©Lisbeth Salas
Ignacio Padilla México
Escribo porque no puedo no hacerlo. Soy consecuencia de los libros que he leído tanto como de la lengua y la ciudad en las que nací en el turbulento otoño de 1968. Mi vida ha estado marcada por libros y viajes, pero ante todo por derrumbes: el terremoto de 1985, la caída del Muro de Berlín y el ominoso Martes Negro de 2001. Escritura y lectura me han permitido sobrellevar con cierta inusitada felicidad esos viajes y esas caídas. Casi por accidente he pasado por universidades mexicanas, escocesas y salamantinas, siempre como pretexto para la escritura de cuentos que a veces devienen otras cosas, y quizá también para la docencia, con la que me alimento tanto como me hago acompañar de otras voces, otras miradas. Contaminado lo mismo por mis maestros y amigos que por las historietas, el cine y las novelas de aventuras, ignoro en qué momento me obsesioné con la vida, la obra y los tiempos de Miguel de Cervantes, con quien de cualquier modo y como cualquiera estoy en deuda. Escribo por amor y por venganza, escribo porque me he propuesto hacer sentir en otros el mismo amor, la misma sorpresa y hasta el mismo horror que ciertos libros han provocado y siguen provocando en mí desde que puedo recordarlo. 79 IGNACIO PADILLA ANTOLOGÍA DE CUENTISTAS 2020 / BERNARDO ESQUINCA