El Callejón de las Once Esquinas
Una crónica de colección
Osvaldo
Villalba Para ser cronista hay que salir… …para practicar la crónica el genio está en los zapatos.
Héctor Abad Faciolince
SEIS MESES habían pasado desde que el director de la revista de actualidad donde trabajaba le dijo que dejarían de publicar la sección «Noticias Insólitas» que lo había tenido como cronista los últimos diez años. Le explicó que ya la gente había perdido interés en las no120
tas escritas, que ahora la televisión por cable y las publicaciones en internet lideraban esa franja. Julio entendió que, tal vez por compasión, o por la amistad que los unía en tantos años de trabajo compartido, no había podido decirle que ya estaba viejo y que sus crónicas