92 nes artísticas artesanales que evolucionan con la nueva tecnología y cultura colaborativa. Rompe la dependencia de los flujos de la tecnología al dotar a las personas de las herramientas necesarias para generar sus propios dispositivos y para una producción artística autónoma no dependiente de productos regidos por la lógica comercial. Producen una inversión de la relación comunidadempresa. Si previamente podíamos ver una clara creación de necesidades por parte de las empresas y una comunidad a expensas de los intereses comerciales de las mismas, con esta tecnología podemos ver que está ocurriendo lo contrario: “Las empresas han adoptado las prácticas de la comunidad, porque esta última de cerca o de lejos ha sido y sigue siendo, por un lado, el árbitro de la validez de la técnica y, por otro, el laboratorio de innovación abierta y descentralizada de la impresión 3D personal, el lugar donde a través de la experimentación se construyen, adoptan y comparten las mejores prácticas; las empresas siguen e intentan contestar a las necesidades innovadoras de la comunidad, las cuales provienen casi todas de ésta.” (Muscinesi, 2010). La replicabilidad de las propias impresoras (que permiten imprimir los componentes de otras impresoras), al igual que el hardware libre en general, permite la replicabilidad de las prácticas, lo que conforma un primer paso hacia la generación de una autonomía real frente a los flujos de la tecnología