Tiburcio Moreno Olivos
cer. Se necesita mucha más investigación en este campo. Sin embargo, un área fructífera de estudios es la que en años recientes han desarrollado Gibbs y Simpson (2004) sobre la relación entre la retroalimentación y el tiempo que los estudiantes dedican a la tarea. Estos investigadores han demostrado que si los alumnos reciben comentarios con frecuencia y regularidad hay una mejor supervisión y autorregulación de su progreso. Otras investigaciones se han centrado en las fortalezas de modos alternativos de comunicar la retroalimentación (por ejemplo, mediante el empleo de un audio o una computadora) y de producir información de retroalimentación (por ejemplo, producciones de carteles donde los estudiantes obtienen retroalimentación al comparar su trabajo con el de otros estudiantes) (Hounsell y McCune 2003; Hounsell 2004). Otras estrategias que aumentan la calidad de la retroalimentación del docente incluyen: a) Asegurar que la retroalimentación ofrecida guarda relación con los criterios establecidos, pero prestando especial atención al número de criterios; b) proporcionar retroalimentación oportuna; es decir, antes de que el estudiante presente su trabajo, no después de la presentación; c) ofrecer consejos correctivos, no solo información sobre fortalezas y debilidades; d) limitar la cantidad de comentarios para que realmente se usen; e) priorizar áreas de mejora; y f ) proporcionar a los estudiantes exámenes en línea, de modo que puedan acceder a la retroalimentación en cualquier momento, en cualquier lugar y tantas veces como lo deseen. ◇ Alienta el diálogo entre docentes y compañeros de clase sobre el aprendizaje
En el modelo de autorregulación, para que la retroalimentación externa sea efectiva debe ser entendida e internalizada por el es140