De ilusión y oro. ¿Sueños cumplidos o ilusiones frustradas? Matadores de toros del siglo XXI (2001-2018)
Sobre este punto, sobre la necesidad casi vital de ponerse delante de un toro a riesgo de perder la vida, recurro a un escrito de él mismo que publiqué en mi libro “Toreo por Seguiriyas”, editado por Egartorre, Madrid, 2013, en que el periodista-torero justifica de esta forma las sensaciones que siente un torero cuando está con un toro: “Y lo cierto es que como con las mujeres, varadero común de la inspiración en las artes, el toreo, y me supongo que igualmente el cantaor, experimenta dos sensaciones opuestas y sin término medio, una de ellas, la mala, es esa en la que se dan las magias necesarias por las que dos personas se atraigan y entonces se está en condiciones de terminar cuanto antes la relación y la otra, la buena, es aquella en la que el misterio hace que la unión sea un goce extremado, indefinible y etéreo que te transporta a una galaxia privativa del hombre enamorado y es entonces cuando, como decía Belmonte, te olvidas que tienes cuerpo y todo el sentimiento sale a flote, confías plenamente en la pareja y ni siquiera te paras a pensar que pueda venir la traición en forma de herida punzante. Llegado el momento del éxtasis el torero se recrea en un placer extraño que se produce en el interior cuando pasa el toro, que en el artista se traduce a la cintura que se quiebra hasta casi partirse, pues el cuerpo, derecho como un junco, siente un escalofrío inexplicable que solo transmite el toro y la mujer; el brazo se alarga y gira la muñeca para soltar al animal que, embebido, encuentra la luz de la salida y el torero, a veces, muchas veces se desahoga gritándose a sí mismo ¡ole!, palabra que algunos eruditos identifican con otra árabe que significa ¡por Dios! pues no hay nada que se le parezca y por ello hay que recurrir a lo divino”. Así lo vemos y sentimos los que amamos el toreo. Terminemos diciendo que es hermano de Enrique Romero, presentador del programa de Canal Sur TV “Toros para todos”, y de la primera mujer que fue presidente en La Malagueta, Ana María Romero.
Rosa Pocostales, Francisco José de la “CURRO DE LA ROSA”
Matador de toros y Banderillero nacido en Madrid, el 31 de agosto de 1972, que allá entre los años 1988 y 1994 fue novillero sin picadores, debutando con ellos en Valencia de Alcántara (Cáceres), el 15 de mayo de 1993. No debieron irle bien las cosas, porque decidió abandonar muleta y estoque para continuar en los ruedos como banderillero. Así lo encuentro con 332