un excelente espacio para desarrollar la investigación.


A partir de entonces, y bajo la dirección de la historiadora feminista, la Dra. Ana Lau Jaiven, investigo este archivo inédito desde la mirada feminista lo que me ha permitido: visibilizar la vida de una mujer desde sus prácticas, complejidades, afectos y opacidades; abonar al vacío historiográfico sobre las experiencias de las mujeres mexicanas en la SGM; proponer mecanismos para la investigación de archivos personales a través de los cuales se estudien las voces individuales desde su pluralidad y colectividad, así como ahondar en mi genealogía para entender dinámicas familiares y sociales del pasado que dan forma a nuestro presente y futuro. En este sentido, retomando la propuesta del historiador argentino Mario Rufer de romper con la definición rígida de archivo, para mí ha sido muy importante aproximarme a éste no sólo como el conjunto de documentos que produjo mi tía abuela, sino como un espacio de poder parcial e inacabado.1 Es decir, lo considero como algo vivo que es frágil y a la vez potente, que (se) construye y que por ende (se) destruye. Que comunica y visibiliza pero a la vez oculta y olvida. Que está atravesado por afectos, obsesiones, resistencias y silencios cotidianos y extraordinarios y como un mecanismo que controla pero también que nos libera para viajar en el tiempo e imaginar otros mundos. En este contexto y desde la distancia espacio-temporal, he entablado un diálogo epistolar con mi tía abuela el cual me ha brindado aprendizajes respecto a, por ejemplo, la importancia de preguntarnos sobre el acto tan político y subversivo que sucede cuando una mujer, en cualquier momento de la historia, escribe sobre su vida, se posiciona en el centro de la narración y, además, conserva sus documentos para futuras interlocutoras. Así, concuerdo con la teórica feminista chicana Gloria Anzaldúa cuando indicó que la palabra escrita, así como los escritos del yo, son un medio y un fin para defenderse ante el olvido, la injusticia y el silencio.2 Lo anterior toma particular relevancia cuando son producidos por personas o grupos que sistemáticamente han sido borrados de la (H)istoria por cuestiones de género, sexo, raza, etnia, clase, preferencia sexual, etc. ya que dan cuenta, entre otras cosas, de las luchas por los derechos a la memoria y al (auto)reconocimiento. Si bien la pluma y el papel fueron los principales medios de expresión utilizados por Trixie, las huellas de nuestras ancestras también las podemos encontrar en sus tejidos, bordados, diarios, fotografías, recetas o en los cuentos o canciones que nos cantaban de pequeñas.3 Es decir, desde su presencia o ausencia, los saberes de las mujeres están materializados en una multiplicidad de objetos, incluso de recuerdos inmateriales, que permiten visibilizar y (re)conocer otras –nuestras– historias que han quedado silenciadas. Así, ante un cis-tema patriarcal que busca borrarnos, les convoco a recuperar, entre sus cajas, cosas y recuerdos, las vidas de sus ancestras y las cotidianidades de sus familiares para (re)escribir la (H)istoria y su historia. Aún más, recordando los lemas feministas de “lo personal es político” y “toda vida merece ser contada”, las y les invito a narrar, registrar y conservar sus propias experiencias para que con ellas produzcan las huellas de su propio archivo. Esto para continuar mirándonos en nuestras múltiples facetas y para generar más estrategias feministas de lucha ante el olvido, la injusticia y el silencio.

Entrevista a Yuruen Lerma Mayer. Antonio Morales Rosado

“Ojalá la guerra no hubiera terminado”. Prácticas, redes e identidad epistolar de Trixie Mayer, una joven mexicana inglesa en tiempos de guerra (19421946). Tesis doctoral en Estudios Feministas. División Ciencias Sociales y Humanidades. UAM Xochimilco. Yuruen Lerma Mayer

1 Mario Rufer. “El archivo: De la metáfora extractiva a la ruptura poscolonial.” Frida Gorbach y Mario Rufer. (In)disciplinar la investigación: Archivo, trabajo de campo y escritura. Ciudad de México: UAM-Siglo XXI Editores, 2016, pp. 160–186. 2 María Socorro Gutiérrez-Magallanes. “La autohistoria como eslabón de lo colectivo”. Diplomado en Memoria y Discursos Autobiográficos de LEM. Puebla. LEM. 22 de mayo de 2021. www.lemmexico.com. Consultada el 24 de enero de 2022. 3 Patricia Hill Collins. Black Feminist Thought. Londres: Routledge, 2000.

*Psicóloga, feminista, activista y fotógrafa.


Las herencias culturales intangibles de la protesta feminista Texto y fotos: Restauradoras con Glitter*

En agosto de 2019 las movilizaciones de diversos grupos de mujeres en varios estados de la República Mexicana dejaron huella. Las mujeres se organizaron y marcharon juntas plasmando en las calles, los monumentos y edificios, sus denuncias y consignas de lucha; la digna rabia se hizo presente. Las autoridades estatales, las instituciones, los especialistas en la conservación de bienes culturales y algunos sectores de la sociedad civil, emitieron juicios de valor que invisivilizaron las expresiones de denuncia por feminicidio, violación, acoso y las violencias machistas enunciadas durante las marchas y condenaron únicamnete la “destrucción y la agresión” contra los monumentos y los símbolos nacionales. En ese momento se inició la conformación de una colectiva de mujeres profesionistas de diversas ramas asociadas al estudio de los bienes culturales, Restauradoras con Glitter. Gracias a este evento comenzamos a reflexionar sobre una serie de aspectos que sostienen, y que incluso legitiman, la noción de patrimonio cultural, las maneras de apropiarse de éste y de resignificarlo. A casi tres años de la conformación de la colectiva, de la emisión de nuestro primer comunicado (21 de agosto de 2019) y de un sin número de charlas entre las miembras de la colectiva, hemos planteado: el tránsito de la noción de patrimonio cultural, entendida internacionalmente como el reconocimiento y validación de los bienes culturales significados por las distintas comunidades a su alrededor, al reconocimiento de estos como herencias culturales. Con lo anterior planteamos una serie de aspectos flexibles, más allá de la dicotomía entre lo material y lo intangible, inherentes a todo objeto con una carga cultural, histórica, y de memoria social. Consideramos que la tradición de separar estas dos dimensiones, responde a la lógica positivista de ver el mundo. Esta perspectiva, anacrónica al contexto cultural actual de la humanidad, dificulta comprender que un objeto se sostiene por las relaciones que con él construyen las personas que lo significan, que lo usan e, incluso, que lo consumen; y que al mismo tiempo una danza, un ritual, una ceremonia, o un recuerdo, se activa y adquiere sentido alrededor de lugares, ciudades, inmuebles y objetos; sin los cuales los actos no tendrían sentido.

Sobre todo, pensamos que dentro de la amplitud que ofrece la denominación herencias culturales, reconocemos las múltiples formas en que las personas se relacionan con su pasado, presente y futuro, cuestionando las formas en que la cultura hegemónica colonial y patriarcal se ha apropiado de éstas. La noción estadocéntrica de “patrimonio”, que decide cómo hay que vivirlas, representarlas y conservarlas para legitimar políticas culturales y económicas de ordenamiento y reproducción social, es un atentado a los derechos culturales de los ciudadanos; y a su vez, sostienen la oferta cultural del país cosificándolas y explotándolas como mercancías. Por lo anterior creemos que cuestionar la Historia, seleccionada desde el ejercicio del poder del Estado, que por décadas ha legitimado una serie de toma de decisiones a partir del pasado que se seleccionó como representativo, nos permite abrirnos a reconocer y dar lugar a los distintos ejercicios de memoria y de construcción de las múltiples historias que la sociedad experimenta con cada bien cultural y con las distintas expresiones culturales vigentes o pasadas. Incluso en contraste con aquello que hemos llegado a considerar como nuestra “historia nacional” y que hoy no es más que una narrativa estadocén-


trica que convierte a algunos de sus objetos culturales tradicionales en símbolos de siglos de opresión y despojo. Nos abrimos, también, a reconocer aquellas memorias que señalan violencias y que incomodan a perpetradores y los pactos de silencio, pues constituyen también nuestra herencia cultural. Nosotras reconocemos las manifestaciones de las mujeres en las que se han intervenido monumentos como una acción social que obliga al Estado, sus instituciones y a la sociedad civil, a escuchar las demandas, para dejar de ser ignoradas e invisibilizadas. Expresiones que hoy ya conforman la memoria del México feminicida.

Otro ejemplo de estas herencias de la protesta feminista son las consignas que, coreadas en diversos espacios, repulsan las violencias y a los agresores, impulsan la lucha en todos los espacios, piden un alto a los feminicidios, exigen justicia por y para las víctimas, etc. Estas consignas se acompañan de cánticos, música y actos performáticos como la danza, donde las cuerpas se vuelven sujeto político de protesta, lucha y resistencia.

Estas reflexiones nos han permitido reivindicar la protesta como una acción legítima de apropiación del pasado que cuestiona el presente, en un ejercicio de memoria. Esta versión de México permite visibilizar y conformar nuevos significados para los símbolos históricos, nuevas historias, crear memorias colectivas para entretejer nuestras herencias desde el ejercicio de nuestros derechos culturales. Por ello, sostenemos nuestro planteamiento inicial de la importancia de la documentación y el registro de todas las expresiones y resignificaciones de nuestras herencias culturales, reconociendo su complejidad, pero sobre todo reconociendo nuestro derecho y obligación de levantar la voz para increpar a la Historia que nos aplasta, que nos excluye e invisibiliza. Tan solo el 8 de marzo del presente año (2022) se reportó una asistencia a la marcha en conmemoración del día de la mujer de más de 80 mil mujeres, todas de diversos contextos. El entender la protesta como un ente vivo y dinámico, también la hace en sí misma una forma de herencia intangible que, si bien incluye muestras completamente tangibles como las intervenciones urbanas en el espacio público, cada forma de abordaje la vuelve más y más compleja, como sucede con cualquier otro proceso social e histórico. La protesta es una herramienta social con un mecanismo de participación política, cuya función primigenia es la focalización de una problemática; la protesta, por tanto, es un derecho humano. Ahora bien, si logramos entender la protesta como una forma de herencia cultural, también podremos entender la importancia de su registro como forma de protección de este fenómeno social.

Las protestas feministas han dejado importantes manifestaciones políticas, artísticas, performáticas, intervenciones urbanas, reconocimiento de los pueblos originarios, entre otros, con un origen y organización totalmente orgánica, donde el eje rector es la exigencia de una vida libre de violencia, con justicia y dignidad para todas. Estas herencias culturales han sido gestadas en todo el mundo y han logrado cruzar fronteras gracias a las redes sociales y al complejo tejido social de la actualidad. Las tesis, una colectiva feminista chilena, en 2020 dio la vuelta al mundo con su performance “Un violador en tu camino”. Las líneas de su cantar fueron adaptadas a cada una de las ciudades que replicaron el himno de lucha, un performance con la intención de criticar a los Estados-Nación, a los medios y a la sociedad frente a las violencias machistas, ya que han sido ellos ejecutores y/o cómplices históricos. “Y la culpa no era mía, ni dónde estaba, ni cómo vestía” fueron las frases que se escucharon en más de 10 idiomas.

Plática sobre herencias intangibles entre colectivas. Alexa Danae Zaragoza Barrios

*Colectiva mexicana feminista, independiente y apartidista, integrada por mujeres especialistas de diversas disciplinas dedicadas activamente a la conservación y estudio de las herencias culturales. Pugnan, a través de sus acciones en el sector cultural, por la restauración del tejido social y la integración de una perspectiva de género en éste, con el fin de que se garanticen los derechos humanos de las mujeres.


Diego Isunza Kahlo: La cocina mexicana, ingrediente de nuestra identidad Texto: Adriana María Urso*

Fotos: Cortesía de Diego Isunza Kahlo y Cristina Kahlo Como una manifestación cultural viva y ancestral, la cocina mexicana demuestra el sentido y la importancia de traer los saberes del pasado al presente a través de sus diversos platillos. En nuestra entrevista con el chef mexicano Diego Isunza Kahlo hablamos de la importancia de la reiterpretación o resignificación de los ingredientes en la cocina mexicana actual, que según nos manifiesta “tiene un valor que va más allá de la mera alimentación; está ligada a un valor ceremonial, incluso religioso, familiar, cultural e histórico que nos ha dado una identidad como país y como nación. El mexicano se identifica gracias a la cocina y sus sabores”. Forjada a fuego lento durante siglos, la cocina mexicana es, según lo manifiesta el chef Isunza, “una cocina de emociones que evoca y que despierta sensaciones que van mucho más allá del apetito y eso le otorga un valor enorme”. Destaca que “es una cocina que ‘habla mucho’, que tiene un diálogo muy interesante no sólo por todo lo que representa la receta, sino por el ingrediente en sí”.

su vida. Sin embargo, destaca la trayectoria de su abuela Elsa Khalo, quien, reconocida como la mujer con el “paladar más refinado” por la revista Sabores de México, impulsara en 2010 junto con otros chefs el proyecto para que la UNESCO proclamara la gastronomía mexicana como Patrimonio Intangible de la Humanidad. Al hablar de herencias o de legado cultural, ANTiDOGMA cuestiona el término -patrimonio- por estar ligado al patriarcado y menciona la resignificación del mismo al vincularlo con las mayoras, teniendo en cuenta la tradición y la presencia de las mujeres en la cocina. Al respecto, Isunza afirma que “la cocina se erige como algo importante, no sólo en cuestión de platillos, sino como un espacio intimista, cercano, donde las familias se agrupan, las amistades convergen”. Destaca, también, el tema de la herencia cultural que se transmite de generación en generación y subraya que uno de los regalos más importantes que recibió en su vida fue el recetario de su abuela materna “escrito de puño y letra, en el que ves hasta la mancha de harina o huevo”. Se refiere al valor de dicho recetario como una pieza de “arte objeto” que muestra su durabilidad a través de los restos de comida pegados en sus páginas, “es el ADN de las recetas” lo que lo hace tan valioso. Cuando le preguntamos sobre su especialidad gastronómica, el chef Isunza responde categórico que si bien “le entra a todo”, él creció con la cocina mexicana al formarse en restaurantes de este tipo. Sin embargo, considera interesante explorar otras cocinas e incorporar otros ingredientes para poder enriquecerla. “Soy mexicano y tengo la responsabilidad de entender mi cocina. No sólo debo tener una noción

En la foto: Diego Isunza Kahlo

Además, señala la importancia de la domesticación del maíz en el proceso de sedentarización de nuestro país: “somos un pueblo que se estableció gracias al ingrediente que nos hizo.” Como ávido lector, agrega que este hecho está asentado en los libros de historia ya que, desde el Popol Vuh hasta las crónicas de Bernal Díaz del Castillo, afirman que los mexicanos estamos hechos de maíz o que, como señala el sociólogo italiano Carlo Petrini, “sin maíz, no hay país”. Por ello define a la cocina como una práctica en la que se fusionan tradiciones e ingredientes, no sólo endémicos sino también foráneos, que hacen de ella una “expresión y saber cultural muy interesante”. En cuanto a su historia personal, Diego escudriña en el vínculo que lo acercó a la cocina: su madre y su abuela, ambas grandes referentes en

En la foto: Elsa Kahlo


básica, sino un entendimiento profundo que se logra a partir de un aprendizaje consciente”. Y agrega que “sería muy irresponsable como cocinero mexicano dominar platillos franceses, glaseados, tortillas de papas y no saber nixtamalizar maíz. El verdadero fundamento del nixtamal es un proceso químico que consiste en separar ciertos almidones del pericarpio del maíz para volverlo a ingerir. Realmente estamos hablando de una transformación química para volver digerible y poder consumir el alimento. Toda la cocina es una ciencia”.

su casa a 8 comensales todos lo sábados, para ofrecerles un menú de temporada. Lo novedoso e interesante de este proyecto gastronómico es que no permite a más de 3 personas conocidas en la reservación, para así incentivar la convivencia con desconocidos y lograr una velada donde las sinergias sean posibles.

