Paciente 91. Piloto escocés que venció al covid-19 Begoña Josa Laorden
No sé qué ha pasado. Tampoco dónde estoy. ¿En qué lío ando metido? Intento hacer una reflexión hacia mis entrañas. No hay nada, tan solo un sentimiento vacío de habitación. Persevero, persevero. Quiero entender qué hago a este lado. Es el momento de buscar la raíz de mi conflicto. Soy experto en contratiempos… pero, ¿este? Atento. Ahora me acecha algo. Un recuerdo poco nítido de algo quizás irrelevante. Lo que ahora no alcanzo a entender es que se trata de un recuerdo en forma de destello que durará por siempre. No es del todo milimétrico, pero sí bastante certero. Ya basta, llora mi alma. Basta de querer recordar. Marco surcos que se lleva un remolino de sentimientos. Ahora recuerdo, aunque me pierdo en aquel día de marzo. Sí, puedo verlo. Me dejé llevar por el tránsito humano de las calles festivas de Ho Chi Minh hasta aquel bar. ¿Quizás fuera la fuente de todo? Erraba solitario como una nube. De después, poco recuerdo. Aflora un sentimiento de culpa, aunque no puedo (ni debo) apesadumbrarme en este momento. Lo vivido hasta ahora no me convierte en alguien relevante, al menos no más que los demás. Pero… ¿por qué yo? Escucho mi nombre en todos los noticiarios. Sé que intentan salvarme por todos los medios posibles. Quizás me dejara dominar aquella noche por los acontecimientos de los últimos días. Solo necesitaba una copa y un poco de compañía. Me acechan sentimientos mezclados con toda clase de otras emociones. No deseo que mi subconsciente decida por mí. Aquella vida que existió una vez se encuentra en coma. Lo sé, puedo notarlo. Lo he visto en otras ocasiones. Y nunca pensé que me ocurriría a mí. Siempre me había parecido pura ficción. 123