PASO 4. PRESERVACIÓN Y MONTAJE DE ESPECÍMENES Existen varios tratamientos y formas de preservación para evitar que se descompongan los insectos: • Larvas: para evitar la descomposición y el resultante oscurecimiento indeseable de las larvas estas se “cocinan” en baño de maría por 3-5 minutos, dependiendo del tamaño o fragilidad de las mismas (las más grandes y robustas requieren más tiempo). Se dejan enfriar hasta temperatura ambiente y se preservan en alcohol etílico al 7075%. No se recomienda preservar larvas con signos de descomposición evidentes (se tornan oscuras o con manchas, lo que dificulta su identificación). • Insectos de cuerpo suave: los insectos pequeños de cuerpo blando, como los áfidos y otros, requieren un montaje especializado en lámina fija, pero se pueden preservar temporalmente en pequeños frascos de cierre hermético (para evitar la desecación) con alcohol 70-75%. • Insectos grandes de cuerpo duro: el montaje de insectos grandes de cuerpo duro generalmente se realiza con alfileres entomológicos. Los alfileres vienen en diferentes grosores numerados que varían de 00 a 7, generalmente se utilizan 00 para insectos muy pequeños, 0 y 1 para los pequeños y 2 y 3 para insectos grandes como algunos escarabajos y mariposas. El alfiler siempre atraviesa el tórax, ya que en esta sección del cuerpo se encuentran los músculos asociados a la locomoción (patas y alas), de manera que cuando estos músculos se secan se adhieren al alfiler, asegurando que el insecto quede fijo y se pueda manipular sin tocarlo y sin dañar sus frágiles apéndices, evitando la pérdida de pelos, escamas y otras diminutas estructuras que se utilizan en taxonomía. • A cada grupo de insecto se le coloca el alfiler en una parte específica del tórax, como se observa en la figura 183. El eje longitudinal del insecto con respecto al alfiler debe formar un ángulo de 90º de manera que el insecto quede en posición horizontal con respecto a la base. La altura en el alfiler también es importante pues se debe dejar justo el espacio suficiente arriba del insecto para sostenerlo con dos dedos (aprox. 9 mm), y dejar espacio bajo el insecto para colocar las etiquetas de localidad y de identificación (Fig. 185a). El montaje de mariposas requiere de una tabla especial y se realiza mediante unos pasos específicos (Fig. 184).
163