“Como cocineros somos portadores de nuestra herencia cultural inmaterial y de una tradición de siglos y siglos de recetas”, comenta. Por eso se considera “un cocinero que hace una cocina internacional con ingredientes mexicanos; y por mexicanos no quiere decir que nada más sean endémicos del país, sino por lo menos producidos en México en su mayoría”. Añade que su cocina sigue transformándose con su aporte personal y que nunca reproduce una receta tal cual.

Así, Isunza rechaza a aquellos puristas gastronómicos que apelan a una sola manera de lograr una cocina tradicional, porque considera que “para tener una tradición deben suceder cosas previas: un acto en un contexto específico que se hace recurrente, lo adoptan como costumbre diferentes individuos y así se convierte en tradición”. Por ello, afirma que no existe una cocina tradicional mexicana, sino que son muchas. Y como ejemplo señala que el mole negro oaxaqueño no es tradicional en Puebla, ni el chichilo en Chiapas. ANTiDOGMA le pregunta al chef sobre la relación entre el valor cultural que tiene la cocina mexicana y su costo económico. Para Isunza la diferencia entre lo que es caro y lo que es costoso, comparando la comida de una fonda a la de un restaurante de alta cocina, consiste en que ambos tienen diferentes servicios y por lo tanto, diferentes costos que encarecen el plato. Aunque Diego no posee un restaurante propio, ha puesto en marcha un proyecto muy amigable que consiste en abrir las puertas de

Por otro lado, abordando el tema de las mayoras como figuras femeninas trascendentes en el arte culinario mexicano, manifiesta que “cada mayora tiene su propio lenguaje y cada saber tiene una referencia visual muy gráfica.” Esto lo ejemplifica con una anécdota cuando, en su primer trabajo, la mayora del restaurante se refiere a la masa a leudar con la expresión “déjala hasta que se embarace”, es decir, hasta “que esté panzona, se infle o se hinche”. A raíz de este lenguaje tan especial, el chef Isunza tiene la idea de escribir un -compendio lexicológico de la mayora mexicana- para ilustrar la riqueza de esta terminología. Así, para concluir, enfatiza que “en la cocina mexicana, las mujeres son las grandes mentoras, las verdaderas ‘profesionales’ que, a través de sus técnicas y saberes ancestrales, han logrado que la gastronomía mexicana destaque en todo el mundo”.

Entrevista a Diego Isunza Kahlo. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo

*Licenciada en Lengua y Literatura Hispánicas, y obtuvo el grado de Historia del Arte en la Facultad de Filosofía y Letras en la UNAM. Sus líneas de investigación se centran en la cultura visual y sus conexiones con los estudios de género.


Dicen que las flores cantan… Voz, palabra y memoria de mujeres en el son jarocho tradicional

Texto: Laureana Martínez Figueroa*

“Dicen que las flores cantan Eso es lo que dice el monte Que cantan al horizonte Y entonces el sol levanta...1” Citlaly Malpica

Fotos: Pablo Emiliano García Hablar del son jarocho tradicional en México es adentrarse en la tierra y la historia de una región conocida como el Sotavento. Significa también, dejarse llevar por los ríos que en su trayectoria recogen las voces de los habitantes de esta zona de cuencas hídricas y llanuras calurosas y húmedas. El son jarocho, por lo tanto, no sólo es un género musical, sino una herencia cultural viva, una cosmovisión en movimiento o un conjunto de saberes ancestrales que se renuevan como el andar de los mismos caminos del agua. Antonio García de León en El mar de los deseos plantea que el Caribe, región de la cual forma parte Veracruz, es una unidad cultural donde todo se desarrolla de manera similar, sobre todo en el terreno de lo inmaterial: la música, la danza, la poesía improvisada, la lírica.2 De la misma manera, el Sotavento no constituye un área geográfica, económica y política definida, sino un territorio de límites imaginarios que atraviesa tres estados (Veracruz, Oaxaca y Tabasco) y cuyos bordes son trazados por lógicas de vida en común.

donde se vive y aprende el son jarocho. El verso, poesía popular, representa una herencia que por generaciones ha sabido nombrar los acontecimientos de cada época: la libertad, la belleza de lo cotidiano, pero también la rebeldía o la injusticia del régimen dominante. Por ello, como parte de una continuidad histórica, en la versada de los sones converge el cuestionamiento y la propuesta de nuevas voces, en este caso, femeninas, que han crecido dentro de la tradición y la han reinterpretado. Éstas adquieren un papel cada vez más activo y rompen el entonces concebido “rol” de la mujer en el son jarocho, que se limitaba, en un principio, al baile o a los quehaceres de la cocina

“Eso es lo que dice el monte” Como buen terreno fértil, el Sotavento vio nacer y desarrollarse a una cultura particular con elementos de raíces indígena, africana, árabe y europea que, en la época colonial, surgió a partir de un intenso tráfico comercial entre marineros, arrieros, esclavos, comerciantes, campesinos y gente común. La riqueza de este intercambio se refleja en el repertorio de sones y en el conjunto de versos que se cantan en el fandango, fiesta en

Décimas de Citlaly Malpica. Laureana Martínez Figueroa/ Antonio Morales Rosado

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Fragmento de décima. Citlaly Malpica, fuente: “Mujer y tradición jarocha. Entrevista a la Mtra. Citlaly Malpica”, en canal INADEJ TV Más que Leyes, Youtube Antonio García de León, El mar de los deseos: el Caribe afroandaluz, historia y contrapunto (México: Fondo de Cultura Económica, 2016)


durante los fandangos. Por lo que más allá de hablar del género musical en su amplitud, este artículo busca situar sus sonidos en territorios femeninos y conocer la dimensión de esta herencia intangible desde una experiencia en particular, desde una vivencia y una voz. “Que cantan al horizonte” Citlaly Malpica, poeta, bailadora, maestra de zapateado y versada, creció en Juan Rodríguez Clara, en la zona piñera veracruzana. Heredó de su familia el amor por el son jarocho y aprendió de forma autodidacta la décima, estructura lírica en la que pudo expresar la imagen poética de su tierra y de la vida. Se acercó, desde muy temprana edad, a las décimas de Tío Costilla, conocido versador regional, pero su mayor guía fue el lenguaje del campo: el sonido del viento; los ciclos; el canto de las aves y los insectos; los saberes ancestrales y la belleza de los procesos de la naturaleza. Elementos que establecían una relación orgánica entre su entorno y su comunidad. Con estas bases y una inmensa sensibilidad, rasgo que compartía con su padre, desarrolló su propia relación con las palabras para expresar y compartir el mundo que llevaba dentro. Apuntaba sus versos o los guardaba en la memoria, mientras observaba en el horizonte un eterno “mar de piñas”, como describía con cariño a los inmensos sembradíos que le rodeaban. Como parte de una genealogía de mujeres fuertes, que desde sus trincheras rompieron los estereotipos tradicionales, Citlaly buscó su propio camino lejos del sitio donde creció, pero siempre cercana a sus raíces. Su madre, mujer aguerrida y vailente, fomentó en ella el interés por el son jarocho, pues sabía que la música le daría una vida con más opciones de desarrollo. Y así lo hizo.

Además de escribir décimas, cuartetas, quintetas y sextetas, estructuras líricas utilizadas en el son jarocho, aprendió de versadores cubanos como Alexis Díaz Pimienta o Tomasita Quiala el difícil arte de la improvisación, para lo cual se requiere de práctica y agilidad mental, pero también de una gran creatividad y sensibilidad poética. Compartió su conocimiento y su trabajo literario en talleres dirigidos a todo el público interesado y participó en presentaciones y discos de grupos reconocidos. Varias veces tuve la fortuna de presenciar su magia, de atestiguar cómo contagiaba a la audiencia con su frescura. Su sonrisa y el fluir de las palabras e imágenes que en su alquímico proceso hilaban cual tejedora de sueños. En su voz, la libertad, la belleza, la paz, la esperanza, temas aparentemente extensos y abstractos, se transformaban en un gesto cercano: un abrazo, un puente o un acto de amor hacia la humanidad entera. Y así, la versada se convertía en una expresión de mayor alcance, en algo honesto y auténtico. En 2021 con el avance de la pandemia, los fandangos y el son jarocho cesaron. Se dejó de escuchar el rugir de la leona,3 y el latir de la tarima en la lejanía. La jarana y el requinto también guardaron silencio. Y en esos tiempos oscuros, la luz de Citlaly menguó por un momento para después brillar con más fuerza en la amplitud de otro espacio: “Yo creo que este silencio nos debe hacer reencontrar la música natural de la vida. […] Esa música vital que viaja a través de la energía del universo”.4 “Y entonces el sol levanta” Esta primavera, tras dos años de encierro involuntario, las voces de muchas mujeres se escucharon con motivo de la marcha conmemorativa del 8 de marzo. Entre los contingentes se encontraba un grupo de jaraneras, representantes de la vertiente feminista del son jarocho. Algunas agrupaciones como “Son Ellas” y “La Surada”, son ejemplo de esta ola que renueva la tradición para adecuarla a su contexto y a su lucha. El son jarocho, como río en movimiento, es y será una herencia que se expande y abre sus fronteras a nuevas percepciones y sentires. De la experiencia a la palabra y de ésta a la música, los versos de Citlaly y otras voces femeninas, forman parte de un nuevo legado. Por ello la importancia de escribirlos, de llevarlos en la memoria, de cantarlos. De ahí deriva su potencia, resonancia y también su delicada trascendencia.5

Video de la canción “Las máscaras en el suelo” de Citlaly Malpica

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Video de la canción “Flor de naranja” de Citlaly Malpica

Leona o guitarra grande, bocona o vozarrona. Instrumento equivalente al bajo en el son jarocho. Citlaly Malpica, entrevista en “Citlaly Malpica, construir nuevas formas de vida”, Malaria Sonora, junio de 2020, https://malariasonora.com/citlaly-malpica-construir-nuevas-formas-de-vida/ A la luminosa Memoria de Citlaly Malpica (1991-2021). Un agradecimiento especial a Pablo Emiliano García por su apoyo y confianza.

*Es arquitecta por la UNAM y actualmente realiza el doctorado en Historia del Arte en la misma institución. Se interesa en difundir e investigar las expresiones artísticas y arquitectónicas desde una perspectiva de género y es mamá de tiempo completo.


‘Te voy a cambiar el nombre’… o de cómo las prácticas artísticas resignifican el espacio público y sus denominaciones Texto: Alma Elena Cardoso Martínez* Recuerdo esa entrevista que Jorge Ramos hizo a Mario Vargas Llosa en 2019 en el marco de la Miami Art Fair. Eran tiempos, como siempre, complejos, marcados especialmente por el momento más álgido de contingencia por COVID-19, al menos hasta ahora. Después de externar opiniones relacionadas con diferentes condiciones políticas de América Latina, todas caracterizadas por manifestar diversas formas de populismo, Jorge Ramos se acerca al final de la entrevista preguntándole por el ‘lenguaje igualitario’, ante lo que Vargas Llosa suelta una carcajada y denuncia su desinterés por aproximarse a esas formas de feminismo que “desnaturalizan el lenguaje”.

Univisión Noticias. Mario Vargas Llosa opina sobre el lenguaje igualitario

Independientemente de si estamos o no a favor de decir ellas, elles, ellxs o ell@s, existe una urgente necesidad de reconocer las tensiones que implican los usos que hacemos del lenguaje, y la posibilidad de reconstruirlo, cambiarlo y resignificarlo, dado que gran parte de las palabras que utilizamos para expresarnos, provienen y remiten a signos, prácticas y costumbres que no necesariamente corresponden con nuestra visión actual del mundo, o bien, que perpetúan prácticas que hemos normalizado toda vez que no hemos reparado en considerar, siquiera, las palabras que usamos para nombrar aquello. En este sentido, podríamos hablar de la necesidad de pensar críticamente el lenguaje como un acto de resistencia y, con ello, de la posibilidad de generar otros mundos, o por lo menos, otras formas de leer el mundo. En opinión de Vargas Llosa, al menos en lo que se deduce de aquella entrevista, el lenguaje sucede y se crea de manera ‘natural’, pero en esa atribuida naturalidad, se está omitiendo que los procesos

naturales no están exentos de tensiones, solapamientos, luchas y resistencias. En este sentido, más que natural, sería relevante apelar a la condición social y política del lenguaje, o por lo menos, no asumir que lo natural implica una progresión incuestionable, prístina, de movimiento infranqueable. Sobre las condiciones tensas del lenguaje y cómo éstas articulan perspectivas sobre las relaciones sociales, encontramos las aportaciones de Edouard Glissant, quien, en Poética de la relación, analiza al idioma como un sistema de dominio, pero también como una posibilidad de construir otras dinámicas culturales cuando se permite la combinación, la “contaminación”, y las fusiones de lenguaje y de sistema del mundo. En este sentido, el creol -idioma nacido en Haití, derivado de las combinaciones lingüísticas entre el francés y otros idiomas africanos-, es una apropiación y mezcla del idioma dominante que se transformó por el uso de comunidades atravesadas por cualidades corporales, sociales y económicas propias de un territorio colonizado. Actualmente, este idioma es un caso que nombra dinámicas propias de contextos específicos, vinculados incluso con procesos migrantes. Para Glissant, el creol da cuenta de una forma de apropiarse del lenguaje, y también de construir “con este y desde este”, imaginarios, mitos e incluso corporalidades, aquello que se entiende como “la zona opaca de la experiencia”. Los cuerpos, los territorios, sus tensiones y procesos históricos construyen colectivamente el lenguaje, de tal modo que los procesos de simbolización y de construcción de imaginarios habilitan la posibilidad de la transformación y de la resistencia. En resumen: el lenguaje es político y no hay cosa más ‘natural’, por usar un término, que hibridarlo para hacerlo propio. Feminizar el lenguaje, decir ‘la cuerpa’, referirse a las infancias como ‘les niñes’, o siquiera intentar usar un femenino inclusivo o un lenguaje auténticamente neutro, son estrategias de resistencia y apropiación del lenguaje que, en conjunto, tienen como intención la de reconstruir un mundo que sea posible habitar de otro modo. En terrenos que van más allá de lo verbal, encontramos otros tipos de procesos simbólicos que también pueden pensarse como formas dicientes. Las prácticas artísticas actuales son un lenguaje en donde a menudo se asumen posturas creol, territorios de opacidad que ponen en tensión las convenciones discursivas en que vivimos. De tal modo que hoy, cuando hablamos de arte, estaríamos habilitando una vía para crear, al menos fugazmente, espacios donde otros mundos son posibles, y donde se consigue resaltar prácticas y creencias normalizadas, invisibilizadas, no cuestionadas.


