SEÑORA MUERTE Irma María Magnani Valdez Eres para mí la gran certeza en este mundo de amor, de duda y de vileza. Estás ahí, agazapada compañera, mientras yo vivo persiguiendo una quimera. Eres la que me espera en la última vuelta del camino, después que recogí el trigo de la era final de la espiral de mi destino. Ya llevo tanto trecho recorrido; luego de cada acierto cuánto desatino. Más vivo y valoro lo vivido tratando de dejarte en el olvido. Sé que vendrás, aunque no quiera desollando a tu paso mi quimera, te espero, nadie escapa de esta suerte; pero, por favor, no vengas todavía Señora Muerte.
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