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Pioderma superficial secundaria a un hipotiroidismo: a propósito de un caso El mecanismo patogénico de la susceptibilidad incrementada a la pioderma bacteriana probablemente se relaciona con una barrera cutánea alterada, una hiporreactividad inmunológica o una combinación de ambas. Por ello es fundamental restaurar la barrera cutánea con un correcto manejo tópico de las lesiones. José Ignacio Gutiérrez Contreras / Asistvet Dermatología / Acreditado en Dermatología por Avepa / Imágenes cedidas por el autor
La identificación de la causa primaria que siempre está detrás de una pioderma de superficie o superficial es de suma importancia para el buen desarrollo del caso clínico que estemos tratando. Muy a menudo este dato se pasa por alto y no queremos profundizar en llegar al diagnostico definitivo, y esto puede ser el principio del fracaso en el buen final de la resolución de la pioderma y, por ende, del caso clínico. El caso que nos ocupa en este artículo es el de una pioderma superficial secundaria a un hipotiroidismo del que el paciente no había sido diagnosticado.
Historia clínica y anamnesis
El paciente es un perro macho castrado de raza Bodeguero Andaluz de 12 años de edad, que presenta en la región externa de ambas extremidades posteriores unas zonas alopécicas junto con áreas erosivo ulcerativas de un tiempo de aparición aproximadamente de 3 meses, por las cuales ha sido medicado y evaluado anteriormente en otros centros veterinarios (figura 1). Anteriormente el paciente ha sido tratado con champuterapia de Aloe vera con una frecuencia de 3 baños semanales y aplicación de pomadas tópicas a base de corticoides, para posteriormente utilizar productos naturales y de herboristería, aproximadamente durante 2 meses sin mejoría ninguna del cuadro clínico, que es cuando es recibido en nuestra consulta de dermatología.
Exploración general
La frecuencia cardiaca, la frecuencia respiratoria y la temperatura están dentro de los valores normales. Además, el paciente presenta un buen estado general, sin apatía, anorexia, ni síntomas digestivos accesorios, y con buena actitud.
Exploración dermatológica
Podemos definir las lesiones en este paciente bajo dos patrones dermatológicos en
el mismo cuadro clínico: un patrón alopécico difuso situado en los miembros posteriores y otro erosivo-ulcerativo dentro del alopécico (figura 2). La distribución de las lesiones se puede apreciar en la figura 3.
Diagnósticos diferenciales
Entre los diagnósticos diferenciales, se consideró la pioderma superficial secundaria a hipotiroidismo, la pioderma profunda, la demodicosis, la dermatofitosis y la neoplasia cutánea (figura 4).
Ventral
Dorsal
Pruebas de interpretación inmediata
Fundamentales en la clínica veterinaria, y yo diría que indispensables en dermatología veterinaria, realizamos varias citologías mediante hisopado de las lesiones erosivo-ulcerativas y extendemos en porta, con tinción en medio Diff-quick. Observamos la presencia de múltiples bacterias cocoides intracitoplasmáticas en polimorfonucleares neutrofilos (figura 5). Realizamos un raspado cutáneo de las lesiones que resulta negativo y un cultivo de dermatofitos en medio DTM que, tras 15 días, no evidenció viraje de color del medio y se estimó igualmente su negatividad. Dada la cronicidad de las lesiones del paciente decidimos la realización de una biopsia de tipo punch de unos 6 mm de longitud mayor de una de las lesiones ulceradas del miembro posterior y su posterior envío a laboratorio externo, para descartar de esta manera nuestros otros diagnósticos diferenciales. De la muestra, una zona de piel con tejido subcutáneo, el laboratorio evalúa dos secciones en cortes seriados. La epidermis aparece moderadamente engrosada. Hay focos de erosión conformación de costras superficiales. Las costras presentan neutrófilos degenerados sin evidencia de acantolisis. Hay algunas zonas con estrato córneo compacto y paraqueratosis. La dermis aparece edematosa.
Figura 3. Distribución de las lesiones del paciente.
Pioderma superficial secundaria a hipotiroidismo
Neoplasia cutánea
Dermatofitosis
Pioderma profunda
Demodicosis
Figura 4. Diagnósticos diferenciales.
Existen infiltrados moderados intersticiales con linfocitos, mastocitos, eosinófilos e histiocitos. Las células inflamatorias rodean algunas de las unidades foliculoanexales. Existe ligera dilatación infundibular y de las glándulas apocrinas. Hay moderada atrofia de folículos pilosos secundarios.
Diagnóstico definitivo
Figura 1. Imagen inicial de las lesiones.
Figura 2. Detalle de las lesiones iniciales.
El diagnóstico definitivo es de una dermatitis subaguda hiperplásica superficial mixta moderada. Existe un proceso inflamatorio superficial de la piel. Las características morfológicas son compatibles con una pioderma bacteriana, posiblemente secundaria a otras enfermedades primarias, frecuentemente dermatitis alérgica o alteraciones hormonales. En animales de avanzada edad es importante considerar la posibilidad de hipotiroidismo como una alteración hormonal que puede inducir una pioderma secundaria. El aspecto es de un proceso pruriginoso.
Figura 5. Citología cutánea, con presencia de cocos intracitoplasmaticos.