Despatriarcalizar o feminizar, o hacer un lenguaje -artístico- cuir, implica repensar la relación que mantenemos con las prácticas culturales y con aquello que entendemos como un legado cultural. Diversas líneas de acción del arte contemporáneo han buscado actuar sobre estas cuestiones a través de performance, arte digital, participativo, comunitario y otras posibilidades expresivas. Pienso particularmente en casos recientes que trabajan con aquellas formas de producción simbólica que se denominan patrimonio cultural, pero que, desde otros usos del lenguaje, suelen pensarse como ‘herencia cultural’, toda vez que la noción de patrimonio se asocia frecuentemente con el patriarca y remite, hasta etimológicamente, a un legado masculino.1 Un gesto de feminización del lenguaje desde las prácticas artísticas es la iniciativa Sistema de Transporte Onírico, donde el colectivo Redretro realizó diversas intervenciones en el metro de la Ciudad de México. Una de ellas, consistió en renombrar la estación Patriotismo, para convertirla en ‘Matriotismo’. En las redes sociales del colectivo, junto al registro de esta intervención hecha en el 2019, versa un fragmento de Teoría Crítica del Patriarcado de Claudia von Werlhof junto con una reflexión del colectivo. Aquí me permito transcribir una parte, especialmente con la intención de denotar la elasticidad que tiene el uso de las palabras a través del tiempo y cómo esto significa que nosotras actualmente tenemos también la posibilidad de ser parte de ese proceso transformador para resignificarlas. <<En otras palabras, descubrí que la alquimia es el “método” del patriarcado. Usando este método, políticos, tecnócratas, científicos y experimentadores han tratado de transformar el mundo no solo en uno moderno, sino que también en un mundo patriarcal. Pater significa “padre”, y arché básicamente significa “origen”, “principio”, o también, en un sentido concreto, “útero”.

La ocupación del espacio público reconociendo que las palabras sí tienen un género, y que el masculino del lenguaje de ninguna manera es neutro, ha sido también una estrategia para la acción en aquello que aquí pensamos desde el sitio de las prácticas artísticas, pero que definitivamente se ubican en aquello que Glissant llamó “la zona opaca”. Ese intersticio del lenguaje donde otras formas de habitar y nombrar aparecen. Cuenta de esto da el movimiento #lascallestambiensonnuestras, que se desplaza entre el espacio público físico y el virtual y que se activa con cada vez más fuerza en el marco de las movilizaciones del 8 de marzo, día internacional de la mujer. Desde Antofagasta hasta Tijuana, basta buscar el hashtag en Twitter para encontrar una marea de renombramientos de calles que feminizan la ciudad, a veces para denominar en femenino a las profesiones, otras para visibilizar a mujeres que luchan o que han sido violentadas. Las palabras importan en tanto símbolos que remiten a vínculos y prácticas que construimos colectivamente, y aquello que identificamos como patrimonio forma parte de ese espectro de códigos que, como las palabras, se asocian a la imposición de referentes desde una voz legitimadora y a menudo unificadora que se encarna la mayor parte de las veces en la idea de Estado-nación que cohesiona y construye identidad, históricamente desde una postura masculina. Desde los feminismos existe una potente investigación que apunta a la necesidad de ‘acuerpar’ la cultura y también las políticas culturales. Imaginar una transición hacia un lenguaje donde el patrimonio -o las herencias culturales- y las políticas culturales que le nombran posean una perspectiva de género, dan cuenta de la necesidad de hacer espacio en el lenguaje para referir a los procesos donde las mujeres buscamos encontrarnos a nosotras mismas en una historia que está constituida a base de capas narrativas que podemos intervenir. La dimensión política y lúdica del arte, pensado aquí como un acto creativo colectivo que sucede para incidir creativamente en los sucesos políticos, permite ensayar esos espacios.

A lo largo de los siglos el significado de arché pasó a incluir el sentido de “poder, control, dominación”, que, por supuesto, es algo bastante distinto. Generalmente hoy solo pensamos en este segundo significado cuando vemos la palabra arché, y por consiguiente, patriarcado y matriarcado se traducen con el significado de “dominio del padre” o “dominio de la madre”, y por ende llegamos a la errónea conclusión de que el matriarcado es una sociedad gobernada por las madres/mujeres” 2>>

Redretro. Sistema de Transporte Onírico.

#lascallestambiensonnuestras Collage de intervenciones para cambio de nombres de calles en diversas partes de la república mexicana.

1 Para revisar las diferentes acepciones de Patrimonio de acuerdo con el ICOM, revisar André Desvallées (et. al.), Conceptos claves de museología, en https://icom.museum/wp-content/uploads/2022/02/Conceptos_ claves_ES.pdf 2 Teoría Crítica del Patriarcado de Claudia von Werlhof

*Académica e investigadora de tiempo completo. Coordinadora de la licenciatura en Arte Contemporáneo y la maestría en Gestión Cultural en la Universidad Iberoamericana de Puebla.


El Estanquillo:

espacio para lo heterogéneo y para hacer comunidad Texto: Maribel Escobar Varillas* Fotos: Cortesía del Museo del Estanquillo

Henoc de Santiago Dulché, director del Museo del Estanquillo

En este país, pensar en herencias culturales intangibles implica invocar a Carlos Monsiváis (1938-2010), a su vasta curiosidad e imaginación crítica. Escritor incansable y con la mirada siempre atenta al devenir

nacional, en su obra se deshilvanan múltiples aspectos de la historia reciente y, desde una perspectiva siempre sugerente, en sus escritos se devela la construcción de imaginarios, mediante el análisis de prácticas culturales diversas como el cine, la música, la fotografía. Si bien los intereses prolíficos de Monsiváis se extienden a lo largo de su obra escrita, hay otro aspecto de su legado que es importante resaltar para acercarnos a su capacidad de asombro y a su compromiso con la memoria: su papel como coleccionista. El coleccionismo, actividad minuciosa y apasionada que lo acompañó por más de cuarenta años, “es una extensión de su visión como cronista”1 y de esa manera nos sugiere múltiples caminos históricos, artísticos y culturales que es preciso recorrer. Actualmente, de forma afortunada, gran parte de esta colección es custodiada y difundida por el Museo del Estanquillo, espacio público que desde 2006 se dedica a indagar en el pensamiento de Monsiváis a través de un programa expositivo y educativo.

Museo del Estanquillo de noche, León Muñoz

El actual director del Museo del Estanquillo, Henoc de Santiago Dulché, nos abre las puertas del edificio La Esmeralda, sede del museo ubicado en el corazón del centro histórico de la Ciudad de México. En entrevista, nos habla sobre el origen del Museo y nos introduce a la colección que alberga, así mismo, nos comparte algunos de los múltiples retos que esta institución cultural enfrenta a quince años de su creación.

El Estanquillo: espacio para lo heterogéneo La colección que conformó Monsiváis, extensa como la mirada de su creador, apela a lo múltiple y diverso haciendo eco, en su nombre, a aquellas tiendas que vendían de todo: los estanquillos. Este estanquillo tan singular reúne en su acervo alrededor de 20,000 objetos en los que se reflejan procesos históricos, movimientos sociales, sucesos cotidianos y prácticas enmarcadas en lo popular; ahondando más al respecto, de Santiago Dulché nos comenta: “Gran parte de las colecciones de Carlos hablan de la formación de la mexicanidad que se da a partir de principios del siglo XX, después del periodo post-revolucionario; este periodo entre 1930-1970 que, desde mi punto de vista (…), es fundamental para la formación de la mexicanidad y de cierta identidad que permea incluso hacia toda Latinoamérica, a través del cine, a través de la música, a través de las tradiciones populares, a través del grabado, etcétera. Este museo transmite esa herencia inmaterial de pensamiento, de formación de personalidad.” En términos materiales, la colección se divide en fotografía de diferentes géneros y autores, caricatura -que va de la última parte del siglo XIX hasta caricaturistas contemporáneos-, miniaturas y grabado -entre cuyos autores encontramos a José Guadalupe Posada, Leopoldo Méndez y al Taller de Gráfica Popular-, así como música y partituras.

Rafael Barajas “El Fisgón” en Valdés, Juan Carlos, et al (2020). “Carlos Monsiváis, el coleccionista” (2020). Audio recuperado de https://noticias.imer.mx/blog/carlos-monsivais-el-coleccionista/

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En su momento, ante la amplitud de la colección, el propio autor cayó en cuenta de que aquello que empezó como un ejercicio individual requería ya tomar un lugar público y convertirse en un museo. En este sentido, la existencia del Museo del Estanquillo refleja el anhelo de Monsiváis por compartir sus travesías y nos conecta con su generoso deseo por hacer de esos desplazamientos intelectuales un ejercicio colectivo. A través de la creación de un museo, el autor posibilitó que cada objeto tome otras derivas ante los ojos del público y ante el cuidado de un equipo de profesionistas que custodian, investigan y activan su colección desde 2006. Henoc de Santiago Dulché nos comparte que la materialización del museo, en sus orígenes y hasta la fecha, sucedió gracias al activo apoyo de distintas instancias como el Gobierno de la Ciudad de México y la Fundación del Centro Histórico, entre otros organismos públicos y privados que al día de hoy permiten su funcionamiento. Primera sala de la exposición Carlos Monsiváis, El musical

público y gratuito. Con mayor énfasis a partir de la pandemia, la idea de construir y fortalecer lo común, de hacer comunidad, ha sido uno de los objetivos centrales del Museo. Aquí se invita a cada visitante a apropiarse del museo y a sentirlo como propio, se incentiva a regresar muchas veces, a sentirse en casa. En esta dirección, pensando en consolidar y construir públicos, aunque el Estanquillo es un museo con el que muchas personas se identifican y que “llega a todos los sectores de la sociedad (…) porque toca fibras muy íntimas”, para de Santiago Dulché es importante abrir diálogos con las nuevas generaciones, aquéllas que temporalmente no se reconocen con la colección y no identifican sus imágenes y símbolos. En consecuencia, para crear vínculos con el pasado, el museo realiza un trabajo amplio que contempla herramientas educativas y tecnológicas que permitan, a las generaciones más jóvenes, acercarse y asimilar estas herencias culturales. Por otro lado, en resonancia con uno de los grandes retos de los museos en el mundo, el Estanquillo busca mirar al pasado, a sus voces y silencios, para interrogarlo y así mostrar una perspectiva crítica de sus colecciones. En este sentido, el Museo del Estanquillo busca construir miradas en diálogo con movimientos sociales, como los feminismos, y así impulsar la construcción de discursos equitativos, con una perspectiva de género, atentos a las omisiones del pasado, pero atentos a aportar a la visibilización y resignificación del papel de las mujeres en la historia. Madonna, José Hernández

Este espacio, que nació guiado por la mirada de Monsiváis, lamentablemente pudo ser acompañado poco tiempo por él. La apertura del Estanquillo y la muerte del escritor sucedieron en una distancia corta en el tiempo, de allí que, como narra su director, hayan quedado muchas interrogantes sobre la conformación de la colección y sobre algunas obras y sus relaciones y motivos de selección. De esta forma, en conjunto con un programa constante de catalogación y registro de obra, el equipo del Museo del Estanquillo, acompañado por curadores invitados y otros aliados, buscan volver sobre los pasos de Monsiváis y tejer, mediante exposiciones y actividades, reflexiones que evoquen lo diverso y múltiple de su pensamiento.

Crear comunidad y abrir diálogos En medio de un discurrir cotidiano tan efervescente y estimulante como el del centro histórico, el Estanquillo se ofrece como un espacio

De Santiago Dulché sintetiza claramente su visión de El Estanquillo: busca que no sea un museo estático, sino un espacio que se renueve constantemente a partir de exposiciones sólidas, con un carácter juguetón, fresco. Así, a partir de los programas expositivos y de actividades, de una vívida participación en redes sociales, de la apertura de espacios de lectura y consulta, y de fomentar la cultura de la inclusión y respeto hacia personas con capacidades diferentes, hay una firme voluntad de que este Museo sea un espacio de beneficio social, un estanquillo de la comunidad.

Entrevista a Henoc de Santiago Dulché. Alexa Danae Zaragoza Barrios

2 Ver López Velarde Estrada, Mónica. (2012). “El coleccionismo de Carlos Monsiváis y el Museo del Estanquillo”. (Tesis de Maestría). Universidad Nacional Autónoma de México, México. Recuperado de https://repositorio.unam.mx/contenidos/84260 p. 21.

*Historiadora del arte que se desempeña como investigadora, gestora y curadora con especial interés en los archivos como espacios privilegiados para acercarnos a la complejidad y matices de las prácticas artísticas contemporáneas.


