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[I] l dIscurso de Manuel VIcente VIllarán sobre las profesIones lIberales y sus tesIs sobre la educacIón nacIonal.- En 1900 pronunció Manuel Vicente Villarán el discurso de apertura del año universitario. Nacido en Lima el 18 de octubre de 1873, era Villarán un profesor y abogado de 26 años, el cuarto de una dinastía jurídica, cuyo talento habíase delineado desde la primera juventud con los rasgos seguros de una ponderada madurez. Al lado de su padre, decano y luego rector de la Universidad supo llevar con sencillez elegante el peso de aquella herencia, destacarse por méritos propios, avanzar por su ruta sin arrogancia y sin estridencias, sin temor y sin sorpresa, subir sin embriagarse, no dejar nunca las huellas delatoras de los encumbramientos inmerecidos y prematuros. El discurso mencionado versó sobre las profesiones liberales en el Perú. Lejos de la erudición decorativa y del alarde retórico, hizo allí Villarán el planteamiento concreto de la desviación de las surgentes clases medias orientadas ciegamente hacia la inflación de grados y de títulos universitarios; y entró en el análisis franco, a veces pesimista, del sentido decorativo, intelectualista y aristocrático de la enseñanza. Pocos años más tarde, en la tesis para su grado en la Facultad de Ciencias Políticas y Administrativas, tituladas El factor económico en la educación nacional (1907) y La educación nacional y la influencia extranjera (1908), Villarán reafirmó sus ideas. Su primera premisa fue la de que el desarrollo económico del país era la condición para el mejor desenvolvimiento de su capacidad educacional. Al mismo tiempo sostuvo que la acción de la escuela tomada en sentido amplio debía promover el progreso material para, a su vez, el progreso material hiciera posible y preparase la cultura. Hubo en esta tesis también una enérgica defensa del indio, al que consideró sano y fuerte, sobrio y prolífico. Su planteamiento del problema educacional fue hecho desde el punto de vista de las clases medias y populares, para vincular al progreso económico el surgimiento de una clase dirigente capacitada y patriota. Aquí polemizó con las ideas pedagógicas de Alejandro O. Deustua (1). Es interesante la similitud de las doctrinas de Villarán con los modernos conceptos acerca de la educación para el desarrollo económico. En el estudio de 1908 Villarán se extendió más en la exposición de sus ideas y sostuvo que era necesario buscar una educación sobria y sana basada en la idea de combatir el ocio y el apocamiento del carácter y con el objetivo de obtener, cuando menos, hombres rudos pero eficaces, sencillos y sin desbastar, pero útiles a sí mismos y a la Patria, una educación democrática, científica, común, tendente a despertar energías físicas y mentales, estimular el trabajo y formar en la profesión de ser hombres. Para este propósito, propuso la venida al Perú de educadores norteamericanos. Parecería hoy como si Villarán, cuando publicó estos escritos breves y enfáticos, hubiese visto entonces los tiempos distintos que llegaban, la necesidad de crear otro estado de
(1) Véase el capítulo 8 en esta sección de Historia de la República del Perú.
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ADENDA
[ CAPÍTULO 10 ]