El pasado abre puertas al futuro
E
n la actualidad, parece difícil pensar en poder innovar radicalmente en la construcción y el diseño de una casa, pero al igual que sucede con la movilidad urbana, donde el futuro está en volver a usar la bicicleta como antes de la Segunda Guerra Mundial. Muchos aspectos del futuro en nuestros hogares también encuentran su inspiración en las ideas donde no se recurría al derroche de energía y se respetaba el medio ambiente. Es que en aquellos tiempos, la creatividad estaba aplicada para los mismos problemas de ahora, pero con escasos recursos, se buscaba aprovechar de manera racional las posibilidades con las que se contaba. Si uno quiere hoy lograr un espacio confortable para vivir puede ir por el camino de los arquitectos Mario Soto y Raúl Rivarola o por el camino del ingeniero Willis Carrier. Es más fácil para nosotros pensar en refrigerar una habitación con un buen aire acondicionado, incluso usando tecnologías de menor consumo. O podemos ir por un camino más austero. En la hostería que fuera del Automóvil Club en Apóstoles, de 1957, Soto y Rivarola recurrieron a técnicas y estrategias de construcción y 123