ANTiDOGMA 06 - HERENCIAS CULTURALES INMATERIALES

¿Y las diablas? Mujeres afromexicanas y representación Texto: Estefanía G. Luna Montero* La danza de los diablos, en la costa chica de Oaxaca y Guerrero, es una de las expresiones dancísticas y musicales afromexicanas que ha destacado por el uso de elementos cargados de símbolos, tanto en el vestuario y los personajes, como en la ejecución musical, cuya lectura se acompaña de relatos sociohistóricos que narran la llegada y establecimiento de cuadrillas de esclavos y negros cimarrones en la región durante la colonia española. Esta danza guarda características peculiares en cada comunidad donde se baila, no obstante, suele ser ejecutada por 20 danzantes: 18 diablos, divididos en dos columnas, un Terrón o diablo mayor y una Minga o diabla.

afrodescendientes durante los siglos XVII y XVIII, en su mayoría, tuvieron que ver con el desarrollo de las haciendas algodoneras en la costa, la producción de azúcar en el Istmo, el trabajo doméstico para miembros de la iglesia en los Valles Centrales, la minería en la Cañada y la Sierra Norte, así como el rol de arrieros y vaqueros en la costa y la Mixteca. Éste último, luego de que el mercado de Teposcolula, en la Mixteca alta, convocara a comerciantes de ganado provenientes del ahora distrito de Jamiltepec, al que pertenece Pinotepa Nacional, uno de los municipios que adscribe a diversas comunidades afromexicanas a su territorio, bajo la categoría de agencias municipales y agencias de policía, por mencionar algunas.

mismo que es representado por un hombre, quien emplea trapos o globos para simular caderas y busto prominentes, además de vestir el traje típico de la región: blusa bordada o de chaquira y faldón estampado o de satín. La Minga, además, porta una peluca y una máscara de diabla blanca; otro rasgo distintivo es que lleva en brazos una muñeca de trapo o diablita, con la que el público participa a modo de juego.

De acuerdo con la revisión de archivos coloniales judiciales, a finales del siglo XVII y principios del XVIII, principalmente, la implementación de censos poblacionales en el distrito de Teposcolula estuvo asociada a controlar a los habitantes negros y mulatos libres e identificar sus oficios, debido al aumento del abigeato en los caminos que conectaban a la costa con la mixteca alta. Dichas órdenes coloniales describen la operación de bandas de ladrones de ganado conformadas por hombres negros y mulatos, cuyo oficio no era conocido.

Foto: José Fredy Bartolo López

La ruta del abigeato comprendía los distritos de Jamiltepec, Putla de Guerrero, Juxtlahuaca, Tlaxiaco, Huajuapan de León y Teposcolula. Un dato importante es que en todos ellos existen expresiones dancísticas que aluden a la figura del diablo enmascarado que usa ropas de arriero y/o vaquero, chaparreras y cuarta de cuero, camisa de manga larga, además de un paliacate en el cuello para evitar la exposición al sol de esta parte del cuerpo durante la larga travesía.

Existen registros coloniales que confirman el argumento de la presencia de población negra y mulata en todo el territorio Oaxaqueño. Los archivos de notarías dan cuenta, además, que los roles que ocuparon los esclavos

La performance de la mujer negra Uno de los símbolos más significativos de las danzas de diablos radica en el personaje llamado Minga, en la costa chica, y, en algunas comunidades de la mixteca, Mamá Lencha;

Foto: Estefanía Luna

La Minga es un personaje satírico que da cuenta de dos posibles situaciones en relación con el pasado colonial. Por un lado, la burla a la mujer blanca erotizada, que coquetea con el público y de quien el Terrón siente celos. Por otro lado, el abuso del patrón blanco que engendra con ella a la diablita y que el Terrón busca en el público, una vez que alguien sostiene a la muñeca que la Minga le pone en brazos y de quien se espera una retribución económica por la ofensa.


COBERTURA ESPECIAL Hasta hace poco tiempo, la participación de las mujeres afromexicanas en esta danza estaba relegada a su oficio de músicas, como se ha visto en algunas comunidades de Guerrero. Y, en años posteriores, debido a su participación en el espectáculo de la Guelaguetza, a ser acompañantes del grupo de danza y portadoras de las ofrendas que se arrojan al público al terminar su participación. No obstante, las mujeres jóvenes buscan trascender la patrilinealidad de la tradición ya que el lugar en los diablos se heredaba, exclusivamente, de padres, tíos y/o abuelos a las siguientes generaciones de hombres. Así, puede entenderse que, con más frecuencia, se observe a mujeres diablas danzantes debido a tres posibles factores y/o motivos: el trabajo, la migración y el acceso a tecnologías de la información y la comunicación.

algunas ocasiones, por los miembros más jóvenes de las familias. Aunque eso implicara la molestia de los integrantes mayores, quienes debían adaptarse a su inserción y a su falta de experiencia. Sin embargo, el factor más importante de la creación de grupos de diablas y/o a la incorporación de mujeres en los grupos ya establecidos, ha tenido que ver con la forma en la que estas mujeres asumen su juventud desde una serie de eventualidades y discursos propios en torno a la visibilidad de su identidad afromexicana. Lo anterior, derivado del Decenio Internacional de los Pueblos Afrodescendientes; de las luchas por la representatividad política que han encabezado distintas activistas; de la inclusión en los censos poblacionales en donde se señalan las necesidades más urgentes de los pueblos

afromexicanos; pero, sobre todo, derivado de la posibilidad de dialogar e insertarse en un mundo global que se transforma gracias a las luchas feministas por la legalización del aborto y a la búsqueda de justicia de las mujeres desaparecidas, entre otros. Se ha visto, por mencionar uno de los contextos coyunturales en estos dos años de pandemia, que las redes sociales avivan la necesidad de pertenencia, sea cual sea el motivo, y la búsqueda de foros de discusión y protesta que el imaginario espacio público de la virtualidad provoca. De tal suerte que las diablas afromexicanas de hoy en día transitan el estado liminal de un margen que, no obstante, intentan ampliar y resignificar en la búsqueda de respuestas sobre quiénes fueron, quiénes son y qué caminos pueden andar.

Durante los meses que dediqué al trabajo de campo en la comunidad de Collantes, Pinotepa Nacional, pude observar y escuchar que uno de los argumentos más comunes para dejar el grupo de danza o para no asistir a los compromisos asumidos por la Casa de la cultura, era que ser danzante no implicaba un beneficio económico para ellos, sino por el contrario, debían dejar de trabajar para asistir; lo cual representaba no percibir el salario diario de peón en el campo, no salir a pescar o dejar de contribuir en la dinámica familiar diaria. Es importante decir que muchas de las familias vivían con menos del salario mínimo y dependían de la pesca y la caza para la subsistencia. Asimismo, la migración de los hombres al centro-norte del país y a Estados Unidos, dada la falta de oportunidades y la clara desigualdad económica, dejó espacios disponibles en los grupos de danza que eran cubiertos, en Foto: José Fredy Bartolo López

Documental “Mi cuerpo de diablo” de Estefanía G. Luna Montero

Foto: Estefanía Luna, Collantes, Noviembre 2012 *Antropóloga visual por la FLACSO, Ecuador, y profesora-investigadora de tiempo completo en la Universidad del Mar, Huatulco, con reconocimiento PRODEP a perfil deseable.


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MISCELÁNEA

JORGE MARÍN: ELOGIO A LA FORMA Texto: Sandra Benito Vélez* Fotos: Cortesía del Estudio Jorge Marín

“La creación artística es una suerte de obsesión y, en mi trabajo, esa obsesión es el diálogo interno. Cada uno de mis personajes, se vuelven las 20 mil caras de Jorge Marín porque siempre estoy en busca del equilibrio, de completarme, de cerrar círculos y deseando la libertad, deseando volar. Para mí es indistinto expresarme a través del cuerpo de una mujer, de un hombre, o de un animal. Sin importar la forma física, es la proyección de mi interior vertida hacia el volumen y la tercera dimensión, porque la escultura es mi lenguaje, es donde realmente me siento cómodo y fácilmente comunico mi experiencia de estar aquí, vivo, existiendo, encarnado en un ser humano y con una gran conciencia sobre todos los temas que se vuelven obsesivos en mí.” (Jorge Marín, 2022)


El arte de Jorge Marín es inquietante y nos desafía a buscar nuestra propia reflexión y experiencia estética. La escultura, a diferencia de otras artes, nos ofrece la posibilidad de enfrentarnos con tres dimensiones, por lo que es un vehículo inagotable de expresión y de lecturas. Con una trayectoria de más de 25 años, Marín se ha convertido en un destacado representante de la escultura figurativa contemporánea, tanto en México, como en el mundo. Sin conocer exactamente cuál sería su vocación, desde niño se sintió inclinado hacia la observación minuciosa de su realidad circundante. En sus dibujos más tempranos ya plasmaba la búsqueda por el detalle y la perfección de las formas, mas siempre inmersos en una realidad paralela, inventada por él. Nació en Uruapan, Michoacán en 1963, en una familia numerosa y comparte profesión artística con dos hermanos, también escultores. Estudió en la Escuela Nacional Artes Plásticas-UNAM y en la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía Manuel del Castillo Negrete-INAH. Sus estudios de restauración e historia del arte, lo fueron acercando a la producción artística de distintas épocas y fue incrementando una cultura estética que ya tenía de manera empírica. Jorge Marín es una persona interesada en muchas manifestaciones artísticas y culturales, tales como la fotografía, el cine, la literatura, la psicología y, por supuesto las artes gráficas, la pintura y la escultura.

sin importar el medio que utilice. En la década de los noventa, se detona su vocación y realiza una serie de acuarelas en la que dibujaba y coloreaba figuras masculinas aladas, que flotaban en unas atmósferas apenas delineadas, que contaban con tan solo ciertos elementos arquitectónicos. También, recuerdo muy bien de esa etapa de juventud, un elenco de obras de mucho contraste entre sí. Por un lado, encontramos retratos de hombres y aves (que todavía no se fusionaban entre sí), en colores azules y rojos muy intensos. Mientras que, por otro lado, tiene una serie de figuras masculinas de cerámica que son totalmente blancas y algunas de ellas se encuentran posadas en contrastantes bancos o sillas fucsia o azules.

Como en toda expresión artística cuando es genuina, cuando es la esencia de tu creatividad, la búsqueda de Jorge Marín nunca cesa y es así que se refleja en las distintas etapas de su obra. Para quienes seguimos su producción desde décadas atrás, hemos sido testigos de la facultad que tiene para imaginar y plasmar volúmenes

Más adelante, produce una serie de excepcionales cerámicas policromadas con seres fantásticos materializados de las maneras más diversas y siempre dejando algo al descubierto y algo oculto sobre sus identidades. De esta etapa datan las mujeres con tocados etruscos montadas sobre armadillos, o figuras de inspiración prehispánica, así como también ancianos y ancianas desnudas de tamaño casi natural. Cabezas sin órbitas oculares, maternidades y, lo que es aun menos común y más interesante: paternidades. Hombres con sus crías, mitad humanos, mitad animales. Las paternidades también las veremos más adelante, ya en bronce. Los personajes de Marín no siempre han tenido esos cuerpos atléticos, en la plenitud física, que la mayoría del público identifica, sino todo lo contrario. Ha sabido plasmar el espectro completo, “las tres edades del hombre”, tema por demás apasionante y tantas veces tomado como inspiración y representación por los más grandes artistas de distintas épocas: Durero, Tiziano, Caravaggio, Claudel, Rodin o Giacometti, entre otros.


Cuando algunos críticos se refieren a la obra de Marín como naturalista yo pienso, si acaso, en un surrealismo o modernismo que se sirve de la forma para provocarnos e invitarnos a mirar más adentro. Porque nunca he visto a un hombre con alas, ni intentando encontrar su equilibrio sobre una esfera gigante o sosteniéndose en una mano sobre la esquina del respaldo de una silla. Tampoco he visto mujeres enmascaradas, cargando a sus regordetes polluelos, o peces con ruedas y diminutas ventanitas que guardan a su vez a otros seres fantásticos. Su motor creativo no descansa, no deja de auto explorarse y el estudio del comportamiento humano es una de sus pasiones. Los invito a mirar a fondo sus obras y a reconocer las múltiples lecturas que de su iconografía emanan. Con el siglo XXI, Marín entró en una etapa de muy prolífica producción de bronces que se fueron desarrollando y perfeccionando hasta alcanzar la monumentalidad y la expansión más allá de las salas de exposición y de las colecciones privadas, para formar parte del paisaje urbano en calles y plazas de todo el mundo. El salto de la escultura de pequeño o mediano formato, al gran formato o monumental en el espacio público, no solamente significó un reto estético, sino que también mostró su interés por poner su obra al alcance de una audiencia cada vez más amplia. En 2010 viene otro parteaguas en su carrera de escultor, cuando se instala su primera exposición en el espacio público, en el Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, con un elenco de 13 esculturas, entre las que destaca las Alas de México que, sin proponérselo, se vuelve una exposición itinerante en sí misma y crea un efecto mediático, artístico y social sin precedentes para él. Esta pieza fue planteada para ser una edición limitada de 28 ejemplares. Hasta ahora, su itinerancia ha tocado más de 35 sedes y son 15 las que ya están instaladas de forma permanente en ciudades muy representativas del Continente Americano, Europa y Asia. Por su naturaleza interactiva, su lenguaje de simbología universal y su proyección, pretenden fortalecer la unión de las artes, así como la identidad del ciudadano de México y del mundo.

Marín, hasta ahora, ha participado en más de 320 exposiciones colectivas e individuales. Su obra, además de en México, ha sido expuesta en Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Panamá, Canadá, Estados Unidos. Alemania, Azerbaiyán, Bélgica, España, Dinamarca, Francia, Hungría, Inglaterra, Letonia, Noruega, Portugal, Rumanía, Rusia, Serbia, Suecia, Turquía. Kuwait, Líbano, Israel, Emiratos Árabes Unidos. Egipto, China, Hong Kong, Indonesia, Singapur y Japón. En ocasiones, la trayectoria de ciertos artistas entra en una dinámica de tanta actividad cotidiana que la documentación, el análisis y la crítica, no llegan tan rápido como para analizar qué tan lejos ha llegado su impronta y hacia dónde va su legado. Este es el caso de la presente etapa de madurez artística y personal de Jorge Marín quien, pensando en el futuro, ha ido conformando una infraestructura que complementa y evalúa su repercusión en el mundo de las artes, pero también en el mundo académico y en la contribución comunitaria. Con él trabaja un grupo de especialistas en distintas áreas que conforman el equipo del Estudio y la Fundación que llevan su nombre. En el Estudio nos encargamos de todo aquello relacionado con la producción, la difusión y la venta de obra, así como el contacto con curadores, escritores, ferias de arte, subastas, comunicación y proyección de la imagen de la obra en los distintos entornos. También, creamos exposiciones y publicaciones que fortalecen la presencia del artista en las artes plásticas nacionales e internacionales. Por su parte, la Fundación se encarga de desarrollar proyectos de índole social, principalmente dirigidos a las poblaciones más jóvenes y vulnerables. Como Embajador de Buena Voluntad de UNICEF México, Jorge ha encontrado una vertiente en donde contribuir con la realización de talleres artísticos infantiles y juveniles, así como intervenciones en las que sus esculturas se vuelven parte de postulados sociales que buscan otorgar visibilidad a problemáticas tales como los derechos de las personas migrantes, la defensa y protección de las lenguas indígenas, entre otros. Estoy segura de que la entrevista de ANTiDOGMA que acompaña el presente texto abrirá nuevas puertas al conocimiento de este destacado escultor mexicano.

