Pasión Cofrade
La Semana Santa de León y su implicación en la asistencia social La Semana Santa de la ciudad de León, y más concretamente sus cofradías y hermandades, han estado unidas al mundo penitenciario, realizando una gran labor social. La relación entre estos dos entes se pierde en la memo ria de los siglos, y aunque no ha sido continua, la línea no se ha llegado a borrar. Tiene sus momentos álgidos, como el indulto del preso que lleva a cabo en la actualidad la Cofradía del Santo Cristo del Perdón cada Martes Santo. O momentos desconocidos para el gran público, como puede haber sido la asistencia a los entierros de los ajusticiados o la comida a los pobres presos de la cárcel, costumbres rea lizadas en siglos pretéritos y actual mente desaparecidas. Los orígenes de este vínculo se re montan a hace más de cuatro siglos, cuando el 9 de febrero de 1578 se fundaba la Cofradía de Angus tias y Soledad de Nuestra Señora la Virgen Ma
Fotografía: Miguel Seijas
ría, a la sazón la cofradía decana desde el punto de vista documental de nues tra Semana Mayor. Esta cofradía mariana dejó patente desde el primer momento el interés por los más desfavorecidos: “acordaos de los presos como si estuvierais con ellos encarcelados” [Heb 13, 3]. Así que en su Regla Fundacional dejó por escrito en su artículo 29 que todas las pascuas del año el abad de la Cofradía, junto al escribano (actual secretario) u otro oficial (actual seise), acudiera a la prisión a dar una comida a los pobres presos de la cárcel, la cual se compo nía de una olla de ternera o de cordero. La asistencia social que realizaba esta Cofradía a estas personas era debida a los principios cristianos de amor al prójimo, ayuda al necesitado, etc. Pero además por razones humanitarias, ya que las prisiones de aquella épo ca no eran lugares muy dignos para el cumplimiento de las condenas. Hagá monos eco de las palabras del gran autor Francisco de Quevedo cuando estuvo cautivo en el convento de San Marcos de nuestra ciudad:
“Redúcese a una pieza subterránea, tan húmeda como un manantial, tan oscura que en ella siempre es de noche, y tan fría que nunca deja de parecer enero. Tiene sin comparación más traza de sepulcro que de cárcel... ” [La torre y la cárcel de Quevedo en San Marcos de León. Apuntes histórico-descriptivos, por F. Fita, S.J. Boletín de la Real Aca demia de la Historia. Tomo 81. Año 1922]. Todos los Sábados Santos de cada año, víspera de la Pascua Florida, la Cofra día de Angustias y Soledad acudía a realizar esta labor social, y sus estatu tos recogían que si el abad se descui dase de realizar este precepto los her manos y oficiales de esta Hermandad le descontaran de su peculio el costo de dicha comida. Este acto se llevó a cabo durante un tiempo que desco nocemos, puesto que no ha llegado a día de hoy ninguna documentación di ferente a la Regla Fundacional que lo mencione.