LUIS ALEJANDRO BRIONES RAMÓN MONTERREY, MÉXICO
Amor eterno Jamás dejaré de amarte, te llevaré hasta el día de mi muerte. Quizás el amor no correspondido sea el más eterno. Un regalo que nunca se da queda intacto, la llama de un corazón que nunca se abre, nunca se apaga.
Nublado Un oscuro manto me invade, nublado mental la decepción me llega hasta el cuello. La idea del suicidio aparece como una salida de emergencia aparece como unos zapatos sucios que creí haber tirado. Esas sensaciones negativas, las convertí en ganas de llorar, nunca se saciaron. No hay anestesia para la inyección de anestesia, del dolor no se escapa. ¿El sacrificio lo vale? Esa es mi cuestión y si nada cambiará ¿para qué me estoy esforzando?
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Luis Alejandro Briones Ramón