Entrevista a Jorge Marín. Esperanza Islas Arroyo

*Licenciada en Historia del arte por la Universidad Iberoamericana, tiene estudios de maestría y doctorado en Historia del arte y Cine mexicano en la Universidad Nacional Autónoma de México. Ha dedicado su vida profesional al arte y la cultura, principalmente en el ámbito de los museos públicos y privados. Actualmente es directora de proyectos del Estudio Jorge Marín.


Oro Británico:

La pintura de A. R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada** Texto: Lourdes Ma. Alcocer Cervera*

Foto: ©Cortesía de derechos de reproducción fotográfica de la obra christies.com1 Alfred Reginald Thomson, “The London Amateur Boxing Championships held at the Royal Albert Hall Londres”, Inglaterra, 1948, Óleo sobre tela, 116.8 x 88.9cm

Los Juegos Olímpicos han sido una tradición deportiva desde la Antigüedad Clásica; no obstante, este evento se ha sometido a modificaciones y actualizaciones a lo largo de los años. Si bien es un evento que se conoce por su apego al deporte, también es cierto que se reconoce como una tradición histórica y símbolo de unión. La Segunda Guerra Mundial marcó a Inglaterra para siempre y, su capital, Londres, fue una de las ciudades más dañadas durante el conflicto, ya que fue bombardeada a lo largo de un periodo de ocho meses. En 1948, se llevaron a cabo en Londres los Juegos de la XIV Olimpiada. Este evento, a tan solo tres años del fin de la Segunda Guerra Mundial, sería el último anfitrión de competencias culturales, para después volver a su forma de evento meramente deportivo. Alfred Reginald Thomson presentó en dicha ocasión un óleo titulado The London Amateur Boxing Championships Held at the Royal Albert Hall por el cual obtuvo la medalla de oro. En la obra el artista desarrolla aspectos técnicos y temáticas políticas y sociales, con énfasis en los factores de autenticidad inglesa que resultan protagónicos. El artista crea una composición que plasma elementos repletos de orgullo inglés, dentro de los cuales se encuentran: los boxeadores, la audiencia, el edificio y, desde luego, el deporte. Uno de los boxeadores va de blanco y tanto esto como su posición física nos hablan del nuevo papel de Inglaterra. Tradicionalmente, dicho país ha utilizado este color en sus uniformes en una amplia cantidad de deportes, lo que nos permite reconocer de primera instancia a este boxeador como la personificación de Inglaterra. La audiencia en la obra se conforma, en su mayoría, por hombres, todos bien vestidos; conversando, fumando, algunos de lado o de espaldas al ring. Es así como el deporte plasmado en la pintura nuevamente explicita lo que representa para los ingleses: una parte de la sociedad, algo de todos y para todos.

La composición de Thomson es completa, detallada y precisa; es el orgullo de lo auténticamente inglés plasmado en una pieza que se convierte en un merecido triunfo en un escenario de oscuridad. Alfred Thomson fue el único británico medallista del oro olímpico en la disciplina de pintura dentro de las siete ediciones en las que las competencias culturales fueron parte de los Juegos Olímpicos; el hecho de que haya obtenido el primer puesto en Londres fue así, motivo para celebrar a Inglaterra.

En el óleo aparece un fotógrafo que nos puede dar cuenta de la cámara que se utiliza para plasmar el momento de la pelea. Popularizada por corresponsales de la guerra, la Speed Graphic con flash de Graphlex, fue utilizada en reportajes de eventos deportivos y noticias generales. Dicho esto, la cámara funciona como elemento identificador temporal dentro de la obra. En la obra, los balcones, las luces y el brillante rojo se destacan dentro de los elementos característicos del lugar. Así, se plasma la tradición del boxeo con énfasis en el edificio sede. La relevancia e importancia del Royal Albert Hall preceden a las guerras mundiales, por lo que es importante recalcar que su papel en la segunda pudo haber influenciado a Thomson hacia la realización de su pintura. Este edificio se convirtió en sede de nuevas actividades durante la guerra, de las cuales se destacaron las reuniones y las recaudaciones de fondos para ayudar al país.

“Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada”, proyecto de investigación completo. Lourdes Ma. Alcocer Cervera

Presentación de “Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV olimpiada” de Lourdes Ma. Alcocer Cervera en el marco de la Semana de Arte IBERO. Cortesía de Arte Ibero/ Sandra De Alba Del Pliego

El uso de esta imagen es de apoyo educativo para fomentar la difusión y promoción del arte y la cultura, sin fines de lucro.

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*Alumna de octavo semestre de Historia del arte en la Universidad Iberoamericana, Campus CDMX. **Proyecto de difusión para el Seminario de Investigación III, de la carrera de Historia del Arte, de la Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, dentro del marco de la Semana de Arte IBERO, primavera 2022.


Angélica Carrasco: reflexión y poética gráfica Texto: Ingrid Suckaer*

Fotos: Cortesía de Angélica Carrasco En el marco del Día Internacional de los Museos (18 de mayo), el Museo de la Estampa del estado de México exhibe, de mayo a julio, la exposición retrospectiva de gráfica Iztaccíhuatl en el sendero de la luna que, integrada por 50 obras de gran formato, muestra el devenir artístico de la maestra Angélica Carrasco (México, 1967). Además, se transmiten siete videos de la experiencia pedagógica que Carrasco emprendió en 2003 con el objetivo de promover a nivel nacional proyectos públicos de obra gráfica. Conozco el trabajo de Angélica Carrasco desde inicios de este siglo y, a lo largo de los años, he constatado cómo la artista es capaz de centrarse en sus arduas investigaciones para después crear poderosas obras gráficas con las que induce a quien observa a percibir en libertad la experiencia estética, la cual, en su caso, produce una gozosa liga entre la razón y los sentimientos. La experiencia con la materialidad y el contenido simbólico en el quehacer plástico de Carrasco origina una integración metafísica que permite ahondar en la reflexión acerca de los devenires de la gráfica que esta exigente autora propone con base en una sofisticada estética lograda gracias a su empeño en el estudio constante que pasa desde el dominio de la caligrafía japonesa shodō, el manejo

impecable de distintas técnicas gráficas, hasta su propuesta de gráfica híbrida en la que integra, según sus propias palabras: “sistemas clásicos para la creación de la imagen en las culturas milenarias y los procesos contemporáneos de acuerdo a mi necesidad expresiva”. De apariencia ilusoriamente sencilla, la gráfica de Angélica Carrasco en realidad es críptica ya que en ella habitan cuidadosas creaciones atravesadas por su distintiva percepción creativa, su prolija búsqueda intelectual y el fino lenguaje artístico alcanzado con gran pasión y esfuerzo constante. La producción gráfica de Carrasco registra los hondos matices de su sensibilidad, pero que también son reflejos de la contemplación que observa sobre la naturaleza y el exigente razonamiento que hace en cada obra que realiza. Lo anterior permite que, de manera transversal, quien observa establezca un prolífico diálogo con la creadora y su poética labor.

* Periodista cultural, escritora, crítica, curadora e investigadora de arte moderno y contemporáneo.


PISO 16.

Laboratorio de iniciativas culturales UNAM Texto: Julieta Giménez Cacho García* y Lissa Nicol Figueroa Rendón** Fotos: Cortesía de Piso 16

Piso 16. Laboratorio de Iniciativas Culturales UNAM es un espacio para investigar, experimentar y aprender en equipos colaborativos. Es un programa de Cultura UNAM, cuya conceptualización inició en marzo de 2017 y empezó a operar en mayo de 2018, para materializar ideas e iniciativas de jóvenes creadores que se desempeñan en disciplinas artísticas, gestión cultural y comunicación. Laboratorio de Iniciativas Culturales UNAM promueve la curiosidad, así como el emprendimiento innovador y creativo con compromiso social a través del trabajo colectivo: un espacio en donde los esfuerzos se conviertan en experiencias y en aprendizajes que cristalicen en proyectos realizables con un plan de sostenibilidad económica a largo plazo. Nuestro espacio se ubica en el centro de la Ciudad de México, en el piso 16 de la Torre UNAM Tlatelolco, a un lado del sitio arqueológico Tlatelolco (S. XIV) y de la iglesia y convento de la Santa Cruz (S. XVI). Lo rodea un conjunto habitacional inaugurado en 1964 con 102 edificios que, en el temblor de 1985, sufrió pérdidas aún visibles por los espacios vacíos; en la zona central de nuestra ubicación, está la Plaza de las Tres Culturas, lugar donde ocurrió la terrible matanza de estudiantes en 1968. Desde arriba, se tiene una vista de 360º que funciona como inspiración y recuerdo del compromiso con el entorno. El espacio interior es amplio y abierto con un mobiliario que se puede utilizar con versatilidad en las diversas actividades de las iniciativas participantes.


Piso 16. Laboratorio de Iniciativas Culturales ofrece un Programa de Acompañamiento dirigido a personas interesadas en pensar y trabajar en el diseño de un futuro sostenible para sus iniciativas culturales. Diseñar futuros sostenibles fue la consigna de la Convocatoria 2022. La precariedad del sector cultural es bien conocida y, en estos tiempos postpandémicos, no es mejor. De ahí la importancia de reflexionar en colectivo para encontrar y construir opciones entre los diversos agentes culturales que se involucran. Anualmente, lanzamos una convocatoria para seleccionar entre diez y doce iniciativas, que pueden ser individuales o de agrupaciones. Está dirigida a creadores, gestores culturales y personas dedicadas a la comunicación que trabajen una iniciativa cultural de cualquier disciplina artística: artes visuales, cine, danza, literatura, teatro, música y multidisciplina.

A partir de este enfoque planteamos utilizar ciertas palabras. Por ejemplo: aprender en lugar de enseñar, sesión en vez de clase, ejercicio en vez de tarea, tallerista en lugar de profesor, compartir en lugar de competir, pertinente, conveniente o necesario en vez de obligatorio o deber. Y en congruencia con esto no hay evaluaciones; trabajamos con retroalimentación basada en el respeto, la confianza, el interés y el aprendizaje colectivo. Además, se desarrollan ejercicios en cada taller, pensados como guía para la toma de decisiones y avance en el funcionamiento de cada iniciativa. Una característica importante del programa es que se piensa en el desarrollo profesional y la sostenibilidad a largo plazo. No se trabaja para sacar adelante un único proyecto artístico. El planteamiento es que, durante los diez intensos meses del acompañamiento, los participantes vayan dando respuesta a las preguntas: ¿qué quiero hacer?, ¿por qué lo quiero hacer?, ¿para quién lo quiero hacer? y ¿cómo lo puedo lograr?

El programa formativo brinda a los seleccionados conocimientos sobre el entorno cultural en sus aspectos económicos, políticos y legales; asimismo, proporciona herramientas que ayudan a la gestión de sus iniciativas a través de talleres, asesorías y charlas con especialistas que se llevan a cabo durante diez meses. Piso 16 ofrece a los participantes un acompañamiento de mucha cercanía. El programa plantea un aprendizaje activo a partir de una participación reflexiva y crítica y de la acción en los diversos talleres que se comparten; se ofrecen herramientas que cada persona va utilizando en función de las necesidades para su avance y desarrollo. Por lo tanto, no se contempla un resultado específico y mucho menos único: no hay soluciones dadas. Cada cual va tomando decisiones y encontrando soluciones a partir de sus inquietudes e intereses, de sus recursos y su bagaje. Adicionalmente a los aproximadamente 15 talleres, que son compartidos por especialistas, cada iniciativa cuenta con un mentor o mentora que se busca tomando en cuenta el perfil, la disciplina, y las necesidades específicas, a fin de que sea una guía adecuada para el camino que se va planteando a partir de un pensamiento crítico y considerando la viabilidad de los proyectos. La mentoría también contempla revisar y analizar aspectos artísticos, así como el desarrollo de relaciones y vinculaciones que contribuyan a dar salida a las creaciones, productos y servicios de la iniciativa. Este cercano acompañamiento resulta indispensable en el proceso y ha generado amistades e incluso complicidades muy interesantes.

La idea es que al final las iniciativas culturales participantes cuenten con un criterio claro sobre el compromiso con su realidad, con una estructura definida, objetivos concretos y un planteamiento de sostenibilidad económica, y que estas definiciones sirvan de guía para el desarrollo a futuro. En estos primeros cinco años han trabajado en el programa 107 personas de 51 iniciativas, de todas las disciplinas artísticas, comprometidas con temas tan relevantes como: diversidad sexual, discapacidad, feminismos, racismo e infancias, entre otros. Se han creado vínculos y redes de colaboración a partir de afinidades y también gracias al enriquecimiento que genera la diversidad, con base en la confianza y el aprendizaje colectivo. Hemos creado una red con una gran cantidad de disciplinas, personalidades, enfoques, edades y niveles de desarrollo que permiten y exigen diálogos con apertura. El lema de Piso 16 Todo esfuerzo es una experiencia está ligado a la idea de definirnos como un laboratorio en donde la experimentación, así como la flexibilidad para modificar y actualizarse, es fundamental en el proceso.

Entrevista a Julieta Giménez Cacho, Lissa Nicol Figueroa, Michelle Ayala y Pedro Núnez. Miriam Cinthia Cerna Rosales

*Directora de Piso 16. Laboratorio de Iniciativas Culturales UNAM. **Jefa de Producción y Comunicación de Piso 16. Laboratorio de Iniciativas Culturales UNAM.


