GLORIAS OSUNA 2019
Restauración de la antigua peana procesional de Nuestra Señora del Rosario
E
l pasado mes de enero, se concluyó la intervención de la antigua y original peana procesional de la venerada imagen de Nuestra Señora del Santo Rosario. Se trata de una peana procesional de la segunda mitad del siglo XVIII realizada en madera tallada y policromada, con imitación de marmoleado y jaspeado, dorada y estofada. Cuenta con cuatro grandes ángeles en las esquinas. Estos últimos, realizados en madera maciza, policromados y dorados.
modo con un sistema de limpieza mecánico dado el grosor de los diferentes estratos. En cuanto al soporte de madera, se aplicó de forma general un desinsectante con el objetivo de prevenir y erradicar el ataque de insectos xilófagos. Posteriormente, se llevaron a cabo labores de refuerzo estructural con el fin de otorgarle a la estructura de una mayor resistencia mecánica. Una vez terminadas las tareas de limpieza y saneamiento del soporte de madera, se realizaron los proceso de reconstrucción volumétrica. De este modo en la peana se reprodujeron todos aquellos elementos decorativos perdidos, atendiendo a la simetría propuesta por el artista. Por otro lado, en cuanto a los ángeles, se reconstruyeron los fragmentos perdidos en prácticamente todas las alas, así como dedos, pies y elementos sobresalientes del ropaje. Hay que destacar que, de forma simultánea a los procesos anteriormente expuestos, se elaboró un nuevo sistema de anclaje de los ángeles a la peana con el objetivo de evitar la fatiga sufrida por éstos a lo largo de los años, ya que el antiguo sistema concentraba toda la tensión en una sola pierna.
La obra se encontraba en un lamentable estado de conservación, tanto estructural como estéticamente. Los ángeles contaban con numerosas pérdidas de soporte original, todas las alas y extremidades se encontraban fracturadas, los dedos de las manos completamente perdidos y contaban con grandes fendas y grietas. También tenían un alto grado de desconsolidación y suciedad de diferente naturaleza. En cuanto a la peana, presentaba el mismo tipo de patologías que los ángeles sin embargo el nivel de pérdidas era menor. La cantidad de suciedad superficial de cera, polvo y restos de deyecciones de insectos y aves era bastante elevada. Tras la realización de diferentes estudios realizados, así como diferentes catas de limpieza y pruebas de solubilidad, se detectaron numerosos repintes que ocultaban zonas de dorados, estofados y policromías marmoleadas en el caso de la peana. Los ángeles, en cambio, tenían numerosas y muy gruesas capas de repinte en las carnaciones y ropajes. Una vez realizadas las catas de limpieza pertinentes, se comenzó con la eliminación de la suciedad superficial mediante aspiración y cepillado. Tras esto se comenzó la limpieza mediante la realización de un sistema gelificado, a partir de la mezcla de diferentes disolventes polares, que permitían eliminar la suciedad más adherida y barniz oxidado. Esto se acompañó del mismo
Posteriormente se procedió al estucado de lagunas y faltantes, para finalmente completar la intervención con la reintegración cromática. Cristina L. Pérez García y Adrián Robles Andreu1 Conservadores-Restauradores de Bienes Culturales
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