Agradecimientos
En mi aprendizaje, el gusto por la historia cuzqueña y formación académica lo he recibido gracias a muchas personas, quienes me han dejado gratísimo recuerdo. Mi agradecimiento al personal del Archivo Regional del Cusco y al desaparecido maestro Franklin Pease, quien supervisó inicialmente mi tesis. Este libro se ha enriquecido con el apoyo, sugerencias, críticas y observaciones de Scarlett O’Phelan Godoy, quien fue mi asesora de tesis, y de Marco Curatola Petrocchi; ambos fueron muy generosos al apoyarme y exigirme. Gracias por sus enseñanzas y amistad a Manuel Burga Díaz, Sabine MacCormack, David Cahill, David Garrett, Luis Miguel Glave, Maritza Glave Remy, Núria Sala i Vila, Tristan Platt, Manuel Jesús Aparicio Vega, Tom Zuidema, Lorenzo Huertas, Ramiro Matos. Mi gratitud y aprecio a Carmen Ruiz de Pardo, Jorge Pardo, Jorge Armando Guevara Gil, José Tamayo Herrera, Mariana Mould de Pease, quienes me mostraron su generosidad. Va también mi reconocimiento por sus valiosos aportes a Brian Bauer, Jean-Jacques Decoster, Kathryn Burns, Carolyn Dean, Alan Covey, Catherine Julien, Chuck Walker, Jorge Flores Ochoa, Antonio Acosta, Bruce Mannheim, Tetsuya Amino y Luis Nieto Degregori. A Martha Zegarra Leyva, quien corrigió el trabajo preliminar y a Rosita Canasa Gutiérrez, por su apoyo constante. He disfrutado de intensas conversaciones y discusiones con los integrantes del Taller de Historia del Centro Bartolomé de las Casas en el Cuzco: Margareth Najarro, Martín Romero Pacheco, Ronald Camala, Elmer Abarca, Jorge Polo y la Borda, Yeni Olazabal, Carmen Escalante y Jesús Orccotoma. A mis colegas del proyecto Qhapaq Ñan de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, Juan Carlos Mellado y Yuri Pinares.