ANTiDOGMA 06 - HERENCIAS CULTURALES INMATERIALES

“Cobra”:

Políticas galácticas del cuerpo Texto: Esteban Romero Álvarez* Hay obras de arte, libros o películas que exigen una lectura desde el cuerpo y no tanto desde las tan respetadas -y sobrevaloradasfunciones mentales. Tal es el caso, por ejemplo, de “Cobra”, novela de 1972 escrita por el autor cubano Severo Sarduy, que narra la vida de une personaje travesti que trabaja en un lupanar llamado “El Teatro Lírico de Muñecas”. Pese a ser admirade por su belleza, Cobra sufre por la longitud desmesurada de sus pies, puesto que estos funcionan como símbolo de su pene, defecto aún mayor que quisiera remover. En su intento por reducir el tamaño de sus extremidades, le protagonista pasa por numerosas torturas que derivan en el surgimiento de una copia miniaturizada de su cuerpo, Pup.

Los cambios suponen compenetraciones que no están relacionadas con las categorías sociales y biológicas que se utilizan para describir el espectro del género. Al llevar a cabo estos cruces, le protagonista rechaza cualquier especie de clasificación taxonómica. No existen significados disponibles para determinar qué clase de mujer/animal es le personaje principal.

Tras diversos episodios, Cobra finalmente es operade para edificarse una vagina. Después de la cirugía, le personaje principal atraviesa una nueva metamorfosis, ya que se convierte en un motociclista tántrico y es sometide a un ritual de iniciación erótico. La ceremonia deriva en la muerte de Cobra que, en las últimas páginas del texto, es venerade por los motociclistas convertidos en lamas budistas, quienes le hacen pasar por una liturgia similar a la descrita por “El libro tibetano de los muertos”. Sin embargo, mientras que el ritual budista funciona para detener el proceso de las reencarnaciones, aquí la intención es, precisamente, mantener al cuerpo vivo: “De tu ombligo surgirá la flor de loto y de ella el creador. Bailarás otra vez. Vuelve a dormirte” (Sarduy 232). Religión de lo inmanente, la muerte de Cobra se convierte en una mutación más que niega la trascendencia de la identidad: “somos puro cuerpo”, nos dice le protagonista. Tras este breve resumen, lo primero interesante de notar es que las metamorfosis corporales y sexo-genéricas de Cobra obligan (el vocablo, aunque agresivo, es el más adecuado) a quien lee a repensar las pobres categorías identitarias con las que clasificamos a las personas. Les travestis de la novela son cuerpos opacos que exigen una mirada chueca, ‘anormal’, donde la persona lectora es la responsable de adecuar el lente para traducir la materialidad que se le está presentando. Ahora bien, al hacer estas traducciones, el lector se da cuenta de que Cobra no puede ser encasillade en una u otra categoría porque todas sus mutaciones conllevan modificaciones más allá de lo humano: cuando trata de reducir sus pies, le salen plantas de las extremidades; y, cuando se traviste, se convierte en un objeto estático, decorado, o en un animal. Esto implica que, cuando se construye la vagina, la transformación no va simplemente de A (hombre) a B (mujer). Cobra pasa de ser un travesti – tigre – planta - objeto artificial a una mujer – serpiente – pájaro - objeto artificial: Instructor de Cobra —Ya eres, Cobra, como la imagen que tenías de ti. […] Se recobra. Se enrosca … Ha encarnado: se pregunta en qué pájaro … Almidón límpido o semen, una baba apelmaza la almohada: hebras brillantes: las secretan lengüetas acanaladas, ásperas … Sopla y silba … Desde los pies hasta el cuello es mujer; arriba su cuerpo se transforma en una especie de animal heráldico. (Sarduy 112)

Foto: Pexels/Victoria Borodinova En la novela, el significante ‘mujer’ sólo se puede pensar rodeado de los demás significantes (pájaro, serpiente, animal heráldico) que le acompañan. Esta acumulación de significantes estampados, que aparentemente no tienen parentesco entre sí, destruye su relación con cualquier clase de códigos previos sobre lo que entraña ‘ser mujer’. Con esto quiero decir que la identidad de Cobra no pasa por un proceso de identificación (“me reconozco en ciertas características”) porque el sentido del código no precede a su producción: se es mujer en el momento en el que el significante, desocupado, se imprime sobre el cuerpo. Esta noción, a su vez, nos permite concebir a Cobra como una identidad vacía que se conforma de afuera hacia adentro con los textos que éste fija en su organismo.


MISCELÁNEA Si algo nos demuestra la obra de Sarduy es que la subjetividad es un proceso dinámico que se construye, no que se descubre, en la apropiación y transformación de las categorías simbólicas que integran el imaginario social. De esta forma, las superficies trans e intersexuales de Cobra generan nuevos vínculos intertextuales que modifican la forma en la que pensamos construcciones discursivas aparentemente irreconciliables como género/sexo o animal/humano. Dicho esto, si la identidad de les personajes exige interpretaciones creativas, ¿por qué no pensar a los cuerpos de la novela -y al cuerpo, en general- desde teorías que no hablen del cuerpo? ¿Por qué no pensar, por ejemplo, a la materialidad desde la mecánica cuántica? Hagamos, pues, un pequeño ejercicio. Une de les físiques trascendentales para la historia de la mecánica cuántica fue Werner Heisenberg. “Le teorique de origen alemán es conocide”, sobre todo, por su principio de incertidumbre que establece que, en el universo, ninguna materia tiene una posición definida, excepto cuando se cruza con otra materia. “Heisenberg imagina que los electrones no existen siempre: existen sólo cuando alguien los mira o, mejor dicho, cuando interaccionan con alguna otra cosa […] un electrón es un conjunto de saltos de una interacción a otra. Cuando nadie lo perturba, no está en ningún lugar concreto” (Rovelli 60). La consecuencia más alucinante de estas formulaciones es que no hay formaciones previas ni posiciones definidas: la ‘realidad’ es sólo interacción. Siguiendo con esta idea, hay ciertos episodios en la novela en los que parecería que el espacio aflora, o nace, a partir de las acciones que les personajes están llevando a cabo. Por ejemplo, cuando el Maestro y la Señora comienzan un ritual operatorio en el Teatro Lírico para hacer crecer a Pup, su vestimenta se transforma repentinamente en ropa fina y extravagante (vestido de brocados áureos, mangas con esmeraldas, brazaletes de ébano, etc.).

Es interesante notar que, junto con la ropa, la atmósfera cambia también de manera abrupta: “Por todas partes surgen columnas de basalto, rejas de plata en filigrana, troncos de marfil y tapices con perlas bordados. Tibios perfumes” (Sarduy 70). En este ejemplo la atmósfera surge gracias a la materia. Como en los experimentos de Heisenberg, cuando el electrón 1 —es decir, la Señora y el Maestro con sus trajes brillantes— entra en contacto con el electrón 2 —el espacio—, este último se transforma en un lugar adecuado para el ritual que les actantes están llevando a cabo. Esto no es poca cosa: los cuerpos disidentes diseñan sus propios terrenos de resistencia y demuestran que los espacios no tienen un aspecto definitivo o que a veces, incluso, no tienen ni siquiera un aspecto. Como resultado, en su compenetración con el espacio, les personajes niegan que aquello que llamamos realidad tenga un aspecto esquemático. La realidad, como les personajes, no es más que una hoja en blanco, un signo abierto1. El espacio social, entonces, no tiene una forma heteronormativa, como nos han hecho creer. Lo que sucede es que no lo hemos dejado interactuar con otros electrones. Mi intención al hacer este cruce es pensar la identidad con cachitos de diferentes aristas: apropiarnos del discurso científico para diseñar una cosmología físico-literaria del cuerpo que enuncie lo que las teorías ‘naturales’ (la medicina, la biología, la genética, etc.) no pueden, o no quieren, decir. Aparte de derribar fronteras entre diversas áreas del conocimiento, hay que idear nuevas formas creativas de ser y estar en el mundo para las identidades sexodisidentes. Producir un encuentro galáctico entre materias diversas, camino hacia un vacío insondable.

Foto: Pexels/Sergey Katyshkin 1 Para poner un ejemplo fuera de la novela, pensemos en la heterosexualización naturalizada del espacio público, donde parejas heterosexuales (valga la cacofonía) pueden circular sin miedo, mientras que, las parejas fuera de la norma, tienen que esconderse. Esto ocurre porque las imágenes que se imprimen sobre la superficie social son siempre las mismas. Contrario a esto, “Cobra” ejemplifica que el espacio no tiene una forma única y que, si se permite que otros electrones interactúen con él, se convertirá en una nueva imagen (más colorida y menos aburrida, seguro).

*Licenciado en Literatura Latinoamericana por la Universidad Iberoamericana, se considera fan de Alejandra Pizarnik y Mónica Ojeda. Le interesan los temas relacionados con el cuerpo, el género y el terror. Le gusta leer diarios porque siente que platica con la gente que los escribió.


Visita al Museo del Futuro Texto: Jesica Bastidas Cruz* Fotos: Cortesía de MUFO

Cryptopapayas, evangelistas del Metaverso, el Wild Wild West de los NFTs y latinoamérica como una fuerza en potencia; de esto y más hablamos en nuestra visita al Museo del Futuro.

las ideas, éstas vienen primero y las tratamos de construir.” Más sobre la evolución del estudio y su consejo a jóvenes artistas en el video.

Experiencia inmersiva Este 7 de abril abrió sus puertas el Museo del Futuro (MUFO), plataforma itinerante que por tres meses permanecerá en el Antiguo Hotel Reforma de la CDMX, mostrando piezas de arte inmersivo y new media de los artistas Antoni Arola (Cataluña), Tundra (Rusia), OUCHHH (Turquía) y los mexicanos Alejandro y Carlos Glatt con el proyecto “Feel The Fruit”. Notemos que ninguna artista mujer fue programada.

TDWLF

OUCHHH

Plataforma híbrida Hablar de un Museo del Futuro nos invita a asomarnos al mañana y preguntarnos con qué tipo de artistas, formatos y experiencias nos podemos encontrar. En entrevista, Mariano Montaño, director del MUFO, nos propone una combinación entre la parte física y digital: puedes experimentar su oferta de arte sensorial, instalaciones, galería de NFTs, e incluso probar cocktelería selecta de forma presencial, o puedes acceder a la sede MUFOverse en el mundo virtual “Decentraland” desde cualquier parte del globo. Esto conecta con lo que nombra como su mayor obstáculo al momento: una barrera que tiene la gente hacia los NFTs y el metaverso, y con esto la tarea de casi ‘evangelizar’ al respecto: “Lo importante es hacerlo, que la gente vea que existe, que lo aprenda a usar y que sea más fácil estar en contacto con estas tecnologías.” Accede al recorrido y entrevista a través del código QR. Artistas multidisciplinarios El perfil de los artistas en exhibición muestra una apertura al trabajo con diferentes formatos. Hablamos con Ferdi Alici, artista del estudio OUCHHH, que expande su campo de acción al integrar arte, ciencia y tecnología para explorar sus límites y experimentar con nuevos dispositivos. “No nos basamos en la tecnología, nos basamos en

Terreno de los NFTs por descubrirse Carlos Glatt (Feel The Fruit) y Juan Diego Lebrija (plataforma Mexican Art Machine) se sorprendieron al no poder imaginar el futuro de los NFTs a 10 años. Carlos comenta “10 años en este mundo del crypto es como 2 siglos”, “lo que creemos es que los NFTs en latinoamérica van a entrar durísimo pero faltan un par de años todavía, estamos empujando para ser los primeros.” Más sobre sus esfuerzos por construir puentes y acercar otros artistas a las posibilidades de los NFTs en el video. Un futuro inmediato Las piezas expuestas nos señalan un futuro que está a la vuelta de la esquina, mujeres todavía luchando por espacios de representación y experiencias sensoriales que colocan a la audiencia al centro de la pieza y de sus selfies. Sin embargo, la especulación e incertidumbre recae en el metaverso y los NFTs. En sus inicios, el internet prometió un espacio para crear un mundo virtual diferente y mejor, pero terminó reproduciendo estructuras de género, raza y poder… esperemos en esta ocasión ser más sabixs, diversxs e incluyentes.

Visita al Museo del Futuro. Andrés Rivera González/ Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo

*Futurista y artista de “Mi Calle, Nuestra Calle”, Laboratoria Urbana Feminista de investigación y arte, con enfoque en estudios de futuros participativos: https://micallenuestracalle.com/


Resistencia social, activismo y arte digital Texto y foto: Marcos Palomeque* Es un hecho que la producción artística de nuestro siglo se ha sofisticado a partir de la adición de diversas herramientas tecnológicas. Incluso, desde el siglo pasado, los llamados “nuevos medios” (fotografía, video, cine y computadoras) y después los sistemas de telecomunicación (teléfono, televisión e internet) han permitido que los artistas generen resultados creativos insólitos con temáticas muy variadas. Por otro lado, la compleja situación actual también ha impulsado la transformación digital. El potenciamiento de nuestro tiempo en redes sociales, la actividad bancaria online y el auge del e-commerce son solo algunas de las actividades que han tomado gran protagonismo en los últimos años. Sin embargo, dicha transformación digital es la misma que también ha reducido a las personas a simples datos, impone un estado de hipervigilancia global, y somete la razón a una realidad ficticia en pantalla. También es cierto que estos espacios digitales han generado un campo para la resistencia. El hacktivismo, la desobediencia civil electrónica, los códigos y poesía, los gestos y el performance son formas alternativas que los artistas emplean para señalar los métodos de dominación bajo los que vivimos. Desde su práctica, el arte se ha preocupado por incorporar a sus procesos creativos y de investigación, teorías y novedades que surgen en distintos campos del conocimiento, como la tecnología, las ciencias sociales y políticas. Una de las posibilidades más optimistas que nos ofrecen estos artistas a través de sus piezas es el cobro de conciencia para pensar que las cosas pueden ser de otra manera. A lo largo de estas líneas me dispongo a presentar (3) proyectos en los que las fronteras entre el arte digital y activismo político se borran para señalar cómo el inevitable uso de la tecnología en los procesos artísticos cobra un papel fundamental en los movimientos de tipo social, político, económico, ecológico o religioso. Desarrollado por el colectivo Electronic Disturbance Theatre (EDT) en 1998, Floodnet fue una obra de arte conceptual y una herramienta para la acción colectiva que tomó la forma de un applet de Java1 que permitía a los usuarios enviar peticiones o mensajes personalizados de forma coordinada al servidor web remoto que alojaba el sitio web del presidente mexicano Ernesto Zedillo para ralentizarlo y tirarlo. Su objetivo era practicar la desobediencia civil electrónica en solidaridad con el movimiento zapatista, reconociendo que se necesitaban acciones políticas tanto en línea como fuera de ella. EDT circuló un mensaje a cientos de direcciones de correo electrónico invitándolos a participar en esta especie de “plantón virtual”. Usando la función de “mensaje personal”, FloodNet también permitió a los visitantes bombardear servidores remotos con mensajes políticos o ideas sin sentido. Si escribías, por ejemplo, “justicia”, el usuario

del sitio web vería un mensaje de error con el texto: “justicia no encontrada”. El objetivo de FloodNet no era causar destrucción, sino crear un contexto para que la gente se reuniera en línea y así “dar testimonio de la injusticia”. También en 1998, surge la corporación-empresa Mejor Vida Corp., un proyecto de la artista conceptual Minerva Cuevas. Mejor Vida Corp., mantuvo la imagen de una empresa de carácter privado para ofrecer, a través de su página web, servicios y productos de forma gratuita para satisfacer necesidades y demandas reales de la población mexicana. Algunos de los productos que ofrece a través de su sitio web, aún vigente, son boletos del metro de la Ciudad de México, credenciales de estudiante para obtener descuentos, “semillas mágicas” con instrucciones de cultivo, entre otras cosas. Puedes conocer más sobre este proyecto de la voz de Minerva escaneando el código QR1 de esta página.

