septiembre de 1925, día del desfile homónimo, «La Entrada» (el primer desfile de las fiestas), dando comienzo cada día 5 a las cuatro de la tarde, a los desfiles de fiestas de Moros y Cristianos. Desde entonces congrega anualmente a una multitud en las inmediaciones de La Losilla, a la espera que llegue la hora en la que el bombo da la señal para el arranque de la banda, un momento muy esperado durante todo el año en la localidad. Además, esta pieza musical tiene un estribillo popularizado en toda Villena que dice «Villena ya no es Villena, es un segundo Madrid, con la plaza de los toros y su teatro de Chapí».
Hoy, en circunstancias normales, hubieran dado comienzo los desfiles de las Fiestas de Moros y Cristianos de la vecina localidad de Villena. Si hay una pieza musical que identifica ese inicio de fiesta es «La Entrada», compuesta por Quintín Esquembre. Curiosamente, se encuentra editada una partitura de esta obra en cuya portada figura un castillo que poco se asemeja al de la Atalaya villenense y que más bien se parece al castillo sajeño. Comenzar unas fiestas como las de nuestra localidad vecina con una pieza musical tan identificada con los villenenses. Esta pieza musical de «La Entrada» abre el desfile y recorre toda la Corredera, Joaquín María López y Avenida de la Constitución. Pero, el espectáculo de música y color comienza con una pieza musical. El pasodoble de “La Entrada” de Quintín Esquembre fue estrenado el 5 de
Hoy en día es pieza obligada en el repertorio de las Bandas de Música y 29