EVOLUCIÓN URBANA DE LIMA Leonardo Mattos-Cárdenas Arquitecto Universidad de Roma La Sapienzza
La Lima prehispánica era un valle muy frondoso conformado por una serie de señoríos como el de Maranga, Sulco y Huatca. Todos estos dependían del Señor de Pachacamac, el cual regentaba a los "huno" inca de Armatambo en Chorrillos y de Maranga sobre el Rímac. Poseían un tambo al ingreso que era “Lima – tambo”, siguiendo el famoso Qhapaq-Ñan¹. Los españoles fundan la ciudad de los Reyes y permiten que funcione el canal prehispánico que iba hacía Maranga y Magdalena, y edifican solares y comercios. El canal prehispánico pasaba detrás de Palacio y cerca de los solares del conquistador y capitán Jeronimo de Aliaga, quien decidió hacer allí la primera fuerza motriz de la ciudad: el molino hidráulico para cereales. Cerca de ese molino se encontraban la Iglesia y convento de San Francisco, y el estanque del marqués Francisco Pizarro, fundador de la ciudad. El estanque antiguo con un hermoso jardín que el cronista jesuita Bernabé Cobo pudo describir en detalle. A los franciscanos se les dio esta cuadra que fue tomada de los antiguos “propios”. Una calle que llegaba al río² la separaba de este jardín anexado luego al gran convento. Entre el molino hidráulico y la iglesia de San Francisco se ubicaba el "Rastro de San Francisco" –en el Jirón Áncash sede hoy de PROLIMA- era el borde de la primera ciudad y parte de su ejido. Juan Bromley al referirse a este límite escribe: "el frente sur de esta calle correspondía a los solares [...mientras] el frente norte de esta arteria urbana sobre el rio, era de propiedad de la ciudad" y Román de Herrera en 1633, agrega³ "donde está edificada la carnicería mayor de la ciudad y [la] casa de albóndiga" o almacén municipal de cereales. Fieles a la tradición, las tiendas del "rastro" siempre emanaron ese típico olor a cuero fresco. No obstante, la presencia española también significó, muchas veces, la destrucción de huacas y oráculos como el oráculo del valle con la "Piedra redonda" que estaba en la huaca que fue de Jerónimo de Silva –destruida, como otras, para hacer ollas y adobes. Cerca se erigió la iglesia de Santa Ana (1550) que después fue barrio, y desde donde (1574) se alimentó la ciudad de los Reyes con un ramal del “río Huatica”⁴ o también llamado Acequia grande. El centro prehispánico fue estructurado y los propios españoles lo reconocieron cuando el Cabildo en 1535 señala: “en esta ciudad hay necesidad que, para servicio de ella, ande el agua por las calles y solares por sus acequias; como solía [ya] andar antes que la ciudad se fundara”⁵. Y el cronista Bernabé Cobo, en 1599, agrega: “los cuales [los españoles] como no pudiesen, tan en breve, tener entera noticia y experiencia de la tierra y [de] sus cualidades para escoger convenientemente sitio en que poblar, juzgaban prudentemente por el mejor y más a propósito,[el] que los naturales tenían [ya] poblado: lo uno por hallarlo ya provisto de agua, leña y otras cosas necesarias a una república, y lo otro, porque conjeturaban seria el más sano [..para poder] labrar nuevas casas, que tan poco tiempo les había de llevar”⁶. El damero que Francisco Pizarro diseñó en la ciudad de Los Reyes fue trazado a inicios de 1535 con intervención de Juan Tello de Guzmán, quien siguió un modelo "pragmático" constituido 14
por manzanas de 450 pasos por lado y calles con 40 pasos de ancho⁷. En las afueras del damero y habiendo el Consejo de Indias español acordado en 1551 la “reducción” de los indígenas, el virrey Marqués de Cañete tuvo que organizar en 1557, con los curacazgos de Amancaes, de Huatca y de Maranga, la "reducción de santa Maria Magdalena" fundándose -en la "huerta de san Jacinto" (1606)- una casa dominica y convento. Un segundo enclave de reducción se edificó con el licenciado García de Castro , llamado: Pueblo de indios de Santiago del Cercado destinado a "indios forasteros" traídos a Lima por los encomenderos españoles para su servicio. Se le llamó “modelo bíblico” ya que su trazo cruciforme basado en 36 módulos⁸ estuvo inspirado en la iconografía de la Jerusalén Celeste. Al final, tuvo sólo 35 manzanas rectangulares con pequeños lotes distribuidos por proveniencia étnica como las tribus de la “Ciudad de Dios”. Esta "doctrina de indios" fue llamada "Cercado" por los muros que lo cercaban con dos puertas que se cerraban al llegar la noche y desde 1570 fue encargada a los jesuitas por el virrey Toledo. Su proyecto original tuvo relación, a nuestro parecer, con el milenarismo utópico del dominico Francisco de la Cruz quemado en 1578 por la Inquisición. La intención original se puede considerar desvirtuada en 1590 al aceptarse allí “indios locales” provenientes de la otra margen del río desalojados para urbanizar dicha zona. Un tercer modelo “jerarquizado” o “militar”, fue el que tuvo el eje sobre la iglesia de San Lázaro levantada desde 1563⁹ inspirado en el Castrum romano; modelo que después fue aplicado en todas las reducciones jesuíticas del Paraguay. Respecto a los puentes edificados en la ciudad, como certifican las actas del Cabildo, se deseaba desde 1549, construir uno de cantería para sustituir el "puente de criznejas"¹⁰ y frente a las Casas Reales se construye con el virrey marqués de Cañete un puente que en 1607 es destruido por una avenida del río¹¹. El actual Puente de Piedra -obra del alarife Juan del Corral- fue realizado durante el gobierno del virrey Conde de Montesclaros siendo alcalde Jusepe de Ribera¹². En San Lázaro, el virrey Conde de Nieva (1561-1564) fue otorgando algunos lotes pero "conforme a la traza y el orden que ha de tener el pueblo que allí se funde"¹³. Finalmente, con el virrey García Hurtado de Mendoza se urbaniza -esta Nueva Triana, al estar como en Sevilla, al otro lado del rio- con manzanas cuadradas más pequeñas que las de Lima y otorga los solares al Cabildo (1591) que en sus libros III y IV da cuenta de las ventas. La ciudad, que desde el Sur recibe sus frescos vientos Alisios; determina asi la orientación uniforme de todas sus llamadas Teatinas (ventanas o tragaluces) estructurándose en torno a estos “modelos urbanos" que fueron integrando con “tejido conectivo" formado por caminos; algunos pre-incas.