Extracto de entrevista a Minerva Cuevas. Cortesía de Farolito.me/ Marcos Palomeque

Finalmente, La muerte sale por el oriente (2016) fue un proyecto autogestivo de la fotógrafa Sonia Madrigal que aborda la violencia feminicida en el Estado de México. Se compone de tres ejes: fotografía documental de manifestaciones y acciones feministas; intervención en espacios públicos en municipios ubicados al oriente de la zona metropolitana y un mapeo digital alojado en el sitio web de la artista. Dicho mapeo funge como una especie de radiografía que además de documentar sus acciones, localiza puntos de violencia. Es un hecho que estos proyectos artísticos son solo tres ejemplos de las muchas maneras de resistencia y oposición que se insertan dentro de las fuerzas sociales para buscar justicia y mantienen nuestra memoria histórica y social viva. Puedes ampliar el contexto de estos proyectos y conocer dos acciones más de arte digital y activismo escaneado el código QR2.

Sitio Web de Farolito.me

El applet es un programa Java diseñado para incluirse en un documento Web HTML (como un sitio web). Cuando se visualiza un el sitio web que contiene un código de applet Java, el navegador descarga los códigos de Java de Internet y los procesa desde el sitio Web. Estos applets Java permiten que las páginas Web contengan gráficos animados o información interactiva como videos, animaciones, textos, etc.

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*Diseñador y comunicador visual. Actualmente dirige Farolito.me, una plataforma digital de libre acceso y sin fines de lucro especializada en artes visuales y diseño. A través de Farolito ha realizado más de 30 entrevistas, escrito artículos y reseñas; y ha establecido alianzas con museos como el Laboratorio Arte Alameda (LAA), el Museo Diego Rivera (Anahuacalli), así como con artistas, diseñadores, curadores e investigadores en el campo del arte y del diseño.


Página de FB de Alejandra Flores Alejandra Flores, “Daniela”, Grafito sobre papel algodón, 35 x 37 cm, 2017.

Alejandra Flores

Artista visual, periodista cultural, y maestra de técnicas tradicionales del dibujo y la pintura al óleo. Dirigió las carreras de Ciencias de la Información en la UDEM, e inició la carrera y maestría en Periodismo Especializado en el ITESM. Durante varios años escribió una columna de crítica teatral en el periódico El Norte, además de artículos y reportajes sobre temas culturales. En el campo de la pintura y el dibujo, se inició como autodidacta en la juventud, retomando esta pasión durante la edad adulta. Se formó en el Estudio Escalier, en Francia, en el Gage Studio de Seattle, Washington, el Anthony Ryder Studio en Santa Fé, Nuevo México, el Daniel Greene Studio en Nueva York y en la Florence Academy of Art en Italia. Ha presentado su obra en México, Francia y Estados Unidos. Desde hace 15 años es maestra de dibujo y pintura en su estudio privado y se especializa en el dibujo y pintura del retrato y la figura humana. agradece a Alejandra Flores el apoyo brindado para la impresión de este número con el cual se suma a la promoción y difusión del arte y la cultura.


agradece a ECOTURBO, empresa 100% mexicana comprometida con la sustentabilidad del planeta y la innovación tecnológica mediante la reducción de emisiones contaminantes y el ahorro en combustibles, el patrocinio brindado para la impresión de este número con el cual se suma a la promoción y difusión del arte y la cultura. www.ecoturbo.mx enlace@ecoturbo.mx @sistemaecoturbo Cel. +52 55 6474 0797 Ofc. +52 55 5084 5824


COMUNIDAD UC

El arte de reinterpretar herencias gastronómicas Texto: Ana Roberta Noriega Casas* Fotos: Cortesía de K’puchinos

México es un país muy diverso que se encuentra frente a un panorama de rescate de herencias culturales. Los sabores y saberes intangibles que giran en torno a la gastronomía se convierten en recursos de gran valor para su conformación, pero al mismo tiempo representan un reto de interpretación para las actuales y futuras generaciones de Chefs mexicanos. La gastronomía, más allá de solo satisfacer una necesidad biológica, se ha vuelto una valiosa herramienta para fomentar el turismo alrededor del mundo, mientras forma parte activa y sostenida de la economía local. Al mismo tiempo, el mundo enfrenta una homogeneización de las propuestas turísticas y gastronómicas, causadas por el intercambio cultural que trae consigo la globalización, fenómeno inevitable e irrefutable que marca las tendencias en el turismo cultural. No es fortuito que la oferta de gastronomía en los lugares turísticos sea, en su gran mayoría, de lugares diferentes o ajenos a lo local. Me refiero con esto a la tendencia de ofrecer alitas, hamburguesas, micheladas, pizzas, etc., que representan un gran porcentaje de los menús en los lugares turísticos, porque es ‘lo que se vende más’. Y es que existe en el mundo una tendencia por presentar la gastronomía de forma occidentalizada siguiendo los patrones de la cultura hegemónica.

Foto: Equipo de K’puchinos

¿Por qué es importante no caer en el juego de modificar la oferta turística únicamente al gusto o comodidad del visitante? Si bien esto es algo tentador para las agencias turísticas y otras empresas de servicios, se puede caer en una pérdida de autenticidad, donde las ciudades se vuelven escenarios desechables que pierden sentido en las temporadas bajas cuando disminuye la afluencia de visitantes, convirtiendo a los lugares en zonas ‘fantasma’. Ya hablaba de esto en 1991 el profesor Peter K. Fallon cuando acuñó el término de la disneyificación para “describir el proceso por el cual un lugar real es desprovisto de su carácter original para ser sustituido por una versión higienizada y desinfectada del mismo. Es decir, en un decorado.” Con base en esta premisa, vale la pena también tener en cuenta que, cada vez más, los visitantes esperan encontrar lo auténtico en la región que visitan. En ese sentido, la gastronomía no se transmite únicamente a través de platillos, sino que es un puente a través del cual podemos conocer la biodiversidad de un lugar, su historia, sus tradiciones, la lengua nativa, las artesanías e incluso la relación de las personas locales con su entorno.

Foto: Mole de olla

El restaurante K’puchinos, ubicado en el centro del bello pueblo mágico de Tequisquiapan, Querétaro, se ha dedicado en estos últimos 15 años a crear sinergias entre la exploración y el rescate de recetas y técnicas auténticas de

Delicioso restaurante ubicado en el centro de Tequisquiapan, Querétaro: www.kpuchinos.com.mx, Tels.: 414 273 2482 y 414 273 1046

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la cocina mexicana, con especial enfoque en la cocina queretana. Es a través de propuestas reinterpretativas de platillos que resaltamos sus virtudes con un toque creativo y original. Buscamos evocar en la mente del consumidor el paisaje queretano y detonar en el paladar las cualidades de estas delicias, no tan conocidas como otras cocinas mexicanas. Algunos de los platillos más representativos del restaurante, de invención propia y creados con ingredientes locales, son el cerdo con salsa de guamishi, el chile en nogada de garambullo, la lengua con mole de nopal, la costilla en salsa de xoconostle, el filete Celiztli (con salsa de vino blanco de la región y ceniza de tortilla) y la crema de queso regional, entre otros. La convergencia de lo tradicional con lo innovador ha representado un gran reto para el equipo directivo y creativo del restaurante, motivo por el cual me he sorprendido de cómo mi formación como gestora cultural me ha preparado (sin saber en su momento que me dedicaría a dirigir el restaurante de mi familia) para tener una visión integradora entre la gastronomía, la cultura y la demanda turística, sin perder de vista que un restaurante debe ser una empresa rentable. De forma tal que K’puchinos termina siendo un lugar familiar de tradición con una mezcla de recetas queretanas y mexicanas, que integra toques originales de cocina contemporánea así como ingredientes de la región y de temporada. Foto: Restaurante K’puchinos

Los invitamos a conocer esta propuesta en su próxima visita a Tequisquiapan, Querétaro. ¡A ver quién se resiste!

“La cocina es un reencuentro con el pasado, un viaje a lugares extraordinarios y el reconocimiento con la comunidad.” Chef Claudia López Búrquez

Foto: Costilla en salsa de xoconostle

Foto: Tía Alfa

Entrevista a Roberta Noriega, Ruth Casas y Javier Jurado de K’PUCHINOS restaurante bar, en Tequisquiapan, Qro. Sandra De Alba Del Riego

“Turismo gastronómico y patrimonio cultural”. Tesis de Lic. en Comunicación y gestión de la cultura y las artes. Universidad de la Comunicación. Ana Roberta Noriega Casas

*Directora General de K’puchinos Restaurante-Bar y licenciada en Gestión y comunicación para la Cultura y las Artes por la Universidad de la Comunicación.


Cultura líquida de México Texto y foto: Dinorah Zepeda Campos* Para los mexicanos es común comprar, consumir, regalar o festejar con un tequila o un mezcalito; también es común ir a un centro comercial a comprarlo. Sin embargo, es menos sabido que, a lo largo de todo nuestro territorio, se produce una buena cantidad de destilados y bebidas que forman parte de la cultura y que se elaboran con procesos y técnicas tradicionales. El patrimonio de México no sólo son sus edificios históricos, monumentos, sitios arqueológicos o parques. Las bebidas tradicionales que se elaboran en todo el territorio nacional también forman parte de la cultura líquida de nuestro país. Existe una gran variedad de las llamadas bebidas espirituosas, por ejemplo, en el norte de la República Mexicana, se hace la bacanora, originaria de Sonora; también está el sotol que es de Durango y Chihuahua. En el sur se produce el pox, que es una bebida destilada de maíz con caña, y el comiteco, destilado de aguamiel del agave de esa región. Entre las bebidas más conocidas destacan el tequila, oriundo de Jalisco y Guanajuato y, desde luego, el mezcal cuya denominación de origen se extiende a nueve estados (Oaxaca, Guerrero, Durango, San Luis Potosí, Zacatecas, Michoacán, Tamaulipas, Puebla y Guanajuato). Sin embargo, a esta lista hemos de sumar la tuxca, la charanda y algunas otras que seguro hemos olvidado mencionar. Los destilados mexicanos son más que un producto alcohólico; son un gran tesoro líquido cuya elaboración es resultado de un proceso histórico de saberes conformado por la adopción, difusión y conservación de técnicas artesanales que han logrado sobrevivir en el tiempo. Además de la riqueza que supone su producción, estas bebidas artesanales están imbricadas con elementos propios de la cosmovisión de las comunidades y son, por tanto, parte fundamental de diversos rituales y celebraciones religiosas. Cuando se habla de bebidas ancestrales no se puede afirmar que se conserven de forma intacta procesos desde la época prehispánica, ya que no hay evidencias de que se produjeran tal como las conocemos hoy. Sin embargo, investigadores del tema como Patricia Colunga y Daniel Zizumbo afirman que antes de la llegada de los españoles ya se conocían las técnicas de cocido, fermentación y una forma de destilación mesoamericana del maguey, y que, durante el virreinato, dichos procesos fueron modificándose y adaptándose a formas de elaboración indígena. En este sentido, lo que resulta innegable es que las comunidades tradicionales han heredado conocimientos de generación en generación logrando la transmisión y conservación de saberes culturales para la elaboración de las llamadas bebidas espirituosas. El legado de saberes para elaborar los destilados es complejo. Se inicia con los conocimientos necesarios para seleccionar y cortar los agaves —debido a la gran cantidad de especies es que se debe conocer cómo trabajar con cada una de ellas, así como su tiempo de maduración que puede ir desde 5 hasta 18 años. Posteriormente, se requiere hacer un horno de piedra tipo barbacoa en el piso y agregar la leña para cocer los magueyes aproximadamente durante 72 horas. Después, se lleva a cabo la molienda y fermentación, lo cual implica cerca de 10 días. Al final, se realiza la destilación en ollas de barro o alambiques de cobre. Resulta de vital importancia reconocer el valor cultural de estas bebidas como una mezcla de conocimientos de las comunidades rurales. Un ejemplo particular lo encontramos en el mezcal de campanilla, elaborado en el municipio de Palmar Segundo, San Luis Potosí. Debido a que éste se logra mediante un proceso de destilación ancestral único en el mundo, ha sido nombrado Patrimonio Cultural Inmaterial del estado ya que cumple con lo que establece la UNESCO en esa materia. Otro ejemplo es el pox, elaborado por comunidades de los altos de Chiapas, y que posee un valor espiritual debido a que le da sentido de identidad a la comunidad. Así, gracias al trabajo de los maestros poxeros y comunidades de la zona que lo producen, se ha logrado conservar la tradición de esta bebida descendiente de la cultura maya. Finalmente, hay que agregar que el proceso de elaboración de estas bebidas genera y fortalece importantes lazos comunitarios entre oficios pues, de diferente manera, participan leñadores, campesinos y artesanos quienes, además, contribuyen en el diseño de las botellas con tejidos, textiles, cerámica o figuras de madera. Por todo esto, los destilados tradicionales mexicanos son una herencia que conserva la cultura líquida de México.

Cata de mezcal en Patricia Conde Galería. Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo

Entrevista al maestro mezcalero Luis ALberto Martínez. Alexis García/ Karla Miranda Pino Rusconi Carrillo

*Profesora de la licenciatura en Periodismo en la Universidad de la Comunicación. Promotora de productos artesanales mexicanos y directora del proyecto Agave y Uvas que impulsa la conservación y difusión de bebidas tradicionales mexicanas.


