El Callejón de las Once Esquinas
El plan perverso Servando
Clemens Presta atención...
UN MAPACHE, sentado en la cornisa de una casa, efectuaba anotaciones en una libreta, mientras examinaba a la gente que circulaba por la calle. Momentos después, una niña llegó corriendo hasta aquel lugar y le preguntó: —¿Qué hace, señor? El mapache no contestó. —¿Me escucha? —Una investigación —respondió al fin— sobre monstruos. —Nárreme más sobre ese cuento. El mapache guardó sus cosas en un 74
morral. Brincó, cayendo a un costado de la pequeña, enseguida pensó en rodearle el cuello con sus manos, sin embargo se arrepintió. —¿Cuál es tu nombre? —Umma. —Si te interesa saber más sobre mi investigación, te invito a mi casa. —¡Yuju! El mapache trotó por la acera. La nena le pisaba los talones. Llegaron a un terreno baldío. El animalito observó a sus alrededores, asegurándose de que na-