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Parásitos internos y One Health
Varias especies de parásitos han convertido a los perros en su hogar. A diferencia de parásitos externos como las pulgas y las garrapatas, los endoparásitos no son visibles para los cuidadores de perros, y son pasados por alto fácilmente a pesar de su potencial para causar daño. A menudo los parásitos no afectan mucho a la salud canina, pero pueden tener un profundo impacto en la humana. Esto hace que sea el doble de importante controlar la infección parasitaria en perros: no solo para proteger su salud, sino también la de sus familias humanas y comunidades.
ficies contaminadas con huevos de Toxocara canis, estos pueden adherirse a la piel y alcanzar la boca y el intestino. Aunque los gusanos no pueden madurar por completo en los humanos, las larvas salen de los huevos y penetran a través del intestino, desde donde son transportados al hígado, a los pulmones y prácticamente a cualquier órgano. El sistema inmunitario destruye algunas larvas, pero otras son capaces de evadirlo y permanecer con vida durante algún tiempo, moviéndose entre los tejidos.
Eric Morgan Catedrático de Parasitología Veterinaria en la Universidad de Queens (Belfast) Fundador del European College of Veterinary Parasitology
La mayoría de los endoparásitos son helmintos, o gusanos, y se presentan en una gran variedad de formas y tamaños, ocupando diferentes nichos en el organismo. En este trabajo se presentan tres ejemplos, que son especialmente relevantes desde el punto de vista One Health.
Toxocara canis Un gusano redondo que habita el intestino del perro, Toxocara canis, es posiblemente el parásito zoonósico más importante que existe, debido a su amplia distribución y efectos nocivos sobre la salud y el bienestar humanos (figura 1). Aunque el gusano adulto es grande, de hasta 10 cm de largo, y se asienta en el intestino donde se alimenta de su contenido, generalmente no produce ninguna enfermedad perceptible en perros, excepto en caso de infecciones muy graves en cachorros jóvenes. Las hembras producen huevos que se expulsan con las heces, y pueden infectar al próximo hospedador. Para desarrollarse hasta el estado larvario infeccioso, los huevos requieren un periodo, y sobreviven muy bien en el medio ambiente durante varios meses, si no años, en condiciones normales. Los huevos son microscópicos y sus cubiertas son gruesas y pegajosas, por lo que los perros se infectan fácilmente al consumir accidentalmente los huevos adheridos a sus patas tras pisar suelo contaminado. En estudios recientes se ha descubierto que hasta uno de cada cinco perros tiene huevos en sus patas en un momento dado. Desafortunadamente, si las personas entran en contacto con el suelo, la suciedad o las super-
La inflamación alrededor de las larvas puede causar varios síntomas, dependiendo de dónde se encuentren. Por tanto, los pacientes presentan una amplia variedad de enfermedades, incluidos dolores y molestias no específicos, debilidad y náuseas (tabla 1). Debido a que las larvas migran a través de los pulmones y tienen preferencia por el tejido nervioso, algunos casos implican problemas respiratorios y enfermedad neurológica, que incluye dolores de cabeza persistentes, convulsiones y psicosis. El diagnóstico de la enfermedad causada por Toxocara en las personas es muy difícil. Las infecciones no solo se presentan de varias maneras, sino que además a veces causan dolencias no detectables, y no existen test específicos para la infección por Toxocara. Los anticuerpos específicos pueden detectarse, pero no permiten diferenciar entre exposición asintomática y
Figura 1. Huevo infectivo de Toxocara canis.
que debería causar una grave preocupación dadas las conocidas manifestaciones neurológicas en casos clínicos, así como los efectos demostrados en el comportamiento de roedores infectados experimentalmente. Solo recientemente los resultados de diferentes estudios epidemiológicos se han cotejado y analizado debidamente. La seroprevalencia humana varía entre países y poblaciones, pero en Europa la media es del 6,2 % (4-42 %). Por lo tanto, es muy probable que muchos casos de enfermedad y deterioro del desarrollo cognitivo surjan debido a la infección por Toxocara.
TOXOCARA CANIS ES POSIBLEMENTE EL PARÁSITO ZOONÓSICO MÁS IMPORTANTE QUE EXISTE, DEBIDO A SU AMPLIA DISTRIBUCIÓN Y EFECTOS NOCIVOS SOBRE LA SALUD Y EL BIENESTAR HUMANOS. enfermedad. Una manifestación específica de la infección por Toxocara más fácil de reconocer es la migración larvaria al ojo (larva migrans ocular, figura 2), ya que resulta en una lesión que es visible en el examen oftalmológico. En cambio, prácticamente en cualquier otro órgano el diagnóstico específico es casi imposible sin biopsia. Cabe destacar que la variable, y a veces vaga, presentación de síntomas, junto con una alta seroprevalencia, implican que los casos de enfermedad zoonósica por Toxocara estén, casi con seguridad, infradiagnosticados. Junto a los estudios de casos clínicos, las investigaciones epidemiológicas han confirmado la existencia de asociaciones entre la exposición a Toxocara y varias consecuencias sobre la salud. Por ejemplo, el riesgo de ser diagnosticado de asma, epilepsia y psicosis es mayor si existen anticuerpos anti-Toxocara. Igualmente, los niños con anticuerpos puntúan menos en las pruebas de capacidad cognitiva, lo
La fuente de huevos de Toxocara canis son principalmente los perros domésticos portadores de gusanos maduros, y el medio principal de prevención de la infección en personas es suprimir la eliminación de huevos en los perros, así como la eliminación rápida y rigurosa de las heces de los perros del medio ambiente y una buena higiene de las manos, especialmente antes de comer. La mayoría de los cachorros (debido a la transmisión vertical de parásitos), y una pequeña proporción de los perros adultos, eliminan huevos en cualquier momento: en la mayoría de los estudios alrededor del 3-5 %. Con el tiempo, sin embargo, una proporción mucho mayor de perros eliminará huevos en algún momento. Cuando esto ocurre, la diseminación de huevos puede ser muy alta, ya que cada hembra adulta de Toxocara canis produce más de 10.000 huevos al día, y cualquiera de ellos podría causar una enfermedad zoonósica (figura 3). Por tanto, es imperativo para la salud familiar y comunitaria que los perros sean tratados regularmente con antihel-
mínticos, para suprimir la eliminación de huevos lo máximo posible y proteger la salud pública.
Ancilostómidos Los ancilostómidos, igual que Toxocara canis, viven en los intestinos de los perros y eliminan huevos al medio ambiente a través de las heces.
Tabla 1. Algunos síntomas de la infección por Toxocara en humanos. Niños
Adultos
Fiebre
Debilidad
Anorexia
Prurito
Dolor de cabeza
Erupciones
Sibilancias
Disfunción pulmonar
Náusea
Dolor abdominal
Dolor abdominal
Discapacidad visual
Vómitos
Retinitis
Letargo, somnolencia
Dolor de cabeza crónico
Discapacidad visual
Convulsiones
Asma
Psicosis
Desórdenes de comportamiento
Nefritis
Dolor en extremidades
Cojera
Linfadenitis
Miocarditis
Hepatomegalia
Linfadenopatía