Capítulo Cuatro. Retroalimentación entre compañeros
La retroalimentación es considerada por algunos como un asunto problemático en la educación superior y, aunque se reconoce como un componente central del proceso de aprendizaje, hemos visto que las encuestas nacionales –tanto en el Reino Unido como en Australia– muestran consistentemente que los estudiantes están menos satisfechos con la retroalimentación que con cualquier otro componente de sus cursos. La respuesta natural a esta situación ha consistido en un esfuerzo por mejorar la calidad de la retroalimentación proporcionada por los docentes, en particular en torno a su rapidez, nivel de detalle, claridad, estructura y relevancia. Aunque estas intervenciones pueden tener nobles intenciones, existen diversos estudios que muestran que tales cambios en la retroalimentación de los maestros no resultan en una mejoría del aprendizaje de los educandos (Crisp 2007; Bailey y Garner 2010; Wingate 2010). Además, tales intervenciones generalmente demandan un aumento significativo en la carga de trabajo del personal académico, lo cual es problemático debido a las limitaciones actuales de recursos y al aumento del alumnado de educación superior. Esta situación ha motivado a los investigadores a reexaminar el tema de la retroalimentación en la educación superior, en términos de cómo se conceptualiza y cómo se traduce en prácticas 109