MERCADOS | PERSPECTIVAS
Aguantar la soja, vender el maíz
EN UN ESCENARIO CAMBIANTE DE ACUERDO CON LAS DECISIONES QUE TOME CHINA, ESTA PARECE SER LA MEJOR ESTRATEGIA PARA MAXIMIZAR RESULTADOS. DENTRO DE LO POSIBLE, CLARO.
C
iertos interrogantes circulaban intensamente en el mercado de granos de fines del mes de julio. ¿Se puede quedar sin soja Brasil antes del arribo de la nueva campaña? ¿Llegará a importar soja/harina de soja desde la Argentina?, se pregunta Enrique Erize, analista de Novitas. “Es probable -afirma, respondiendo al dilema que acababa de plantear-. Las fábricas necesitan mucha mercadería para abastecer a las poderosas cadenas de las carnes en este país, y durante el primer semestre la gente privilegió poner la soja arriba de los barcos. Brasil batió récords de exportaciones, pero quedó más apretado que de costumbre. Si precisan importar soja o derivados, existe el arancel externo común y el mayor valor de flete en caso de pretender traerla desde fuera del Mercosur”. El hecho es que la soja ha recuperado posiciones desde los mínimos del inicio de la pandemia, de la mano de las compras chinas en Estados Unidos (al menos así era hasta el cierre de esta edición). En la Argentina, los precios de la oleaginosa han estado casi siempre arriba de la paridad. Erize entiende que si se restituyera el diferencial de aranceles que tenía la industria (“desacertadamente eliminado por el gobierno de Mauricio Macri”), esta podría pagar todavía más.
QUÉ HACER CON EL MAÍZ Cuando uno produce este cereal en la Argentina tiene que distinguir dos escenarios. Con el maíz temprano estamos a contraestación: cuando salimos al mercado en el mundo no hay maíz suficiente, y además el nuestro es tan 18 | REVISTA CHACRA
bueno o mejor que el estadounidense. El maíz tardío es un hallazgo agronómico, pero es un problema comercial: en julio aparece la safrinha brasileña, en septiembre entra Ucrania y en octubre, Estados Unidos. “Para ser optimista en maíz hay que tener mucha imaginación. Si no nos hubiera ayudado el recorte de
La situación del maíz en Chicago, mercado rector a la postre, no da para entusiasmarse demasiado. Viene más oferta en camino. Y lo que abunda no vale.
ALTO RIESGO “Hoy la cadena comercial argentina está herida de muerte: molinos, corredoras, aceiteras. Y la cadena de pagos se halla en terapia intensiva. La caída de la recaudación es estrepitosa. ¿Cómo sigue esta historia?, ¿de dónde van a sacar la plata para evitar un estallido social? No es difícil imaginarlo”, advierte Erize.