SEMANA SANTA OSUNA 2020
Presentación del Pregón Semana Santa de Osuna 2019 Patricio Rodríguez-Buzón Calle
S
r.Vicario y Párroco de Ntra.Sra. de la Asunción, Señora Alcaldesa, Sr. Presidente y miembros del Consejo Superior de Hermandades y Cofradías, autoridades, hermanos y amigos todos.
en este importante acto, responsabilidad que no dudé un momento en aceptar, después de gozar de una amistad de siempre, no solo con él, sino también con toda su familia. Ahora,a pesar del mucho tiempo pasado, la imagen se mantiene fresca, y recuerdo con nitidez como los Martes Santos, la familia Barrera llegaba puntual, con sus túnicas negras, a la Iglesia de San Agustín, para acompañaren en el recorrido procesional a su Cristo de la Vera-Cruz, devoción compartida por todos ellos.
De verdad que no lo esperaba, que cuando las Hermandades se ven repletas de la entusiasta juventud que tanto aguardábamos, jóvenes que han venido para quedarse y que desarrollan una magnífica labor en la mejora de la vida religiosa de sus cofradías, ofreciendo además un especial empuje en las actividades del día a día, fuera a ser yo el elegido para esta muy agradable misión de presentar a un amigo entrañable, siempre comprometido con lo que emprende, esposo y padre ejemplar y que se entrega ilusionado, humana y cristianamente en todo lo que hace.
La diferencia de edad y sus ausencias de Osuna hacían que, por entonces, mis contactos fuesen más con su hermano Antonio, su padre y su tío. Recuerdo siempre con infinito afecto a los hermanos Barrera, Pepe y Paco, a los que mi hermano Manuel atrajo a la hermandad y que, siendo tan distintos, tenían un denominador común: el amor sincero y decidido a Vera-Cruz y el estar siempre presentes tanto en la vida diaria de la Hermandad, como en los acontecimientos importantes de la misma. Su padre era, sobre todo, un hombre ejemplar, muy querido en la Hermandad y que, tras la apariencia de persona seria, que en realidad lo era, se escondía el hombre religioso, noble, divertido y alegre que, en ocasiones, sorprendía a los que no lo conocían bien. Tuvimos siempre en la Vera-Cruz una convivencia alejada de todo lo que no fuese trabajo, compromiso, religiosidad, entendimiento y amistad y que fue lo que nos ayudó a conseguir la armonía sincera y afable que tanto bien hizo a nuestra Hermandad, favoreciendo su importante desarrollo.
Quiero recordar ahora, con toda la ilusión del mundo, mi presentación del pregonero de la Semana Santa de 1995, don Manuel Olmedo, amigo del alma que nos dejó recientemente, cofrade convencido, hombre culto, inteligente, humano, divertido e inolvidable pregonero, con el que convivimos en el seno de los Amigos de los Museos, gozando de su amistad en viajes inolvidables. También recibí la distinción de Eloy Pineda, brillante pregonero de 1996, heredero de las más puras esencias de su familiar Antonio Pedro Rodríguez-Buzón que, con un pregón bellísimo, poético, emocionante y emotivo, consiguió elevar el pabellón cofrade de Osuna a las más altas cotas de la oratoria. Pero volviendo a nuestro pregonero, en breve biografía comentaré que nació en Granada, pero con muy pocos años, sus padres se trasladaron a Osuna y, por consiguiente, Pepe y sus tres hermanos crecieron en nuestro pueblo, conviviendo en una familia ejemplar. Sus primeros estudios fueron aquí y, posteriormente en los Salesianos de Puerto Real cursó estudios de Maestría Industrial, formación que completó en el País Vasco, obteniendo su titulación en Ingeniería. Su incansable espíritu de trabajo y deseo de formación, le llevó a que en las vacaciones dedicara su tiempo libre trabajando en la empresa Savicsa, bajo la dirección de Antonio Rojas y Carlos Querol. También lo hizo en la Cooperativa Santa Teresa. Más adelante, finalizados sus estudios, ocupó puesto de trabajo en Barcelona en la empresa Motor Ibérica como técnico de organización, empresa que fue comprada ulteriormente por la multinacional Nissan, donde trabajó como ingeniero de producción. Por su formación, honradez, seriedad y especial dedicación al trabajo, progresó rápidamente en la empresa, siendo seleccionado para viajar por Europa, EE.UU. y, principalmente, al Japón, país donde recibe información sobre modernas técnicas de organización y racionalización del trabajo que, más tarde, bien asimiladas, implantó con éxito en su empresa. Finalmente tras la jubilación, llega nuevamente a Osuna, donde fija su añorada residencia.
Pepe tuvo buena enseñanza cofrade, vivió la hermandad durante años y tuvo ocasión de pasar por todos los escalones de la misma: colocó flores, limpió candelabros, barrió la iglesia cuántas veces hizo falta, trasladó enseres y también subía y colocaba amorosamente nuestras imágenes en los “pasos” para el desfile procesional. En definitiva cuando es nombrado Hermano Mayor, conocía la Hermandad perfectamente y, como es hombre que sabe organizarse, desarrolló un extraordinario trabajo durante los ocho años que duró su mandato. Antes, ocupando yo ese puesto, colaboró conmigo como Tesorero. Creo que una de las cosas importantes que realicé en mi vida cofrade fue convencer a Pepe para que aceptara el nombramiento, comprometiéndome por mi parte a acompañarle durante su mandato como Teniente Hermano Mayor, o Alcalde, que así se denomina el cargo en nuestras antiguas Reglas. En esta tarea intervino Milagros, su mujer, mi aliada, siempre a su lado, formando el eje fundamental de una familia religiosa y comprometida, que le empujó decididamente para que aceptara el nombramiento, todo con la ilusión que le proporcionaba su profunda religiosidad y el ser también ella decidida cofrade. Su hermano Antonio y Matilde, amigos a los que distingo con claridad en mis afectos, también me apoyaron en la tarea, como lo han hecho en todo lo que, en las circunstancias que fueren, tuve que pedir colaboración o ayuda. Actualmente, tanto Pepe como Milagros y
Como he dicho, fue inesperado que el pregonero se acordase de este antiguo amigo para encomendarle el honor de presentarle 76