La ausencia de la presencia RESEÑA DE LIBRO Foto: Ernesto Franco

Ulises Verde, autor de La ausencia de la presencia, ha desarrollado su vida académica en las artes visuales, obteniendo el grado de doctor por la Universidad Nacional Autónoma de México. Durante su trayectoria profesional ha participado en diversas exposiciones nacionales e internacionales, así como en estancias artísticas en Ecuador e Italia.

Texto: María Cristina Luna Tamayo* El libro en sí mismo puede considerarse un objeto de arte, ya que el diseño editorial está pensado específicamente en ese sentido; tiene una propuesta gráfica que coincide con el proceso del avance del virus, el desarrollo tipográfico está diseñado incluso para hacer referencia a la ausencia de algo que importa,

En 2019, como parte de su año sabático, se le ofreció la posibilidad de hacer una estancia de producción artística, así como una exposición en Monte San Martino, Italia. Como pocos imaginamos, ese año marcaría el principio de una serie de sucesos no experimentados en época contemporánea: una emergencia sanitaria que nos obligó a tomar medidas restrictivas de movilidad e interacción social. En este contexto se origina el libro. La ausencia de la presencia relata de manera gráfica el avance del virus, esa presencia imperceptible para nosotros, pero que generó la ausencia de las personas. Un teléfono móvil fue el instrumento mediante el cual se hizo el registro de la Ciudad de Roma vacía mientras esperaba el tiempo de regresar. Recordar los espacios turísticos, antes llenos de gente, y capturarlos ahora como espacios completamente vacíos fue su misión. Roma, el Vaticano, Castel Sant’Angelo… Fueron más de 150 las fotografías que pasaron por una selección curatorial dentro de la fase de creación del libro, fundamentando así los procesos de investigación-producción que son base esencial para toda creación artística. Cada imagen está señalada con coordenadas que nos permiten consultar de manera interactiva el lugar en el que fueron tomadas.

Foto: Ulises Verde

*Coordinadora de la licenciatura en Comunicación visual en la Universidad de la Comunicación.

sustituida o insinuada por una presencia otra. Se trata, en suma, de un acercamiento conmovedor y al mismo tiempo impactante, ya que nos remite a la experiencia catastrófica de la pandemia sin hablarnos de ella. Una forma diferente de presentarnos la ausencia…


Foto: Museo Frida Kahlo - Casa Azul. Sebastián Monsalve, 2019

MUSEO FRIDA KAHLO:

un inmueble, muchas herencias Texto: Karla Mariana Arellano Cadena* Desde su apertura en 1958, el Museo Frida Kahlo ha atraído a miles de visitantes que buscan acercarse a la artista a través de sus objetos y obras de arte. Así, quienes recorren la también llamada Casa Azul, son testigos de su historia y de cómo, a través de las distintas estancias, pasillos y jardines, la artista creó su universo íntimo rodeada de una rica colección de piezas de arte prehispánico y popular que dan cuenta de su herencia mexicana. Frida Kahlo es uno de los íconos nacionales por excelencia, pues a través de su forma de vivir, de vestir y de pintar, logró plasmar su personalidad y su esencia mexicanas. No en balde, hoy en día, es seguida por miles de personas que admiran su pasión por la vida y por el arte, así como su resiliencia ante los diversos retos que se le presentaron a lo largo de su vida.

La artista es un símbolo para diversos grupos. Por un lado, representa a miles de mujeres que desean hacer valer su opinión pues, en su momento, se convirtió en una de las pocas mujeres que estudiaban en la escuela nacional preparatoria y, gracias al impulso de su padre, también realizó actividades poco comunes para las mujeres de su época. Hizo valer su opinión y creó una carrera, así como prestigio adquirido por mérito propio. Por otro lado, también es admirada por su fortaleza ante las dificultades de salud que enfrentó, siendo el accidente ocurrido a sus 18 años el hecho más importante y trágico. Sin embargo, a pesar de diversas operaciones y enfermedades, entre las que se cuenta la amputación de su pierna derecha en 1953, la artista continuó plasmando en su obra sus deseos y sentimientos más profundos, así como su pasión por la vida.

Foto: Archivo Diego Rivera y Frida Kahlo, Banco de México, fiduciario en el Fideicomiso Museos Diego Rivera y Frida Kahlo

Fotos: Cortesía del Museo Frida Kahlo – Casa Azul


A pesar de las vicisitudes, Frida Kahlo fue capaz de crear una imagen propia a través de su forma de vestir y de presentarse ante el mundo. En ese sentido, La Casa Azul juega un papel esencial en la comprensión de la vida y obra de la famosa artista; motivo por el cual su colección debe ser analizada como un testimonio vivo del legado artístico y cultural reunido por la pareja Rivera-Kahlo. Las colecciones de arte prehispánico y popular a las que ambos artistas dieron tanta importancia ayudaron a la creación de una identidad mexicana en tiempos de la post revolución. Sin embargo, gracias a que han sobrevivido el pasar de los años, éstas han llegado hasta nuestros días en calidad de vehículos transmisores de herencias y tradiciones mexicanas mezcladas con pasión artística. El Museo Frida Kahlo es una realidad gracias al deseo del pintor Diego Rivera de legar el inmueble y su contenido al pueblo de México. Esto lo formalizó a través de la creación de un Fideicomiso a través del Banco de México, con el fin de asegurar su correcta administración y preservación a lo largo de los años. Gracias a esta acción, el museo puede compartir sus contenidos desde 1958. La labor museística de este recinto es muy importante ya que, al igual que otras instituciones culturales alrededor del mundo, se ha convertido en un puente que conecta las colecciones y todos los demás legados inmateriales que en él se albergan con la diversidad de públicos que lo visitan. Así, para lograr este objetivo, el museo cuenta

Museo Frida Kahlo - Casa Azul. Estudio

con un equipo multidisciplinario que se encarga de la correcta conservación de los espacios y objetos que resguarda. Por otro lado, La Casa Azul tiene al frente un equipo de profesionales encargado de gestionar y garantizar su correcto funcionamiento para poder recibir adecuadamente a miles de visitantes al día. Ciertamente, el museo ha tenido que crecer y evolucionar para estar a la par de la sociedad cambiante, y esto no fue la excepción durante la pandemia por COVID 19. En ese sentido, a través de un recorrido virtual creado años antes de la emergencia sanitaria, así como

de diversas actividades digitales, el museo pudo continuar abierto al público de manera virtual durante el periodo de encierro. Este tipo de recursos resultaron indispensables para la creación de un vínculo, no solo con las nuevas generaciones, sino con personas que se encuentran del otro lado del mundo, y fue debido a la pandemia que pudimos explorar su viabilidad y sus resultados. En cuanto al futuro del Museo Frida Kahlo destaca su constante búsqueda por continuar mejorando las herramientas y estrategias disponibles para relacionarse con sus públicos, así como la capacitación constante de su equipo de colaboradores. Para conocer más sobre este museo, sus colecciones y su historia consulten el QR en el que podrán ver la entrevista que ANTiDOGMA sostuvo con Perla Labarthe, Coordinadora General de la Casa Azul.

Entrevista a Perla Labarthe Álvarez. Esperanza Islas Arroyo

Museo Frida Kahlo - Casa Azul. Cocina *Gestora cultural egresada de la Universidad de la Comunicación en 2012. Fue encargada de Relaciones Públicas en el Museo Frida Kahlo-Casa Azul y ahora es Lifestyle Specialist: Arte, Música y Cultura Urbana en Vans.


NEUTLE: Bebida No Contada Un documental que visibiliza una de las bebidas más representativas y legendarias de nuestro país: el pulque Texto: Yésica Neri Valdés* El pasado 6 de abril de 2022, en el foro de la Universidad de la Comunicación, se llevó a cabo la presentación y proyección del documental NEUTLE: Bebida No Contada, un proyecto audiovisual producido y postproducido por estudiantes de 7º semestre de Comunicación Social. El documental se llevaba gestionando desde que las alumnas y alumnos se encontraban en 6º semestre, dentro de la materia de televisión a cargo del profesor Antonio Escribano.

ya que productoras y vendedoras siguen preservando la tradición del néctar de los dioses. Mediante entrevistas a productores, raspadores y consumidores, el proyecto audiovisual logró plasmar el amor y respeto que se tiene a la bebida. En pantalla se puede disfrutar desde el pulque más natural hasta una amplia gama de curados de diversos sabores que antojan a cualquier paladar. Y así, finalmente, se llevó a cabo su estreno en las instalaciones de la Universidad, donde para rematar con broche de oro, al concluir la proyección se compartió una degustación de pulque natural y una gran variedad de curados, traídos directamente del Municipio de Jilotepec.

Foto: Yésica Neri Valdés

Desde un principio, el propósito del documental fue visibilizar este elixir nacional, obtenido de la fermentación del aguamiel de la planta del maguey. Además de poseer múltiples propiedades nutritivas, es una bebida ancestral. Si retomamos un poco de historia, los aztecas veneraban a Mayahuel, la gran diosa del maguey, por lo que respetaban mucho a la bebida. Sin embargo, los españoles al no verlo atractivo empezaron a desprestigiarlo, arrancando su legado. Es por ello que la misión principal del documental fue retomar el valor de esta bebida natural para destacar su herencia nacional y fomentar su consumo. La primera parte del rodaje se realizó en pulcatas de la Ciudad de México, algunas de ellas fueron: La Hija de los Apaches, Las Duelistas e incluso el Museo del Pulque y las Pulquerías MUPYP. Sin embargo, el proyecto buscaba involucrarse con mayor profundidad en las raíces del néctar de los dioses, por lo que la segunda etapa de producción se rodó en el Municipio de Jilotepec, Estado de México. Aquí se conoció Pulque Diamante, un lugar dedicado al proceso del raspado del maguey para la elaboración de esta bebida artesanal. También Jilotepec fue la puerta para documentar pulquerías como: La Palapa y Fórum, establecimientos dónde se puede disfrutar un pulque 100% artesanal.

Foto: Antonio Escribano

NEUTLE: Bebida No Contada, no solo se convirtió en un proyecto estudiantil para visibilizar una de las bebidas más representativas y legendarias de nuestro país, sino que también dio la pauta para que otros grupos de Comunicación Social se involucren en la creación de contenidos audiovisuales que visibilicen temas sociales relevantes e históricos de nuestro país e, incluso, de otros lugares del mundo. Si quieres ser testigo del documental te invitamos a escanear el siguiente código QR que te llevará a reproducir NEUTLE: Bebida No Contada.

¡Recuerda, si un dolor quieres aliviar, un pulque debes de tomar!

El proyecto evidencia el renacimiento del pulque, destacando que cada vez es más común ver establecimientos donde se ofrece hoy en día. Sin embargo, el documental invita a consumir neutle legítimo para disfrutar realmente de los frutos de esta bebida tradicional mexicana. Por otro lado, aborda la importancia de la mujer en la industria pulquera, *Alumna de séptimo semestre de la licenciatura en Comunicación social en la Universidad de la Comunicación.

Documental “NEUTLE: Bebida No Contada” de Yésica Neri Valdés




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Museo Frida Kahlo: Un inmueble, muchas herencias

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Cultura líquida en México. Dinorah Zepeda Campos

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La ausencia de la presencia, reseña del libro. María Cristina Luna Tamayo

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El arte de reinterpretar herencias gastronómicas. Ana Roberta Noriega

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QR1: Entrevista a Roberta Noriega, Ruth Casas y Javier Jurado de K’PUCHINOS restaurante bar, en Tequisquiapan, Qro. Sandra De Alba Del Riego QR2: “Turismo gastronómico y patrimonio cultural”. Tesis de licen- ciatura en Comunicación y gestión de la cultura y las artes. Universidad de la Comunicación.

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Resistencia social, activismo y arte digital. Marcos Palomeque

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Alejandra Flores, artista visual regiomontana

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Piso 16. Laboratorio de iniciativas culturales UNAM

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Oro británico: La pintura de Alfred R. Thomson en los juegos de la XIV

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Angélica Carrasco: reflexión y poética gráfica. Ingrid Suckaer

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Jorge Marín: Elogio de la forma. Sandra Benito Vélez

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QR: Entrevista a Henoc de Santiago Dulché

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QR2: Video de la canción “Las máscaras en el suelo” de Citlaly Malpica QR3: Video de la canción “Flor de naranja” de Citlaly Malpica

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QR: Entrevista a Diego Isunza Kahlo

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Diego Isunza Kahlo: La cocina mexicana, ingrediente de nuestra

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QR: Plática sobre herencias intangibles entre colectivas

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Las herencias culturales intangibles de la protesta feminista

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Entre archivos personales, afectos y genealogías. Yuruen Lerma Mayer

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QR1: Entrevista a Yuruen Lerma Mayer. Antonio Morales Rosado QR2: “Ojalá la guerra no hubiera terminado”. Prácticas, redes e identidad epistolar de Trixie Mayer, una joven mexicana inglesa en tiempos de guerra (1942-1946). Tesis doctoral en Estudios Feministas. División Ciencias Sociales y Humanidades. Uni-versidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Xochimilco. Yuruen Lerma Mayer

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Apropiación y extractivismo culturales: un llamado a la concientización

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Desde la génesis de nuestra ancestra Francesca Gargallo

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Graciela Iturbide: de herencias y rupturas para encontrar lo propio

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QR: Entrevista a Graciela Iturbide. Esperanza Islas Arroyo

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Poetas de Colima: entre letras y volcanes. Oscar Robles Méndez

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The Front Arte & Cultura (San Diego). Diana Karina López Correa

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Gasto absurdo del esfuerzo. Alma Delia Miranda Flores

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Galería Freijo (Madrid). Brenda Naomi Morales Ramírez

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INASIBLE, Reflexiones Actuales de Mujeres en las Artes

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La Nave (Xalapa). Sebastian Kunold

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Casa UC (CDMX). Belena Hesles Ferreiro

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Resplandor Gallery (Oaxaca). Judith Romero

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MAIA Contemporary (CDMX). Rodrigo Oropeza Adame

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ArtSpace México (CDMX). Belena Hesles Ferreiro

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Galería Hispánica (CDMX). Imelda M. Morales Ferrero

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Galerie Nordenhake (CDMX). Paula Sophia Segura Brito

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Galería L (CDMX). María Fernanda Ruiz Gil

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Carta de las editoras

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Carta del rector

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Aguafuerte Galería (CDMX). María Guadalupe Fuentes Vergel

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Patricia Conde Galería (CDMX). Patricia Conde Juaristi

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