entre otras, en las plazas de Santa María del Río, Acapulco y Ciudad Juárez, pero viéndose obligado a desistir en su empeño a causa de un accidente que tuvo en la mano derecha al entrar a matar, sufriendo cinco fracturas y estuvo escayolado cerca de dos años. Se puede decir, que ha sido en la Hacienda ganadera de Santacilia, propiedad de don Luis Obregón Santacilia, donde adquirió los conocimientos que posee en la crianza del toro de lidia, guardando para dicho señor eterno reconocimiento y gratitud sin par. El señor Marcelino Miaja, español de origen, es otro gran aficionado al campo bravo, esperando que entre los dos den a la afición de la República Mexicana tardes inolvidables con la bravura de sus toros”. Y a fe nuestra que así fue. Y finaliza don Agustín Linares García: “En atención a don Juan Aguirre ‘Conejo Chico’, fundador de la vacada, no se cambió el hierro primitivo, siguieron lidiando con el mismo, así como los colores de la divisa en verde y morado, además de conservar la antigüedad que le corresponde del año 1937, al haber adquirido toda la dehesa, siendo aumentada a finales de los años 60 con un ejemplar de San Mateo, de los señores José Antonio Llaguno e Ignacio García Aceves, de nombre ‘Vidriero’, marcado con el 222 Javier Garfias
número 91”. Chafik fue un gran taurino y un aficionado que se dio el lujo de triunfar en América como en Francia y en España con las ganaderías que se atrevió fundar, experimentado lo que aprendió en la vida como ganadero mexicano. Chafik experimento en Europa, y a América volvió a traer vacas de Saltillo.
Capítulo Treinta y dos REYES HUERTA
C
uando conocí a Abraham Ortega iba camino a la finca del ganadero Mario Moreno, “Cantinflas”, para hacer un reportaje para El Nacional de Caracas y la Televisora Nacional, Canal 5 de Venezuela solicitado por Oscar Yanes director de la planta de TV y Carlos Eduardo Misle cronista taurino del diario El Nacional. Era una fresca tarde de tempano anochecer de octubre de 1969 íbamos camino a La Purísima, Ixtlahuaca, México, la finca donde “Cantinflas” tenía, en sociedad con sus hermanos Eduardo y José Moreno Reyes la ganadería que se lidiaba a nombre de Moreno Reyes Hermanos fundada con 100 vacas de don Julián Llaguno de Torrecilla y el toro Gladiador entre los sementales. Abraham Ortega fue el inductor, ya por relaciones o por