GLORIAS OSUNA 2019
Pregón de las Fiestas Patronales 2018 a cargo de José Ángel Rodríguez Brando Pero en mis letras, Yo pongo el alma, Mis lágrimas una a una, Y se las voy dedicando A Consolación de Osuna. PRESENTACION A TI MARIA. Oh, Dios te Salve María, Inmaculada de Corazón, Dulce amor eterno y Gloria de mi alegría. e presento a ti, como un Don Nadie, un soñador, un cristiano por impulsos, un pecador redimido y arrepentido, sin nada más que ofrecerte que mi fe… mi yo… y estas manos frutos de mi vida, de mis designios del día a día.
Cuando sale de sus adentros. Buenas noches, - Reverendo Cura Párroco de Nuestra Parroquia de Consolación, Don Juan Dorado Picón. - Ilustrísima Alcaldesa de nuestro hermoso pueblo de Osuna. - Sra. Hermana Mayor de la Hermandad de Consolación. - Señor Presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, de Penitencia y Gloria. - Queridos Sacerdotes Don Juan Martin Perejón. - Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones. - Autoridades presentes. - Hermano Mayor de la Hermandad de la Paz. - Hermanos Mayores y Representantes de las diferentes Hermandades. - Familia, - Amigos, - Señoras y Señores desde donde estén,
Manos con la que he trabajado este pregón, que han sido capaces de percibir y sentir cada minuto de ese tiempo que he dedicado a saber más de ti.
Como me vean y oigan.
M
Mis manos se han sentido melancólicas, dudosas y torpes, pero a la vez: limpias, agradecidas y descansadas. Con ellas he derramado una luz, en estas hojas que salían de mi alma desnuda, convirtiéndose en escritura desde que fui elegido para enaltecer tu nombre. María, Madre de Consolación ten piedad de mí Y en mi ruego de devoción y lealtad, Intercediendo tú, a través de Dios Padre, Te pide este humilde siervo que nunca se olvide de ti. Tú, Madre de Dios Bendita, que alumbras mis senderos, Dame luz y alegría desde un rincón del cielo, Para poder pregonarte en este día Y decirte todo lo que yo siento. Porque no hay amor más puro y más sincero Que el amor de un hijo a su madre
Gracias por querer compartir y vivir conmigo este sencillo pregón. Que la virgen de Consolación os proteja bajo su manto. A ti, mi Hermana Mayor: Mari Linares, primera Hermana Mayor mujer de la historia de la Hermandad de Nuestra Señora de Consolación, Patrona y Alcaldesa Honoraria de Osuna, y a su Junta de Gobierno, por vuestra valentía y vuestro amor a María por haceros cargo de esta Hermandad, de sus quehaceres que no son pocos. Gracias por mi elección y comunicarme a través de ella la propuesta de pregonar, en la que desde el primer día, me sentí orgulloso y responsable de tal tarea encomendada, ya que aunque la lleve muy adentro de mi ser, no es nada fácil expresar lo que uno siente y poder escribirlo en estas hojas, que antes vacías y sin alma, ahora gozan de vida, sometidas a mis recuerdos, pensamientos y necesidades. Y si es difícil escribir, más difícil será transmitirlo desde aquí, desde este atril, que como yo hoy, antes otros pregoneros tuvieron la valentía de poder proclamar tu nombre. El día que fui designado nunca lo olvidaré. Esa misma noche mi mente empezó a esbozar lo que sería tu pregón, pues siempre he pensado que ella cuando menos te lo esperas te llama… Y a mí me tocó saberlo una tarde de un 8 de Octubre, por testigo una plaza con nombre de escritor: Cervantes, unido a nuestro pueblo en su mención en su libro El Quijote de la Mancha; un Arco con su nombre La Pastora, que daba antiguamente entrada y salida a los vecinos de la villa; y una Torre que se alza por encima de tejados y azoteas, quieta e inmóvil como el reloj de sol que la vigila y la mantiene preservada del tiempo, como la ausencia de sus manillas, que solo las dibuja una sombra en días despejados: Torre de la Victoria. Victoria que se convierte en una derrota por un Arco que lanza una flecha fina y erguida como una Torre que alcanza mi corazón partiéndolo en pedazos… que caen en la Plaza del escrito que recogerá con su pluma para dar fe y testimonio de cómo mi corazón derrotado te tenía en un rincón, no perdido, pero si casi olvidado por el frenético, voraz y exigente mundo en el que vivimos, olvidados de nuestro mayor sustento de vida diaria: LA FE. Otra vez gracias por haber podido enriquecerme de valores que desconocía, y que me han hecho recorrer un año especial, lleno de vivencias y de momentos únicos, que guardaré en el cofre de mis recuerdos, al que he llamado:
UN AÑO PARA TI MARÍA. Paqui, de ti no me he olvidado. No cabe en mi corazón que aceptarás ser mi presentadora ese domingo el cual evoca el domingo de resurrección. Un 22 de octubre, día mundial del Domund, y que el lema de ese año se me clavara en el alma: SE VALIENTE, LA MISIÓN TE ESPERA. Utilicé esta misma expresión para pedirte que fueras mi presentadora. >
117