representación estudiantil
Se postergaron provisoriamente las elecciones del Claustro Estudiantil A finales de Septiembre la Junta Electoral de la UNQ comunicó que las votaciones de los Claustros serán pospuestas hasta que estén dadas las condiciones sanitarias para realizarlas de forma presencial. :: Por Candela Araoz y Victoria Lezcano Este año, entre el 13 y el 16 de Octubre, en la Universidad Nacional de Quilmes debían haberse celebrado las elecciones de los Claustros, entre ellos, las del Claustro Estudiantil. Dichas votaciones se hacen cada dos años y son de carácter obligatorio. El Claustro Estudiantil está conformado por Consejeros que representan a los estudiantes en los Consejos de cada uno de los Departamentos de la Universidad, en el Consejo Superior y en la Asamblea Universitaria. Los representantes funcionan como el nexo entre los estudiantes y las autoridades propiamente dichas de la institución educativa. Este año se debían renovar a los representantes antes de que finalizaran los mandatos de los delegados actuales. Sin embargo, pocos días antes de la fecha establecida para la votación, la Junta Electoral de la Universidad comunicó su decisión de posponer el proceso eleccionario hasta que se den las condiciones sanitarias necesarias para regresar a la Casa de Estudios y votar de manera presencial. Esta medida, sin precedentes en la Universidad, se adoptó a través de la Resolución del Rector Nro. 943/20 e implica la extensión de los mandatos de los Consejeros actuales hasta el 12 de Junio del 2021 o hasta que se elijan nuevas autoridades. Florencia Melluso, Consejera Estudiantil del Consejo Superior, explicó que la decisión de suspender las elecciones del Claustro se tomó debido a las dificultades que implicaría realizarlas a distancia, puesto que tendrían que llevarse a cabo a través de correo postal. “No quisimos im-
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plementarlo en este contexto de pandemia porque es riesgoso, muchos tendrían que movilizarse en colectivo para acercarse a un correo, y la carta pasaría por muchas manos, lo cual podría contribuir a la cadena de contagios. Por eso, propusimos que no se hagan las elecciones”, expresó la Consejera, dando cuenta de la preocupación que impulsó a los Consejeros a plantear tal medida ante las autoridades de la Universidad. “Además, hay muchos chicos que quizá nunca enviaron una carta; lo cual afectaría la participación’’, añadió Florencia respecto a estas votaciones (que son de carácter obligatorio para el alumnado). Y concluyó: “Todos tienen que participar, un voto más o un voto menos puede hacer la diferencia”. La adopción de esta medida no estuvo exenta de controversias. De hecho, algunos de los distintos espacios que coexisten dentro de la Universidad (de izquierda o derecha) manifestaron su desacuerdo al saber que se prorrogarían los mandatos actuales por tiempo indefinido. Sin embargo, algo que ellos no parecen tener en cuenta, según la Consejera Estudiantil consultada, es que la Universidad no puede estar sin un gobierno que la administre y tome decisiones. “Si no seguimos gobernando, nuestro mandato termina y no hay elecciones… ¿quién se queda a cargo?”, preguntó enfáticamente la representante. Como el anuncio de la suspensión se realizó pocos días antes de la fecha pautada para las elecciones, no fue sorpresa que las agrupaciones estudiantiles que pretendían participar ya tuvieran preparadas sus listas y plataformas electorales. Florencia comentó que la agrupación a la que pertenece, Alianza Universitaria (que actualmente cuenta con la mayor