Antoñete, Caracas lo rescata para Madrid
En Madrid, a la edad de 79 años murió en el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda el 21 de octubre de 2011, el Maestro de Maestros, Antonio Chenel “Antoñete”, víctima de una bronconeumonía contra la que había luchado durante tres días. –No hay duda que ese día todo cambió para mí, pues de no haberme tropezado con Jesús Nieves quien sabe dónde estaría. Antoñete sería un punto de referencia anecdótico para algunos aficionados. Así comenzaba el relato de su vida en Caracas, aquella mañana en los jardines alrededor de la piscina en el Hotel Tamanaco, junto a Karina, su esposa, la madre de Marco su hijo que lleva por nombre el agradecimiento de Chenel hacia una familia, los Branger-Llorens que le dieron el afecto que no tenía cuando llegó a Venezuela en 1977… –Todos habrían olvidado al “toro blanco”, nada era igual. Con sus dejos de frágil apariencia, el torero madrileño rompió el cintillo que ahorca el celofán de la cajetilla de cigarrillos. Con el ritual que podría tener un sacerdote en la Eucaristía, Antonio Chenel le quitó el papel de plata a la cajetilla de Winston, la que guarda el aroma del tabaco en los rubios pitillos americanos. 259