juLio vv 1876 vv [ perú [ vv ]
23 18
vvvvv se inaugura en Lima La escueLa nacionaL de construcciones civiLes y de minas deL PerÚ, Bajo La dirección deL ingeniero PoLaco eduardo de haBich. en 1898 este estaBLecimiento educativo camBió su nomBre Por eL de escueLa de ingenieros de Lima, y Posteriormente, en 1955, Fue reconocida como La universidad nacionaL de ingeniería (uni). Las Primeras materias que se imPartieron a Los Futuros ingenieros Fueron: Puentes y caminos, toPograFía, arquitectura y diBujo, canaLes y Puentes, docimasia, metaLurgia generaL y economía PoLítica y nociones de estadística.
52
PERÍODO 3
[ CAPÍTULO 21 ]
nización de las zonas situadas entre Lima y Callao y Lima y Chorrillos, idea que se ha convertido en realidad después de 1920. Pero entonces nadie compró esos terrenos y los árboles se secaron. También quiso Meiggs construir casas decorosas para empleados y obreros. A la administración de Balta se le debe, en cambio, la carretera entre Callao y Lima, la inauguración del nuevo puente sobre el Rímac y el aumento del caudal de las aguas de este río. Esta última obra fue contratada en 1.314.400 soles; pero de ellos se obtuvo una economía de 321.609 por decretos de diciembre de 1874 y agosto de 1875. También fue autorizada en esta misma época la creación del barrio de La Victoria. Es así como resulta Balta un gran propulsor del progreso urbano de Lima, impulso que continuó y extendió más tarde, como gobernante, su ministro Piérola.
loS SerVIcIoS de aGua Y deSaGÜe eN lIMa. loS tuBoS de FIerro.- A pesar de existir un servicio de agua potable en Lima, contratado desde 1855, los servicios de desagüe continuaron haciéndose por acequias descubiertas en medio de la calle, con derivaciones al interior de las casas. Tubos de fierro reemplazaron en 1856 a la cañería de arcilla, lo cual hizo aumentar extraordinariamente el consumo de agua en las casas. A principios de 1870 fueron establecidos canales subterráneos profundos y cubiertos que, además de dar curso a las aguas que atraviesan la ciudad, recibieron también las aguas caseras. El diámetro de estos tubos era más ancho en los jirones que en las calles transversales, siguiendo los primeros la dirección del agua potable, de este a oeste (Guía del Viajero, Lima, 1898). Muchos de los canales de desagüe entonces construidos aún están en uso. Implicó este episodio una victoria de la salubridad pública, a la vez que una mejora en la estética de la vida urbana.
[ VII ] la eXpoSIcIÓN NacIoNal.- El entusiasmo por la prosperidad aparente y el espíritu de imitación de los grandes acontecimientos mundiales llevaron a la Exposición Nacional, suceso culminante de la vida limeña durante el período de Balta. Una ley del Congreso la autorizó en 1869 y los trabajos empezaron en enero de 1870. Debía ser una Exposición Nacional de productos naturales, agrícolas y manufacturados, de plantas y animales de todas clases, junto con la cual fue celebrado un concurso público de modelos de máquinas, plantas y animales útiles extranjeros (decreto de 2 de agosto de 1870). Participación importante tuvo en los trabajos Manuel Atanasio Fuentes (El Murciélago). El arquitecto italiano Antonio Leonardi corrió a cargo de la sección técnica. Las labores de supervigilancia fueron hechas por una comisión presidida por el general Manuel Ignacio de Vivanco. El Palacio de la Exposición fue construido en las afueras, al sur de la ciudad, más allá de las murallas que Meiggs derribara, cerca del edificio de la Penitenciaría. Un terreno baldío se convirtió en un gran jardín de 192 mil metros cuadrados, en cuyo centro se edificó este palacio. Tres puertas monumentales se erigieron a la entrada del jardín, la principal frente a la pared de la Penitenciaría y las otras dos cerca del ferrocarril a Chorrillos; estas fueron llamadas Santa María y Vivanco. A la derecha de la entrada principal había un teatro y a la izquierda una sala de refrescos. Más allá estaba el conser vatorio de plantas de tierra cálida, con una glorieta turca. También podía hallarse una fuente rodeada por largas piedras formando un montículo en cuya cima se erguía una figura colosal que evocaba a Hércules y la hidra. Ciento treinta metros había que avanzar de la entrada al vestíbulo del palacio. El edificio principal, que aún se conserva, es de estilo Renacimiento italiano y de dos pisos. Ha servido después, entre otras cosas, como local del Museo Nacional, de la Cámara de Diputados, de la Municipalidad y del Ministerio de Agricultura. Hoy está dedicado al Museo de Arte. Al entrar en 1872 el visitante veía en una caja de vidrio los objetos llevados del Museo Nacional: momias de Cajatambo y Ayacucho. De allí sacó el almirante chileno Lynch las tres que rega-