Pasión Cofrade
La desconocida Ronda de la Procesión de los Pasos Julio CAYÓN
otras proclamas que lo que ella, cual pentagrama de cera y crespones doloridos, anuncia en la noche del Jueves Santo y, en concreto, en el ánima oscura de la traición al Hijo del hombre, que es frontera con la jornada del dolor y la hora nona: el viernes de la sangre. Y La Ronda escribe el prólogo del también titulado Día de la Cruz, el Viernes Santo, a continuación de que el reloj de la catedral de Santa María de Regla, admirada como “Pulchra Leonina” (hermosa leonesa) desgrane, pudoroso, las doce de la noche. Es el anuncio primario de la tragedia cristiana que se avecina a partir de la amanecida. Y será el director nato de la cofradía y a la vez encargado de la muy histórica parroquia de Nuestra Señora del Mercado, la antigua del Camino, quien inicie, con un Padre Nuestro a título de preámbulo, esta primera llamada oficial frente al antiguo Ayuntamiento de la plaza de San Marcelo, conocida en su tiempo -aunque menos hoy- como plaza de las Palomas. La oración, elevada a piadosa plegaria, la comparten los cientos de personas que acompañan a la cofradía. Es una cita obligada. Después de los cuatro ‘toques’ perceptivos de la esquila, el clarín y el tambor-los marca el protocolo y la costumbre-, se escuchará de nuevo -a modo de epílogo- el sonido de la esquila y el ronco redoble del desafinado tambor antes de que el canto que obliga la tradición haga pedazos la noche: “Levantaos, hermanitos de Jesús, que ya ha es hora”. Es, sí, el inicial mandato a los papones de la sarga negra y el emblema morado -una corona de espinas de ocho huecos- para que, al romper la mañana, asistan a la procesión de Los Pasos.
Fotografía: Mª Edén Fernández Suárez 46
La Ronda de la cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno -esquila, clarín y tambor destemplado- es un punto y aparte de la Semana Santa de León. Tiene personalidad propia. Carácter insustituible.
SEMANA SANTA • LEÓN 2022
Aroma a incienso. A día de hoy -y también desde hace siglos-, ya no se entendería la Pasión en la capital leonesa sin su presencia en las calles y en las plazas de la ciudad. Por derecho propio y por personalidad. Sin
Desde allí, dejando atrás el viejo Consistorio que ideara el arquitecto Juan de Ribero, la Ronda proseguirá su periplo anual visitando el Palacio Episcopal, la Diputación,