Las piedras de Tiahuanaco: Arquitectura y construcción de un centro megalítico andino
Principales componentes de la arquitectura de Tiahuanaco Paul Goldstein escribió sobre la arquitectura de Tiahuanaco que En Tiahuanaco, la representación monumental del poder estatal se cristalizó en una arquitectura ceremonial característica cuyos arquetipos se encuentran en Tiahuanaco y sus satélites altiplánicos. En el sentido más amplio, los elementos centrales pueden categorizarse en (a) montículos artificiales de terrazas, (b) recintos rectangulares, incluyendo complejos amurallados y patios hundidos, y (c) un complejo de portales y escaleras que canalizan el acceso al núcleo ceremonial (1993, p. 24).
Seguiremos la clasificación de Goldstein en primera instancia, pero queremos modificar la clasificación de las estructuras y ampliar las categorías más allá de los montículos y entradas monumentales para incluir los edificios, las estelas y las estatuas, así como los sistemas canales. Estructuras Proponemos clasificar las estructuras visitadas en el recorrido previo en tres tipos: montículos de plataformas, patios y la combinación de estos dos. Individual y conjuntamente, las estructuras forman una intrigante combinación de planos horizontales. Comenzando con el plano base del terreno circundante, los montículos, con sus plataformas sucesivas, definen uno o más planos horizontales sobre el plano de base. El patio del Templete Semisubterráneo, y quizá también Kantatayita y Putuni, establecen planos horizontales por debajo del plano base. Los patios en la cima de los montículos-plataforma, Kalasasaya y Pumapunku, por ejemplo, repiten el patrón escalonado debajo del plano inmediatamente circundante. Es tentador pensar que los habitantes de Tiahuanaco adjudicaron un significado especial a cada uno de estos planos y a la relación entre ellos. Moverse en y por la Tierra debe haber tenido un significado muy distinto al de bajar a la Tierra, y esto debe haber tenido un significado distinto al de subir por encima de la Tierra. Descender a un patio dispuesto en la cima de un montículo, así como alude al acto de descender hacia la Tierra, también debe haber tenido un significado distinto al anterior. No parece probable que podamos descifrar estos significados, pero no hace ningún daño pensar sobre las posibilidades. Volveremos a la pregunta de los planos horizontales en la conclusión de este libro. La geometría de la arquitectura de Tiahuanaco es ortogonal y las estructuras que todavía son visibles demuestran una simetría bilateral rigurosa en el eje este-oeste, con excepción del Templete Semisubterráneo, cuyo eje de simetría sigue una orientación norte-sur. 66