¿Trabajos de mujeres y trabajos de varones? » Por MArCelA zAngAro Filósofa
¿Pensaron alguna vez en todo lo que es necesario para que las personas podamos crecer y vivir en sociedades como las nuestras? Supongamos que tenemos que hacer una lista. Seguramente, incluiríamos en ella cosas muy diversas; por ejemplo, una vivienda, alimentos, vestimenta y medios de transporte. Algunos agregarían también entretenimiento y vacaciones, por supuesto, educación e incluso cuidados, porque a veces, por diversas circunstancias, dependemos de que alguien se ocupe de nosotras y nosotros. Quienes integramos las sociedades realizamos múltiples actividades para satisfacer estas necesidades. Algunas de esas actividades producen bienes, es decir, objetos materiales que, cuando se consumen, satisfacen necesidades. Otras, producen servicios: acciones que satisfacen directamente las necesidades sin generar un bien material, como, por ejemplo, educar, sanar, solucionar un problema, cuidar, etc. Todas estas múltiples actividades son trabajo. Nadie realiza todos los diversos trabajos que existen en nuestra sociedad; de hecho, no sabemos cómo se hacen y, en realidad, tampoco nos alcanzaría el tiempo para hacerlos todos. En nuestras sociedades lo normal es que las personas sepan hacer unos muy pocos tipos de trabajos. Entonces, ¿cómo se organiza la sociedad para producir todo lo que se necesita? Desde hace mucho mucho tiempo, las sociedades reparten los trabajos: algunas personas se especializan en el trabajo de producción de alimentos, otras en la producción de viviendas; ciertas personas se ocupan de diseñar medios de transportes, ciertas otras de fabricarlos y otras más, distintas, de manejarlos. Algunos educan, otras curan, algunos otros cuidan. El concepto división social del trabajo hace referencia a esta especialización en las distintas actividades que se deben llevar a cabo en una sociedad para producir todos los bienes y servicios que se consumen. En una sociedad como la nuestra, la división social del trabajo es muy compleja. Esto se debe a que existen muchas y diversas necesidades que se satisfacen por medio de muchos y diferentes tipos de trabajos. Pero esto no siempre ha sido así. Si miramos hacia atrás en la historia podemos encontrar ejemplos de
131