Caminos hacia la transformación Estrategias de gestión Es posible rastrear abordajes hacia la gestión de los conflictos en los mecanismos convencionales establecidos por el Estado. El principio que guía estos abordajes es el de la construcción de consensos políticos entre los actores sociales en disputa, parte de la premisa del Estado moderno, donde el contrato social es el paradigma de la materialización de la gestión a nivel colectivo, y se basa en que el Estado tiene monopolio de la resolución de conflictos30. Con este objetivo, se han creado dispositivos e instituciones que adjudican, delegan o descongestionan la función pública para la gestión de conflictos en los poderes legislativo, judicial o ejecutivo. En este contexto, los ciudadanos deben hacer uso de los “servicios” del Estado y tramitar los conflictos en el campo de los abordajes formales. Como se ha visto, las aproximaciones de los actores al conflicto son relacionales e implican intervenciones de diverso orden: es posible afirmar que un solo método difícilmente dará cuenta de la complejidad del conflicto. Los mecanismos formales de resolución de conflictos buscan que el Estado, partiendo de su rol ejecutivo como implementador de políticas públicas o administrador de la justicia, por medio de un tercero cualificado, tome las decisiones pertinentes según los marcos normativos. En los cinco casos estudiados, de acuerdo con la experiencia de las comunidades en relación con el Estado, se puede evidenciar la presencia diferenciada de éste en los territorios. Las comunidades han acudido a diferentes tipos de respuestas institucionales, atendiendo a las rutas dispuestas y más accesibles de acuerdo a su contexto particular. Las personerías municipales, corregidores, las inspecciones de policía y, por extensión, las alcaldías, son las oficinas del nivel local que tienen conocimiento y reciben constantemente solicitudes para la gestión de todo tipo de conflictos, entre ellos los conflictos por la tierra. Pese a esto, en tres de los cinco casos, la distancia geográfica y la dimensión de las disputas están entre las principales causas de la ausencia de este mecanismo. En los casos de los playones de Sincerín y algunos municipios de la Ciénaga Grande del Bajo Sinú se pudo identificar que los mecanismos de intervención estatal, aunque son utilizados no resultan efectivos, dada la complejidad de los conflictos territoriales que se viven en estas comunidades. Por ejemplo, la gestión de respuesta local ante una de las quejas más comunes como la perturbación de la propiedad privada, es casi nula, debido a la naturaleza pública del bien o 30. No obstante, la gestión de los conflictos no es monopolio del Estado en estricto sentido: las comunidades y los particulares también están facultados para resolverlos desde sus propios mecanismos, que en contextos particulares tienen un alto nivel de efectividad.
120
CAPITULO 4
Caracterización de los abordajes de los conflictos