que consiste en utilizar machos de una raza pura con hembras de otra raza, generación tras generación.
Castañeda de Gómez del Campo/ Piedras Negras, sitio, vida y memoria)
El esquema que utilizó Antonio Llaguno para formar la ganadería fue técnicamente insuperable. La simiente, importada de España, y su descendencia, solo se apareó entre sí para formar un núcleo de raza pura que fue aumentado paulatinamente.
Capítulo Seis LOS ANTEDEDENTES
En México, en las ganaderías de Piedras Negras, La Laguna y Zotoluca los señores González diseñaron un sistema de apareamiento, es decir sistema de crianza y selección distinto al proyecto que se trazaron los hermanos Antonio y José Julián Llaguno, de San Mateo. El de los hermanos Llaguno fue un diseño cimentado en el ganado criollo mexicano. Sistema con el que los Llaguno separaron entre 3 mil vacas cuneras (criollas), 30 vacas que cruzaron con el pie de simiente de Saltillo, importado de España. Fueron desde un principio lo de Zacatecas y lo de Tlaxcala, dos conceptos distintos, dos encastes independientes. Toros únicos emanados de dos ramas obtenidas del mismo origen que hoy caminan por rutas disparejas con enfrentados conceptos por sendas separadas. (Carlos 54 Javier Garfias
por Gustavo Robledo
H
ablar de la Familia Garfias en San Luis Potosí, nos obliga a remontarnos años –muchos años atrás- en la unión y su origen que tiene con otra familia ganadera de nuestra fiesta potosina: la Familia Labastida y su origen taurino en la Hacienda de Santo Domingo de la Familia Peña. La Hacienda de Santo Domingo fue desde su fundación hasta entrado el siglo XX una estancia de paso que servía como muleros y abrevaderos para quienes transportaban producto de las zonas mineras, agrícolas y ganaderas de la región para el paso de las caravanas, a la capital del País. Era un mesón donde se detenían las caravanas, y que posteriormente fueron asentando sus reales varios grupos de inmigrantes en la zona, desarrollando diversos polos productivos agrícolas y ganaderos de los cuales Sto. Domingo formó parte. A principios del siglo XIX el dueño de estas tierras fue rico francés